Partida Rol por web

El viaje había transcurrido apaciblemente, había logrado tratarme las heridas y poner a punto mi armadura, estoque y diario.

Cuando paramos ya en el ocaso, y ante nosotros un páramo a los que pocos les gustaría estar.

- Cuando esperas visita en tu casa normalmente traen pastelitos y tu pones el té. Pero no creo que esta compañía traiga pastelitos...

Vaya relato aburrido de Failin, la única emocionada era Alhandra que por un momento parecía que hubiera picado piedra ella misma en la cantera, cuando lo único de lo que trata la historia es que la casa Cannith, como todas las casas se quedó con los recursos que encontró en el camino.

Con la vuelta al camino y el avance del terrero, pasamos de un desierto baldío a ver un poco de vegetación y algo mucho peor, la gran humareda de un sitio en donde no hay árboles, al acercarnos se puede observar a simple vista la destrucción completa de toda estructura, un trabajo concienzudo y cruel, quién ha podido hacer esto? Quizás se pueda ver desde aquí.

A Shanna, como siempre, le encantaban todas las historias y aquella no fue una excepción, la escuchó con atención muy fascinada, e intentó rellenar con la imaginación los huecos que dejaban sus pocos conocimientos de geografía o incluso historia. ¡Había tantas cosas que saber!

Cuando veo el aspecto que tiene nuestro destino...recuerdo la razón que nos ha traido hasta aquí y lo que nos perseguía o en este caso lo que nos había adelantado.

- Puede que nuestro "amigo", nos haya adelantado en esta ocasión. Desenvaino lentamente mi acero para hacer el menor ruido posible. - Creo que nos espera otro combate.

La hora del día os favorece en el sentido de ocultaros de las vistas de posibles miradas indiscretas. El ocaso se encuentra en la fase anterior a la noche y una oscuridad que recuerda al mar profundo es todo cuanto ilumina el lugar. Sin embargo aquella hoguera si delata la presencia y los movimientos de aquellos que se mueven entre las ruinas de Cantera Carmesí.

 Os agazapáis en el límite del promontorio que ocupáis y observáis durante unos minutos. Susurrando intentáis poneros de acuerdo en aquello que veis.Shana y Raith ven el fuego ardiendo en el pozo, ven las  cuatro tiendas de gran tamaño y ven la gente que pulula a su alrededor. Sin embargo no llegan precisar con más detalle. Alhandra y Khala, sin embargo, hacen un recuento. Según ellas cuentan 16 caballos, dos carromatos cubiertos y 7 figuras humanoides. Las formas humanas, dicen , parecen llevar yelmos y cotas de malla a juzgar por como el fuego se refleja en su equipo. Jurarían que ninguna de ellas parecen encontrarse de guardia. Threkor confirma los números de la Cannith y de la cambiante y añade otra información. Los yelmos tienen un diseño curioso con tan sólo medio protector facial.

Cuando parece que ya no veis nada más Edirel os señala una de las tiendas. Allí, dice, hay dos figuras que permanecen en las sombras cerca de las tiendas como si montasen guardia. Lo que os dice os llena de horror y, si no os hubieseis enfrentado hace poco con estas criaturas, hasta os podríais sentir incrédulos ante las palabras del tifling. Pero Edirel asegura que lo que está viendo junto a las tiendas son dos muertos, dos cuerpos descarnados, dos esqueletos... 

El grado de destrucción del lugar no parece acorde con el tamaño de la fuerza asentada en ella. Tal vez sean los restos del ejército destructor o cuenten entre sus filas con algún mago de extraordinario poder para causar semejante anquilación. Lo que está más allá de toda duda es que no se trata de los malhadados supervivientes de la comunidad ni de unos vulgares oportunistas que han acudido en busca de cualquier cosa que puedan rapiñar.

La presencia de no-muertos informada por el semidemonio no hace sino confirmar mis peores temores y los presagios de Raith de que nuestros enemigos se nos han adelantado y estaban detrás del abordaje del Exhaustless. De algún modo han logrado averiguar que viajábamos en el barco y que nos dirigiámos hacia aquí. Solo se me ocurre una forma de que lo supieran: que hayan capturado, torturado y probablemente asesinado a mi prima Elaydren.

Qué relación existe entre los constructos de ese tal Señor de los Filos y los muertos vivientes del Exhaustless y de Cantera Carmesí es algo que debemos descrubrir todavía.

—Según las indicaciones de la carta que nos dejó Lady Elaydren, aquí debemos encontrar indicaciones de cómo llegar hasta un lugar llamado Albohogar —recuerdo a mis compañeros—. Sugiero que registremos el pueblo en busca del edificio de la Casa Cannith, con suerte hallaremos allí algún registro que pueda servirnos de ayuda. Los míos son grandes constructores y es probable que la estructura todavía se conserve en pie o, al menos, en mejores condiciones que la mayoría de edificaciones que conforman la aldea.

»No parece que esos tipos de ahí abajo tengan prisa por levantar su campamento pero tampoco que estén esperando nuestra llegada tan pronto. Si nos mantenemos alejados de ellos y la Fortuna nos sonríe, tal vez logremos entrar y salir de Cantera Carmesí sin levantar sospechas.

Otra vez muertos vivientes, después de la experiencia del barco los quería lejos de mí, por cierto el barco, esto no es nada casual, alguien va un paso por delante nuestra, pero no he notado ninguna presencia cerca en ningún momento, magia quizás?

- No se supone que nuestro enemigo eran los forjados? Que pasa que ahora sólo los encontramos sacos de huesos? No quiero acercarme a esas cosas sin un beato al lado para destruirlos, más vale que no tenga al lado ninguno.

- Como es un edificio Cannith? tiene algún tamaño especial? Torres? Algo que ayude a localizarlo?

Muestro a todos mi sello, para que aquellos que no estén familiarizados con él puedan identificar el glifo de la Casa Cannith cuando lo vean.

—Puede estar grabado en una fallada, tal vez en algún pendón flotando al viento... —sugiero, temiendo que cualquier vestigio de tela que pudiera haber en el pasado debió arder en el incendio que arrasó la aldea—. Si no, tendremos que buscarlo dentro de cada edificio. En cualquier caso éste es un asentamiento pequeño y, por lo que nos ha contado el señor Failin, mi Casa tenía aquí una importancia preponderante. No parece descabellado pensar que se encontrará entre las construcciones de mayor tamaño de la aldea o, como ya he sugerido anteriormente, entre las que se encuentren en mejor estado de conservación.

Una vasta meseta, limitada al oeste por un estrecho cañón, se abre ante vosotros.La cantera se extiende al menos durante una milla y la villa cercana está dispersa por toda la meseta; al menos, lo que queda de ella. Todo lo que estuviese hecho de madera ha quedado reducido a cenizas, dejando en pie un puñado de fachadas de piedra, los cimientos de roca y alguna chimenea. Aunque el clima es cálido, la villa parece estar cubierta por una capa de hielo que brilla bajo la luz de las lunas ascendentes. También os fijáis en otra fuente de luz. En la parte superior de la villa, hay un fuego ardiendo en un gran pozo, que a su vez está rodeado por cuatro tiendas de gran tamaño. Hay figuras moviéndose por este campamento improvisado. 

- Bueno...Veo que tenéis trabajo que hacer- susurra Failin sorpendido por vuestras palabras-. En cualquier caso yo me quedaré por aquí. No puedo arriesgar ni mi carreta ni mi vida- Le veis mirar alrededor buscando algo-. Estaré tras esta misma colina para cuando terminéis. No os preocupéis, que no voy a dejaros tirados. Ya os lo dije, habéis contratado el mejor transporte de Darguun.

Señalo a mis compañeros un edificio situado en el centro de la villa, cuyo tamaño es notablemente mayor a los demás y su estado de conservación, bastante mejor dado que conserva sus muros prácticamente intactos. O al menos eso parece desde donde nos encontramos.

Bien situado, grande y en buenas condiciones, el edificio parece cumplir todas mis premisas como candidato a ser la residencia de la Casa Cannith en Cantera Carmesí. Por desgracia, no está lejos del campamento, de modo que le pido a Failin que nos acerque a la población desde el norte, de modo que no tengamos que pasar entre los milicianos acampados para llegar al edificio.

- Yo me puedo mover discretamente, el que sea capaz de lo mismo que forme grupo conmigo, el resto tendrá que dar un rodeo o crear una distracción.

Espero mientras deciden para ver como vamos a repartirnos.

Vi como Khala se adelantaba moviendose silenciosamente. Yo era el único que podía intentar seguirla sin hacer ruido. Mejor ir los dos para podercubrirnos si las cosas se.ponian feas.

"¿Qué tal entonces, si ellos dos investigan por el sur..." señaló a Khala y Threkor, "...mientas que nosotros investigamos por el norte?" propuso Shanna, estando de acuerdo con el plan de Alhandra de usar el transporte para entrar en el lugar por el norte. Khala y Threkor ya se pusieron en marcha. "¿Podría acercarnos, señor Failin? No somos tan diestros en el sigilo como nuestros compañeros, y tenemos que evitar a todos esos milicianos..."
 

Había demasiados milicianos en el campamento como para bajar sin que hubiésemos descubierto un camino que les sortease. La cosa tendrían que resolverla Khala y Threkor, eran los únicos capaces de no hacer tanto ruido como para atraer atenciones no deseadas.

- Si causamos una conmoción los milicianos se pondrán en guardia y duplicaran sus patrullas, eso es lo que yo haría. Mucho mejor es que Khala y Threkor oteen el terreno y nos marquen un camino por donde podamos hacer nosotros el acercamiento al edificio seleccionado. 

No me gustaba mucho dividir el grupo, pero me daba en la nariz que en este caso no teníamos elección.

- Me parece bien, creo que tanto Khala como Threktor son los más capacitados para esta tarea - Comenta al grupo - Podemos montar guardia desde aquí y vigilar por si le ocurre algo, si vemos que les cogen corremos a por ellos y ya veremos que hacemos.

-¡En absoluto!- insiste Failin-. No puedo hacer lo que me pedís. Sería mejor anunciar nuestra llegada a bombo y platillo antes que acercarnos con toda una carreta elemental. No es medio ideado para la infiltración sino para el viaje. Haríais muy bien en evitar ese campamento y quienes lo guardan. Y por supuesto, ni se os ocurra llamar su atención...

Failin rechaza toda propuesta que implique aproximarse más con la carreta elemental. Khala se ofrece para aproximarse. Raith sugiere que sean ella y Threkor quienes se acerquen en busca del itinerario que más les garantice la ocultación. Edirel está de acuerdo con el guerrero y Alhandra propone centrarse en aquellos edificios centrales. Hay algo en ellos que le hacen pensar que su objetivo se encuentra cerca de ellos.

Con esta idea en mente Khala y Threkor empiezan a moverse en dirección a cantera Carmesí. Sus movimientos expertos son visibles apenas unos metros. Saben hacer su trabajo. Sus pies apenas rozan el terreno, las sombras son  medio en el que se sienten cómodos. A pesar de que sois conscientes de que deben estar por delante de vosotros sois incapaces de descubrir ni el más leve de sus movimientos...

Os acercáis a Cantera Carmesí con excelente sigilo. Frente a vosotros la luz del fuego del campamento brilla e ilumina una zona a su alrededor. Vuestra aproximación desde la colina os lleva al poblado desde su flanco occidental. El terreno es lo suficientemente accidentado como para pensar que por esta ruta el resto del grupo pueda acercarse de forma bastante sigilosa y oculta hasta las primeras ruinas del poblado.

De repente escucháis algo...

Se trata de un chasquido rítmico, como el que haría un pico golpeando piedra o hielo. Parece provenir de la parte central de la villa. No conseguís ver nada que lo relacione con este ruido...

Le hago señas a Threkor hacia la fuente de ese ruido extraño, a su vez le propongo que vayamos por el norte para tener una mejor vista de lo que sucede.