Partida Rol por web

Bella que se había parado para que todos pudieran verla, prosigue su marcha quedándose a pocos centímetros de Eragon.

¡Tú! ¿Qué le has hecho a Micah? ¡Maldito! Grita con furia, apuntando con un dedo el pecho de Eragon de forma amenazante. La otra mano la tenía cerrada con fuerza y...rabia.

La miro asombrada y luego a Eragon. No me gusta nada que la gente se enfade asi sin mediar palabra.

Bella, deberias tranquilizarte. ¿Que ha pasado? la pregunto sin apartarme del lado de Eragon y sin soltar su mano Seguro que no es lo que piensas.

Zumo. Te dice intentando despejarse un poco dando vueltas en la cama.

Y con la gran lista de la compra que te acaba de dar el Mago, sales a comprar algo a las tiendas, dónde supones habrá alguien atendiendo o simplemente, podrás coger lo que te interesa y después pagarlo cuando vuelvas a ir.

Por suerte, has encontrado a un dependiente y te ha vendido todo lo que buscabas, por lo que regresas a casa tarareando una cancioncilla.

Cuando abres nuevamente la puerta de tu casa árbol, puedes ver que todo está completamente inmaculado y limpio. Ni un rastro de la fiesta de anoche.

Shimrod, en cambio, parece que se está dando una ducha.

De repente un vaso de zumo cae junto a tu mano mientras el chico continúa con sus quehaceres culinarios.

Pues, en realidad no tengo idea. Te responde con su melodiosa voz. La verdad, es que tampoco me interesa ya que mientras él esté fuera, yo tengo una casa donde quedarme y eso, querida mía, es muy importante para alguien como yo.

El chico sigue a lo suyo mientras continúa con la charleta.

El bosque no es algo que me disguste, pero dónde haya una buena cama, que se quiten las rocas de las cuevas... ¿no te parece?

¿Shimrod? - pregunta en voz alta, empezando a recoger la compra - No hacía falta que lo recogieras todo, lo habría hecho yo.

Dijo en una voz suficientemente alta para que la oyera.

¿Micah? ¿Qué le ha pasado a Micah? Si hace unas horas estaba muy tranquilo en su habitación... ¿por qué me dices eso? Y quita ese dedo que te vas a lastimar. Le dice Eragon a Bella un poco desconcertado por lo que le dice la Jinete.

No sé de que me hablas, así que tranquilízate y por favor, cuéntame que ha pasado.

Freya toma el vaso de zumo sin dejar de mirar a ese extraño, todavía algo recelosa.

¿Y como es alguien como tú exactamente?

Pregunta después de darle un sorbo al zumo y sin dejar de mirarlo. Ella sí quería que Roran volviera. Además, si ese individuo se quedaba allí... ella tendría que utilizar por fin la habitación que los elfos habían habitado para ella.

Bella aparta el dedo, pero no se separa e ignora a los demás presentes.

Sabes muy bien lo que le has hecho. Oromis me lo ha dicho. Has condenado a Micah a sufrir por mí. Le dice girándose y enseñándole la marca de la espalda. Deshaz esto immediatamente. Le ordena mirándole de reojo con rabia.

Pâris se quedó mirando pasmado la actitud de Bella

-Pero que ha pasado? No se puede resolver algo sin saber la causa de todo? Es por algo que paso esta noche y que nos ha afectado a todos??

Pâris intento imponer su resolucion poco a poco de las cosas, intentando desentrañar lo que ocurria ahi

Alguien como yo. Un exiliado. Un ermitaño. Vamos, un paria aquí en Ellesmera. Por eso me escabullo aquí cuando Roran se va y de paso, cuido de su casa. Dice el extraño mientras seca los platos y las cosas que ha usado para preparar el desayuno.

Después, coge un plato con su comida y una taza de zumo y se gira hacia tí.

Por cierto, ¿te pides la cama o el sofá?

Bella tiene razón. Lo he hecho sin querer al intentar aliviar su sufrimiento y al usar palabras en el lenguaje antiguo, lo que he logrado es todo lo contrario. Ahora su destino es sufrir por todos los demás, pero no te preocupes, entre Oromis y yo haremos lo posible por regresar todo a la normalidad. Simplemente, tenemos que encontrar las palabras correctas. Le dice Eragon a Bella intentando tranquilizarla.

No pasa nada, cielo, no me he esforzado mucho. Escuchas que te gritan desde la habitación.

En ese momento, ves pasar dos criaturitas amarillas corriendo por entre tus piernas, que se van llevando todo lo que hay en el suelo y les faltaba recoger.

Te giras y los ves comerse toda la basura con la panza llena y después, se tiran en el suelo con la espalda apoyada en la pared soltando un sonoro: Buuuuuuuuuuurp.

Bueno... ahora sí tenía un problema. Había descubierto que el amiguito de Roran estaba tan bien formado como él. Había intentado no fijarse en él, pero al darse la vuelta, había sido superior a ella... En una situación normal, habría notado un calor recorrer todo su cuerpo y habría podido salir por patas de allí. Pero teniendo en cuenta la cantidad de esencia que había gastado mientras entrenaba... El calor era mucho más que calor ahora mismo.

Además... Siguiendo así, no podría esperar a que Roran volviera. Y si no era con él, sería con otro... Así que... ¿para qué huir?

Sonríe de medio lado, sin llegar a separar los labios mientras recorre de nuevo con la mirada al monumento que tiene delante.

¿Sólo se te ocurren esas dos opciones? Vaya, vaya...

Pregunta con picardia antes de lamer su labio inferior para limpiarlo de zumo.

Mira de reojo a Pâris. Como volviese a interrumpir... Si no había explicado nada, es porque a ellos no les hacía ni fu ni fa.

¿Y en vez de estar allí con él intentando arreglarlo estás aquí de cháchara? Prosigue con su enfado, que no ha disminuido ni un ápice. ¿O es que quizá esas "palabras correctas" -exagera- están por aquí? Por que yo no las veo... Ironiza.

Luego se acerca más. Desde que confié en tí, Micah no ha hecho más que sufrir... Le reprocha con rabia, quizá contra ella misma, por haber confiado en alguien.

La miro y luego a él, se que puedo confiar en el asi que no me preocupa nada mas.

Hay veces que se tiene que alejar del problema para poder ver el error. Bella, hara lo necesario para encontrar la manera de arreglarlo, hasta yo le ayudare, asi que tranquilizate.

¿Esas dos opciones? Pues mira, la verdad es que sí. Si te pasas más de cuatro meses durmiendo sobre una roca, no te apetece entrar a una casa y dormir en el suelo. Tal vez a ti sí, pero lo que es a mí, bueno, la verdad que no es mi primera opción. Aunque si tu quieres dormir en el suelo, allá tu. Dice Noah mientras bebe un poco de zumo. Suponía que al ser la novia de este, ibas a dormir en la cama. Sorpresas que me llevo por no estar mucho tiempo entre los de mi especie.

He dicho que lo voy a arreglar y lo haré, Bella Swan. No te preocupes por eso. Mi mente puede pensar en varias cosas a la vez y mientras me encuentro aquí, una parte de ella piensa en como solucionar lo que he hecho. ¿Tu crees que yo no sufro por lo que hice? Pero una palabra mal pronunciada, puede hacer que las cosas se tornen peor. Déjame intentarlo a mi manera, ya podrás castigarme después. Dice un triste Eragon al recordar sus actos.

Pero ahora tenemos cosas más importantes que hacer, por más que te duela que te lo diga. Micah está en las mejores manos.

Freya se echa a reír al escuchar al "salvajito", como lo había bautizado mentalmente. Termina de desayunar y deja los cubiertos en el fregadero para empezar a limpiarlos. Cuando termina, se gira hacia él de nuevo, ahora con una mirada muy sugerente, a juego con su media sonrisa. Da un par de pasos mientras se acerca a él, apartándose el pelo de los hombros con una mano en un gesto natural y femenino.

¿He de volver a explicartelo?

Pregunta hasta llegar justo delante de él. Sólo un par de centímetros separan sus cuerpos y sus labios se encargan de recorrer esa escasa distancia, sin apartar la mirada de la de él, para quedarse justo rozando los suyos y susurrar, en tono meloso... casi un ronroneo.

Yo no soy la novia de nadie.

Se queda allí plantada, con la respiración algo agitada y mirándolo provocadora.

Bella entrecierra los ojos, como si se mordiera la lengua. No confiaba en Eragon, ya no.

Se separa un poco, ahora sí dando a entender que los demás podían participar en la conversación.

¿Y qué se supone que hacéis aquí? Pregunta mirando a los tres. Ahora quería saber porque justamente esos 2 jinetes habían sido llevados aparte.

Pero veloz como un rayo, la mano de Noah se aferró a los cabellos de Freya y tiraron hacia atrás de ellos, haciendo que la cabeza de la pelirroja se inclinara hacia atrás y su boca se separara de la de Noah. El rostro del chico cambió por completo, antes estaba tranquilo, ahora parecía realmente enfadado, como si la acción de la chica lo haya molestado de sobre manera.

Sin embargo, tras unos segundos de tensión, Noah le metió un terrible beso a Freya, un beso apasionado que duro solo unos diez segundos, para después, soltarle el pelo y apartarla unos metros de él.

Eso no funciona conmigo, niña. Le dijo mientras se daba la vuelta para dirigirse al salón.