Partida Rol por web

Nathin se retiró del combate, buscando alejarse, él no era un hombre de acción por muy ajetreada que fuera la vida del rogue trader y estaba sufriendo al fuerza antinatural del mutante. La archimilitante exterminó a otro de aquellos títeres; por lo que sólo restaba el que se oponía a M4R14, sin duda controlado por el navegante corrupto. 

Nathin vió que el navegante no cejaba en su empeño de acabar con su vida cuando este volvió a arremeter contra él.

Tsanthos había había decidido dejar a sus compañeros la tarea de la eliminación de hostiles y centrarse en proteger su integridad física, por lo que se centró en evadir a su atacante, algo que logró con mejor fortuna que la anterior vez al haberse centrado únicamente en esquivar a su enemigo.

-¡Ayuda! Alcanzó a gritar mientras trataba de mantenerse en pie.

M4R14 escuchó la orden de Sarvus y el comentario de Nathin. Tiene lógica, el campo Geller se usa para aislar la nave de nave del Inmaterium pero que estuviese conectado en el espacio real podía significar que en su interior permaneciesen rastros de la disformidad.

Tan solo necesitaba conectarse al terminal pero pos desgracia uno de los títeres se lo impedía. Tal vez no fuese el combate más digno para una reliquia de la Era Angevin pero M4R14 desenfundó su espada sierra legendaria y atacó.

- Pirripi pi... Calculo que en 12,5 segundos podré estar en disposición de usar el terminal.

Mientras el senescal evitaba los letales puños del navegante la exploratora serraba con su arcaica espada una de las extremidades de un títere, que cayó al suelo muerto; más muerto. Sólo quedó el navegante que recibió el fuego concentrado de todos los rifles de los marinos. Los destellos rojos inundaron el puente e impactaron en el navegante, en el trono, en el vox interno, en los mamparos y en el suelo; ninguno de aquellos haces rojos logró siquiera un rasguño en el navegante.

Orden se abalanzó sobre el rogue trader y le lanzó violentos puñetazos.

¡Proteged al Lord Capitán!

     Sarvus sintió un dolor lacerante en su brazo cuando el puños potenciado del navegante le impactó. - ¡Bastardo! Bramó mientras intentaba asestar a su vez una estocada, pero la sorpresa y el dolor le habían desequilibrado, haciendo que fallase el envite. - ¡M4R144444! Gruñó a la exploradora con tono autoritario y apremiante.

El Lord capitán resultó herido, si bien era apenas un rasguño, y su contraataque no logró siquiera rozar al navegante, pero más preocupante aún fue el hecho de que otros seis cadáveres se alzaron del suelo, dispuestos a exterminar al equipo de incursión.

Nathin no sabía qué hacer. La situación se les escapaba de su control por momentos, y pronto acabarían todos muertos si no lograban acabar con lo que se había desatado en el puente.

Se cubrió como pudo cuando vió aparecer más enemigos, preparándose con sus últimas fuerzas para lo peor, gritó apremiando a su compañera para que ejecutara la orden de Sarvus.

-¡M4R144444!

Nathin estaba, literalmente, contra la pared; tras él se alzaba un muro bajo de metal que se paraba la zona principal del puente de un nivel subelevado donde habían más computadoras y cadáveres (quietos). Si el navegante decidía ir a por él sólo podría huir hacia los laterales, por lo que adoptó una postura defensiva lo mejor que pudo; aunque de momento parecía centrado en acabar con su rogue trader.

La archimiliante Lorayne abrió fuego con su bólter, exterminando a otro de los títeres, la munición empezaba a escasearle y los enemigos seguían alzándose del suelo.

El tiempo necesario para terminar de rematar a este títere supera con creces la estimación realizada al capitán. La situación con el navegante es crítica, especialmente después de ver como reanima a mas cadáveres la solución lógica es tratar de desconectar el escudo. El resultado probable será recibir un golpe del rival con el que me enfrento dando lugar a daño en mi cuerpo pero el bien de la mayoría supera el de la minoría. ¡Alabado sea el Omnissiah!

- ¡Me pongo a ello ahora mismo! - gritó

Sin más M4R14 ignoró a su adversario y procedió a conectarse al terminal mientras murmuraba cantos secretos que solo los tecnoadeptos podían comprender.

Los marines dispararon sus armas láser, tumbando en el suelo otros dos títeres mientras el navegante alzaba sus puños contra el Rogue trader en un duelo de tronos.

     - Arggg... Sarvus recibe un puñetazo de energía en pleno rostro y siente como su mandíbula reverbera dentro de su boca. Apretando los dientes por el dolor, devuelve el favor con un tajo bien colocado de su crepitante espada de energía. En un momento de toma de aire, llamó a su tecnomaga. - ¿¡M4R14, como va eso!? Si no resolvían pronto el problema del campo Geller no podrían aguantar mucho mas.

- He logrado que el campo Geller fluctúe ante la pérdida de energía, es posible calcular cuándo estará débil con un margen de tiempo de 10 segundos. Margen de error, 1.2%. En el próximo asalto (el 5º) el campo estará débil.

Los títeres de disformida acabaron con otros dos marinos más, la tripulación de Task sufría bajas entre su personal; pero por fin habían logrado una brecha en la defensa del navegante corrupto.

Nathin vió cómo al fín M4R14 lograba ejecutar las órdenes de Sarvus, e inmediátamente informó a todos de la desactivación del campo en cuestión de segundos.

Esperanzado por poder acabar con la amenaza, trató de ayudar a su Capitán y amigo disparando a su atacante, y el tiro fué a dar en el blanco, a pesar de la imprecisión dle disparo por culpa del frenético forcejeo de ambos combatientes.

-¡Aguanta Sarvus! Exclamó.

La batalla se recrudecía (por si no bastaba ya con los sacos de carne de mala calidad que ahora se revolvían con bastante mala leche) y sus vidas, en un juego de apuestas imaginario, cada vez valían menos. Lorayne echó mucho de menos, pero que mucho, un lanzallamas que pudiera cambiar el devenir de las cosas. Es obvio, nadie puede decir que una batalla se recrudece cuando huele a carne quemada.

El que Lorayne pudiera mantener su sentido del humor en una situación como esta era el fruto de muchos años de experiencia en las peores situaciones. Joder, si te vas a morir, al menos vete con una sonrisa en la cara, así, cuando el rigor mortis inmortalice (que paradójico) tus músculos en un gesto permanente, que nadie diga que tu sonrisa macabra tenía algo que envidiar al de la misma parca.

En estos pensamientos estaba sumida cuando un grito desesperado le avisó de que el campo que protegía a... aquella cosa... estaba momentáneamente desactivado. Sin perder un instante, Loraynpara  lanzó una ráfaga controlada para tratar de abatir a aquel navegante blasfemo y antinatural, pero falló. Falló estrepitosamente sin ninguna razón aparente. Falló como fallan aquellos que confían sus vidas y las de sus compañeros al resultado de un disparo y pierden. Falló como tantos otros de los que hoy solo queda polvo. 

Ni siquiera le quedaban ganas para mascullar algún insulto

Si los sagrados cálculos no se han equivocado, es el momento justo, el Campo Gueller se encuentra en su momento más débil y no se cuando se volverá a repetir el ciclo. La aberración debe ser vencida para poder recuperar el arcanoartefacto.

Con la furia que solo puede comprender un discípulo del Dios-Máquina al contemplar una tecno-herejía, M4R14 aumentó la potencia de su arcana espada sierra y cargó contra el navegante.

- ¡Muere tecno-hereje! ¡ Alabado sea el Omnissiah! - gritó por el vocalizador con una rabia que contrastaba con su natural frialdad

La arcaica y sacrosanta espada sierra de M4R14 rasgó aire, ropa, carne y hueso al atacar al corrupto navegante, que reaccionó ante la herida.

Ish Nar'Tzeechnakt octrun... Ish'Tarshgsnti Yals ulsdornths...

Ninguno de los marinos se atrevió a disparar con su Lord Capitán tan cerca del navegante, y se mantuvieron como estaban. Unas palabras que ninguna garganta humana podría pronunciar. El contraataque tuvo la misma furia que sus palabras. 

     Aquel ser estaba poniendo al grupo en aprietos. No hacía mas que repartir golpes a diestro y siniestro mientras ellos apenas conseguían herirlo a él. Por mas que lanzaba estocadas al navegante corrupto, no conseguía penetrar sus defensas. - ¡Lorrayne ayúdanos o te quedarás sin patrón! Dijo a su archimilitante mientras trataba inútilmente de ensartar a su enemigo. - ¡Y vosotros no os quedéis mirando y acabar con los no muertos! Ordenó a los marinos.