Partida Rol por web

Plata de Ley

Capítulo 6 - Regreso a St. Elmo

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13/07/2016, 00:11
Director

- ¿Pierre? - respondió confundida la camarera, abandonando por un segundo su actitud dócil e infinitamente alegre. - Debe de haberse equivocado, señor. El dueño de "Le Parisiene" es Monsieur Percival Beaumont. Todos lo saben. Puede que se haya confundido con un familiar suyo, por el apellido. Es Francés ¿se da cuenta? - respondió orgullosa de si misma la jovencísima e inocente camarera.

- Monsieur Beaumont solo recibe a personas importantes, gente con tierras, sobre todo minas y cosas así. Si de verdad son amigos de un familiar suyo tal vez pueda recibirles, pero "Le Parisiene" está bastante lejos, al pie del cruce entre las montañas; tardarían algunas horas en llegar y ustedes ya deben estar hambrientos ¿por qué no se quedan un poco más y disfrutan de nuestra comida? No se decepcionarán, se lo prometo.-

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13/07/2016, 00:27
Michael Maverick

Michael cabalga junto a Lonegan en silencio. Una breve sonrisa en sus labios ante la perspectiva del juego, terreno que conocía bien, mejor que nadie. Algo cohibido sin embargo por la siempre seria compañía del jefe de la banda, hombre de acción, pero de pocas palabras y éstas, cuando las había, claras y directas. Sin duda un hombre poco dado a la chanza o la charla banal. Maverick razonaba en silencio.

Ya se lo había parecido cuando lo conoció, pero a fin de cuentas había acabado salvándole la vida frente a aquel sheriff enloquecido y Michael había decidido continuar con aquella vida de delincuencia y muerte violenta.

Al menos, se dijo Michael, Lonegan no sería como Pancho, capaz de meterles en líos y emboracharse lo que sólo le hacía abrir aquella bocaza suya que era la perdición. Por otro lado, la compañía del mejicano sin duda sería más entetenida y todo sea dicho, era un tipo que a poco, te acababa cayendo simpático.

Notas de juego

Perdón (publicado minutos despúes del máster) de ahí el lapso temporal.

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13/07/2016, 00:38
Adler Leitner

- Aguarrrdiente, entonces. Medio dolarr botella - respondió el camarero sacando de un armarito una polvorienta botella sin etiqueta, refrotó bien el cuello con un trapo antes de quitar el tapón, y sirvió sin miramientos en el vaso que te había ofrecido. En cuanto solicitastes el segundo, lo sirvió de inmediato, dejando la botella a tu lado.

- Otrrro desesperrado hijo del desierrrto sin un centavo, ¿eh? - respondió observador el barman. - Si, haberrr trrabajo de sobrra, perrro solo parra minerros y hombrres fuerrtes. Olvidate de encontrrarr algo más porr aquí. - Como buscando algo que hacer, el barman comenzó a quitar el polvo de la mesa, aunque siempre frotaba en el mismo lugar, con lo que la tarea no avanzaba.


No fue hasta que terminastes de hablar que ocurrió algo imprevisto. El hombre del traje zurcido apenas te había devuelto el saludo con la mano, pero al mencionar al francés...

- ¡Beaumont, mal rayo le parta! Ese extranjero es el diablo. Ahora por su culpa el pueblo es próspero, decadente, y está maldito. Escúchame, pobre ignorante, no te acerques a esa finca ni a nadie que trabaje para él; o también tú acabaras maldito. -

Los pocos parroquianos que había respondieron chistando al hombre, como temiendo que pasara algo por decir esas palabras. El barman, por su parte, no dijo nada, pero escupió en el suelo con cara de pocos amigos.

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13/07/2016, 00:40
Director

Notas de juego

Sin respuesta por tu parte no puedo actualizarte.

Si crees que falta información para que tomes una decisión, avísame y añadiré algo más, pero creo que es suficiente con lo expuesto hasta ahora.

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13/07/2016, 09:13
James McReady

James miró a su alrededor buscando algo parecido a una oficina de Correos, pero para su decepción, no encontró nada, ni a nadie, salvo a aquel distraido individuo que leía el periódico en su garita; probablemente el encargado de la venta de billetes para el tren. A James se le ocurrió que había de ser un trabajo aburrido teniendo en cuenta que solo había un tren al día. No es que pensase que aquel individuo fuese a dale la respuesta que buscaba, pero la ventaja de esta gente que estaba acostumbrada a pasar tantas horas a solas, es que solían recibir bien cualquier tipo de conversación que les sacase de la monotonía.

-Buenos días-dijo James dirigiéndose a aquel hombre-Disculpe que le moleste. Acabo de llegar a la ciudad y ando buscando a un viejo amigo que debió establecerse aquí hace algún tiempo. No sé si podría ayudarme.

Notas de juego

Lo siento, pero estos dos días no me encontraba muy bien. Venía ya esta mañana a contestar. Lamento el retraso.

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13/07/2016, 18:31
Juanita "Dinamita" Rosales
Sólo para el director

Escucho atenta sus palabras. Ni siquiera me molesto en ofenderme con su comentario sobre que no contraten mujeres en el First Bank. Sencillamente tiene razón, no las contratan ni ahí ni en ningún otro sitio que no sea un burdel. Y menos a una mujer de ascendencia mejicana.

-¿veinte kilómetros dice? Ciertamente está más alejado de lo que creíamos. Le agradezco mucho su oferta sobre el mensajero pero tendré que comentarlo con mi responsable. Ciertamente, el First Bank no me contrataría a mí. Es a mi jefe a quién a contratado pero él está haciendo otra gestión en este momento. Le comentaré las dos cosas, la posibilidad del mensajero y la posibilidad de que vengamos aquí a comer. Muchas gracias por su ayuda- le digo antes de salir por la puerta a encontrarme con mis compañeros. Por supuesto no vamos a comer aquí pero a ver qué dice Jack sobre la oferta del mensajero...

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14/07/2016, 12:05
Jack Lonegan

Mierda, aquel hombre del bigote ya nos había dicho que el francés ahora se hace llamar Percival.

Ya que aquella chica parecía mostrarse avispada, Jack decidió hacerse el atolondrado:

-Seguro que tiene razón con lo del nombre, señorita. Pierre, Percival... A mí es que esos nombres franceses me suenan todos igual. Nuestro amigo siempre se enfadaba porque no le llamaba una sola vez por su nombre correcto. Espero que no me lo tenga en cuenta cuando vayamos a visitarle.-Escucha la invitación a quedarse a comer, a lo que responde.-Aun tengo que pasar por la oficina de correo en la estación y hacer un par de recados, pero Michael puede quedarse un rato mientras termino de arreglar estas cosas. Eso ya como mi joven amigo quiera.

Como gesto de gratitud por la información que les acababa de conceder, no veía mal dejar a su compañero dispuesto a probar un par de veces su suerte en aquel local. Se acercó a Maverick para comentarle con discreción:
-Si te quedas, pásatelo bien pero no desplumes demasiado a nadie. No queremos llamar la atención antes de visitar al francés.-Conocía la reputación de su compañero como jugador y prefería tomar precauciones.

Esperando la decisión de Michael, Lonegan se disponía a volver a la calle en busca del resto de sus compañeros para compartir la información que acababan de recibir.

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14/07/2016, 16:55
Michael Maverick

Cuando el jefe le alentó a quedarse en el saloon, el jugador sonrió de oreja a oreja y se permitió un guiño travieso dirigido a su jefe y se llevó las manos al ala del sombrero deseándole suerte. Aquel era su terrero y haría lo que mejor sabía hacer, soltar las lenguas y los bolsillos.

- Suerte - dijo en voz alta, sin dejar claro si era un deseo para el Jack o para sí mismo. Se volvió y ofreció su brazo a las dos señoritas de generoso busto y escasa ropa y se dirigió hacia el saloon.

- Creo que hoy será póker - No le había gustado como había sonado lo de la ruleta. Demasiado bueno como no estar trucada - un tramposo es bueno detectando una trampa - indicadme una buena mesa preciosas. La dama suerte tiene vuestros ojos. Lo sé - unas manos de póker después seguramente sabría más cosas del francés y de sus posesiones que cualquiera de sus compañeros de partida.

Por primera vez se sentía bien después de muchos días de polvo, caballos palabras indias y caras largas.

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14/07/2016, 23:02
Director

- Buenos días tenga usted también, amigo. - respondió el hombre con voz aburrida, pero abandonó el periodico, diligente por atender al viandante que reclamaba su atención. Escuchó con atención las palabras de McReady, asintiendo un par de veces a medida que avanzaba la conversación.

- Bueno, era evidente que es usted un forastero, en una ciudad pequeña como esta todos se conocen. Tal vez pueda ayudarle a encontrar a su amigo, pero no le prometo nada; he de advertirle que en los últimos meses St. Elmo ha sufrido muchos cambios. Ya sabe, llegan nuevos hombres buscando trabajo, y los viejos... - hubo una incómoda pausa por un segundo - bueno..., dejémoslo en que dejan libre su lugar. Por mi abuela, si incluso nuestro sheriff es un novato. - la breve conversación parecía haber desperezado por completo a aquél encargado, y también su lengua.

- A ver. Necesitaré que me diga algo más. Como quién es, o donde vive vuestro amigo. -

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14/07/2016, 23:21
Director

Apenas ponéis un pie en el exterior os ciega por un segundo el brillante sol de la tarde. Las calles continúan tan desiertas como hace unos escasos minutos y la brisa levanta pequeññas nubecillas de polvo apenas por encima de los tobillos que en seguida se depositan en el suelo y desaparecen.

Ambos habíais salido de vuestros respectivos edificios prácticamente al unísono, con apenas unos segundos de diferencia. Percibísteis al otro al instante y no tardasteis ni un minuto en reuniros para compartir vuestros hallazgos. No había rastro de Pancho ni McReady, que habían ido cada uno a un lugar distinto a recabar información; tampoco de Maverick, a pesar de haber entrado con Lonegan al local de juego.

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14/07/2016, 23:32
Director

- Adiós, señor. Acompáñeme señor - La camarera parecía ligeramente decepcionada cuando Lonegan abandonó el local, pero recuperó su carácter sonriente al volverse hacia ti y te guió con una sonrisa agarrándote del brazo hasta la mesa de los hombres ruidosos. - Sus apuestas no han dejado de aumentar en todo el día - te susurró al oído de un modo excitante cuando os encontrásteis lo suficientemente cerca para ver en detalle a los jugadores de aquella mesa.

Aunque son hombres musculosos, no dan la impresión de ser simples mineros. De hecho, si los hubiera encontrado en otras circunstancias posiblemente hubieras pensado que se trataba de bandidos. Por otro lado, los locales de juego solían atraer a aquél tipo de gente. Nadie cuestionaba de donde provenía el dinero con el que llegaban los clientes, ni les importaba donde terminarían sus ganancias. Aquello era lo que ayudaba a la prosperidad de aquellos negocios.

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14/07/2016, 23:47
Director

Notas de juego

Sin respuesta por tu parte no puedo actualizarte. Esto queda para el próximo día (Domingo)

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15/07/2016, 14:23
James McReady

-Gracias por su ayuda.Es usted muy observador-contesta James sonriendo-Bueno...a mi amigo le gusta llamar la atención allá donde va. He oído que había montado una hacienda o algo así, en las afueras del pueblo, hace cosa como de un par de años. Le Parisiene. Mi amigo se llama Pierre "Bomont".

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15/07/2016, 20:14
Pancho Castillo

¡Corcholis! Era como si Beamount tuviera un aura de maldad no directamente visible, pero que de algún modo incluso las gentes simples podían notar. Pancho recordó lo dicho en la hoguera sobre espíritus dias antes por Keezheekoni, y sintió un escalofrío que le estremeció. ¿Sería Beamount la Santa Muerte? Las palabras y actitud de los miembros del local habían contagiado de temor al mexicano. Sus ojos revelaban ese temor. Tenía meido de preguntar, pero tenía que hacerlo.

Con rostro líbido,se dirigió de nuevo al hombre de traje. El únicod e los presentes que parecía dispuesto a atreverse a contar algo.

-¿E... en....serio? Hay señooorr. Soy un hombre supersticioso y creo en cosas de esaaaas? ¿Qué es esa maldición? ¿De verdad ocurre algo malo con el señor Beamount? ¿Echa mal de ojo ese pendejooo? ¿Le pasa algo malo a la gente que trabaja en su finca...?-

Detuvo sus palabras para mirar hacia los lados paranoico, como si buscara a alguien escuchando la conversación, antes de dirigirse de nuevo al individuo trajeado para añadir -¿Y por donde demonios cae esa maldita finca, para que no me acerque a ella, híjoleee?

 

Notas de juego

Disculpa. Siento retrasar la partida.

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16/07/2016, 10:56
Michael Maverick

- Caballeros - dijo Michael sonriendo al tiempo que se llevaba una mano al sombrero - ¿aceptarían a un jugador más?

- ¿Puedo preguntar a qué están jugando? - desde hacía mucho tiempo, a Michael le bastaba con ver jugar una o dos manos para saber la variante del póker que se jugaba en una mesa en particular, pero siempre venía bien hacerse un poco el ignorante para empezar.

- O van a hacer ustedes que tenga que jugar a la ruleta, como las señoritas - se carcajeó de su propia broma, aludiendo a la fortaleza y hombría de aquellos individuos de mala catadura que sin duda se tenían por los más machos del lugar. Aumentar su orgullo, eso también solía abrir puertas, con un poco de suerte, de par en par.

En cuanto empezara la partida cataría a esos hombres, su carácter y empezaría a indagar, como el que no quiere la cosa, sobre su ocupación. No le extrañaría que el "difunto" francés hubiera contratado gente violenta a modo de un ejército privado. Michael, con un poco de suerte acabaría con algún dólar de menos y mucha información de más. Cuantos eran, qué tal se llevaban con el francés y a qué dedicaba éste el tiempo. Todo ello, entre tragos de whisky y manos de póker, que iría ganando o perdiendo en función de los ánimos.

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17/07/2016, 13:49
Jack Lonegan

Jack salió a la calle principal del pueblo con la intención de reencontrarse con sus compañeros. Al atravesar las puertas de salida del salón de juegos, entrecerró un poco los ojos para acostumbrarse a la fuerte luz del exterior. Tras unos instantes mirando arriba y abajo por la calle, distinguió a Juanita, que se acercaba en su dirección, por lo que el forajido hizo lo mismo para reunirse con ella. Una vez estuvieron frente a frente, le comentó sobre sus avances para dar con el paradero de su antiguo compañero:

-¿Que tal en el Gran Hotel, te han dicho algo interesante? Parece que en el salón de juegos conocen bien al francés y saben perfectamente donde se encuentra su residencia. Ha sido tan sencillo que he decidido dejar a Maverick que se divierta un poco ahí dentro mientras nos reuníamos todos para sacar conclusiones. Cuando Pancho y James estén de vuelta, iré a recoger al muchacho y ya decidiremos como hacer la visita a nuestro viejo amigo.

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17/07/2016, 17:42
Juanita "Dinamita" Rosales

Salgo del hotel y vuelvo a escuchar comentarios similares a cuando entré. Contengo las ganas de responder o, mejor aún, de llenarles de plomo.
En ese momento, veo a Jack que viene hacia donde estoy.  Avanzo yo también para quedar a medio camino, lejos de los oídos indiscretos. En la calle sólo se escucha ahora el sonido de nuestras espuelas.

Escucho cómo le ha ido a Jack y a Michael y no puedo evitar torcer el gesto cuando dice que Michael se ha quedado en el saloon. No me fío de dejarle en un sitio como ese y que no se meta en líos. Pero yo no soy el jefe, Jack sabe lo que hace.

-En el hotel también ha ido bien. No solo me han indicado dónde está, si no que se han ofrecido a enviar un mensajero para avisarle. ¿Crees que vendría? Igual es mejor que venga, me da mala espina meternos allí. Seguro que tiene hombres armados... ¿Qué opinas?-

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18/07/2016, 00:25
Director

- ¿Beaumont? - preguntó el encargado, levemente sorprendido al escuchar el nombre - Espere ¿habla de "ese" Beaumont? no, no puede ser, el nombre no me suena. Pero un francés con ese apellido sí construyó la hacienda que menciona. - El hombre parecía ahora algo alterado; se rascaba la oreja con nerviosismo y durante un momento miró alrededor como esperando ver a alguien más en las cercanías.

- ¿Cómo ha dicho que se llamaba? ¿y cual es su relación con Beaumont? -

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18/07/2016, 00:37
Anton Stark

- ¡No! Y eso es lo extraño. - Respondió el hombre ignorando los gestos de sus compañeros instándole a que se callara. - Llevo en esta ciudad desde antes de que ese traicionero francés se instalara aquí. En estos dos años han ocurrido muertes de lo más extrañas; sobre todo mineros, viajeros, y a veces indios aparecían medio devorados por chacales del desierto. Cada mes las muertes iban a peor, e incluso de varios desaparecidos no se ha encontrado cadáver, pero ni una maldita vez los hombres de Beaumont. Sus minas, y su finca; todos los que trabajan para él parecen protegidos por obra del demonio. -

- No se si ese hombre es un criminal, un brujo, o ha vendido su alma a satanás, pero como que me llamo Stark que es el culpable de todo. Casi todos los de la ciudad huyeron hace tiempo; los Bradey, los Dalton, los McCalister... o bien perdieron a alguien, o se fueron antes de que les llegase el turno. Cada vez que alguien abandonaba su casa Beaumont la compraba a un precio ridículo; y al poco se convería en un prostíbulo, un saloon, o ese espantoso hotél que nadie aquí se puede permitir. -

Cuando preguntaste por la ubicación de la hacienda, el hombre negó con la cabeza - Olvídese de la finca y hágame caso, no se acerque a ninguna hacienda o a las minas. Váyase por donde ha venido, o súbase al tren y no vuelva nunca por aquí. -

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18/07/2016, 00:58
Director

Los hombres te miraron con una mezcla de prepotencia e indignación. La mitad de ellos habían comenzado a recoger sus dólares y uno de ellos ya se había levantado de la mesa, parecía que tenían intención de irse en el momento en el que les habías abordado.

Hubo algunas quejas silenciosas, pero el que tenía la voz cantante elevó el tono y los demás callaron para escucharle. - ¡No pasa nada! Tenemos un trabajo que hacer, "Monsieur" elegante de la gran ciudad. Así que si no le importa que juguemos solo una mano de poker... mire tenemos un asiento libre - señaló indiferente el asiento del hombre que se acababa de levantar

- Como sólo será una partida rápida tendremos que darle emoción. Que le parecen... ¿20 dolares? - el hombre sonreía burlonamente y varios de los otros lanzaban risillas con un leve tono cruel. 20 dolares era una apuesta absurda. Los tenías, por supuesto, pero con ellos podrías pagarte una noche en un hotél de lujo como el de la entrada. Perderlos significaría quedarte sin una moneda hasta que la banda decidiera reclamar el efectivo de los bonos del banco.

Notas de juego

Si te apuntas, haz una tirada de Inteligencia + (la tirada es enfrentada y no vas a saber el resultado de los otros jugadores, por lo que intenta sacar lo máximo posible).