Partida Rol por web

Mientras TJ comenta a la capitana su idea, ésta se aproxima seguida de los doctores Noble y Podolsky hacia la fuente de los sonidos.

El equipo avanza sin hacer demasiado ruido, sale de la gran habitación y ya todos pueden oir el extraño repiqueteo...

Y despues de avanzar unos metros por el pasillo pueden comprobar que justo en la intersección que tienen enfrente aparece una cosa bastante poco agradable.

.

El autómata avanza lentamente, como si apenas tuviera energía, a su lado una de las extrañas bolas flota.

No parece que se haya dado cuenta de vuestra presencia, pero tiene un módulo sensor justo detras del pico... o de la herramienta... o de lo que sea.

Y justo cuando el automata va a pasar de largo (o eso pensáis)... la radio de Podolsky vuelve a estallar.

-Eh, que es importante, escuchame, ¿me oyes?, Rush se ha puesto a gritar con el Coronel que le ha gritado a él y luego ha venido, se ha cabreado con lo que estabamos haciendo y nos ha echado a todos de la sala. Decía que sin la Capitana Costa yo no podía calcular donde estábamos que el coronel la estaba arriesgando innecesariamente ¿Tu lo crees?...-

Escucháis inmóviles la parrafada de vuestro compañero, que objetivamente sin duda suena bajo al salir de la radio, pero con vuestro nerviosismo y el intento de moveros en silencio que estábais haciendo os parece que atruena el pasillo.

La visión del autómata le deja completamente helado. Una sensación como de gelatina líquida le recorre la espalda, mientras intenta hacer el menor ruido posible.

En cuanto suena la radio con la voz de Eli, ignorante de la que está liando, intento rápidamente bajar la voz de la radio. Es un movimiento instintivo, automático e inevitable. Con los ojos fijos en el aparato, incapaz de apartar la vista parta poder ver qué es lo que va a hacer, con las manos manosea los mandos de la radio.

¡Ayayay...! Que no haga nada, por favor

Pero los buenos deseos raramente bastan.

La Capitana Costa vio el autómata, no parecía destinado a la defensa de la nave pero no podía estar segura, era la primera vez que veía algo parecido a esto. Automáticamente paró en seco y en menos de un segundo, su P90 estaba apuntando directamente a esa cosa. Parecía que tenía algún tipo de sensor en la parte trasera y que aún no se había dado cuenta de nuestra presencia.

En ese momento la voz de Eli empezó a resonar por toda la habitación.

¡Maldita sea!

Podolsky apague esa maldita radio, ¡ahora mismo! -le dijo visiblemente alterada y con la voz más baja posible-.

Luego volvió a fijar la vista en el autómata y volvió a apuntar a su sensor...

La Capitana Costa se queda unos minutos observando al "cacharro" que parece que sigue sin detectar su presencia.

Parece un autómata destinado a la reparación, aunque no hay que bajar la guardia, no me gustaría caerle mal -dice mientras se retira un poco del autómata, para evitar que los detecte-.

Bien, parece que tenemos bastantes frentes abiertos, lo mejor será que nos separemos. Podolsky, aléjese de la zona hasta la entrada de esta sala, de ahora en adelante será nuestro punto de encuentro. Contacte con Eli, a ver si consigue que se calme y que le cuente lo que está pasando exactamente. Dra. Noble, acompañe a la Tte. Johansen a explorar el búnker, si parece que hay agua en esta zona no podemos irnos sin más. Yo acabaré de examinar esta sala y el autómata. Si alguien oye disparos o percibe cualquier amenaza, sea lo que sea que hayan encontrado, vuelvan al punto de encuentro. Si no hay ningún contratiempo nos veremos allí en media hora. 

Podolsky se aleja asintiendo a la orden de la Capitana, siguiendo con los ojos al autómata. Todavía no se acaba de confiar...

Podolsky y Noble retroceden hasta la entrada de la gran sala en la que está TJ y la doctora además se mete en la misma. En ella TJ está contemplando con curiosidad uno de los variados conductos que parten de las paredes. Hay muchos del mismo tamaño repartidos por las paredes.

La capitana se queda contemplando el autómata.

Podolsky se pone detrás del arco de la puerta, mientras enciende el transmisor de la radio...

Eli... Eli... aquí Podolsky -espera unos instantes a que le responda, pero la premura le puede- Oye, que es que aquí estamos examinando una habitación interesante, no te podía hablar porque estábamos asegurando a zona. Si sacamos algo en claro te vuelvo a llamar... bueno, cuéntame lo que pasa. ¿Tenéis problemas? ¿O es que Rush grita mucho?

Espera con cierta ansiedad a la respuesta...

Dada su graduación, la Capitana Costa no estaba acostumbrada a liderar un pelotón en missiones de exploración en zonas alienígenas. Esperaba haber evaluado la situación correctamente y haber tomado la decisión acertada. Pero aún así, la situación era complicada y temía haber puesto alguno de los miembros del grupo en peligro.

Sin embargo sabía que debía centrarse ahora en su objetivo, examinar al autómata para descubrir su función. Tenía su P90 en mano, lista para disparar ante cualquier situación de amenaza. Primero observó unos minutos desde su posición cuales eran las tareas que realizaba y luego se fue acercando lentamente al autómata, esperando captar su atención en algún momento.

Espero que sea un droide de mantenimiento, quizás podríamos utilizar algo parecido en nuestras naves...

Se le acelera el corazón un poco al ver el robot, pero intenta disimular poniendo ojo clínico. Tenía que reconocer que aquello era interesante y que cualquier científico de la Tierra se daría de palos por poder ver lo que estaba viendo ella. Tal vez era el momento de dejarse llevar y disfrutar de la experiencia, aprendiendo cosas nuevas. Podía morir en cualquier momento de una forma horrible, ¿pero no era algo que podía pasar en cualquier parte?

- Ese robot parece de mantenimiento, es fascinante... - dice flojito, pensando en todas las novelas de ciencia ficción que ha leído, alguna dejada miserablemente a medias - Aunque yo no lo tocaría, sería mejor dejar que siga haciendo lo que tenga que hacer...

Se gira y mira la sala donde la teniente dice que podría haber agua, su prioridad en toda esta exploración. O al menos la de su garganta seca, a la que le ha ido racionando el agua voluntaria y precavidamente.

- ¿Vamos a investigar? - pregunta a la teniente, sin querer tomar la delantera a la militar.