Partida Rol por web

Irene puso el teléfono el altavoz y marcó el numero de emergencias. Sonaron unos pitidos con señal:

"... Sentimos comunicarle que todas nuestras lineas están ocupadas. Pruebe de llamar mas tarde... pi pi pi..."

Luego probó con el numero de la policía:

"... Usted ha llamado al cuerpo de policía. En estos momentos no podemos atenderle, nuestras lineas están ocupadas..."

Irene miró a Lampking con cara extrañada, no podía creer que estuvieran todos los servicios de emergencia colapsados. Algo grande tenía que haber pasado.
- Intentaremos llamar luego - dijo guardándose de nuevo el móvil en su mochila.

- Está visto que no es nuestro día de suerte... ¿Ha dejado ya de llover al menos? - digo mientras salgo de la zona de las duchas. - No soy muy escrupuloso con la sangre, pero tampoco me apetece quedarme aquí.

Camino hasta la zona principal de la sala, y miro por las ventanas, a ver si ha dejado de llover.

La tormenta esta bajando su intensidad, ahora solo una leve llovizna cae del cielo. Aún así el viento sigue azotando, sobre todo teniendo en cuenta la localización del muelle, no hay nada que haga de barrera.

Empezáis a estar cansados pues ya son altas horas de la noche.

- Hace mal tiempo para salir a la calle, y más sin coche o taxi para circular... además ya está anocheciendo... y no conozco la zona... ¿Sabes de algún hostal u hotel cercano donde psar la noche? Porque quedarnos aquí no lo veo como una opción viable, no se tú...

Irene se queda pensativa mirando al infinito y luego de repente se ríe.
- Jajaja! Recuerdo que muchas veces los profesores usábamos este vestuario para dormir siestas - dijo y luego miró a Lampkin.
- Este puerto esta bastante alejado de todo, solo se puede acceder por la carretera o por la ruta montañosa que vengo yo en bicicleta. - luego miró el móvil de nuevo - Las lineas siguen colapsadas, yo no tengo problema por dormir aquí, he dormido en sitios peores.
- Por cierto, no me has dicho a que te dedicas!

Devuelvo a Irene la sonrisa. - Soy profesor de idiomas en una academia, en Barcelona. Aunque estoy doctorado en física y matematicas, pero claro, eso no da de comer, salvo que estes investigando en una universidad.

Miro alrededor de la sala, comprobando que la puerta sigue cerrada y bien asegurada. - Si vamos a pasar aqui la noche, o hasta que por el móvil puedas localizar a alguien, sería recomendable buscar mantas o algo para protegernos del frio.

Vuelvo a mirar de reojo la puerta. - Y quiza algo para proteger mejor esa puerta. No quiesiera encontrarme con mi asaltante de madrugada...

- Bueno, tampoco son muy bajas las temperaturas, al ser verano. - dijo Irene mientras se acercaba a una de las taquillas. - Aquí guardamos algunas toallas, que nos pueden servir. La taquilla tiene truco - dijo sonriendo. Luego dio un golpe seco al lateral y se abrió la taquilla que aparentemente estaba cerrada. Había en ella 3 o 4 toallas.

- Mira a ver si puedes ir cerrando la puerta de alguna manera - dijo señalando hacía allí.

Me acerco a la puerta con ritmo cansado. Ha sido un día de lo más extraño, y no parece mejorar. Compruebo que la silla está apoyada contra la puerta, sirviendo de tope entre el suelo y el picaporte, manteniendola bien cerrada. Aun así, busco otra silla para reforzar a la primera. No quiero que se abra por la noche con el viento, no nos demos cuenta, y amanezcamos con un resfriado y cubiertos por la lluvia.

Luego me acerco a la taquilla donde se encuentra Irene, y extiendo la mano para que me de un par de toallas que sirvan de almohada improvisada para descansar.

Irene se había acurrucado en una de las banquetas, con dos toallas y su mochila haciéndole de cojín. Era de sueño fácil pues cuando Lampkin había ido a poner las sillas y vuelto, ella ya se había quedado dormida, como tantas veces había hecho en esas largas jornadas de trabajo cuando había los cursillos de vela.

Se había dormido con su móvil en la mano, esperando a ver si alguien la llamaba o volvía todo a la normalidad.

Miro durante un segundo a Irene. Parece muy cansada. Desde luego, el día de hoy ha sido de lo más extraño.

Paseo en silencio por la sala durante unos minutos. Haber estado inconsciente durante horas impedía que ahora pudiera dormir. Finalmente, me siento en una de las sillas que he dejado apoyadas contra la puerta, he intento dar una cabezada.

La puerta vuelve a sonar de nuevo, como si el viento empujase de nuevo, con algo mas de fuerza que anteriormente. Está amaneciendo y parece que ha dejado de llover, habéis dormido varias horas y ahora que vuestro sueño es algo mas ligera.

Los golpes cada vez son mas fuertes, y os despiertan.

Me despierto con los golpes en la puerta, que casi mueven la silla en la que he dormido. Me levanto sobresaltado, y busco a Irene, para saber si se ha despertado.

Irene se despierta sobresaltada.
¿Qué pasa? - dice susurrando y gesticulando con ambas manos, mirando de reojo hacía la puerta, que era de dónde venían los golpes.

Irene estaba algo despeinada pues se acababa de levantar, aunque con un gesto rápido de muñeca, entrenado durante toda su vida, se hizo una coleta con una goma que tenía en su mano.

Se levantó y se acercó lentamente e intentando no hacer ruido hacia la puerta.

- Intenta asomarte por una de las ventanas, a ver si puedes ver que o quien está haciendo ese ruido. Yo mantendré la puerta cerrada apoyándo la silla contra la puerta.
Ya puesto en pie, sujeto la silla que mantiene la puerta cerrad, haciendo fuerza para evitar que ésta se abra.

Irene se asoma por una de las ventanas, pega la cara al cristal pues no tiene mucho angulo para ver y la ventana es totalmente fija, aún así le parece ver una sombra en movimiento de reojo.

- Psst.. - hizo Irene un chasquido para llamar la atención de su compañero sin alzar la voz. - Creo que hay alguien intentando entrar - dijo casi sin alzar la voz, vocalizando para que se la entendiese. También señalaba con el dedo indice hacía la puerta.

Asiento con la cabeza para dar a entender a Irene que la he entendido.

Alguien que quiere entrar... pienso para mis adentros. ¿Tan temprano? ¿Y sin decir nada? No me fio...

- ¿Quien está ahí? - pregunto, levantando la voz para hacerme oir.

Necesito que hagas una tirada de fuerza: tira 1d20

Pese a la presión sufrida desde el otro lado de la puerta, consigo mantenerla cerrada... y descarto que sea el viento.