Podeis ir describiendo lo que haceis mientras el doctor acaba.
Connor: no voy a pedirte tiradas de aguante y restauración de salud, pero tu personaje va a tener que estar en cama unos cuantos dias.
Nadie va a hacer nada? Os quedaréis esperando en la puerta sin más?
A no ser que el médico nos necesite para algo, creo que lo mejor es esperar fuera, donde no estorbemos.
El tiempo pasaba y la noche seguía su curso. De vez en cuando una de las chicas del salón subían con alguien pasando a vuestro lado, lo que generaba situaciones incómodas y no pocas quejas.
Al final decidisteis salir de allí por la escalera lateral que usasteis para entrar al piso de arriba, dejando el pasillo libre a aquellos parroquianos del salón que quisieran usar los servicios que se les ofrecían.
Pero llegó la hora del cierre.
La puerta se abrió y salió el doctor, arremangado y sudoroso, pero contento.
-He conseguido contener varias hemorragias y cerrarle las heridas. Está fuera de peligro, aunque le recomiendo reposo absoluto durante una semana.-
El propietario estaba ya limpiando el bar cuando salió el doctor a daros la noticia.
-Podéis entrar a verle si lo deseáis. Para cualquier otra cosa, preguntadle a Henrry, el propietario del negocio. Él os dirá donde encontrarme.-
El doctor recogió su maletín y bajó las escaleras, perdiéndose en la oscuridad de la noche.
- Yo agradecer trabajo shaman médico señor. Yo deuda con usted.
Y descubriendo la cabeza lo saludo con un gesto respetuoso bajando la mirada hacia el suelo. Tras elloe cubro y voy a ver a Connor.
Cuando esté al lado, saco mi manta de oraciones y entono una letanía para mejorar su salud.
PD: lo que sería un curar heridas leves del D&D aunque sea sin efectos prácticos jejejeje
Después de despedirnos educadamente de médico, miré a mis compañeros:
- ¿Y ahora que?. ¿Esperamos hasta que O'Connor se recupere o vamos nosotros tres a hacer el trabajo solos?. Creo personalmente que si el tiempo no apremia, deberíamos de esperar a que el herido se recupere.
Además, todavía un asunto personal que atender aquí y los días de convalecencia me vendría muy bien para darme tiempo a resolverlos.
- Muchas gracias doc.
Y escuchando a Gabi, planteo:
- Deberíamos resolver lo que hemos venido a hacer. Y después volver si Connor se ha recuperado. ¿Y qué es eso que has venido a hacer? ¿O vamos a perderte a tí también?
Miré a McCarthy antes de responder, con gesto sombrío:
- La hija de un amigo se fugó con un jugador. Lo último que supo es que el bastardo la estaba chuleando aquí. Quiero comprobar si siguen por la zona y asegurarme de que ella regrese a casa.
Su padre solo quería que estuviera sana y salva, de vuelta al hogar con él, sin importarle lo que el mal nacido le había estado obligado hacer durante todo este tiempo.
- Ok. Vamos a buscarla. Siempre podemos cubrirte, y además, nos serviría de tapadera al volver a casa con el carromato. Unos amigos que devuelven a la hija descarriada a otro amigo.
Mirando a Matto le digo:
- Matto, vamos que aquí ahora poco podemos hacer.
- Coff Coff Coff
- Me muero!!!! (Voz del
El indio asintió.
-Chamán blanco viste bien. Hacer buena cura.-
Sin más palabras, Matto os siguió.
Pnjotizado.
La noche se cernía sobre Topeka. Los salones estaban cerrados y ya no había nadie por la calle.
Uno de vuestros caballos relinchó y tiró de las riendas para intentar liberarse. La marcha forzada les había agotado y necesitaban cuidados y alimento.
La tenue llama de la lámpara de aceite hacía titilar las sombras que proyectaba con su luz. El dolor se acentuaba en el pecho y vientre, pero no era para tanto, podía soportarse, de momento, o eso habia dicho el doctor.
Una nueva luz se filtró entre las tinieblas al abrirse la puerta, y una mujer se acercó a tu cama con unos trapos limpios en la mano izquierda y una jofaina de porcelana blanca en la derecha.
-Buenas noches. Soy Sarah Murphy y mi padre me ha pedido que le cambie los vendajes a petición del doctor Mathew. No se mueva por favor.-
Sus suaves manos comenzaron a desenrollar las vendas de lino y a cambiar los paños manchados de sangre. El agua estaba tibia, calentada sin duda, y era una sensación agradable cuando uno de esos paños nuevos tocaba la herida.
A partir de ahora y hasta nuevo aviso, tu y yo solos.
Miré preocupado, en dirección a nuestras monturas:
- Será mejor dejar a nuestos caballos en un buen lugar donde descansar. Después de todo el esfuerzo que han tenido que hacer en esta última etapa del viaje, se lo merecen.
No es cuestión que revienten en cualquier momento, por no haber descansado adecuadamente.
A partir de ahora mejor dejar a Connor fuera de conversación hasta nuevo aviso.
Será mejor dejar a nuestos caballos en un buen lugar donde descansar
Tendréis que despertar a alguien para que os abra el establo a esas horas de la noche
Vosotros diréis como procedéis.