Partida Rol por web

El grupo hace un breve descanso, pero pronto la caravana ya está lista para partir. Cada uno en su lugar y vosotros al frente para abrir camino como hicisteis para llegar aquí.

Que Kava se aparte de la caravana parece levantar varios suspiros de alivio, nadie parece sentirse cómodo cerca de el.

No obstante no parece que el grupo vaya a llegar muy lejos cuando un grupo de asaltadores hace acto de presencia.

Dos de los elfos enmascarados disparan sus arcos de hueso hacia Krunhos, pero aún y que dan en su obetivo, la armadura del Mul detiene la mayor parte del impacto dejando solo algunas heridas menores.

Apenas habían salido a partir cuando de repente fueron asaltados, en la cabeza de Stramis solo pensaba en los tesoros que aquellos habían conseguido y su mente fue alertada por el rabillo del ojo, pues enseguida vio lo que pasaba pasó a la acción, debía moverse rápido y con agilidad como estaba acostumbrado si no quería morir, si la cosa se ponía fea, siempre le cabía la posibilidad de huir, aunque algo le decía que aquel grupo le traería algo de fortuna...

Mientras el mul se adelantaba y los elfos intentaban detener su avance sin conseguirlo, Stramis se dio prisa en sacar su daga y enfilarse hacia un goliath que esperaba su oportunidad, pero Stramis era muy rápido se metió en su espalda para clavarle no una, sino con rapidez y precisión su daga en los costados logrando debilitar ese cuerpo fornido, para después ponerse en posición de defensa atacante esperando la respuesta del semigigante, lo estaba esperando con una sonrisa en el rostro.

"Te estoy esperando, ven, laza lo mejor que tengas"

Uno de los elfos se lanza a una carrera sacando su espada corta, cuando llega cerca de Stramis empieza a lanzar cuchilladas de forma frenética a las cuales el pícaro no puede hacer frente ... poco a poco los cortes se acumulan haciendo que se desangre.

Cuando las flechas de hueso entran en su carne, el mul las recibe con una carcajada. Luego de las batallas que había resistido en el túmulo, aquello le daba risa. Estúpidos elfos, ya había matado tantos de ellos, tomo aquello como un calentamiento de práctica.

- Seguid disparando, escuálidos -  vociferó mientras embestía con la mirada fija en el mago.
- No me extraña ya, depravados hechiceros... - Su cuerpo se movió solamente con el propósito de dejar fuera de combate al practicante arcano. Detestaba a los de clase, no solamente porque eran ladrones y asaltacaminos, sino porque con ellos traian destrucción de lo único puro que perduraba en ese mundo.

Su martillo giró en derredor; el asesino saltó a un lado pero su objetivo no puso apartarse a tiempo.

el reptil mostró una mueca de triunfo al ver los adversarios que frente a ellos se alzaban amenazantes, quien querrá lucrarse de la supervivencia de los que sobrevivieron a Daron Madar? se cuestiono mentalmente el muerto vivo.

con una voz cansina y desgastada casi como si se tuviese un trozo de tela en la garganta la gutural pregunta de kava se acompaña de un brillo intenso de sus ojos: demando saber quienes son nuestros atacantes si me lo dicen ahora quizá considere dar una muerte rápida a sus miserables vidas bastardos (intimidar), para dar fuerza a sus palabras enfrenta a un de los goliath y con un tremendo espadaso en su vientre hace doblar al semigigante que ya había sufrido un tremendo daño por efecto de uno de sus camaradas.

el goliath parecía estar desorientado por los ataques del pícaro y mira a los ojos resplandecientes de venganza del Dragón entonces un dolor inconmensurable lo posee, suelta un alarido de dolor cuando kava giro la espada en sus entrañas, seña clara a stranis para que diese el golpe de gracia al ya mal herido semigigante.

Gracias a la valentía y la aberración a la propia vida de la persona que se había unido a la caravana, cayo uno de los enemigos, pero por la forma de actuar, esos asquerosos elfos no hacia tratos limpios a la hora de pelear.

Invoco un vórtice de especio tiempo gastando esfuerzo para que solo fuera atraído uno de los elfos y no sus amigos. El elfo fue absorbido y reaparecido una versión mas vieja de si en otro lado de campo de batalla.

Yo de momento me quedare aquí guardando las caravanas. Os estare aquí apoyando.

Parece que la batalla va sobre ruedas, Kava y Stramis flanqueando al semigigante, Hall-khad usando sus poderes psionicos para apartar a uno de los asesinos de la espalda de Stramis y a Krunhos apañandoselas con su afinidad elemental para tener a mas elfos y mago entretenidos.

Sin embargo el panorama se torna mucho mas oscuro rápidamente, como suele pasar en las arenas ardientes de Athas.

Cuando Stramis se dispone a realizar el golpe de gracia impulsado por el no-muerto Kava, el medio gigante estalla en un ultimo frenesí de furia mientras vomita chorretones de sangre ... este ultimo estallido de rabia hace que estampe el enorme garrote con incrustaciones de hueso en las costillas de Stramis que se parten como ramas secas.

Quizá otro día hubiera podido aguantar tal envite, pero aún perdía mucha sangre por culpa del asesino elfo ... las hemorragias terminan pudiendo con el y el humano cae inconsciente en el suelo.

Rápidamente el elfo que había atacado a Stramis se lanza contra Kava blandiendo su hoja corta, el reptil consigue parar uno de los ataques y evitando así terminar con la misma herida que su compañero humano, pero el asesino consigue hundir su espada en las carnes del revenant.

Al otro lado del campo de batalla, uno de los semi-gigante -al cual parecía que grupo hubiera olvidado- aprovechó que Hall-khad estaba solo par realizar una contundente carga. El golpe fue contundente y el psionico pudo notar como las piernas le flaqueaban.

Krunhos por su parte es flanqueado por dos de los elfos mientras el mago profanador se aparte como puede arrastrándose por el suelo y usando magia profanadora para lanzar una fea maldición en el Mul. Superado en numero y bajo los constantes ataques, la resistencia de Krunhos fue menguando rápidamente hasta amenazar su consciencia.