Partida Rol por web

Abro la puerta y huelo profundamente la fragancia de lavanda. No era una habitación muy lujosa, pero la primera impresión había sido muy buena. Seco mi cuerpo, y saco mis ropas humedas de la mochila. Me tumbo en la cama mientras noto las sauves sábanas bajo mi cuerpo, y cómo el colchón de plumas envolvía mi persona. No era mi casa, pero la verdad es que estaba muy agusto tumbado. Tranquilamente, me visto con la ropa que llevaba en la mochila, y me dirijo a la planta de abajo para tomar la cena.

Bajas las escaleras, y llegas a la planta baja. Allí te encuentras con un enano y un humano comiendo juntos. Y ves en otra mesa aparte, preparado un plato encima de una mesa

-Ya tiene la cena preparada señor, en aquella mesa de allí. Va a querer alguna cosa para beber? Te pregunta el posadero que ahora lleva en la mano dos bebidas.

-Muchas gracias Heinrich, es usted muy amable. Respondo sonriente ante la expectativa de una cena caliente y una jarra de vino especiado.Por favor, para beber, me gustaría una jarra de vino especiado. Le respondo al posadero mientras me dirijo a la mesa que me había indicado. Miro a al humano y el enano sentados juntos. La verdad es que no me gustaba tener un enano cerca mio. Por educación, saludo diciendo Buenas noches. Y me dirijo a mi mesa para dar cuenta de la cena.

Empiezas a cenar. Pruebas la gallina y para ser un plato de varemos humanos, la encuentras realmente bien preparada. Al cobo de unos instantes y tras preparar otra mesa, te trae la jarrade vino especiado. Es de buena calidad también, aunque nada como los que se preparaban en tu bosque.

Mientras cenas, observas que el humano y el enano tienen una conversación como de dos personas que se acaban de conocer.

Ves como una humana baja de las habitaciones y va a la mesa que está preparada.

Veo a la humana, sin prestar demasiada atención. Mi atención está en la reparadora cena. La verdad era que el calor de la gallina templaba mi cuerpo. Degusto tranquilamente mi cena, mientras los comentarios del enano inundan mis oidos, y veo como el humano trata de conseguir conversación con la nueva aparición.

Tras terminar, y ver que todavía me queda algo de vino especiado, saco mi tabaco y me preparo una pipa. La enciendo y le doy una profunda bocanada mientras saboreo y degusto el aroma del tabaco de mi tierra. Quizás ese sabor era lo único que ahora mismo me recordaba a ellos.

Tras tu gran bocanada, el humo de tu pipa llena la estancia. Ves como la humana que acaba de sentarse en la mesa de la ventana, te sonrie y prosigue la conversación con la mesa de al lado.

De pronto, la conversación da un giro inesperado, y el enano decide subir al cuarto a dormir.

Veo como ese engendro de la naturaleza se va sin inmutarme. Me quedo tranquilamente fumando la pipa, pensando en mis cosas. Qué hacer y cómo hacerlo, eran ahora mismo mis prioridades. Quizás debiera de esperar a llegar a Altdorf, y al llegar allí saber como desenvolverme.

Aunque un poco tarde, hago una reverencia con la cabeza a la humana que me había sonreido, y extendiendo la mano, la invito a sentarse conmigo. No era usual que un elfo quisiera compartir su tiempo con esta raza inferior y vulgar, pero si había salido de mi bosque para aprender más cosas, debía de no tener prejuicios a la hora de relacionarme.

Tras tu invitación, ves como la humana se acerca a ti un poco sorprendida.

-Muy buenas noches Maese Elfo. Te dice ella con voz dubitativa

En el momento en el que vas a responder a la chica, el humano que acompañaba al enano, se levanta de su silla y le dice: No creo que quede mucho trayecto para llegar a Aldorft

Muchas gracias, espero que tengas razón -le digo al humano que me responde, Por cierto , soy Endora, lo digo mirando al Elfo primero y luego al humano, intentado no ser maleducada con ninguno de los dos.

Esperas un poco y ves que el humano tras no decir nada se va a su habitación.

Parece que este humano no es que sea muy vivo Pienso mientras hago una mueca de sorna cuando este se gira. 

-Mi nombre es Narwë. Es un placer conoceros y tener un rato de conversación tras el largo día que he tenido. Es indiscreción si le pregunto de donde viene?

Termino de preguntar a la mujer intentando tener un poco de conversación amena antes de irme a dormir.

Mientras empiezas a mantener una conversación con Endora, entra en el comedor otra humana. Ves que está empapada por la tormenta. tras un jovial saludo, ves que se sienta en la mesa en la que han cenado el enano y el humano, centrandose más en secarse que en cualquier otra cosa.

Tras el saludo, y terminando mi presentación a endora, entra otra humana que nos saluda jovialmente. La miro mientras se sienta enla mesa en la que habían cenado el lumbreras y el metroymedio. Por un instante, pienso en la variedad de gente que las mesas veían. Habían pasado de tener un par de tontos, a tener una agradable joven.

-Buenas noches joven. Parece que la noche no os ha sido clemente. Comento mientras observo como se seca con el calor de la lumbre.

Aunque la joven está llena de barro por todas partes, ves que no pierde la sonrisa. Os mira amablemente, y responde mirandoos a los dos:

-Me ha caído una buen encima, señor/a

-Por lo que parece a todos se nos ha complicado el día con el aguacero. Respondo a la recién llegada. Y susurrando a Endora le pregunto:

-La invitamos a sentarse con nosotros tras la cena?

Amablemente y de forma amistosa, tu compañera de mesa le responde también: Ya veras como con una comida caliente la noche toma otro color