Partida Rol por web

es una muy buena idea, revisaremos los edificios alrededor de estos... - mira por el suelo, viendo las secuelas del combate de antes.. -

Y después, revisaremos que no haya ninguna entrada subterránea al edificio, por si acaso, además de los pisos superiores.. - dice alternando la vista de mirar al suelo y luego mirar arriba.

Mejor que nos apresuremos, cuando mas pronto hagamos las cosas, en menos tiempo volveremos a reunirnos con el resto... ,salgamos de aquí, aun no me he acostumbrado a ese olor amoniaco, tendremos que hacerle una muy buena limpieza.. - dice a la misma vez que con un gesto de caballero, le cede el paso a Kumiko para que suba las escaleras, para salir del sótano.

El sótano es simple, sin salidas o entradas de ningún tipo, ni siquiera hay una rejilla de alcantarillado. Aquello podía ser un problema si llovía mucho y calaba, habría que arreglar el techo del edificio y asegurarse que eso no pasaba. Por lo demás, era seguro y posible mudarse a aquel lugar.

La pequeña no se deja poner la ropa, pese a que está tiritando por tener su túnica blanca mojada. Hacía mucho frío y ella no llevaba nada más, pero por alguna razón, no confiaba.

Han salió afuera con Kumiko, para revisar los edificios al lado de su nuevo refugio. No pudo evitar antes de salir de aquel almacén o fábrica, lo que fuera, mirar al techo, algo tendrían que hacer con los tejados, además de reforzar las puertas y ventanas, como bien le enseño Vassily

Una bomba de agua en algunos sitios estratégicos, por si el agua les llegaba a los tobillos, cámaras de vigilancia, detectores de movimiento, cosas asi.

Bien, empezaremos por estos, están prácticamente a dos pasos.. - mira a Kumiko esperando afirmación o respuesta.

Aham... - afirma con la cabeza dando a entender que está de acuerdo y echa a andar en dirección a los que le indica su compañero, prestando atención a todo tipo de detalles.

Yo carecía de ningún tipo de empatía con nadie y, con los niños, mucho menos. Mi cicatriz no ayudaba a que confiaran en mí. Probablemente fuese el tipo del que se alejan cuando lo ven por la calle. De hecho… recuerdo que así era cuando me veían rebuscar en los contenedores algo de comer.

Vale pequeñaja. Dejo la ropa en el suelo y, si tú quieres, te la puedes poner solita.

Por suerte los edificios de alrededor no estaban muy pegados a la vieja fábrica, lo que quería decir que no intentarían hacer pasadizos fáciles de un edificio a otro para pillaros por sorpresa, pero con tiempo quizás vosotros podríais hacer algunos subterráneos para escapar. Por lo demás están limpios, no hay nada como lo que encontrasteis en la fábrica, ningún strigoi rezagado escondiéndose del sol en sus sótanos.

Los grandes ojos de la pequeña, vidriosos por las lágrimas, escudriñaron la cara del vagabundo. No se fiaba de los adultos, por alguna razón le daban más miedo que cualquier strigoi. El que le dejara sola para vestirse fue suficiente para ella, que se quitó la túnica como pudo. Era una camisola blanca, larga hasta las mangas. Cuando se quedó en cueros, vieron que en los brazos de la pequeña había vías intravenosas. Una en cada brazo. Alrededor de ellas tenía los brazos amoratados, como si hubiera tirado y se hubiera rasgado las venas levemente en el proceso.

En un santiamén estaba vestida y abrazándose a sí misma.

Era palpable el miedo de la niña hacia mí y hacia Scar. Pero... ¿por qué?

Observé a la pequeña mientras se desvestía y abrí los ojos de par en par, cuando vi las vías intravenosas en sus bracitos. Tragué saliva. ¿Qué le habían hecho a la niña? Una idea tan oscura como el alma de un strigoi se deslizó por mi mente... pero la aparté, sacudiendo la cabeza. 

-Peque... ¿quién te hizo eso?- pregunté con un susurro. Intenté que mi voz sonara tan dulce como mi frío corazón me permitiera.

Busqué a Scarface con la mirada y fruncí el ceño. 

-Si éso se lo hicieron humanos... puede que por eso nos tenga tanto miedo.

Al parecer están limpios, vamos a buscar a los demás para darles las nuevas noticias, luego ya hacer algo con este refugio e informar a Vassily - dice algo relajado al ver que no había mas chupasangres por los alrededores.

Yo tendré que pensar en algún sistema camuflado de videovigilancia, alarmas de detección de movimiento, para saber si hay cosas por los alrededores, o algo asi..., luego me pondré a ello en cuando encontremos a los demás... - termina comentando Han

Luego ya se dedicaría al tema electrónico y de vigilancia, en cuando tuviera mas tiempo para ello.

Vamos sí, vamos - dice Kumiko un poco distraída, con la vista en su reloj de pulsera, realmente le preocupaba que la noche se les echara encima, con ese encuentro con los strigoi ya había tenido suficiente por ese día y no quería pensar en lo que podía haberle pasado de no estar sus compañeros, tenía que concentrarse más.

Levantando la cabeza como saliendo de una ensoñación apuntó con la mano en una dirección - creo que la tienda está por allí, pero pasemos por la furgoneta primero, no sea que ya hayan terminado.

Por alguna razón Aletha y Scarface se habían demorado y no estaban en al furgoneta, sino en la tienda aún. Podíais verlos desde fuera, a través del cristal sucio del escaparate. Dos siluetas grandes y una pequeña que parecían examinar desde algo de distancia.

Vaya, será que la niña ha vuelto a darles problemas - dijo Kumiko para sí misma mientras caminaba desde el coche a la tienda.

Al verles dentro, se apresuró hacia el establecimiento, pero en lugar de entrar por la puerta decidió acercarse al escaparate para dar unos golpecitos en éste, parecía que estaban examinando algo y no quería llevarse un tiro por entrar por la puerta sin avisar, Aletha a veces tenía el gatillo un poco suelto...

Espero que estén bien, aquí desde este lado no es que se vea muy bien el interior... - Han a diferencia de Kumiko, se colocaría cerca de la puerta, no sea , que de la misma manera que ellos no ven el interior nítidamente, los de dentro, vean a los de fuera de manera extraña, de todas maneras, estaría cerca de Kumiko, por si tiene que darle un tirón y sacarla de golpe del campo visual de la ventana.

Quien sabe, lo mismo desde dentro, se creen que lo de fuera no es Kumiko.

Kumiko se acercó a la tienda y dio unos golpes al cristal del escaparate. Parece que tanto ella como Han habían acabado de investigar la zona, o quizás trajeran alguna novedad.

Fruncí el ceño y volví la cabeza al escuchar un golpeteo en el escaparate. Era Kumiko. 

Pasé junto a Scarface y apoyé brevemente la mano en su hombro -Cuida de la peque, voy a ver si ha pasado algo- me acerqué a la entrada de la tienda y abrí la puerta.

-Kumiko, ¿habéis encontrado algo?- luego giré la cabeza hacia Scar y la niña, y miré a Kumiko de nuevo, susurrando esta vez para que la pequeña no me escuchara -La niña tiene hematomas en la parte interior de los bracitos. Parece que le han puesto una vía... quizá se ha escapado de algún campamento de sangre.

El gesto habitual de Kumiko se torció en uno de gran preocupación - Incluso a los niños.... es que esta gentuza no respeta nada? - susurró pensando en sus gobernantes, que tan rápidamente se habían acomodado a la nueva situación.

Sacudiendo la cabeza, como intentándo sacar de su mente la idea, cambió de tercio - Nada, los edificios anexos están limpios y no hay rastro de cubiles ni nada por el estilo. Por mi parte creo que podemos ir con Vassily - se detuvo un momento mirando hacia la niña - ...nos la llevamos,¿no?

Compartía el disgusto de Kumiko. -Cerdos...- dije arrugando el ceño y la nariz. Mi expresión se fue suavizando mientras la chica hablaba. Miré hacia el interior de la tienda y asentí. 

-Sí. Se viene con nosotros. Cogeremos algunas prendas de ropa más para ella, sobretodo de abrigo.

Han que se había acercado, había escuchado lo ultimo de la niña...

Mejor también, miramos de encontrar comida , siempre y cuando nos queden horas de luz, si salió de un almacén de sangre, debe de estar debilitada, normal que estuviera tan asustada, sobretodo por mi.... - no dijo nada mas, se situó en la puerta haciendo guardia, hasta que salieran todos.

Lo mismo en el futuro, esa níña podía ser el futuro de la resistencia, o pensando mal, puede ser una estratagema, de aquellas personas que los buscan sin descanso para acabar con la resistencia, pero si algo decía, lo tildarían de paranoico.

Los monstruos parecían ser un azote para la humanidad pero ver las vías de la niña me hizo recordar. Los humanos hemos sido un azote para los demás humanos desde siempre. Tráfico de mujeres, prostitución infantil, esto siempre ha existido.

La diferencia es que ahora hay un nivel más en la cúpula de los malvados.

¿Cómo podemos luchar contra estos monstruos si las grandes potencias y las grandes fortunas los apoyan? Apenas somos un grupo de rebeldes.

Bueno. Mi vida siempre ha sido una mierda. Si tengo que morir… al menos moriré sabiendo que he hecho lo correcto por una vez.