Partida Rol por web

genial, cuanta gente, y todos pensando cosas malas de nosotros... mas vale que nadie susurre o midny empezara a pensar mal y mas vale que Mindy este tranquila polgo los ojos en blanco y desvio totalmente la mirada de la sala, necesito distraerme con algo antes de salir de aqui, 3 o 4 personas esta bien pero un regimiento de personas...ademas hay mujeres, se me van a saltar los colores si no lo an echo ya... que no me mire ninguna....no me mires... mirando de reojo a Kat, que lo a mirado fugazmente ho... genia, simplemente genial, tenemos otro esponjaman... espero que no tenga que pasar a llamarse tijeraenpechoman finalmente me siento en el suelo dejandome caer poco a poco ante tantos pensamientos abrumadores.

Tengamos la fiesta en paz, al menos hasta que tenga claro si voy a quedarme en este barco o no. Pero llamarse a sí mismo "El Sabio".... valiente ocurrencia. Y luego está el de la rata, mirando a las dos mujeres como si se le fueran a salir los ojos de las órbitas y casi desmayado en un rincón. Qué más.... un borracho que por lo menos solo aparenta ser borracho y dos mujeres. Genial. Válgame el cielo, si es que el único que parece mínimamente competente para un barco es el escocés, que tema a quien tema, los tiene bien puestos. Me parece que me voy a quedar ronco en cuanto lleve un día en alta mar. ¿Un día?, ¡por Belenos! que hasta con una hora bastaría para que la mitad de estos marineros de agua dulce echen la bofa por la borda

Sin embargo nada digo. Es mejor esperar. Asiento ante el saludo de "El sabio" y espero a que alguien diga algo mas. O a que llegue el capitán.

O a lo que sea

-hola mis aventurados camaradas,dicen que traé mala suerte una mujer en el barco....pero es una agradable y placentera sorpresa tener a dos.Voto a dios que si es mala suerte,bendita sea esa maldición.-mientras me quito el sombrero y las hago una reverencia.
-¿Señoras o señoritas?,piratas.-luego sonrio.

-Pirata mejor.- dijo Mony rotundamente mientras esbozaba una preciosa sonrisa.

-Yo soy Mony,encantada de conoceros y compartir esta aventura con vosotros.- dije bastante seria.

Tú Rojo -digo con voz queda- si vas a navergar en un barco pirata deberías dejar de mirar con aires de superioridad, a menos, claro está que seas el capitán. No serás el primero ni tampoco el ultimo que es arrojado por la borda por miradas de ese tipo. Es solo un consejo, pero tómalo como quieras. Bebo un trago de mi ron, y esta vez miro con una mirada algo perdida al Escoces- Y tú escoces, no desees nunca algo que no quieras que te ocurra, o te lamentaras de haberlo deseado.
En ellos queda aceptar o no un consejo fruto de la experiencia en alta mar. Tras este pensamiento, doy otro trago a mi bebida, todavía puedo pensar con claridad, y eso solo puede significar problemas

Interesante lo que tenemos aquí, el pobre chico parece no estar a gusto mientras noto como se va dejando caer hasta sentarse en compañía de ese animalejo que a mí mucho no me gusta. Luego están ese que parece demasiado serio y por supuesto, aquel que no sabe cómo dirigirse a nosotras o sí, pero le gusta jugar. La silla que se nos ha sido ofrecida quedará vacía, no esperaba tanta caballerosidad entre estos hombres que supongo son todos piratas o al menos lo intentan.

Bastante agradable a la vista, señor Swann...

-Por mi parte, ni señora, ni señorita... No sé de esos títulos y no me interesa llevarlos-miro a cada uno de los presentes a los ojos.-Soy simplemente Katherine Jay...

Kat para los amigos, veamos quién es el primero que se atreve a llamarme así sin que tenga que decirlo.

Tampoco tengo ganas de decirles que soy una ladrona, aprovecho a que el camarero aparece con el ron de ese que no para de beber y pido uno para mí, al fin, creo que tendré con qué pagarlo.

-Parece que tendremos un viaje muy interesante...-me siento cerca de Mony.-Hola Mony, un placer.

Le guiño un ojo y luego a William, me parece divertido pero vuelvo la vista a Jack dos segundos.

La puerta se abre justo antes del comentario de Jack, y aparece una mujer. Carmen observa el ambiente de la posada, algo intranquila y con el pensamiento en otra parte. Esto no se parece nada a España... -piensa mientras recuerda como casi se pierde buscando la taberna- Que mala forma de empezar...

Aunque de repente se da cuenta de los personajes que tiene delante. Estarán esperando al capitán Lenoir también, piensa mientras los observa de lejos. Aunque cuando Jack profiere ese comentario, con el que pretende encandilar a las mujeres ya presente, se le escapa una sonrisa y decide finalmente acercarse.

No tan rápido, a bordo tendréis tres mujeres. -empieza a hablar, con una sonrisa encantadora en la cara- Aunque espero que esto no suponga ningún problema para vosotros...

Mi nombre es Carmen, aunque acostumbran a llamarme La Española, por mi procedencia. -continua hablando, mientras hecha un vistazo a todos. Al terminar se apoya en la pared más cercana y continua con la atención centrada en ese pintoresco grupo.

Miro a la recién llegada. ¿Otra mujer? eso hacen... Miro mi mano para contar, no estoy preparado para cifras tan elevadas ...cuatr.. tres mujeres. No creo en las supersticiones, aunque solo espero que cada una ejerza su puesto como un auténtico pirata. Además, nunca viene mal darse un alegrón a la vista en alta mar, siempre es mejor ver a una mujer que no a un sucio, borracho y desdentado pirata.

Buenas Española. Deberías sentarte, es posible que te canses de estar de pie. Al parecer el capitán LeNoir no tiene intención de aparecer hasta que no tenga la tripulación completa -dicho esto, pongo mi jarra bocabajo, para beberme la última gota de ron, mirando la jarra vacía con profunda tristeza. Para que luego se diga que no intento ser cortés. Tendré que pedir más RON

-Kat,es más apropiado,su similitud con gato(en ingles)te va al pelo.Mirada dura,un poco arisca...pero bella y seguramente mortal.-luego me giro hacia "bocaseca".
-Si te referias a esto señor Bocaseca.No me arrepiento de haberlo deseado.
Al contrario "Española",será un placer añadido a esta tripulación.-mientras señalo a la tercera mujer.

- mmm, realmente interesante. Tres mujeres, ni más ni menos, y una de ellas Española -

- Salud compatriota - me dirijo a Carmen en perfecto castellano mientras alzo mi copa de ron recién servida por el camarero

- Estoy de acuerdo con "Bocaseca" - continuo en Inglés - parece que el Capitán va a hacerse de rogar un rato más, así que propongo que nos pongamos cómodos - me reclino ampliamente sobre el resplado de la silla - y disfrutemos de una agradable velada en compañía de tan exquisitas "damas" - alzo de nuevo la copa y trazo un medio círculo con ella para abarcar la posición de las tres mujeres que nos acompañan.

Me hace sonreír a la primera con todo aquel dominio de palabras y la comparación de con un gato, quizás ha adivinado mis huidizas maneras o quizás conoce de ellas tanto como yo. Hago una breve inclinación con la cabeza a Jack, sé de muchas mujeres que habrán caído ante una sola de sus palabras y no es para menos, pero yo suelo ser un poco más ruda.

-Kat para los amigos...-murmuro muy cerca de su oído.

Observo cómo algunos levantan la copa, en torno a nosotras tres; demasiado caballeroso el asunto pero simpático si se quiere. Me giro a las dos mujeres y les sonrío mientras me encojo de hombros.

Ni siquiera se imaginan lo que quieren hacer con ellas? ya vendran a llorar al pobre william cuando llebemos 2 meses en alta mar y estos piratillas quieran tapar otros boquetes que no sean los del barco... pongo los ojos en blanco y miro a Mindy la cual olisquea algo poniendose a dos patas en mi hombro, siempre es divertido verla cuando tiene algo de hambre, cuando tiene mucha, es mejor no sacarla de la pequeña caja.

parece que despues de todo algunos de estos hombres no seran tan malos pero ya tengo calados a los que no quiero hacercarme y mucho menos hacer migas con ellos suspiro y miro a la Española esas mujeres van de mujeronas y se bajan las bragas las primeras, guarras todas ellas, aun recuerdo cuando paro mi aintugo barco cerca de galicia...

-Entonces tendremos que conocernos mejor, si te quiero seguir llamando Kat...¿no?.-se lo digo murmurando,dirigiendo mis palabras exclusivamente a ella ,mientras paso por su lado, y hecho un vistazo a la posada corriendo un poco la cortina.
-vaya,esta tardanza me exaspera.-

Bueno, he ahí el motivo de el porque las mujeres son un mal fario, si estais mas pendientes de sus pechos que del barco, probablemente este hunda mientras seguis babeando ante su rimbombante contoneo. -Dedico una amplia sonrisa al Escocés. Espero que la próxima vez sea más discreto.

-Al menos un tanto más...-respondo pero está mirando a otro lado.

Parece que la espera se seguirá alargando, repaso uno a uno a los presentes, tratando de averiguar cómo serán cada uno de ellos, el valiente capitán algún plan debe tener para habernos reunido y sobretodo, para llevar a tres mujercitas entre ellos.

-Puede que si.Pero si se hunde el barco,te enrolas en otro....como ahora.Pero si pierdes el amor de una mujer....de una a la que hallas amado....la mar no te parece tan interesante,el ron pierde sabor,el viento de popa te molesta,la comida o no te sacia,o no te agrada.La vida pierde sentido,y el sentido no alcanza tu vida.
Amigo,prefiero que se hunda el barco a que se hunda el afecto de una mujer en mi vida.- Le devuelvo la sonrisa a Bocaseca.Luego pego un sorbo a la petaca. -Aún me sabe a Ron.-

Jajajajaja no digas eso en alta mar si no quieres que te pasen por la quilla Escocés, nunca digas que prefieres que se hunda el barco, los capitanes tienen mucho aprecio a sus embarcaciones, y esos comentarios los desagradan bastante.

-Eso será porque no han amado,o no han sido amados.Quizás por eso estoy aqui...-y le guiño un ojo.

Miro al Escoces extrañado. Quizás no he entendido bien su repuesta, pero creo que está aquí para insinuarsele al capitán, bueno, yo a lo mio, que es el bebercio. Tras esto, apuro otra jarra de ron. ¿Cuantas van ya? en realidad... ¿alguien las cuenta?

Al cabo de un rato el capitán llegó. Entrando acompañado de dos forzudos marinos se sentó en una silla claramente reservada para el, la edad habia hecho mella en el pirata, con un aspecto cansado y moviendose lentamente os hizo dudar de si estaria en condiciones de comandar una nave. Un mono pequeño le acompañaba sujeto sobre su hombro observando asustado y con asombro a todos vosotros.

Dirigiendo una mirada de aprobación a cada uno, aclaro su garganta con un bronco y desagradable ruido, lanzando después un gran escupitajo cerca de vuestros pies.

Bien caballeros... y "damas" dirigiéndose al extraordinario número de mujeres presentes, veo que todavia soy capaz de atraer a los mejores individuos para que navegen conmigo. Su tono de voz es grave, pero habla con educación y con un buen nivel de inglés con poco acento que casi todos entendeis. El maldito gobernador D'Ogeron de la isla dice que soy demasiado viejo y que esta patente de corso caducada no se puede renovar. Dice mientras estruja un papel lanzándolo a una lumbre. Pues verá ese perro pulgoso de que es capaz este viejo lobo de mar. Se acabo el seguir ordernes, romperé los grilletes impuestos por cada nación, ahora soy libre y van a conocerme desde aquí hasta el viejo continente.

Tras unos instantes, como recordando tiempos pasados, baja el tono melancolicamente. Navegaremos con bandera francesa, pero solo para mantener la discrección hasta que tengamos más fuerza. Zarparemos al amanecer, asi que espero que os vayais pronto a la cama....

¡JA, JA, JA!... una estruendosa risa rompe la sorpresa. Que demonios, divertios, antes de marchar, alzo esta jarra de ron por vosotros, mi nueva tripulación. Sois jovenes y seguro que terminareis abandonandome como mis antiguos hombres, e incluso trateis que ser capitanes, pero hasta que ese momento llegue navegaremos juntos. Por nosotros y nuestro navio, el Bonne Chance.