Partida Rol por web

El pajarraco intentó defenderse, pero por suerte esta vez pude esquivar, sin duda tenía que estar bien herido con mi golpe y con el de Alhandra, con un poco de suerte podremos terminar rápido con él.

Buscando la precisión sobre el número de ataques vuelvo a concentrarme en los movimientos de la criatura y consigo hundir la espada de nuevo en la carne putrefacta.

A pesar de que la buena fortuna acompaña a mi disparo para que éste resulte certero, la escalofriante ave no parece acusar debidamente la gravedad de la herida recibida. ¿Es que en este maldito lugar no hay nada que funcione como debería?

Tengo la sensación de que todo esto no es más que un mal sueño y que en cualquier momento me despertaré en Sharn lamentándome de haber bebido anoche más cervezas de la cuenta. Y, con un poco de suerte, no me despertaré sola.

En cualquier caso, sea realidad o una visión onírica, lo cierto es que Khala está haciendo un buen trabajo a la hora de acabar con esta monstruosidad desplumada y no quiero acercarla accidentalmente con uno de mis virotes así que guardo mi arma y dejo que ella termine lo que ha empezado.

La criatura esquelética había descendido sobre nosotros, en este caso su objetivo era Khala pero podía ser cualquiera. Su movilidad era inaudita....maldita nigromancia. Suelto un mandoble con el tangat intentando que se fije en mi en vez de en mi compañera, pero el golpe es flojo y sin fuerza.

- Maldita criatura.

El arma doble de khala se mueve de nuevo con inusitada velocidad. Un destello azulado es la única evidencia visible del recorrido que su acero recorre al cortar de lado a lado el descarnado cuello del buitre. Mientras su cabeza y su alargado cuello vuelan en el aire dando giros, el cuerpo del no muerto sigue moviéndose ante vosotros. Parece no haberse dado cuenta que su cabeza se ha desprendido definitivamente, casi diríais que ni tan siquiera le importa. Finalmente las dos partes cesan el movimiento...

Pasados unos segundos Failin desciende del carromato elemental. Su mirada desconcertada mira al buitre no-muerto y luego os observa de uno en uno. Sus cansados ojos parecen interrogaros; "¿qué hago yo ahora?" .

Una rápida exploración de la mina os revela que se trata de una excavación, en apariencia, normal. Tras un pasillo principal de 60' la mina desciende hasta llevar a una gran cámara de piedra sin pulir. A esta distancia de la entrada tenéis que encender alguna luz ya que el interior está oscuro.Partiendo de la sala surgen otros cuatro pasillos. En un primer momento, y desde esa encrucijada , parecen ser túneles sin salida. Pero una exploración más detallada os revela un hallazgo importante.

Al final de cada  pasillo hay una trampilla en el suelo, fabricada en adamantita y con forma circular. Justo al lado hay un pequeño agujero pintada de esmalte azul.

Cuatro túneles con cuatro idénticas trampillas al final de cada uno de ellos... 

De nuevo teníamos delante una encrucijada que nos imponía la oblegaciñon de decidir. En principio nada diferenciaba un camino de otro, pero con toda seguridad no serían un camino de rosas.

Me acerqué cuidadosamente a la entrada de cada pasillo para intentar descubrir si había algo que los diferenciara entre sí para poder escoger uno y no dejarlo en manos del azar. Agudicé también el oído por si detectaba algo, un siseo, lo que fuera.

Palpé cuidadosamente la piedra alrededor de cada abertura intentando identificar algún mecanismo o sello que nos marcara el camino.

Khala termina con ese monstruo desplumado, ganándose mi más sincera felicitación por ello. Sin embargo, no tenemos mucho tiempo para la autocomplacencia de modo que le pido a Failin que esta vez nos acompañe para que podamos protegerle como hasta ahora de los horrores de las Tierras Enlutadas.

Tampoco tengo intención de discutir con él de modo que, con independencia de su decisión personal, me adentro en la oscura mina siguiendo a Threkor de cerca. Dado que mi visión no es tan aguda como la de mi amigo elfo, no dudo en valerme de uno de mis cetros solares para iluminar nuestro camino.

Todos los senderos que escogemos terminan en callejones cegados por escombros pero una serie de trampillas parecen habilitar el acceso a los niveles más profundos de la mina, donde posiblemente se encuentre el laboratorio de mi Casa.

Al lado de Threkor no soy más que una aficionada, pero no pierdo la oportunidad de examinar también los potenciales accesos consciente de que los míos siempre han sido muy celosos de sus secretos y es muy posible que haya todavía trampas dispuestas para disuadir a posibles intrusos.

El maldito pajarraco del averno por fin se queda inerte en el suelo, por fin un enemigo que no ha causado estragos entre los nuestros, ahora hay que adentrarse dentro de la cueva, un ambiente que no es me guste mucho, pero me imagino que no queda otra.

Threkor y Alhandra ya se adelantan para explorar, así que yo también me adelantare, mi visión puede ayudar para averiguar lo que podemos encontrarnos.

Por suerte para mi, el fallo que había cometido al arremeter contra la criatura fue suplido por la buena actuación de Khala. Una vez terminada con la no-vida de la bestia, podíamos continuar con nuestra inspección de la "mina". Threkor y Alhandra abrían la marcha seguidos por Khala, el reto íbamos un poco mas retrasados.

- Failin tu y Shanna en el medio de los grupos, Edirél y yo cerramos la comitiva. 

Caminamos por los silenciosos túneles intentando no estropear el trabajo que nuestros expertos saqueadores iban haciendo.

Pensó en sacar la linterna siemprebrillante, pero la solución que Alhandra pensó fue mucho mejor, ya que no alumbraría un campo tan amplio como el del cetro solar que la artífice había sacado. El plan de permanecer en formación circular, con Failin y ella en medio parecía el más seguro para todos, así que asintió y en silencio se colocó en su lugar. Siempre le gustaba ver lo bien que se manejaban estos aventureros, curtidos en mil situaciones como aquella, pero aun tan nuevas para ella.

- Está bien, iré con vosotros. Se que ahí dentro será peligroso, pero no creo que estar aquí fuera y solo sea mejor- responde Failin a Alhandra. 

Buscáis en los túneles y en las trampillas. Analizáis cada pie de caverna y cada viga de la entrada. Reconocéis la dirección de cada uno de los pasillos. Pero no encontráis nada, no se escucha nada ni podéis deducir que un camino sea mejor que otro.

Estudiáis las trampillas de 4 pies de ancho. Hay un mecanismo de cierre sencillo en el centro de cada trampilla y un pequeño agujero justo a su izquierda pintado con esmalte azul. Threkor y Alhandra coinciden en señalar que este orificio parece tener una forma como de cono. Si se tratase de receptáculo para una llave esta tendría una forma afilada. 

No habíamos encontrado nada en nuestra búsqueda mas que una puerta de la que no teníamos la llave, era desesperante encontrarnos una y otra vez en un callejón sin salida.

- ¿Y ahora?. ¿Algo de lo que hemos encontrado os suena que pueda encajar ahí?.

- Yo no recuerdo nada parecido, quizás en la mochila que nos dieron haya algo medianamente parecido.

La falta de un objeto tan trivial a estas alturas es altamente frustrante.

¡Qué frustración! Después de haber realizado un viaje tan largo y peligroso, resulta que ahora no podemos entrar en el laboratorio subterráneo.

Soy una mujer tozuda de modo que me niego a darme por vencida tan pronto. Tiene que haber una manera de bajar, incluso aunque tengamos que destrozar las trampillas para ello. Sin embargo, si podemos encontrar una forma más fácil de entrar, debemos tratar de explorarla.

La sugerencia de Khala de que tal vez mi prima nos dejara alguna llave o herramienta que pudiera servirnos de utilidad no me parece descabellada. A fin de cuestas, mi prima Elaydren es también una Cannith y ha demostrado sobradamente ser tan ingeligente como previsora.

Registro el contenido de la mochila pero no encuentro en ella nada que pueda servirnos de utilidad, no al menos a simple vista. Entonces recuerdo que no todo lo que nos dejó Elaydren está aquí dentro. En concreto, una paqueña vara de unos siete centímetros y rematada con un zafiro tan azul como el esmalte con que está pintada la que parece ser la cerradura de la trampilla. Entonces no supimos para qué servía pero puede que se trate de la llave que estamos buscando.

Si no me equivoco, Shana se la guardó para sí antes de que nos marchásemos de Sharn de modo que le pregunto si todavía tiene la vara consigo y si nos la prestaría para probar suerte con ella.

Shana extrae aquella extraña vara que ha estado guardando durante todo este tiempo sin saber muy bien para que podía servir. La observáis detenidamente...

  Tiene una manufactura excelente, muy antigua. Observáis el orificio esmaltado en azul y... Parece hecho para encajar en ese mismo orificio. Pero os asalta una duda.

 ¿En qué trampilla usarlo?

- ¿Habéis encontrado algo en las trampillas que nos haga sospechar que hay detrás de ellas?. Threkor y Alhandra habían realizado una búsqueda a conciencia, si ellos no lo sabían yo solo podía hacer conjeturas. - ¿O probamos en la primera en la que encaje?. 

Miro a Raith mientras habla.

Diría que encaja en todas ellas. No he visto ninguna indicación de cual debería ser el correcto, así que supongo que tendremos que arriesgarnos y colocarlo en uno al azar.

Miro las cuatro entradas y los cuatro pasillos. - Quizás la dirección en la que se encuentran sea relevante, pero ahora mismo no sé nada más.

La idea de la varita con el zafiro podría funcionar pero me muestro tan indecisa como el resto de mis compañeros a la hora de determinar en qué trampilla utilizarla. Tengo la sensación de que probablemente funcione con todas y, dado que no sabemos a qué lugar del laboratorio nos lleva cada una, tanto nos da tomar uno u otro camino.

Así pues, sugiero a mis compañeros que comencemos por la trampilla situada más al este de la mina.

Shanna sacó la varita de su mochila. ¿Era una llave, despues de todo? Tenía sentido, ya que Elaydren la había dejado en la bolsa mágica para ellos. Desconocía qué trampilla podría servir, así que decidió dejar que sus compañeros lo decidieran.

Dada la encrucijada que no encontramos, sugiero seguir el camino marcado por la Cannith, ya que al menos estamos en su terreno.