Partida Rol por web

Joder, todo el rato sacando buenas tiradas y ahora saco esta mierda XD

Tim intenta hacerse con la pistola y Serpiente, sin dudarlo, le dispara. Un disparo certero y mortal.

El cuerpo sin vida de Tim se desploma contra el suelo, mientras en la estancia se hace el silencio...

Al ver caer el cuerpo de Tim al suelo muerto, asiento a Serpiente y le indico con la mirada que observe al resto y me dirijo al cadaver de Tim con tranquilidad, para registrarlo concienzudamente, a ver si en verdad llevaba algo oculto entre sus ropas.

- Bueno en principio, si tu ojo clinico es acertado Kimball, el asesino de Tomas esta muerto. ¿Y que vamos a hacer con los objetos? - pregunto.

- No tiene nada, esta mas limpio que el suelo del barracón donde hice instrucción. Y ahora Kimball, nos puedes decir ¿porque has sospechado de el? - pregunto incorporándome del suelo mientras no aparto la vista del resto, y mi mano se dirige hacia la pistola.

Me dirijo a la esquina a la que intentaba acceder Tim para ver qué es lo que se encuentra tirado en el suelo, lo recojo todo y lo acerco hasta la barra mientras le digo a Saúl -Vigila a Eduardo por si acaso.

-Parece que tenían algunas cosas escondidas que no querían compartir con los demás.

Joder y ahora comienza la desconfianza, lo que me temía - pienso al escuchar las palabras de Serpiente y ver la bolsa con los diversos objetos que trae consigo.

- Estaré atento - respondo sacando el arma del lugar donde la habia guardado, observando a Eduardo, Esteban y Jhon - ¿Que es lo que tenían, Serpiente? - pregunto.

-Parece que hemos tenido suerte y hemos encontrado muchas cosas útiles.

Me dirijo a Kimball y Saúl que son los únicos con los que cuento en estos momentos y les comento -A ver qué os parece si lo repartimos de la siguiente forma: una ración de comida para cada uno; ya que Saúl se ha quedado sin munición que se quede él con las balas; y entre tú y yo, Kimball, nos repartimos las dos pistolas. Nos quedan un par de bebidas energéticas para repartir entre nosotros y las 3 bebidas se las pueden repartir Eduardo, Esteban y John.

- Me parece bien, pero quedaos con las bebidas energéticas. Yo tengo un saco de dormir gracias a vosotros, cosa que agradece de veras mi dolorida espalda. Así que es justo que os las quedéis, lo comido por lo servido. Pero...¿No dirán nada nuestros tres amigos? - pregunto a Serpiente mientras miro a Eduardo y al resto.

El pulso me aumenta de forma exagerada y recuerdo muy pocos momentos en los que me haya sentido tan asustado como lo estoy ahora. ¿Por qué precisamente a Tim? Si parecía el tipo más pacífico...

Con voz temblorosa y mirando todavía el cadáver de Tim, le digo al resto de supervivientes: Yo... yo quiero una pistola y la linterna, por favor, y algo de comida o bebida. Yo me quiero largar de aquí, me quiero ir ya mismo. Tim es uno de los tipos de los que menos sospecho y siento que el asesino sigue todavía vivo. Vosotros no me aguantáis, yo no os aguanto, por favor, dejadme ir y todos ganamos. Sólo pido llevarme algo conmigo que me permita sobrevivir ahí fuera, seguro que mañana encontráis algo más en el bar que reponga lo que me llevaría esta noche conmigo, y además habría una boca menos que alimentar. 

Se hace evidente el miedo que me está empezando a calar, con manos y piernas temblorosas.

Gracias por salvarme el culo, Serpiente. Te debo una hermano.

Tras los sucesos, recogí mi arma y me senté en una de las banquetas, mirando a cada uno de los presentes.

Sin duda alguna, Tim era un asesino, puedo garantizarlo. Pero no estoy seguro que sea el único de la sala. Es por eso que nadie va a largarse de aquí. Dije clavando esta vez la mirada en Eduardo. Pasaremos juntos una noche mas, y si nadie mas cae tendremos la certeza de que todos estamos limpios. Y si aún queda algún asesino entre nosotros, será mas fácil descubrirle. Aunque seguramente mañana tenga la respuesta.

- Kimball, tu idea no es algo que me tranquilice mucho, a decir verdad. No nos dejas abandonar el bar y encima tenemos que confiar en que no pasa nada esta noche… Entiendo que quieras garantizarte que no hay más asesinos aquí, porque tu idea es hacerte fuerte en el bar, pero comprenderás que no me haga mucha gracia el pasar la noche y que a la mañana siguiente no despierte porque estoy muerto. Creo que es algo que deberíamos discutir con calma - digo mirando al resto de mis compañeros.

No obligo a nadie a hacerlo, pero creo que es lo mas sensato. Aunque sea arriesgado. ¿Y si hubiera mas? ¿Que pasa si nos encontramos con mas gente y ocurre lo mismo? Seguramente Tim fuese el único asesino de la sala, pero quiero asegurarme. Depende de vosotros ayudarme o no.

- Es algo que debemos pensar y hablarlo entre todos, además recuerda que aún esta fuera Carlos y deberíamos de encontrarlo para que estuviese en un lugar seguro y con gente en la que pueda confiar, sobre todo tras ver que hay asesinos en la ciudad – respondo a Kimball.

- Por cierto, Eduardo, ¿sabes dónde se encuentra el palo de combate, que se encontró hace unos días?
 

-Bueno, Kimball, no esperes que te salve siempre el culo, estate más atento la próxima vez. Y dime, ¿por qué estás tan seguro de Tim fuese el asesino? le pregunto mientras le devuelvo el arma. Espero no estar equivocándome con él y arriesgar nuestra seguridad al volver a armarle, y que cause problemas en el futuro. No puedo asegurar que él no sea un asesino también.

-No habéis dicho nada sobre qué os parece el reparto, pero yo, tal y como os he propuesto, me cojo una ración de comida, una bebida energética y la pistola. Os queda el resto ahí para repartiroslo. Comento con Saúl y Kimball. -Y tened cuidado no se lo lleve Eduardo.

-Y hablando de Eduardo, Kimball, creo que deberías cachear a esos tres, empezando por Eduardo.