Partida Rol por web

.-Hay trato.-Le digo estrechándole la mano al duros:-Salga como salga la cosa, mañana por la noche volveré para darte el resto del dinero.-le dije antes de soltarle la mano, para que supiera que lo que le decía lo haría.

.-Ahora dime: aspecto y lugar donde puede estar este contacto tuyo?-pregunté al final. 

Sharene estaba dando forma a una idea que se le acababa de ocurrir. Agradeció que Gial reaccionase tan rápido y tan acertadamente, además. Le encantaba cómo se desenvolvía y le hizo bastante gracia el modo en que se expresó. Lo cierto es que no tenía que fingir, porque cada vez estaba más encandilada con él. 

Se sonrojó un poco al coger su mano, pues no lo esperaba, y sonrió, apoyando en un gesto afectuoso su cabeza en el hombro de Gial, mientras aguardaba la respuesta de la twil'ek.

La twi´leak sonrío y os acompañó al rededor de la sala. Os mostró varios hologramas de última generación que mostraban las bondades del crucero, de las paradas antes de llegar a vuestro destino, Glee Anselm. Allí fue donde hizo más incapié en su fuerza de venta. 

- Aquí podrán disfrutar de experiencias de casi cualquier tipo. ¿Quieren sentirse como los únicos habitantes del planeta? ¿Quizá quieran vivir como lo hacían hace miles de años los autóctonos del lugar? Podemos cumplir casi cualquier deseo que tengan. Tours Estelares está para servirles en lo quieran antes incluso de que ustedes lo sepan - 

No había duda de que aquel discurso era ensayado. La mujer sabía hacer su trabajo y siguió con el tour hasta que terminó casualmente en uno de los terminales donde poder contratar el viaje. 

- ¿Creen que podrán soñar lo suficientemente a lo grande para aventurarse? Si tienen alguna duda, yo misma podré solucionársela - 

El duros miró con rostro preocupado. Quizá esperaba recibir todo el dinero ahora, pero finalmente parece que se decidió a hablar. 

- Muy bien, encontraras a tu hombre en el Droide averiado. Una cantina de mala muerte al otro lado de la ciudad. Pelo moreno, bigote y una cazadora azul. No tiene pérdida. Habla como si fuera el dueño del lugar. - 

Se guardó los créditos y se levantó de la mesa. Dejó entonces sobre la mesa una pequeña pulsera de color negro.

- Llévala puesta cuando entres al local. Si no tratarán de robarte todo lo que tienes o te pegarán un tiro. No es una buena zona. Me la devuelves mañana junto con los créditos o yo mismo me encargaré de encontrarte y desparramar tus sesos por las calles de la ciudad. ¿Entendido? - 

Mientras el duros me da la descripción física del hombre con el que me he de reunir y el lugar donde estará, yo lo apunto en el datapad para asegurarme de que no me equivoco de objetivo:-Parece un tipo normal, por lo que cuentas.-digo mientras me hago una imagen mental del objetivo. 

Al darme la pulsera y hacer la amenaza me lo vuelvo a mirar:-Descuida si tenemos que llegar a ese extremo, tendrás una buena muerte.-le digo antes de levantarme de la silla:-Aquí estaré mañana, llegaré antes de media noche. Espera hasta entonces.-le digo, guardo la pulsera en mi bolsillo y salgo del bar, para volver con el resto:-Vamos amiguito, a ver cómo les ha ido al resto.-comento mientras me encamino hacia el casino donde nos teníamos que reunir para poner la información en común. 

Gial sonrió amablemente a la twi´leak. Estaba poniendo todo de su parte para que eligieran su tour.

-Si nos disculpa un momento. –dijo con una sonrisa.

A continuación, cogió a Sharene amablemente por el brazo y se acercó a su oreja pasa susurrarle sin que nadie pudiera oírlo.

-Sonríe mientras te hablo y afirma de vez en cuando. Qué opinas si le digo que queremos vivir una experiencia como imperiales tratando de luchar con jedis, ¿es demasiado arriesgado? Tengo la sensación de que podemos sacar algo de aquí, pero no sé muy bien cómo enfocarlo. ¿Qué opinas?-.

Acompañó a Gial, retirándose a un lado para que nadie pudiera escucharles. De no haberla avisado, en lugar de sonreír y asentir, le habría mirado sorprendida, como sorprendente era el plan, tanto por su originalidad como por el riesgo que entrañaba. A Sharene, sin embargo, el riesgo no era algo que la echara para atrás.

-Bueno... llamaremos la atención, desde luego, aunque tal vez eso nos venga bien, nunca se sabe -dijo pensativa-. Es arriesgado, pero confío en tu instinto, y además -añadió con un tono cómplice- tengo curiosidad por ver dónde nos conduce tu plan -sonrió.

A ella no se le habría ocurrido algo así y eso le hacía gracia. De hecho, su idea era muy distinta. Decidió dejarla en reserva, por si la necesitaban en otro momento.

-Creo que sacaremos más información si no nos ponemos de acuerdo, al menos des del principio -opinó. Si planteaban la idea como un deseo común, la twil'ek podía agarrarse a la imprecisión, aludiendo al compromiso y profesionalidad de la empresa, pidiéndoles que confiasen y dejasen todo en sus manos. ¿No es eso lo que querría la mayoría de recién casados? Tiempo libre mientras otros preparan el viaje de sus sueños.

Sin embargo, si uno de los dos no estaba convencido, tendría que esforzarse y concretar. De no hacerlo, se arriesgaba a perder dos clientes, y algo le decía que la twil'ek no estaba dispuesta a dejar pasar la ocasión.

-Gial, creo que deberíamos adoptar perfiles distintos. Si te parece bien, tú puedes ser el jugador en busca de emociones fuertes. Yo estaré más reticente. A ver qué nos ofrecen y cómo nos convencen.

El rodiano te mira y muestra una sonrisa cuando lo amenazas. 

- Ten cuidado - 

Dice antes de que te marches apoyando su espalda en el respaldo...

...

No tardas en llegar hasta el casino. El lugar está bastante lleno, hay multitud de mesas de juego con una variedad abrumadora. Los droides reparten cartas de Sabacc, lanzan bolas virtuales de la ruleta y desempeñan todas las funciones que son requeridas por el casino. Unas cuantas twi´leks pasean entre las diferentes zonas de juego ofreciendo bebidas y diferentes tipos de servicios.

Tras un vistazo parece que eres el primero en llegar al lugar.

La mujer sonríe y os deja pensar un rato, aprovechando el impás para atender a otra pareja que pasaba por allí. Los despachó bastante rápido y no tardó en volver, escuchando la proposición de Gial.

- ¿Imperiales dando caza a Jedis? - Dijo bastante sorprendida. 

- Bueno, lo cierto es que esa experiencia la podrían tener en una inmersión de realidad virtual en el mismo crucero antes de llegar incluso al planeta. Aunque tendría que hablar con los encargados de este tipo de entretenimientos para confirmar que puedan cumplir todas sus expectativas. - 

Ciertamente no parecía una actividad que estuviera acostumbrada a ofrecer...

Al llegar al casino en cuestión, doy una primera visual para buscar al resto pero parece que soy el primero en llegar:-No veo a nadie. Me iré a sentar al bar y esperaré.-dije en voz baja para mí mismo e hice lo propio. 

Me dirigí al bar del casino y vi una mesa libre con cuatro sillas. Me senté en una de ellas y le pedí un vaso de bourbon corelliano mientras esperaba al resto. Saqué el datapad y busqué la bandeja de entrada:-ID despliegate, sal fuera, mantente oculto y vigila el perímetro, llevate mi comunicador.-le dije antes de ponerme a escribir un mensaje para todos de donde estaba: bar del casino, mesa del extremo derecho, detrás de los focos. Aquí espero. 

Pulsé enviar y esperé a la confirmación para guardar el datapad. 

Mensaje de entrada.......

Remitente: Daedar Korl........

Bar del casino, mesa del extremo derecho, detrás de los focos, Aquí espero.......

Fin del mensaje...........

El mensaje de Daedar llegó justo cuando Gial comenzaba a dudar si era buena idea proponer a una desconocida tal experiencia.

-Mmm pues me parece buena idea que lo consulte. Tenemos que ver otras ofertas pero si consiguen algo parecido yo estaría muy interesado en ello. Le parece si le dejamos nuestros datos de contacto.

No quería ser descortes pero si su compañero se había comunicado era porque seguramente tenía alguna pista que seguir.

La twi´lek asintió y sacó un datapad donde registró los datos personales facilitados por Gial. Con un movimiento de su mano que simulaba lanzar algo desde su aparato envío a vuestro dispositivo los suyos; apareciendo como un nuevo contacto en vuestros propios datapads.

- Me pondré en contacto con ustedes en cuanto tenga la información. No duden que seremos capaces de ofrecerles este servicio así como otros que pudieran tener en mente - 

Hizo una reverencia educada y dio media vuelta en busca de la siguiente persona a la que poder ayudar a gastar su dinero.

-¿Realidad virtual? -Sharene hizo una mueca de disconformidad- no me convence -respondió a la twil'ek. Luego miró a Gial. Daedar esperaba en el casino, así que se acercarían allí antes de lo previsto.

-Este plan es idea suya -con un gesto de cabeza señaló a su marido-. Yo imaginaba unas vacaciones más... románticas -dijo arqueando una ceja a modo de pequeña decepción-. Así que si cedo en esto, tendrá que ser una experiencia más real.

Suspiró, encogiéndose de hombros cuando la twil'ek envió su contacto al datapad. -Confío en que también nos envíe información de otro tipo de eventos -añadió.

A pesar de mostrarse en desacuerdo con la propuesta hablada, se despidió de ella con amabilidad y a continuación se cogió del brazo de Gial para encaminarse juntos hacia el casino.

Gial y Sharene no tardaron en llegar al casino. El lugar estaba bastante lleno, había multitud de mesas de juego con un variedad de ellos abrumadora. Los droides repartían cartas de Sabacc, lanzaban bolas virtuales de la ruleta y desempeñaban todas las funciones que eran requeridas por el casino para satisfacer a sus clientes. Unas cuantas twi´leks paseaban entre las diferentes zonas de juego ofreciendo una amplia variedad de bebidas y un todavía más abultado número de servicios especiales.

Un rápido vistazo a la zona que Daedar os había indicado os deja ver que se encuentra tal y como había dicho. Delante de él tiene un vaso de alguna bebida visiblemente fuerte. Os espera solo...

Sharenne se fijaba en todo cuanto sucedía alrededor. Caminaba cogida del brazo de Gial cuando localizó a Daedar, con una bebida de las fuertecillas, lo que hacía augurar que igual acababan saliendo los tres cogidos del brazo.

-Ahí está -sonrió y miró a Gial, para comprobar si también le había visto- acerquémonos.

No podía evitar preguntarse qué información habría conseguido.

.-Hola chicos.-dije en cuanto Gial y Sharene llegaron a la mesa:-He dejado a ID fuera vigilando con mi comunicador por si se acercan invitados no deseados, ya me entendéis.-les comenté a continuación.

.-Esperaba que Trent llegara también. He conseguido algo pero hasta mañana no sabremos si es de verdad o no pero puede que tenga una pista sobre Jeralie.-les expliqué. 

-Me alegro de escuchar esas noticias. Nosotros hemos estado hablando con una compañía que vendían actividades especiales en los cruceros. Hemos realizado una petición un tanto peculiar, si hay suerte y llega a los oídos adecuados igual tenemos alguna visita sorpresiva.- resumió sin dar muchos detalles Gial, pues había demasiado extraño cerca.

¿Cómo va la partida? – preguntó mientras cambiaba alguna ficha hacer tiempo hasta la llegada de Trent. Cuando se acercó el droide de las bebidas cogió una para él y pregunto a Sharene:-¿Algo en especial?

La conversación seguía su ritmo, ya había pasado más de 20 minutos y no había señales de Trent. No por el comunicador ni de forma presencial... Los intentos de comunicación tampoco parecían obtener respuesta alguna...

-Hola, ¿podemos sentarnos? -preguntó al llegar, haciendo el teatrillo.

Asintió con la cabeza cuando su compañero dijo que su ID estaba vigilando fuera. -Qué buenas noticias, Daedar -sonrió cuando les contó que había conseguido una pista.

-Algo suave -respondió a Gial cuando le preguntó acerca de las bebidas. No quería marearse, al menos, antes de tiempo. Se la tomó tranquilamente, observando a las twi'leks mientras esperaban a Trent. Ya llevaban un tiempo y el chico todavía no aparecía.

-Iré a la exposición de joyas a buscar a Trent, además hay algo que quiero mirar allí. También podemos ir los tres si lo preferís. Pero antes... si mi marido no tiene inconveniente -dijo a Gial con una sonrisilla pícara- me lo llevo a un reservado. -Paseó la vista por la cantina y levantó la mano haciendo un gesto para que se acercase a una hermosa twi'lek que ofrecía sus servicios-. A ti y a ella.

Cuando la twi'lek llegó, Sharene se levantó y le susurró algo en el oído, mirando a Gial.