Partida Rol por web

No, los di todos juntos pues el combate no había acabado, pero tuve en cuenta al primer jabalí también.

La sensación que había experimentado enfrentándose a los jabalíes había dejado a Grimmjow con sed de más. La adrenalina recorría sus venas a pasos agigantados provocándole una gran euforia en aquel momento. Mientras luchaba había olvidado quién era en la realidad, sus preocupaciones, su trabajo.. allí podía olvidarse de todo. Además, ¿qué otra cosa podía hacer?, no tenía sentido seguir pensando en cosas que no podía controlar.

- Creo que podemos seguir avanzando y encontrar al élite, si por el camino encontramos más jabalíes les atacamos como acabamos de hacer - dijo mientras miraba a su alrededor y movía de forma circular su espada. Volvió a mirar de reojo a Ondine y había recordado su reacción y nervios cuando le pidió que le cortase el brazo. Después de todo, no era una petición demasiado normal. Dirigiéndose a Ondine de forma que sólo ella le escuchase dijo - Eh, perdona por lo de antes, no quería asustarte.

Despues del combate Grimmjow dijo de seguir adelante y no esperar a que los jabalies aparecieran cosa a la cual asenti pues no queria ocasionar problemas, igual que lo hacia en la vida real, y junto al resto del grupo nos pusimos de nuevo en camino en busca del jabali de elite.

Mientras caminabamos y recuperaba el aliento mientras observaba lo diferentes que eran cada uno de los compañeros que habia hecho desde que habia entrado en aquel mundo Grimmjow se acerco a mi

Cita:

Le mire curiosa pues no consideraba propia de él aquella reaccion, aunque era verdad que hacia poco que lo le conocia y no podia decir bien como era.
Tranquilo le dije mostrandole de nuevo mi sonrisa He de aprender ha ser fuerte y para ello no puedo asustarme con facilidad

Me agradaba aquella manera de ser de Grimmjow y cuanto mas pasaba junto a él mas sabia que acabariamos siendo buenos amigos

Las llanuras dan paso a una zona algo menos poblada de vegetación. La hierba alta donde os encontrabais da paso a un césped raso de apenas unos centímetros, y los eventuales árboles que de vez en cuando se encontraban en vuestro camino desaparecen para ser sustituidos por esporádicos arbustos de medio metro o menos. El clima también parece cambiar un poco a algo más cálido y húmedo. Mientras continuáis siguiendo la pista del mapa, abruptamente os encontráis con una zona pelada de hierba, con el suelo desprotegido y sin vegetación. Marcas de patas y tierra levantada por doquier, a lo lejos de dicha zona podéis ver una sombra recortándose en el horizonte. 

De un metro y medio de alto, un gran jabalí muerde incansablemente el suelo, levantando terrones de tierra constantemente. Parecería que está comiendo de la poca hierba que hay en el suelo, si no fuera porque conforme os acercáis a él podéis ver claramente que escupe inmediatamente la tierra de su boca, casi con furia. Sus ojos rojos y su marcador rojo de peligro os indican que es un mob hostil, y muy posiblemente sea el objetivo que buscáis.

Cautelosamente, os seguís acercando, hasta poner vuestros pies en la zona de tierra pelada, y en el momento en el que lo hacéis, un destello rojizo proveniente de los ojos de la bestia os alerta. Sin dar ningún tipo de advertencia, el enorme jabalí se lanza a por vosotros, mientras una barra de vida considerablemente más grande que la de los jabalís normales y un nombre especial hacen acto de presencia: "Skaarl, jabaseñor de las llanuras". 

En el camino había entablado conversación con todos los miembros del grupo. Había alabado los golpes de cada uno de ellos, como habíamos acabado con el jabalí como un equipo. Realmente lo estaba pasando genial.

De pronto vimos aquel bicho enorme. La sangre me empezó a hervir, creo que había olvidado el hecho de que este juego era mortal... O eso nos querían hacer creer. Al ver a la.criatura cargue mi arco y apunte hacía ella. El bicho se lanzó a por nosotros. Las ganas que tenía de otro enfrentamiento hicieron que actuara rápidamente. Venía en dirección recta así que no me costó mucho apuntar y disparar a la frente del animal. La flecha voló y acerto en el animal que lo retraso un poco pero lo que a otro jabalí le hubiera echo salir por los aires a este solo lo retraso... Con el calor de la batalla empece ha hablar.

- Cuidado chicos, este parece más duro que el resto. Los espadachines atacar desde el frente mientras los arqueros vamos rodeándolo, si sólo es uno lo podemos marear entre todos. - dijo contento. Con entusiasmo en la voz

La flecha acertó de lleno en el morro del jabalí, pero apenas se hundió en el avatar de la bestia un centímetro antes de que la expulsara resoplando, rebosante de furia. Durante un segundo se mantuvo quieto en el sitio, frenando con sus patas, lo cual era ciertamente desconcertante. Sin embargo, inmediatamente después profirió un rugido antinatural para un jabalí normal, volviendo a la carga a por vosotros. Lo único que indicaba que había sufrido ciertamente algo de daño era la marca roja que progresivamente iba despareciendo en su morro.

- ¡Rayos! - pensó Lhaian al ver como nada más entrar dentro de la zona delimitada por los agujeros en la hierba, el monstruoso jabalí al que habían ido a buscar se daba la vuelta y atacaba de inmediato. Estaba claro que era muy diferente al resto de las bestias, dado que este poseía mayor corpulencia, velocidad, "instinto asesino" y una barra de vida notablemente más larga. 

No había duda de que este iba a ser un combate muy arduo, pero no había tiempo para pensárselo. EL monstruo ataco y era tiempo de acabar con el lo más pronto posible. Uno de los otros miembros del grupo le dio primero con una flecha, pero la criatura se la saco de encima como si nada. Lhaian estuvo a punto de hacerse en los pantalones, si acaso eso era posible en el mundo virtual, pero junto coraje y ataco. Había visto que los demás usaban algo como un golpe especial, "cargando" el ataque y luego soltándolo, así que trato de darle ese poder a su golpe, antes de ir hacia adelante y dar un golpe horizontal de derecha a izquierda con el filo de la espada.

- ¡Golpe cargado o lo que sea! - grito el muchacho, medio aterrado y con latidos a mil por hora, aunque su golpe al final resulto ser torpe y carente de potencia. 

El ataque de Lhaian, si bien había ido con total intención de herir al jabalí, de eso estabais seguros, apenas fue un mero rasguño para la dura piel de la bestia, considerablemente más fuerte que sus pequeños congéneres. De hecho, su vitalidad no había decrecido en absoluto.

 La cara aterrada de Lhaian mientras el jabaseñor se giraba a mirarlo furibundo sería, en cualquier otra situación, realmente cómica. Sin embargo, esto no era para tomarlo a la ligera, pues todavía no sabíais lo que era capaz de hacer la indómita bestia.

Trato de tomarle el lateral al bicho y cargo desde ahí para poder dañarle y, si es posible, que se centre en mí.

Mylky se acerca por el costado tratando de pillar por sorpresa a la bestia de alguna forma, pero aunque está distraída y encolerizada con Lhaian, al que mira fijamente con sus ojos rojos, es capaz de reaccionar a tiempo para esquivar el ataque de la chica, que falla por mucho. 

Skaarl, jabaseñor de las llanuras, se gira para encarar a todo el grupo, después de recibir unos cuantos ataques más bien poco efectivos. Un destello de sus ojos rojos os sorprende, antes de soltar un poderoso rugido que resuena en lo vasto de las llanuras. Un par de destellos de color aparecen a sus lados, y cuando terminan de brillar, dos nuevas figuras aparecen al lado de la enorme bestia: dos jabalís hacen su entrada, en ayuda del jabaseñor. Con otro rugido los jabalíes recién invocados se ponen en marcha hacia vuestro grupo, mientras que Skaarl lanza una poderosa cornada hacia Lhaian, que afortunadamente se lanza al suelo a tiempo para esquivar su afilado colmillo en el último momento.

Grimmjow sonrió cuando Skaarl invocó a sus secuaces. Se acercó rápidamente al jabaseñor, enfocándose únicamente en él, para asestarle un golpe en la cabeza.

Con una sonrisa Grimmjow da una estocada en la cabeza del enorme jabalí, penetrando un par de centímetros en su gruesa piel mientras sonríe aún más. Sin embargo, el jabalí se retira antes de que la hoja continúe penetrando en su cuerpo, soltando un rugido de dolor a la vez que Grimmjow da un par de pasos hacia detrás para evitar ser golpeado en sus embates.

A medida que ibamos avanzando las verdes praderas iban perdiendo su esplendor quedando en llanuras e incluso se podrian denominar desierto, a medida que esto iba sucediendo sin poder evitarlo me iba refugiando mas y mas en Grimmjow utilizandole, si se le puede llamar de alguna manera, de escudo humano. Finalmente llegamos a Skaarl el cual aparentaba ser aterrador pero mis compañeros se lanzaron a su ataque sin pensarselo hasta que este viendo que él solo no podria contra todos nosotros llamo a un par de sus compañeros, era mi turno y aunque en un primer momento mire dubitativa a los tres jabalies finalmente decidi atacar a Skaarl pues no era cuestion de que llamara a mas de sus amiguitos.

Ondine coge el arco, respirando profundamente tratando de mantener la calma. Silenciosamente activa la habilidad "Disparo potente", y el arco comienza a brillar ligeramente, y una flecha imbuida de un resplandor notable aparece en el arco, tensándose mediante la mano de Ondine. La flecha, una vez soltada, sale despedida del arco de Ondine, trazando una línea de luz que potentemente impacta en el cuerpo del jabalí Skaarl, que retrocede despedido un par de metros, cayendo al suelo momentáneamente. 

A pesar de ser un golpe durísimo, Skaarl se levanta de nuevo, más enfadado que realmente herido todavía, y un poderoso rugido resuena en el aire, antes de contraatacar a Uzume. Sin embargo, la chica, que estaba atenta a los movimientos del furioso Skaarl utiliza la espada para apartar ligeramente la trayectoria de la cornada que, de otra forma, habría impactado en ella.

-¡Vaya! -poco luego de terminar nuestro primer combate, el siguiente empezaba más adelante. Nadie retrocedía antes el enemigo que debíamos derrotar; bueno, a Lhaian casi se le sale el corazón en pleno campo, pero de momento seguía con nosotros.

Tomé posición en una parte apartada del combate cuerpo a cuerpo; los espadachines parecían llevar bien el combate, y Ondine daba un buen apoyo: era mi momento de unirme.

Apunté y tense mi arco cargando una nueva flecha, manteniendola para concentrar el disparo al jefe mientras el viento soplaba a mi alrededor.

-¡Disparo Cargado! -el disparó causó el suficiente viento de vuelta que mi capucha cayo hacía atrás mientras la flecha volaba hacia su objetivo: El jabaseñor. -. ¡Vamooos~~~!

El jabaseñor retrocede un poco, abrumado por el constante bombardeo de ataques por parte de vuestro grupo, profiriendo una serie de sonoros rugidos que retumban en vuestros oídos. Los jabalíes que lo acompañaban, después de ser invocados, por fin son capaces de llegar a vosotros, y lanzan dos ataques por separado: uno a Mylky, que impacta dejándote brevemente sin aliento de un súbito golpetazo en el pecho, y otro que Lhaian a pesar de su aspecto de estar aterrado consigue evitar a duras penas, pasando el jabalí por su lado. 

Cuidado chicos - Grite cuando los jabalis atacaron. Esta vez si impactaron. Cuando Milky recibió el golpe me asuste. Era la primera vez que alguien recibía daño y pese a que no parecía ser mucho el susto me lo lleve igual. 

El jabaseñor estaba enfurecido y bramaba sin cesar. Venga... concentrate - Era mas fácil decirlo que hacerlo, estaba claro. Apunte al objetivo entre los ojos que no hacia mas que patalear y de pronto me miro con esos ojos.

El arco comenzó a temblar y la flecha voló con el curso desviado. No... ¡Mierda!

La flecha sale despedida del arco de Kure, alejándose en el horizonte sin encontrar el cuerpo del jabaseñor Skaarl, su objetivo inicial. El jabaseñor ni se inmuta, manteniendo los ojos fijos en la línea de ataque frontal.