Partida Rol por web

Andrew Crow se encontraba sentado en el porche de la cabana donde habia vivido por los ultimos tres meses, solo y subsistiendo a base de una dieta casi "vegetariana", es decir sangre animal. Esto era algo que hacia, no por ideologia o conviccion, si no por pura conveniencia: Primero que nada un humano desaparecido levantaba sospechas y atraia atencion. Segundo, no habian muchos humanos en la profundidad del bosque del norte... de hecho no habia mucho de nada.

Por eso su sorpresa fue inmensa, cuando un movil comenzo a sonar de improvisto. - Maldita sea! -Se dijo entre dientes, despues de todos sus intentos por permanecer alejado de la sociedad cainita, habia sido encontrado...

Ya es demaciado tarde, Ahora  que me han dado conmigo tengo que ir... -Reflexiono Crow, quien conocia de sobra la forma de ser de esos "principes" malcriados y prepotentes.

Acontinuacion se monto en su Land Rover del 86, empaco sus escasos bienes y se marcho en direccion a la ciudad "X" Donde este tal Julian ejercia de regente.

Cuando llegas al edificio del principado ves la ya conocida entrada de puerta doble en la pared frontal. Todas las luces de la alta edificación están a oscuras. Miras a lo largo de la calle y no ves a nadie a excepcion de una muchacha apoyada en la pared junto a la puerta.

Andrew aparco su vehiculo el lugar designado para visitanes y se bajo al encuntro de la muchacha. - Supongo que usted es, Susan Comb... Porfavor digame que hago aqui. - Dijo en voz neutra, mientras examinaba los alrededores.

La joven levanta la mirada del suelo mostrando una cara a medio camino entre la sorpresa y la indiferencia - Si no lo sabes tú . . . - Sonrie y mira al cielo - Creo que me confundes, mi nombre es Rachel Douglas.

Le pido que me disculpe... Vera, he recibido este mensaje de texto.  -Crow le monstro fugazmente el movil a la muchacha-  Asi que por favor le ruego que me indique  la direccion correcta. No me gusta hacer esperar a nadie.

- Y a mi que me cuentas? Por que no me dejas en paz? Pronto vendra mi novio y te vas a enterar como sigas molestandome.

Andrew miro esceptico a la muchacha, pero no dijo mas... Acontinuacion abrio la puerta y decidio invitarse asi mismo a entrar en el principado. -Valla, esto si que no tiene ni pies ni cabeza.

Me fijo bien en el desconocido antes de seguir mi trayecto. - Que raro se me hace eso de encontrar el principado sin aparente  vigilancia o proteccion...

Al entrar ves un pasillo a cada lado, totalmente oscuros, y de frente un mostrador de informacion con una pequeña lampara de mesa, a la derecha de éste, un ascensor.

- Buenas... - Dije en voz alta, a ver si alguien me escuchaba- He venido a ver al principe A continuacion dejo que mis ojos recorran meticulosamente la escena, en busca de cualquier indicio de peligro o de cualquier cosa que este fuera delugar

Ese cilencio y esta soledad me da muy mala espina.

Escuchas una tos procedente del mostrador, al acercarte, el hombre que está tras el  te mira, y con un boli que tiene en la mano te señala el cartel que tiene detras, donde indica que en la planta -4 está las "Oficinas principales; P. Julian.

Gracias... - Die con sequedad mientras me disponia a bajar al piso -4. - He de recoconocerlo, esta apariencia de soledad ayuda a mantener la mascarada...

- Ding - Se abren las puertas del ascensor, ves una pequeña estancia con sillones y al fondo una puerta batiente doble con cristales lechados.

Avanzo con cautela por la estancia, mirando de vez en cuando hacia el elevador. No podia evitarlo, toda esta experiencia me estaba resultando muy, pero muy incomoda: Simplemente no terminaba de comprender esa mania de los vampiros citadinos por  limitarse a pequeños espacios cuadriculados y claustrofobicos, como si asi pudieran estar verdaderamente "seguros" de los peligros de la noche.

- Ya estas aqui Andrew Crow, asi que mientras mas rapido camines, mas rapido sabras que es lo que quiere el principe de ti.

Abro la puerta.

Cuando atraviesas la puerta ves como una mujer sale de uno de los numerosos despachos que recorren el pasillo que hay frente a ti.

- Señor Crow, verdad? Señorita Comb. Sigame, por favor.

Te guia hasta uno de los despachos donde te invita a sentarte en una silla frente al escritorio que lo preside.

- Espere un minuto, no tardará.

Y vuelve a salir.

Avanzo con cuidado por el pasillo... Inseguro hacia donde ir. Entonces porfin sale la mujer que se identifica asi misma como Comb.

- Valla ya era hora...

Digo para mis adentros mientras tomo asiento en el lugar que me indican

- A ver que quieren de mi, todo este protocolo esta comenzando a impacientarme...

Espero.

Se vuelve a abri la puerta y entra un hombre bastante peculiar, se sienta tras el escritorio mientras lee unos papeles en una carpeta de carton marron, cuando la cierra y la pone sobre la mesa puedes en ella "Andrew Crow".

-Supongo que ya se habra enterado del motivo por el que ha sido llamado, verdad?

Miro con seriedad al hombre... - No, enrealidad no se. A si que por favor le pido que me diga... -Dije algo irritado, toda esta prosopopeya me estaba poniendo incomodo.