Cuando vas a guardar el libro una foto tuya cae de él.
Es una foto de hace unos dos años.
Detrás tiene un texto escrito.
Ánimo, la voluntad es lo que hace a un buen hombre, no su cuerpo. ¡Tú lo demostrarás!
Además, ves que la esquina de otra foto sobresale entre las hojas del libro.
Cojo mi foto y sonrío. Maestro Plarion...yo...
Entonces me dí cuenta de la otra foto. Cogí la esquina y la saqué del libro para poder observarla con detenimiento.
En la foto salen dos chicos que no conoces, ambos sonríen, y uno tiene la mano por encima de los dos hombros del otro. Entonces te das cuenta, uno de ellos es Plarion antes de ser un caballero jedi. El otro es el maestro de la túnica amarilla. Parece que ambos eran amigos, grandes amigos.
En la parte trasera de la foto también hay algo escrito.
"Amigos por siempre" y luego otro escrito más pequeño "Adiós, amigo".
Parece que no eras dado a contar tu vida maestro...me gustaría mucho saber más cosas de ti...
Pensé antes de guardar ambas fotos en el libro cómo pude y encaminarme fuera del templo, para buscar el rastro de los demás. Posiblemente me matarían cuando me vieran, pero tenía que contarle a Daesha la verdad.
El exterior está totalmente desierto, solo ves cadáveres allá donde miras.
No me queda otra que seguir adelante...lo más seguro es que hayan ido al pueblo.
Me encaminé hacia allí, me costaba cargarlo todo con una sola mano. Pero no me iba a rendir, tenía que ver a mi hermana...aunque ello significara mi muerte, ahora era lo único que me quedaba en el mundo.
Tan solo una hora de viaje después llegas al pueblo en que trabajaba tu madre. Normalmente tardabas 30 minutos, pero esta vez has ido más lento.
Intenté buscar algún rastro de mis antiguos compañeros, quizá estarían por algún lado. Aunque andaba con cuidado y escondido. No por ellos, si no por el Hutt...
La gente se te va quedando mirando cuando te cruzas con ellos, eres bastante llamativo con la mano amputada y cargando tanto agua como comida.
Me dí cuenta de que estaba llamando demasiado la atención...tendría que salir de allí rápido...pero ¿Dónde estaría mi hermana? Decidí cruzar el pueblo y salir por la otra punta...si no había nadie acamparía en las afueras. No podía hacer nada mejor.
Numerosas miradas se detienen en ti, pero nadie dice ni hace nada.
Finalmente llegas al otro extremo del pueblo.
Nada ¿Y ahora qué? no sé qué puedo hacer...tendré que moverme por mí mismo..creo que será mejor buscar un sitio donde dormir.
Pienso mientras me alejo del pueblo caminando con lentitud, en busca de un buen lugar donde pasar la noche. No sabía cómo había logrado llegar tan lejos con estas heridas y sin un tratamiento decente...pero la pomada no evitaría para siempre la infección, y los analgésicos se agotarían. Si no encontraba ayuda pronto moriría, lo sabía. Sólo esperaba poder ver a mi hermana y contárselo antes de que llegara mi hora.
De nuevo comienzas a andar por el árido páramo. Delante de ti ves el fantasma de los que habían sido tus compañeros aprendices.
Avanzo temeroso, despacio hacia lo que veo.
No me lo puedo creer.
Sus fantasmas vuelan a tu alrededor, eres consciente de que debe ser una alucinación, pero no puedes evitar pensar que quizás y solo quizás, todo estén muertos.
Sus espíritus se desvanecen por completo cuando te topas de bruces con una formación rocosa.
¿Me describes la formcaión porfa?
Un par de rocas de varios metros sobresalen encarándose contra el cielo, mientras que un par más pequeñas parecen "tumbadas" y "descansando" sobre la tierra.
Consiguen dar algo de sombra y cobijo.
Un buen lugar para descansar...
Pienso mientras me siento entre las rocas y saco cómo puedo el agua y la comida para comer algo antes de descansar.