Partida Rol por web

Introducción del módulo a los jugadores...

Sois goblin de la tribu Lamesapos, que vive en el corazón de la marisma Tocón de Salmuera, al sur de un odiado pueblo humano llamado Punta Arena. En su día otros goblin intentaron quemar Punta Arena hasta los cimientos, y se hubieran convertido en leyenda si lo hubieran conseguido. Pero no llevaron consigo fuego suficiente, y como consecuencia se hicieron matar.

Ayer, tu tribu descubrió que uno de los suyos había usado artes prohibidas y que estaba involucrado en uno de los mayores tabús: escribir las cosas. ¡De hecho, los rumores apuntan a que estaba escribiendo una historia sobre tu tribu! No hay forma más rápida de atraer la mala suerte que robarle las palabras a tu mente escribiéndolas, y por lo tanto la tribu no tuvo otra opción. Marcasteis la cara del goblin con letras para castigarle, por eso todos le llaman ahora Cara Garabateada, y por eso le expulsasteis del poblado, rapiñasteis todas sus cosas, y quemasteis su choza.

Entonces fue cuando las cosas se pusieron interesantes, ya que antes de que quemarais la choza, el jefe Gutwad encontró una extraña caja en el interior del edificio. Dentro había un mapa y una buena cantidad de fuegos artificiales, que usasteis inmediatamente para quemar la choza. Esta mañana, Gutwad (el jefe de la tribu) anunció que por la noche tendría lugar una fiesta para expulsar cualquier rastro de mala suerte debido a las malas decisiones de Cara Garabateada. Pero quizá aún más excitante es el hecho de que habéis sido invitados a un encuentro en la Casa de reuniones del jefe Gutwad. ¿Por qué querrá hablar con vosotros el jefe? Eso solo puede significar que tiene una misión importante para vosotros… una que los demás goblin de la tribu no podrán arrebataros. ¡Esta podría ser vuestra oportunidad de entrar en la historia de los Lamesapos!

Chuffy Lameheridas, Mogmurch, Poog de Zarongel y Reta Malota se encuentran reunidos fuera de La Casa de Reuniones. Este edificio no sólo es la casa del gran jefe Su Barriguda Señoría, Rendwattle Gutwad, sino que además es todo un museo que recuerda la heroicidad e historia de vuestro pueblo, los Lamesapos. Trofeos de guerra como armas oxidadas, piezas de varipinta índole con un denominador común de brillantez, y cadáveres en salazón de perros y pequeños animalejos constituyen la mayor parte de este botín. Dentro también se encuentra la Gran Mecedora (el trono del jefe), sobre el que aposenta sus flacas nalgas y da órdenes al único que ha escuchado su voz, el pomposo goblin Slorb. Y es que es de saber popular que sólo este ayudante es capaz de soportar las palabras del jefe Gutwad, las cuales son capaces de ahuyentar todas las palabras de la mente de aquel mundano que las escuche (o, al menos, estáis convencidísimos de esto).

Mientras esperan que les den paso, los goblin héroes tienen unos instantes para intercambiar unas palabras. Hay que tener en cuenta que todos os habéis criado en el pequeño poblado, así que más o menos os conocéis (y podéis hacer la buena práctica de inventarse detalles de los demás, práctica tan usada en las partidas humorísticas).

Mientras me acerco intentando presentarme ante el jefe Gutwad como alguien útil para lo que los goblins necesitan, quemar, rajar, descuartizar, eso que me gusta tanto con mi rajaperros. Cuando llego veo al bebebotes de Mogmurch, ese tío se bebía cualquier cosa que veía, e incluso lanzaba eructos de diferentes colores y olores, una vez incluso escupió fuego por la boca abrasando el pelo del pobre Poog, causa por la que intentaba mantener la boca de este a cierta distancia. También estaba la deliciosa Reta Malota, y el nombre le hacía justicia, por que pocas hembras goblins eran a la vez tan deliciosas y malotas como ella, por eso siempre que podía Chuffy se acercaba sigilosamente a ella por detrás y le levantaba el vestido para mirar debajo de él, y esta vez no iba a ser diferente, así que se acercó aprovechando las sombras y su destreza sigilosa para acercarse hasta Reta y levantarle el vestido, tras echar un vistazo a su delicioso cuerpo, y dejó su muñeco de ojos saltones debajo de ella para aparecer en ese momento frente a Reta y el resto y decir chillando y riendo como un loco (como todos los goblins):

- ¡JAJAJAJAJAJA EL MUÑECO LE ESTÁ MIRANDO SU SINCOSA A RETA, JAJAJAJAJAJAJAJA!- Mientras señalaba al muñeco que tenía debajo del vestido, en el suelo, Reta

Voy alegre y kontento a la choza de del jefe. Seguro que nos manda alguna misión para kemar kosas. En cuando llego veo a Retta y le froto la kabeza. Todo goblin sabe que frotar kabezas grandes da buena suerte. También está Mogmurch, ke me hizo el favor de quitarme el pelo que me hacía parecer una goblina. Menos mal, porke ya estaba harto de kemar a los goblinos que me tiraban los tejos (aunque kemarlos también tenía su gracia). Y por último está Chuffy, que es el goblino más feo de toda la tribu. Le tengo un poco de envidia por ello, pero nunca se lo diré. Igual me tira los tejos y sería una pena kemar al goblino más feo de la tribu.

El gran jefe llama, Reta acude... Vestida con sus mejores galas se acercó a la choza con ganas de agradar... y se encontró con tres de los muchachos más feos del poblado... Se hizo la despistada cuando Chuffy se acercó por detrás para espiar bajo su vestido... se acababa de tirar un pedo y se lo tragaría entero... cuando descubrió el muñeco junto a sus pies se agachó, cogió el fetiche y de un bocado le arrancó la cabeza...

JAJAJAJAJAJA MI SINCOSA? SI TENGO MAS COSA QUE TÚ!!!

Luego llegó Poog.... antes también parecía tener sincosa pero no era cierto... Reta había visto la cosa de muchos de la tribu pero la de Poog era mucha cosa... Sacó de la bolsa a Spotol y le dio un lametón, se le torcieron los ojos de placer...

El jefe lo había llamado a su presencia. Quizás fuera una misión que cumplir...

Mogmurch dejó sobre la mesa los cuencos y potecitos con los que solía hacer sus "inventos". Echó mano sobre una rata rebozada y le hincó el diente mientras se limpiaba sus sucios anteojos. Si el jefe tenía una misión para él, había llegado el momento de que todo el mundo goblináceo viera los ingenios que era capaz de elaborar. Se acercó a la puerta de su choza y se puso su sombrero de cráneo... ¡¡le encantaba!! Ese sombrero realzaba su atractiva figura trasguil.

Se encaminó hacia la Gran Choza de Su Barriguda Señoría y allí vio que Chaffy, Reta y Poog aguardaban en la puerta. Reta y Chaffy reían y no entendía por qué hasta que llegó a la vera de sus amiguetes... ¡¡Era maravilloso!!

La peste que rezumaban las nalgas de Reta era un primor para su olfato. Era la mezcla perfecta entre metano, alimentos digeridos en estado de descomposición, aire y un toque sutil de pepinos agridulces... ¡¡Sus cuescos eran lo más!!

- ¡¡Hola chicos!!... ¡¡Huuuummm!!... ¡¡Qué olor tan rico Reta!!- Aquel hedor era la perdición de Mogmurch. El trasgo sabía que ese aroma a una concentración adecuada seguramente fuera inflamable... Tal vez un día tuviera que hablar seriamente con la hembra y pedirle que se tirara unos cuantos pedos en un recipiente... ¡¡Quién sabe!! Quizás unas cuantas chufas envasadas a presión fueran un artificio explosivo...

- ¿Qué ser este esjandalo? -resopla Slorb con su voz nasal y chillona saliendo de la Casa de Reuniones-. ¡To'os firmes, joder! ¡Pa' dento en fila a otear a Su Barriguda Señoría! -gesticula.

Vosotros, con vuestra cara de inocencia más convincente, pasáis al interior de la estructura. Allí está el jefe Gutward sobre La Mecedora, un trono de aproximadamente 1'80 metros de alto que le permite mirar a sus súbditos como si fueran hormiguitas. El consejero Slorb se apresura a ponerte a su diestra del jefe y ordena:

- ¡Al suelo, sentaitos to'os, puña'o de pulgas! ¡Aquí está Su Barriguda Señoría!

Es un auténtico honor estar delante del viejo, oriondo y demacrado Rendwattle Gutwad, así que obedecéis como niños. Y, para vuestra sorpresa, este os mira y... os habla directamente.

Las palabras del jefe Gutwad son...

Tós ser héroes. Cada tú. Sos los mejores Lamesapos tras yo. Y puede que Slorb tambén. No huis muetos de miedo del podeoso ruido de mia voz, asín que eso ser sola prueba que necesitas. Mu pronto, tós goblin Lamesapos saber tus podé, poeso os elegí pa una peligrosa misióng. Sabeis de lo fuego artificial y lo mapa qu’encontramos en choza de Cara Garabateá. Lo fuego artificial eran divertido. Pero mapa más divertido. Mostra una ruta a un lugá cerca la costa donde Cara Garabateá encontrar fuego artificial. ¡Y decía que pallá hay más! Lo quiero para Lamesapos. Tós vosotros los traparéis mañana. Ta noche hacemos un grande fogata para quemá la mala suete tuya, y haremo mucho juego. Mucho divertido. Mañana me traeis lo fuego artificial. Si topais hombres, matais. Si topais perros, matais. Si topais caballos, matais. Si topais Muchas patas come niños goblin muchos, quizá debáis corré. Y si no topais fuego artificial, ¡no volváis o daremos de comé vosotros a Nord chillón!

Tras esto, bosteza y rumia algo antes de dirigirse de nuevo a Slorb.

- ¡Dales el mapa y ya dejá solo a el jefe, merda de pixy! -le indica.

- ¡Sí, Su Barriguda Señoría! -obedece cogiendo el mapa de Caracortada-. ¡Tomá, tío-listo! -le grita a Poog entregándole el mapa-. ¡Ya oir vosotros al jefe! ¡Largo! ¡Largo! -os echa a empujoncitos hasta conseguir por fin teneros fuera de La Casa de Reuniones.

Me arrodillo como pide Slorb el pesado, no por su tamaño, si no por esa vocecilla. Me pongo junto a Reta intentando recomponer mi muñeco que ha decapitado de un mordisco.

El gran jefe, era para mi todo un honor. No lo había visto muchas veces, y menos a voluntad del gran y barrigudo jefe, ni nadie de su familia antes. Era el primer gran héroe dentro de ella, muchas veces habíamos salvado a unos y otros con nuestras artes furtivas, pero pocas veces eran reconocidad abiertamente siendo de las más utilizadas entre los pequeños grupos de nuestra especie.

¡¡Oh!! ¡¡Qué orgullo servir a tan deleznable, barrigudo y fétido héroe goblin!! -Pensó Mogmurch, mientras se agachaba frente al líder que residía en La Mecedora... Para cualquier goblin era un honor inimaginable poder hallarse frente al Gran Rentwattle Gutwald, y el alquimista no fue una diferencia. Su corazón estaba repleto de felicidad, pues el gran jefe confiaba en sus "creaciones". Sin perder un segundo, puso sus orejas tiesas y escuchó todo lo que tenía que decir y entonces su atención quedó estancada en un par de palabras... FUEGOS ARTIFICIALES...

La baba fluía a chorros por su comisura bucal, mientras su mente fabulaba con la idea de hacerse con unos cuantos de esos petardazos. Por unos instantes el alquimista fue feliz. Pero la enumeración de los múltiples peligros que podían hallar en el transcurso de su misión, despertó a Mogmurch de su ensoñación...

¡¿Muchas patas come niños goblin muchos?! ¡¿Nord Chillón?!...- el feo e inteligente trasgo con anteojos creía recordar donde había oido tales epítetos...

El goblin pasó unos segundos cavilando mientras con su mano derecha se rascaba el mollete del culo. Intentaba recordar dónde había oído esos apodos y finalmente, su mente evocó el peor de sus temores...

- ¿¡La Gruesa Ocho Patas!?... Creo que papea goblins de todos los tamaños, cheñó...- Exclamó el alquimista con cierto tono atemorizado ante la horrenda imagen de toparse con dicha criatura asesina y fatal, pero la mirada severa que el jefe Gur¡twald le dedicó, hizo que Mogmurch recompusiera su imagen, no en vano se hallaba ante el último descendiente de los Trasgos Obesos, un linaje de extirpe sin parangón.

- No che preocupe jefe... Chi topamos con esa feufa araña... !!La quemaremoooooos!!- mientras una risa sádica se escapaba entre dientes, provocando que el sombrero de cráneo se balanceara de arriba aabajo emitiendo un molesto ruidillo.

- No hará farta que nos tire a eche cerdapio de proporciones monstruochas- mientras hacía una serie de indicaciones a sus compañeros para que lo siguieran fuera y forzaba una sonrisa para complacer a Slorb y su adorado líder.

Reta se colocó el vestido como pudo, quería estar wapa para el Gran Barrigudo, el mayor héroe conocido... Pero cuando entró su atención se desvió completamente a un gran perro disecado que había en una esquina. Se pasó todo el rato que el jefe estuvo hablando babeando con la mirada fija en el perro....

Pegroooooooooo, pegroooooooooo...

Y si no fuera porque estaba en la Casa de Reuniones se hubiera abalanzado sobre el perro para descuartizarlo salvajemente... Pegrooooooooooo....

Cuando el lameculos de Slorb los obligó a salir de la choza, le enseñó los dientes por última vez a aquel perrazo que le miraba fijamente.... Y una sonrisa bobalicona a Su Barriguda Señoría....

- que eeee? que ta dao? que eeeee? decía mientras señalaba la caja que le habían dado a Poog y daba vueltas a su alrededor- QUE EEEEEEEEEE?

Chuffy se gira hacia sus compañeros que parecen tan ansiosos como él de mirar y disfrutar de lo que les ha entregado Slorb por orden del gran Jefe Gutwad para ELLOS que son los HÉROES de esta tribu, por fin era reconocido como lo que era:

- Ssssi, sssi, ssi ¿qué hay, qué hay, qué hay? Ssssupongo que ninguno ssse cagará por las patassss abajo y nossss dejará tirado en el peligro de la MARISSSSMA...cuando lasss patassss de Muchasss Pataasss Come Niñosss essssté a punto de devorarosss, recordad que Chuffy puede aparecer de cualquier sitio y rajar, matar, morder, comer!!

A quitar k'es pa mí -Grita Poog mientras se intenta apartar y mira el mapa arrebujado por si hay algo escondido que se pueda quedar. Cuando ve que no se lo enseña a los demás.

Akesto s'un mapa. Tesnemos k'ir p'aká -les indica mientras señala el punto con la X, poniendo cara de listo.

Uno mapa.... Puaj!!! Y que poneeee? que eeeeeeee? que poneeeeeee?

Trataba de recordar lo que había dicho el gran jefe, para ello se frenó bruscamente y se quedó mirando fijamente un punto indeterminado con la boca abierta....