Partida Rol por web

Crónica del Heredero - Episodio II - El Ascenso.

VII - Un encuentro con el pasado

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26/05/2015, 20:13
Tampan Bolmare

Aunque el elfo había escuchado las voces de la joven bardo este prefirió no abandonar la sombra que le proporcionaban la fachada cercana. No es que Ogna pudiese verlo, ya que su hechizo de invisibilidad aún seguía activo, pero era mejor no darle oportunidades a la chiquilla de que lo localizase. Si por alguna razón a ésta se le ocurría acompañarlo lo único que haría sería importunarlo y puede que retrasarlo. 

Durante su corta pero intensa estancia en el interior del palacio el pánico se había ido adueñando de la población lo que hacía que, aparte de los soldados y los voluntarios más aguerridos, poca gente más estuviese dispuesta a estar por las calles. Adoptando la apariencia de anciano que le confería el anillo encontrado en Nashkel, una vez hubo desaparecido el efecto de la invisibilidad, Morwing se dispuso a realizar las últimas compras antes de abandonar para siempre aquella ciudad que sólo le había dado quebraderos de cabeza. Cuando por fin tuvo en su poder todo el equipo necesario se vio en la disyuntiva de abandonar la ciudad por las puertas o volando por encima de las murallas. Teniendo en cuenta como estarían los ánimos tras su discusión con Heomar, optó por la segunda opción. Así pues, en menos de un día, el hechicero volvía a cambiar de destino. Esta vez sus ojos se dirigieron hacia el oeste, hacia Athkatla. Si algo importante iba a pasar, sin lugar a dudas sería allí. En la gran urbe conocía Sir Eradack Filguien, antiguo protector quien le había puesto a trabajar en Oaksville para vigilar a Aranar Brusta. Puede que fuese un buen momento para ver qué se traía el anciano entre manos.

Los caminos, como era de suponer, estaban completamente vacíos y, para un individuo solitario, la caída de la noche siempre podía resultar un problema si no te disponía de un cobijo o al menos de compañía. Por un momento se preguntó qué estaría pasando en Crímmor pero unas voces lejanas le hicieron desechar la intención de seguir pensando sobre ello. A lo lejos, sobre un altozano, un carromato de bueyes parecía estar pasando dificultades para ascender el inclinado repecho. Su dueño, un hombre mayor, se afanaba por hacer que los dos testarudos animales se moviesen. Por la carga que transportaba imaginó que se trataría de algún granjero de las inmediaciones de la ciudad que había decidido poner tierra de por medio tan pronto llegaron las noticias de la invasión orca. Una mujer y dos niñas se había apeado del carro y, mediante voces, trataban de jalear a las dos bestias de tiro.

Notas de juego

Te encuentras a 3 horas a pie de Crímmor. 

La noche caerá en poco menos de una hora.

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26/05/2015, 22:57
Morwing

Morwing no dudó un instante en dar marcha atrás a su decisión. Las palabras de Ogna solo hicieron más amarga la despedida… tocaría seguir en solitario.

Tras hacer las compras necesarias para el riesgo que supondría viajar sólo a partir de ahora, el hechicero salvó con uno de sus conjuros los muros de la ciudad y puso rumbo de nuevo a Ahtkatla donde, por fin, podría reencontrarse con Sir Eradack Filguien y averiguar hasta dónde estaba embarrado en toda esta trama.

La noche comenzó a caer y aun el trayecto era largo. Acampar en solitario en mitad del bosque no lo veía como una opción demasiado segura… - Será mejor continuar, se animaba a sí mismo.

Fue entonces cuando en mitad del desértico camino, un carromato perteneciente a una familia granjera se presentaba como una opción para pasar la noche en compañía e incluso salvar algunas millas a pie.

- Buenas tardes, compañero, se presentó una vez alcanzó al granjero que lidiaba con sus bueyes. - …O quizá debería decir Buenas noches, pues ya la tenemos casi encima. ¿Necesita ayuda?, se ofreció amablemente tras su apariencia de anciano. 

Notas de juego

Descontado conjuro de Volar

Intentaré dejarte detalladas las compras mañana... 

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26/05/2015, 23:37
Tampan Bolmare

Buenas noches buen hombre. - Saludó de forma amigable el granjero de amplias mandíbulas. Sus hijas, ambas adolescentes, buscaron inconscientemente los costados de su madre quien observaba la escena desde un lateral del carro. No son buenos momentos para andar solo por estos caminos olvidados por los dioses. ¿Quiere usted agua? Tengo ahí una cántara con agua fresca. - Dijo ofreciendo un vaso de madera que colgaba en un lateral del asiento del conductor. Nos dirigimos a Athkatla señor, ¿va usted también allí? Puede venir con nosotros si quiere y...bueno, si consigo que estos dos miedosos se pongan en movimiento. - El granjero propinó otro par de azotes en los cuartos traseros de los animales con una vara. ¡Como si fuese la primera vez que ven un murcielago por los dioses!

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27/05/2015, 00:03
Morwing

- Ciertamente, amigo… no son buenos momentos con los rumores del este, respondió Morwing. - Yo también me dirijo a Athkatla, y aceptaré si no es mucha molestia para usted y su familia tal ofrecimiento. Mis piernas ya no están para estas largas caminatas…, dijo golpeándose la rodilla derecha.

- Déjeme ver, continuó aproximándose al carro. – De joven tuve que lidiar con criaturas como estas ayudando a mi padre...

Morwing se aproximó hasta uno de los animales de carga y tras suaves caricias por detrás de las orejas comenzó a susúrralas – Shhhhh, shhhhhh…tranquilos, tranquilos… pronto llegaremos a un lugar seguro… ¡Vamos….aaaaaarrriba!, terminó animándolas mientras tiraba de sendas riendas…  

- Tiradas (1)
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27/05/2015, 00:14
Tampan Bolmare

Los bueyes mugieron en señal de protesta y se resistieron a los intentos del hechicero por hacer que estos se moviesen. No fue hasta que el granjero se unió a Morwing cuando éstos comenzaron a moverse lentamente. La muchachas fueron las primeras en trepar a la parte de atrás de la carreta junto con la madre. Vamos amigo, monte. - Ofreció el hombre al anciano para que montase junto a él en el pescante de la carreta. No fue difícil para Morwing, aun fingiendo ser un anciano, el encaramarse al vehículo.

Comenzaron a moverse con lentitud superando por poco el paso que una persona adulta. Sí, nos enteramos esta mañana temprano de que esos orcos van venir a por nuestros campos. ¿Tengo una familia sabe? No puedo arriesgarme a meterlos tras esas murallas. ¿Y si no resiste la ciudad? Sé que Lord Hembelan es sabe como tratar con esos seres pero no sé...esta vez me da muy mala espina. - Comentó ajeno a las últimas noticias de la ciudad. 

De pronto el chillido de una de las niñas hizo que tanto el hechicero como el padre se alarmasen. ¡Ahí está! - Gritó la joven pelirroja señalando a un murciélago que se había escondido entre el equipaje del carruaje y volaba raudo hacia el oeste. 

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27/05/2015, 00:42
Morwing

Morwing permaneció en silencio cuando el viejo habló de Hembelan. No era necesario alarmar a aquellas inocentes personas haciéndoles saber lo ocurrido con aquel desgraciado. Iba a cambiar de tema cuando el chillido de las niñas del granjero alarmó al hechicero llevándole la mano directamente a uno de los bolsillos de su nueva túnica.

La falsa alarma hizo sonreír con sinceridad a Morwing. – Tranquilo, no es nada…, pensó.

- Ojalá esos feos bichos sea lo único que nos encontremos durante el trayecto, comentó rompiendo el hielo. – Por cierto, mi nombre es Mor…Morthen…, acabó diciendo. Parece que el cansancio comenzaba a hacer mella en Morwing y casi le hizo revelar su verdadero nombre. – Le agradezco mucho su ayuda… 

Notas de juego

Lo de la túnica es que tengo pensado pillarme una nueva. Si me dices por cuanto saldría para añadirla a las compras..., esta vez será azul oscuro :D

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27/05/2015, 23:46
Tampan Bolmare

Es un placer conocerle don Morthen. Mi nombre es Tampan Bolmare y soy...o era dueño de una granja a pocas millas de Crímmor.  - Contestó el granjero sin despegar la vista del camino. - ¡No hay nada que agradecer! El viaje hasta Athkatla suele ser muy aburrido. Es la primera vez que lo hago en compañía de toda la familia pero aún así... - El hombre giró la cabeza y miró con una sonrisa a sus hijas y a su mujer, las cuales iban sentadas en unas alpacas viendo cómo se alejaban de las tierras que habían sido su hogar durante tantos años. - No creo que tarden mucho en caer rendidas de sueño.

He dejado a mi hijo mayor a cargo de los animales pero ya le he avisado de que a la mínima señal de peligro que vea, que deje todo y huya. - Confesó en voz baja al anciano para no alertar a su familia quienes probablemente no conocían del todo el alcance de la invasión. No sé si nos dará tiempo a llegar a la posada del Arado de Plata antes de que sea noche cerrada pero no pienso detenerme antes. ¿Me comprende no? 

Notas de juego

Tirada de avistar

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28/05/2015, 00:25
Morwing

- Por supuesto, respondió el hechicero. – Tras esas alarmantes noticias sería una temeridad continuar el viaje de noche… toda precaución es poca, dijo echando una mirada alrededor. -…¿y sabe cuánto queda hasta llegar a esa posada?, preguntó mostrándose cansado. – Me temo que no serán sólo sus pequeñas hijas las que caerán rendidas esta noche, bromeó.

-Por cierto, Sr Bolmare, ¿Qué intenciones tiene una vez llegado a Athkatla?

- Tiradas (1)
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28/05/2015, 15:09
Director
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Notas de juego

Quasit - esconderse: 31 (éxito)

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28/05/2015, 15:11
Tampan Bolmare

Si estos miedosos no se me vuelven a poner tercos no creo que tardemos más de tres horas. - Respondió acompañando sus palabras con una ligera caricia de su fusta sobre los cuartos traseros del buey de la derecha. Espero que tengan al menos una sopa fría para nosotros, porque algo me da en la nariz de que no vamos a ser pocos en la posada, ya verá. - Dejaba caer así el granjero sus inquietudes acerca de que irían encontrando muchos refugiados a medida que se fuesen conociendo las noticias de la invasión. 

Pues tengo familia allí - dijo refiriéndose a Athkatla -, un primo por parte de padre y a mi cuñado. Mi hermana, que en paz descanse, nos abandonó hace tres veranos. Ahora es mi cuñado quien lleva la tienda que en su día fue de mi padre. Es un negocio modesto pero me daba pena que con la muerte de mi hermana se perdiese. Nosotros dejamos la ciudad cuando todavía éramos jóvenes y no teníamos hijos. No me gustan las ciudades, son muy peligrosas y nunca ves venir a tu enemigo de cara, no sé si me entiende. Preferimos montar nuestra propia granja no muy lejos de Crímmor y vivir de una manera más modesta en el campo. Allí somos, éramos, perdón,  - corrigió rápido - , más felices.

Durante el verano llevo a mis corderos hasta la capital y es a mi cuñado a quien se los vendo. La lana prefiero venderla en Crímmor porque me la pagan mejor, ¿comprende?. He pensado que podemos quedarnos unos días en la antigua casa de mis padres hasta que todo esto pase, las niñas agradecerán el cambio...y nuestros huesos también. - Añadió en voz baja en referencia a lo que habría pasado si los orcos alcanzaran la granja con ellos allí.

Ambos hombres hablaron largo y tendido durante las dos horas y media que duró el viaje hasta la posada del Arado de Plata, un vetusto edificio a un lado del camino que durante años había sido el lugar de descanso de pequeños mercaderes y gentes de pocos recursos que necesitaban hacer noche en el tramo entre Athkatla y Crímmor no alcanzándoles la luz del día para llegar hasta El Derro de Piedra, una posada mucho más grande y lujosa para bolsillos menos apretados. Como bien había supuesto el señor Tampan, los alrededores de la posada se encontraban repletos de carretas. Los establos de la misma hacía tiempo que no conocían un lleno tan absoluto, al igual que el salón y las habitaciones. Por suerte para los cansados viajeros aún había camas libres en la habitación comunal así como un par de habitaciones que podían ser alquiladas a un precio mayor al que habían tenido hasta esa misma mañana. 

Notas de juego

La túnica azul no vale más de 1 pieza de oro.

 

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28/05/2015, 21:37
Morwing

El viejo Tampam no estuvo desacertado con su augurio acerca de la acumulación de personas que se encontrarían en la posada. Por fortuna para Morwing y la familia del granjero aún quedaban algunas camas libres. Con la entrada de la noche y la distancia que aún quedaba por recorrer, sin duda aquella parada en el camino era la mejor opción a tomar.

- Bien, Señor Bolmare, creo que aquí podremos obtener nuestro merecido descanso- , dijo palmeando su espalda.

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

COMPRAS:

x1 Caida de Pluma 25po
x1 Agrandar Persona 25po
x2 Falsa Vida 300po
x2 Invisibilidad 300po
x1 Ver lo Invisible 150po
x1 Esfera eslastica de Olituke 500po
x1 Invisibilidad Mayor 500po
x2 Aura Mágica de Nystull 50po
x1 Bruma Ultratumba Kelgore 150po
x1Cinto de Pociones 60po
x1 Túnica nueva 1po

TOTAL: 1911 po -1 po habitación (Descontado. 5813-1912 -  Restante: 3901po)

A la espera del ok

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28/05/2015, 22:04
Tampan Bolmare

Así es Don Morthen. - Contestó mientras ayudaba a descender del carro a su mujer y recogía algunos objetos de valor que no quería dejar en la carreta. Nosotros nos alojaremos en la habitación comunal. - El hombre se echó el saco con las pertenencias al hombro y acompañó a Morwing hasta el interior de la posada. - Tenemos pensado retomar el camino tan pronto cante el gallo, a ser posible antes de que despunte el alba me gustaría estar en el camino.

El salón del Arado de Plata era una amplia y cálida sala donde se congregaban una treintena de personas en el momento en que el hechicero entró junto con la familia de Tampan Bolmare. No había que ser adivino para saber cual era el tema predominante en aquel momento. Como el granjero quería mantener apartadas a sus hijas de todos aquellos rumores, fuesen fundados o no, no tardó en separarse de Morwing y dirigirse hacia la habitación comunal tras haber pagado el correspondiente precio en la barra. Morwning, tras asegurarse de que lo que allí se comentaba o bien lo sabía o bien eran invenciones sin fundamento, decidió también subir a su habitación, ésta individual y de mejor calidad supuestamente.

El hechicero, dejó su equipaje y se aseó como buenamente pudo en una pequeña palangana de porcelana que había sobre un palanganero. Como la desconfianza había sido consejera fiel durante su periplo a través de los reinos no dudaría en asegurar puerta y ventanas para evitar sorpresas. Bagul tendría una larga noche por delante. Precisamente se encontraba el hechicero asegurando el cierre de la ventana cuando un sonido en el exterior le llamó la atención. Se trataba de uno de los dos bueyes que el señor Tampan utilizaba para tirar de la carreta. Por lo que parecía intentaba soltarse del poste al que había sido aferrado. Conocer lo qué molestaba al tranquilo animal no fue difícil para Morwing. No parecía haber nada extraño en la calle aparte de otros caballos, carretas vacías y los típicos murciélagos dando vueltas alrededor de los farolillos tratando de cazar insectos. Sin embargo, uno de ellos comenzó a crecer hasta adoptar el tamaño de un halcón. Por supuesto el hechicero sabía que aquello no era un halcón tan pronto éste se posó sobre la carreta y se introdujo entre el equipaje. Era un Quasit.

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28/05/2015, 22:47
Morwing

Presto y dispuesto a descansar, no sin antes hacer de Bagul un vigía improvisado, Morwing se aproximó una última vez a la ventana para asegurarla. Todo parecía en calma en el exterior a excepción de los bueyes que tendrían que aguantar la presencia de murciélagos esa noche… Esos pocos segundos observando la carreta le permitieron descubrir como un Quasit se infiltraba entre el equipaje. – Hummm, jodido bicho… Bagul, ¿te apetece dar un paseo?, comentó con su fiel amigo mientras lo introducía de nuevo en uno de sus bolsillos.

Aquellos malditos diablillos comenzaban a ser verdaderamente irritantes. ¿Pero cómo había dado con él? No existía motivo aparente para que eligiese esconderse justo en el carro en el que había viajado el hechicero. – ¿Casualidad…?  …seguro que no.

Algo en todo aquello no terminaba de encajar. Morwing era conocedor que los Quasit merodeaban casi siempre ocultos tras un conjuro de invisibilidad. Exponerse así podría haber sido un descuido por su parte o el cebo perfecto para tenderle una trampa.

El hechicero no quería correr ningún riesgo. Conocía la posición del diablillo y en esta ocasión más que acabar con él…preferiría capturarlo vivo. Quizá así conseguiría algo de información y en el peor de los casos podría torturarlo hasta la muerte.

Así pues, Morwing salió de la habitación, la cerró y cuando estuvo fuera del alcance de la mirada de los numerosos clientes ejecutó un conjuro de invisibilidad. Raudo salió de la posada, mientras esquivaba chocar con los clientes que se agolpaban en su camino.

Una vez fuera, se aproximó hacia la carrera con cuidadosos pasos para evitar ser detectado. Cuando por fin pudo ver el interior de ésta, espero paciente hasta divisar a su presa. 

Notas de juego

Uso conjuro de Invisibilidad (Descontado. Queda 1)

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29/05/2015, 07:37
Director

Cómo había llegado aquel demonio a saber que Morwing se encontraba bajo la apariencia del anciano era todo un misterio pero a fin de postre no le sorprendió demasiado. Si aquellos seres habían sido informados de los recuerdos que el susurrante había extraído de la mente de Lord Hembelan, era más que probable que a esas horas conociesen sobre el grupo multitud de detalles que el gobernador hubiese deducido o hubiera conseguido por otros medios. Por otro lado estaba el poder de algunos demonios para ver más allá de las apariencias, con lo que su disfraz habría valido de bien poco contra ellos. No obstante, y aquí Morwing podía hablar con conocimiento, los quasit no eran conocidos por esas habilidades.

Entre esos pensamientos y con la firme idea de ver qué se proponía el pequeño demonio, el hechicero avanzó hasta estar a pocos metros de la carreta. Sólo el ulular del viento y los mugidos y relinchos de bueyes y caballos respectivamente rompían la serena calma de la noche. Durante unos segundos Morwing aguantó la respiración como si aquella fuese una molestia que le impidiese escuchar con claridad. De pronto, la queja de una aguda y apenas perceptible voz hizo acto de presencia. No sabía qué diantres podía estar diciendo pues hablaba en el idioma de los demonios pero estaba claro que se trataba de una protesta. Llegó hasta Morwing el sonido de un saco al rasgarse y sin saber por qué a su mente vino la escena de otro quasit. Fue días atrás, aquellos lejanos días en los que aquella aventura no parecía poder iba a complicarse tanto. Imaginó la cara del sorprendido Holmar Beram al enterarse por los guardias de la puerta de Athkatla de que un demonio trataba de colarse en la ciudad camuflado entre sus pertenencias. 

Notas de juego

Tirada de moverse sigilosamente si vas a acercarte más.

El Quasit lo has visto en la carreta que está cerca de los bueyes, en la entrada a las habitaciones comunales.

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29/05/2015, 18:40
Morwing

Morwing se aproximó hasta la carreta entre pensamientos sobre aquellos seres. Que estuviese allí no podía suponer otra cosa que no fuese cumplir la voluntad de un ser superior a él, y posiblemente por ese motivo, llegó a escuchar quejidos en su idioma demoniaco mientras se escondía entre el cargamento de la carreta.

- Ahora tocaría ser más cuidadoso, pensó cuando estaba lo suficientemente cerca como para que el Quasit pudiera descubrirle. Con cuidado sacó de su equipo una bolsita de maraña que sostendría en su mano izquierda durante el lento y minucioso avance. Si algo tenía claro el hechicero es que tendría que impedir que una de esas criaturas se le volviese a escapar. Acabar con él, conociendo su escondite, sería muy sencillo… atraparlo… ya lo veremos… 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Acción: Avanzo lentamente hacia la carreta sin perderla de vista. Si detecto al bicho le lanzaré la bolsa de maraña usando el conjuro de lanzar (NL0). 

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01/06/2015, 21:32
Xceeztuc

El hechicero avanzó hasta estar a pocos pies de la carreta cargada con las posesiones del granjero. Seguía sin poder ver al quasit aunque algo le decía que debía de estar intentando esconderse dentro de uno de los sacos de trigo que Tampan llevaba consigo. El paso de Morwing era lento y cuidadoso sin embargo la ruidosa protesta de uno de los bueyes al sentir aproximarse algo que no podía ver hizo que el hechicero se detuviese. Se encontraba a poco más de un salto de ver al pequeño demonio pero éste, alertado, ceso sus murmullos de inmediato. 

 

 

 

 

 

 

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Iniciativa Quasit: 11

No hay acción sorpresa porque él te ha escuchado también. Tendrías asalto completo por lo que lo verías si te colocas encima de la carreta y le ganas en iniciativa.

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01/06/2015, 22:23
Morwing

Morwing se fue aproximando hasta la carreta mirando en todo momento posibles lugares donde podría estar oculto el Quasit. De pronto notó como sus murmullos inentendibles cesaron, o le había descubierto o al menos había notado su presencia… Era el momento de actuar antes de darle opción a escapar. Sin embargo tendría que esperar hasta que el diablillo mostrase su escondrijo.

- Tiradas (1)
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02/06/2015, 15:27
Xceeztuc

Xceeztuc guardó silencio. ¿Sería posible que alguien lo hubiese descubierto? Lo que al principio pensó que podría tratarse de un simple borracho pronto se convirtió en una amenaza. Aquel paso cauto aproximándose hacia él no era una casualidad. Cesó su intento de vaciar todo aquel trigo y contrajo sus músculos debido a la tensión. De un salto se elevó por encima de los sacos y mantuvo el vuelo para encontrarse frente a frente con su enemigo. Para su decepción y sorpresa no pudo verlo aunque gracias a sus poderes innatos sí que podía detectar la magia que expelía. Aquello no le gustaba lo más mínimo pero se dijo que si no plantaba cara probablemente lo lamentaría. ¡Fuera de aquí asqueroso! - Gritó al espacio vacío donde se encontraba Morwing. Para darle un motivo a aquel curioso para que se alejara de allí optó por abalanzarse hacia adelante y lanzar sus diminutas garras venenosas hacia donde había escuchado los pasos. Nada sucedió. Sus manos rasgaron el aire sin toparse con nadie aunque sabía que realmente había alguien allí.

- Tiradas (3)

Notas de juego

Ataque con garra: Fallo.

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02/06/2015, 20:24
Morwing

Morwing se detuvo frente a la carreta en el mismo instante en el que el sonido procedente de los sacos de trigo cesó. No alcanzaba a ver a su enemigo pero estaría dispuesto a esperar pacientemente hasta que delatara su posición. Fue entonces cuando el diablillo saltó por encima de los sacos lanzando un ataque muy cercano al hechicero. Erró por poco pero ya no había ninguna duda de que sabía de su presencia, muy probablemente gracias a sus aptitudes mágicas.

Tocaba responder al ataque. Con la criatura revoloteando por encima del hechicero lo primero debía ser intentar inmovilizarlo. – Rúma, susurró justo antes de que la bolsita de cuero saliese despedida hacia el quasit e impactara en una de sus alas de murciélago. – Ya eres mío, rata asquerosa…, creo que tú y yo tenemos una conversación pendiente… 

Notas de juego

Acción: Conjuro Lanzar Bolsa de Maraña (Descontado conjuro NL0 y maraña)

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03/06/2015, 15:51
Xceeztuc

Xceeztuc se sorprendió al ver aparecer al anciano de la nada, no porque desconociese el hechizo de invisibilidad, ya que él mismo solía utilizarlo a menudo, si no porque no pretendía convertirse en la mascota de ningún mago. En su plano de origen no eran pocos los de su raza que eran invocados por los magos y eran presos por éstos para convertirse en sus familiares. Xceeztuc, como todo quasit que se preciara, odiaba enormemente a los humanos y en especial a aquellos que profesaban tan asquerosa profesión. 

Un gruñido que recordó a Morwing al de un cachorro precedió a un inusitado ataque tan violento y explosivo que, de no haber sido por las pequeñas garras del demonio, le hubiese ocasionado más de un problema. Sus afiladas uñas marcaron sendos cortes en la cara del hechicero que comenzaron a escocerle inmediatamente. Morwing conocía el veneno que aquellos seres transmitían en sus ataques por lo que supo que debía reducirlo cuanto antes si no quería que la caza de aquel ser se le complicase. Además, si la lucha se prologaba mucho, había muchas posibilidades de alertar a los inquilinos de la posada y, en aquel momento, lo que menos deseaba era tener que dar explicaciones.

- Tiradas (6)

Notas de juego

Ataque completo: 2 garrazos (éxito) - 2 PG - 

Mordico: Fallo

Tienes que hacer 2 TS de Fortaleza CD 13, una para cada garrazo. No se acumula el efecto del veneno por lo que sólo te hará efecto el mayor de los penalizadores, si es que fallas alguna de las 2.

Pierdes 1 punto de Destreza ahora, y 5 al minuto.