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El amanecer trae consigo un silencio extraño.
Las calles, que deberían estar llenas de motores y voces, permanecen desiertas.
En la distancia, una sirena se ahoga en un gemido interminable, como si hasta las máquinas supieran que algo no va bien.
Primero fueron los rumores: hospitales saturados, gente atacando a desconocidos, disturbios en las ciudades.
Después, las imágenes: cuerpos tambaleantes, ojos vidriosos, dientes desgarrando carne.
Y al final, la certeza: los muertos ya no se quedaban en sus tumbas.
Ahora el mundo se ha roto en pedazos.
El teléfono ya no suena.
Las carreteras están bloqueadas por coches abandonados.
La comida se acaba.
Y cada sombra puede esconder un vecino… o un monstruo.
No hay explicaciones ni rescate a la vista.
Sólo estáis vosotros, el miedo latiendo en cada respiración, y la necesidad de seguir adelante un día más.
Porque aquí la única pregunta es:
¿Qué estáis dispuestos a sacrificar para sobrevivir?
Un virus desconocido ha desatado el caos en cuestión de horas: las calles están desiertas, los hospitales colapsan y los muertos caminan de nuevo entre los vivos. La civilización se derrumba a una velocidad imposible de comprender, y los gobiernos no han podido contener la catástrofe.
Los personajes son personas corrientes atrapadas en medio del desastre. No son héroes, ni soldados entrenados: son supervivientes que deberán enfrentarse a decisiones terribles para proteger su vida y la de quienes les rodean.
La partida se centra en la supervivencia, el drama humano y la tensión constante de un mundo donde cada recurso cuenta, cada encuentro puede ser mortal y la línea entre la humanidad y la barbarie se vuelve cada vez más delgada.
El verdadero enemigo no son sólo los zombis… sino el miedo, la desesperación y lo que los vivos están dispuestos a hacer para seguir respirando.
Sistema: Fudge.
Ambientación: Apocalipsis zombi, tono realista. Los personajes son personas corrientes enfrentadas a una catástrofe global.
No sois héroes de acción ni soldados de élite (al menos al inicio).
Los personajes deben ser gente común: profesores, mecánicos, enfermeras, policías, estudiantes, camioneros…
Lo importante no son las armas que llevéis, sino quiénes sois y qué estáis dispuestos a hacer para sobrevivir.
Maduro y dramático: supervivencia, horror y dilemas morales. +18.
Habrá violencia, tensión y situaciones duras, pero siempre buscando la inmersión, no la gratuidad.
La historia se centra en las decisiones humanas: la amenaza zombi es el telón de fondo, pero los verdaderos conflictos nacen entre supervivientes.
Respeto entre jugadores: lo que ocurra entre personajes no debe confundirse con lo personal.
El Director marcará escenas y tiempos narrativos.
El abandono de partidas es frecuente en el rol por foro: si necesitas dejarlo, avisa para cerrar bien tu personaje.
Se priorizará la coherencia narrativa sobre la optimización de fichas.