Partida Rol por web

El edificio estaba esperando mientras Khardros permanecía inerte boca arriba con los ojos vidriosos. Tras el torreón suroeste os espera las escaleras que ascienden 5 metros hacia una abertura abierta en la parte sur del edificio. Unos peldaños de piedra desgastado conducen a un puente levadizo de madera mediante el cual se accede al interior. Las escaleras están orientadas hacia el norte y no se ve presencia alguna de trasgos.

El viento es apenas una leve brisa que se filtra por recovecos y agujeros emitiendo un silbido espectral, quizás sean los espíritus de sus antiguos habitantes entonando un réquiem por los caídos. Todo parece estar en calma en aquel lugar. Puede que sea la calma que precede a la tempestad.

 El helmita mira a Lezort a quien no puede evitar sentir que es culpable en parte por no haber sabido contenerse, tal vez el resultado habría sido el mismo. Pero aquella no era la forma de hacer esta incursión. Con un temerario que le importaba un pimiento la seguridad de sus compañeros, exponiendose él mismo y a los demás con sus temerarias acciones.

 - Esta no es la forma de hacer las cosas. Tenemos que avanzar todos a una y con sentido común. De nada sirve dejarse matar por que sí. Que sirva de lección del destino de Khardros.

 Lorenzo se incorpora mirando al resto y finalmente centrando su atención en las construcciones.

 - Aún tenemos trabajo por hacer, no es el momento de detenernos ahora. Pero que el sentido común y la paciencia guíe nuestros pasos.

Reviso el cuerpo de Khardros por si lleva alguna cosa que pueda sernos de utilidad y luego me dirijo a las escaleras.

-Tenemos que seguir adelante, sería mejor honrar su cuerpo de otra manera pero no podemos tomarnos ese tiempo sin arriesgar que acudan mas trasgos o algo peor.

Dichas estas palabras Yenian se puso rumbo a las escaleras

Lorenzo siguió a Durin hacia las escaleras mientras contestaba a susurros Yenian.

 - Cuando no estemos en peligro podremos atender a Khadros como es debido. Ahora vayamos antes de que no tengan tiempo para prepararse debidamente.

http://pyromancers.com/media/view/main.swf?round_i...

Sin más ceremonia el grupo de valientes aventureros comienzan a ascender los desgastados escalones hacia la entrada del voluminoso edificio. Las escaleras terminan en un puente levadizo de madera. Se puede ver un arco ojival que da acceso al edificio sin apenas adornos. Tras el umbral sólo se puede ver un pequeño recinto con dos cortinas.

Todos se encontraban en el interior  de aquella edificación.

-Andar con cuidado esto puede estar plagado de trasgoides repugnantes. Yenian se fijo en lo que parecía una habitación y se acerco con pasos cautelosos.

La curiosidad se apodero del mago pero si bajar la guardia.

 Lorenzo, ataviado con su armadura de cuero y el escudo se acerca a la pared del fondo y agudiza su oído mientras Yenian va a dar un vistazo a la pequeña habitación que hay en la antesala.

 - Es extraño que no escuchemos pisadas apresuradas formando una defensa tras los gritos de los trasgos del exterior.

Yenian avanza cauteloso hacia las cortinas y tras escuchar se asoma lentamente para observar. Se puede ver parcialmente un recinto de pocas dimensiones con un torno en la penumbra y una pequeña ventana en lo alto, supones que es el dispositivo para subir el puente levadizo y de esa manera aislar a voluntad el edificio de las escaleras que dan acceso al mismo.  

Lorenzo se acerca a la esquina para escuchar. No hay sonido alguno que evidencia la presencia de guardias.

Me giro hacia los que no han avanzado:- ¿Quizá deberíamos preguntar a ver si queda alguna de  esas bestias inmundas para acabar con ellas?- Espero que respondan algo mirando de vez en cuando hacia los dos que avanzaron.

Yenian cree haber encontrado un mecanismo de apertura y cierre. Pero antes de avisar a sus compañeros de lo encontrado decide buscar su libro de hechizos para iluminar aquellas estancias sombrías

Tras decir las palabras crea una bola de luz que se mantiene a pocos centímetros del bastón y aclara la oscuridad de alrededor.

Luego llama a sus compañeros para enseñarles el mecanismo.

 Ante el aviso Lorenzo va a dar un vistazo a la estancia, ahora iluminada, donde permanece Yenian.

 - ¿Qué pasa? Y este mecanismo, parece ser de un puente levadizo.- Comenta estudiando los engranajes y la cadena.- Creo que mejor no usarlo por el momento, propongo ir castillo adentro antes de que nos descubran por casualidad... si es que aún no lo han hecho.

Me acerco a los dos avanzados y tras las palabras de Lorenzo con amplia sonrisa le digo:-¿ Pareces muy versado en las artes arquitectónicas? ¡JAJAJAJAJAJA!- Río ante la evidencia que acaba de decir como si fuese un gran arquitecto enano y le doy un par de palmadas en el hombro. Luego miro el mecanismo y al mago y le digo con ironía :- ¿Crees que nos va a servir de algo?- Me dirijo a la cortina más cercana y pregunto en voz bastante alto:- ¿HAY ALGUIEN AHÍ? ¡SALID Y NO OS HAREMOS DAÑO!- Tras esa frase miro con una sonrisa en la cara a Lezort y Klaus.

Klaus se abre paso hasta la otra cortina y la arranca de un manotazo, sin prudencia alguna penetra en el interior.

- Klaus quiere abrir cabezas de trasgos, ¿a qué esperamos? Vamos Lezort.

 Tras la acción de Klaus, y las voces de Durin, toda opción de tomar a los adversarios por sorpresa se había esfumado directamente.

 Sin perder tiempo el joven helmita se adentra en habitación y se dirige hacia la puerta para atrancarla para evitar que por ella aparezca un torrente de trasgos, o eso cree él.

 - ¿Os suenan las palabras, estrategia, furtividad, ataque por sorpresa?- Dice con sarcasmo- Nos estamos jugando la piel, por lo menos no seaís unos necios insensatos. Si buscaís que os maten de forma tan necia, no espereís que interceda por Helmo para sanar vuestros despreocupados pellejos.

Ante las acciones irresponsables del grupo el mago enfurece pero el clerigo se adelanta 
Yenian asiente todo lo que dice.  parece que al menos alguien tiene algo dentro de la cabeza
 

-Ciertamente no me gustaría morir rodeado de asquerosos trasgos clavándome sus oxidadas armas
No sabemos el número de enemigos!

Tras decir esto avanza por la sala y se queda fijándose en el amueblado por si puede reconocer alguna simbología o marca

Miro a los cabreados y luego a Klaus y a Lezort y suelto una carcajada:- ¡Ja,ja,ja,ja,ja! Veo que sólo vuestras astutas acciones nos han traido aquí, ¿creeis que unos trasgos hubiesen esperado tanto para atacar tras entrar en su guarida?Se nota que poco habeis luchado contra estas bestias...- Avanzo hasta la altura de Lorenzo "el sabio" acercándome a las escaleras a ver si se escucha algo.

El recinto parece una sala de guardia. En medio la mesa vacía con algunos taburetes ocupan la mayor parte del espacio disponible. Hay un torno parecido al anterior y un rastrillo bloquea el acceso a la parte más amplia del edificio. También hay una estantería al final del recinto junto al muro exterior y un armero con algunas viejas armas de asta carcomido y herrumbrosas hachas en la pared opuesta.  Al final hay unas escaleras que asciende y desciende a las siguientes niveles. Parece completamente vacía.

- ¿Subimos el rastrillo o vamos por las escaleras? - Mirando al mago- ¿Alguien quiere mirar las estanterías?