Partida Rol por web

Un ruido en la salita me despierta. Son como unos golpecitos, pero nunca se sabe, estoy solo y las criaturas del wyrm no son muy compasivas si les dices que estás cansado.

Podría ser cualquier cosa, pero prefiero asegurarme de que no vaya a ser peligroso antes de salir ahí.

Los golpes se repiten, sin duda alguna provienen de la salita.

No sentía nada especial en la sala, pero desde luego que había algo. Podría cualquier tipo de gamberro o delincuente e, incluso, podría venir armado.

Atento a cualquier otro ruido que pudiera venir de otro lado, me fui acercando cuidadosamente a la puerta que daba con el salón. La abrí lentamente intentando hacer el minimo ruido y me asomé para ver quién era.

Un niño con una pelota la está botando lentamente. La pelota es obviamente de cuero, pero al tocar el suelo suena a madera. Está de espaldas a tí, pero aun así, algo extraño notas en el. Un escalofrio te recorre la espina dorsal al observarlo.

Me voy a cagar en el puto niño y la madre que lo parió!

Manu prefería haberse encontrado con un fomori, sabía como actuar ante eso. Este niño, sin embargo, le recordaba mucho a una pelicula de miedo...y los protagonistas no solían salir bien parados de estos encuentros.

Niño...dijo manteniendo las distancias...¿Que haces aqui, niño?

El niño se da la vuelta. Es un niño de unos 9 años aproximandamente, de pelo moreno y ensortijado, piel clara y ojos castaños. Tiene la mirada perdida y vidriosa y su boca se mueve constantemente como queriendo decir algo, pero ningún sonido brota de sus labios. El cuello lo tiene torcido hacia un lado de forma extraña y la zona que queda más expuesta tiene un corte inmenso por el que a ritmos de latido, brotan regueros de sangre que le bajan por la ropa hasta ir formando un charco poco a poco en el suelo, a sus pies. Gira la cabeza en dirección a ti y vuelve a botar el balón a sus pies, manchandolo de sangre, otras tres veces.

Toc...Toc...Toc.

Ho...hola, niño ¿querías algo?

Era claramente el espiritu de algún muerto, pero no sentía influencia del wyrm en él y eso me permitía no esperar nada agresivo de él.

El niño se señala el cuello, luego señala la calle y repite el gesto dos o tres veces. Luego te tira la pelota y cuando la coges y vuelves a mirarle, ya no está. La pelota no obstante sigue en tus manos, manchada de sangre.

Salí corriendo a mirar por la ventana, por lo visto intentaba avisarme de algo que pasaba en la calle.

Seguía sosteniendo en mi mano derecha la pelota que el niño me habia lanzado.

Cuando te asomas a la calle no consigues ver nada extraño. Las farolas iluminan la misma con desgana, y ni un alma se mueve por ahi fuera.

No había nada que llamara la atención de Manu en la calle...más bien, no habia nada en la calle.

Tras echar un vistazo aún con más detalle, se volvió a girar hacia el "niño". Estaba bastante confundido por lo que pasaba, pero también sabía que aquel espiritu quería decirle algo, y Manu intentaría averiguarlo.

Me giro hacia el espiritu. Es obvio que quería enseñarme algo, pero no conseguía ver lo que era.

¿Puedes guiarme hasta lo que quieres que vea?

Parecía que no volvería a aparecer, por lo que no tendría más ayuda hoy que la que ya me había dado.

Tenía curiosidad por saber lo que querría contarme así que bajé a la calle. Recordaba haber pasado junto a un colegio bastante cerca de aqui. Posiblemente allí pudiera descubrir algo más.

En la calle no hay nadie a estas horas, es invierno, hace frio y mañana hay que trabajar. No hay ambulancias, no hay policias que delaten que se acaba de cometer un crimen. La zona no es muy segura, eso está claro, pero tampoco son las 3000. Tu vagabundeo te lleva hasta el colegio. En alguna que otra esquina vez algun yonko parado, en su propio mundo, pero nadie te importuna.

Llegué al colegio donde pensaba que pudiera pasar algo. Al fin y al cabo, el niño tenía una pelota y no se me ocurria otro sitio más logico al que pudiera referirse el espiritu.

Desde este lado, tan solo veía un colegio, tenía que pasar a la umbra si quería ver algo que pudiera tener interes. Vi una señal de trafico, podía reflejarme en la barra de metal, asiq eu eso podría facilitarme el trabajo. Me acerqué a la señal y me preparé para caminar de lado.