Partida Rol por web

 - Bien, como quieras, ocupate tu entonces.

Deja su arma en el arsenal y se retira a sus literas.

-Gracias por comprenderlo, procura descansar- digo a mi compañero mientras se retira a la sala de las literas.

Yo me siento en el sofá a mirar la tele, al lado del soldado. Me quedo allí esperando a la hora de la comida y también a la espera de alguna noticia de Vladimir, el guardia que mandé a que echara un vistazo a las celdas.

Oigo los bocinazos, el "chef" está aquí. Me giro y digo al americano que estaba sentado:

-Ve a abrir la veja para que pueda pasar el encargado.

Vuelvo a fijar la vista en la televisión. No me gustaba mucho la pelicula, pero no me apetecía descansar tan pronto, el día acababa de empezar.

Carraspea

- Si señor

Se levanta de mala gana y sale sin el fusil (solo con la pistola y porra en el cinto, que es lo más corriente cuando las cosas no estan movidas).

Por El talkie.

A los miembros de mi equipo...que cojones pasa. No encontráis a un puto preso?.

Sibley agobiado sale de la habitacion de las literas con decision, recoge su arma del arsenal y sale en busca del preso en direccion al patipo para mas tarde ir al bloque de presidiarios

Acaba de encontrarse con Vasiliev en la sección de las celdas y enterarse que McCoy no se encontraba en la suya cuando la voz del Coronel Robins se oyó por el walkie.

-Coronel, Evans al habla, acabo de enterarme de la desaparición de McCoy, ya mismo peino este lugar para encontrarlo... Evans fuera.

Gracias Soldado Evans...pero por ahora tan solo capitán. Si no lo han localizado en media hora, informenme. Si hace falta, disparen a matar. Corto.

Señores...parece que el viejo tenia ganas de leer un poco, y tambien parece que el ambiente esta algo tenso hoy especialmente, los presos tienen ganas de salir de la celda aunque sea para tomar el rancho del desayuno...

- Que los capitanes decidan.

Los walkies volvieron a activarse, pero esta vez quien hablaba era la soldado Evans y se dirigía al capitán Robins.

La aventura resultó ser una perdida de tiempo. Aunque mejor así, si se hubiera escapado alguien las consecuencias serían graves. No podía fallar a la compañía. Ella había hecho mucho por mi y no podría devolverles el favor por mucho que trabajara toda la vida.

Miro el reloj para ver que hora es y esperar a la hora de la comida. Yo mismo comenzaba a tener algo de hambre. Cojo algo para picar y continúo con la pelicula que estaba viendo antes de todo el asunto de la desaparición de McCoy.

El hombre de mantenimiento entra al cuartel dejando una caja en la que encontrareis vuestras raciones (en cajitas individuales, tambien teneis cubiertos) y luego se encamina al comedor de prisión.

No dice nada, nunca dice nada, solo hace su trabajo.

Cojiendo una de mis raciones le digo a los soldado bajo mi mando- Id a vigilar a los presos mientras comen, que no hagan nada raro. Si lo hacen no dudeis en llamarme. También podríais contarles, si se extrañan de su reducida ración, porqué se come la mitad cuando no todos los presos hacen su trabajo, si trabajan unos pocos, comen solo un poco. Contadme luego la carita que han puesto, y si ponen muchas pegas llegando a ser irritables, llamadme también

Vladimir afirma con un Si señor rotundo, luego mira a su compañera de tarea y espera para salir junto con ella hacia el comedor.

Smith se levanta del sofá y se dispone a acompañar a Vladimir. Como de costumbre deja su fusil en el cuartel.

- Vamos a ver si se les atraganta la comida... - a Vladimir, cuando pasa a su lado