Partida Rol por web

Gracias a la distraccion de Kazurh y Lilith habia conseguido librarme de aquella prision de musculos que por poco me destrozan. Sin embargo era ahora el enano la victima de la escamosa criatura, por lo que sin dudarlo cargo contra la criatura buscando concretar un tajo en su escamosa piel y finalizar con una estocada profunda. 
-Resiste Karzurh, yo me encargo de este monstruo.

Joder no os acerquéis hasta que yo o la maga hayamos aturdido algo a la serpiente de lejos. Sino estamos perdidos.

Vuelvo a cargar el arco.

El enano se debate con fuerza y logra deshacerse del mortal abrazo del reptil y separarse un par de metros. Ese momento lo aprovecha Itán para atacar por detrás a la serpiente hundiendo profundamente su espada en el cuello de la gran sierpe. El animal se revuelve dolorido y pega un fuerte topetazo al elfo con sus cuernos y lanzándole con fuerza tremenda contra la boca de uno de los túneles. El elfo rebota con crujir de huesos y cae al suelo mareado. La serpiente, rápidamente le enrosca y empieza a apretarle.

Artros dispara pero la flecha, simplemente rebota en la piel de la bestia y sale hacia arriba antes de caer inerme al suelo.

Morrowir, para dar tiempo al enano a alejarse vuelve a intentar sajar el cuerpo de la serpiente pero esta vez su mandoble falla el escamoso cuerpo.

La atribulada Lilith, dispara de nuevo con su bastón pero otra vez la sierpe esquiva el mágico proyectil.

Con una asombrosa rapidez, después de atrapar al elfo, golpea con su cola al enano y lo tira al suelo. Kazurh rueda por el suelo alejándose otros dos metros del animal. Y con un rapidísimo movimiento de su cabeza golpea en el tórax a Morrowir. Suenan huesos al quebrarse y el guerrero sale despedido casi cuatro metros hacia el lago para caer en él con un fuerte chapoteo que salpica agua ensangrentada. Morrowir queda flotando en el agua con la cara hundida en el líquido mientras en torno suyo el líquido empieza a volverse rojo. No se mueve.

Aunque no consigo acertar en un ojo como pretendía, logro atravesar las escamas bajo la cabeza, aunque desgraciadamente no consigo un golpe mortal, si no enfurecerla aún más... El relampagueante golpe me deja sin aliento y casi inconsciente, pero lo peor está por venir, pues moviéndose con una rapidez asombrosa, la serpiente me atrapa, me envuelve y aún tiene tiempo de prácticamente acabar con el resto del grupo a golpe de cola y cuernos...

Sonriendo con rabia y fatalidad, intento liberarme, a pesar de estar convencido de que es inútil competir con la fuerza del monstruo.

Te... sacaré... ese musgo... aunque... sea... a mordiscos... hija de...

Para mi sorpresa, noto como un hueco entre los anillos mortales, y consigo escurrirme, momento que aprovecho para alejarme de los túneles a los que tan pegada está la bestia, para tratar de recuperarme lo más lejos posible de ellos.

Joder!!!!!

Vuelvo a cargar ota flecha.

Kazurh era consciente de que probablemente moriría allí, pero mientras tuviese fuerzas, seguiría andando. Estaba a punto de volver a cargar cuando se percató de que Morrowir estaba inconsciente o muerto en el agua, boca abajo. Corrió junto al agua y empezó a tirar de Morrowir, si tenía que morir, que muriese, pero que no fuera por ahogamiento.

-Aguantad del bicho compañeros, voy a sacar al grandullón del agua!

Todo sucede demasiado deprisa como para que pudiera reaccionar, el intento de acabar con aquella abominacion que apresa a Itan y su veloz reaccion que me golpea como una montaña. 
Me siento desfallecer y las fuerzas me abandonan por completo, una honda tristeza me invade por haber fallado a mis compañeros en el momento en que más me necesitaban.
 

El elfo, consigue liberarse del mortal abrazo de la serpiente y rodar lejos de ella. El enano se retira del combate y agarra a Morrowir para sacarlo del agua. Mientras Artros mantiene una flecha cargada apuntando a la serpiente. El animal sisea y se enrosca en lo alto de la cueva protegiendo los túneles. 

Con ayuda de Itán, Kazurh logra sacar a Morrowir del agua. Rápidamente, Lilith se acerca para intentar curarle. Mientras Artros les cubre, llevan al guerrero a una zona más seca y lo tienden. Itán acerca la antorcha mientras la maga intenta arreglar el destrozo. 

Por suerte, las manos de la maga logran estabilizar al guerrero.

- ¡El ungüento de la bruja! - comenta Lilith - ¿Lo hemos traído? 

Morrowir abre los ojos con dificultad.

La serpiente, se mantiene en lo alto de la cueva siseando de modo amenazador.

En cuanto Morrorir cae olvida su ofensiva fallida y corre hacia el moribundo. Por fortuna el enano saca al guerrero del agua. Espero que no sea tarde. Con la mente puesta en mis dotes como sanadora olvido mi propia seguridad y me arrodillo sobre el herido de muerte en el momento en que Kazurth lo saca con un esfuerzo sobrehumano. Pongo mi esperanza en mis conocimientos sobre la medicina y trato de hacer lo posible para salvar su vida. Apelando a mis fuerzas impongo las manos y mis ojos se cierran concentrándome.

Entre toces y estertores me dejo arrastrar por el enano para luego ser atendido, me cuesta focalizar mis sentidos y la respiracion es costosa debido al peso de la armadura y posiblemente a algunas costillas rotas. Los primeros auxilios de Lilith apenas si logran evitar que continue la perdida de sangre, aun me siento demasiado debil como para luchar. Aunque lamento que por mi culpa todo el equipo tuviera que centrarse en mi.
- Esa maldita...no crei jamas que su piel fuera tan fuerte y ella tan veloz- Digo con dificultad- Dejenme recuperar el aliento y hagamos un plan para un ataque en conjunto.

Esbozo una sonrisa al ver como el guerrero volvía a la realidad.
- Ha faltado poco, amigo.
Rápidamente me vuelvo, como si, precisamente, fuera una serpiente al acecho del enemigo, la batalla no había acabado, recupera su bastón y se adelanta unos metros levantándola como si me protegiese con él. El corazón bombeada ese preciado líquido caliente que nos da la vida.

- Lilith tiene razón, deberíamos usar ya la pasta curativa... -comento, resollando y masajeándome las costillas, mientras vigilo de reojo los movimientos de la serpiente gigante.

- ¿Aún la llevas contigo, Morrowir? Úsala, contigo y con Kazurh, al menos. Pensé que la serpiente os había partido todos los huesos. Casi lo consigue conmigo...

Miro a Artros y a su arco, y asiento.

- Yo también sé tirar. No me acercaré más a esa bestia, al menos no hasta haber agotado todas mis flechas.

Intento recuperarme sin perder de vista al enemigo, al tiempo que busco el mejor lugar para intentar asaetearle.

´´Al ver la situación decido arriesgarme algo más y me acerco a la serpiente para que la fuerza del arco y la poca distancia hagan que la flecha no rebote de nuevo.

Una vez que este a tiro, disparo y corro o al menos esas son mis intenciones.

Lilith usa su poca magia restante para curar al guerrero. Morrowir sana bastante pero aún así tiene que reposar para restañar sus heridas. El enano, tras sacar al guerrero del agua, hace lo mismo. 

Mientras Artros se acerca un poco más a la bestia para que sus flechas penetren más en el cuerpo del animal mientras apunta. El elfo por su parte, saca el arco y se desplaza unos metros hacia un lado para disparar también sobre la serpiente.

La agotada maga se levanta, tras curar a Morrowir y se encara al animal.

La serpiente, enrrollada, sisea desde lo alto de la cueva delante de los túneles sin perderos ojo. Varias flechas asoman de su corpachón ensangrentado...

Con un sobrehumano esfuerzo Kazurh se pone en pie, apoyándose en su hacha. Aun le costaba respirar, y resoplaba entre frase y frase:

-Dadnos un segundo, y nos incorporamos al ataque. Verdad que si, amigo - dice mientras mira al guerrero.

Aún dolorido, apunto al centro de gravedad del enemigo, para intentar evitar que esquive mi proyectil con uno de sus rapidísimos movimientos...

Algo recuperado y viendo como mis compañeros, excepto el gran Kazurh quien luce tan abatido como yo mismo, se preparan para un nuevo ataque, me pongo de pie y calzo el escudo en la diestra, para luego aferrar con la derecha la espada larga. Todavia no me acercaria a la bestia, pero desde mi lugar estudiaria la situacion preparandome para el proximo ataque, cuando el enano tambien estuviera dispuesto y pudieramos combinar una tactica.
-No se descuiden, esa criatura es endemoniadamente rapida, la unica forma de vencerle es si actuamos de manera coordinada.