Partida Rol por web

Crónicas de Á: Tomo 0 - El Amanecer -

Concilio de Sabios

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28/09/2010, 19:57
Director

Notas de juego

El concilio comenzado en la Tercera Edad continúa aquí.

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28/09/2010, 22:10
Jeldhor, el errante

Jhirann de Tal Kokand se adelanto viendo que el concilio se habia estancado por disputas que no venían a cuento

-recopilemos lo que sabemos. Este velo surgio tras las guerras. Se alza mas alto de lo que nadie puede volar, inalcanzable. Interrumpe la comunicación de los dioses con sus criaturas y corrompe y ensucia todo lo que cae bajo su sombra. ¿alguien sabe algo mas que sea de utilidad?-

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28/09/2010, 22:16
Hya, Reina Dragón

La Reina Dragón se sienta, piernas cruzadas... en el aire, tal que su cabeza está a la altura del Kohiri, o del Gigante.

- Eso mismo venía a contarles. En el Norte el manto es más débil, aunque igualmente nos atormenta con su llamado a la desesperanza. Sin embargo, un artefacto parece repeler estos efectos...

En su palma abierta muestra a todos lo que parece ser una moneda de grandes proporciones; de unos 5 centímetros de diámetro. Algunos reconocen un objeto de leyenda: una Moneda Dragón.

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29/09/2010, 01:16
Elocc`iso

El naya se habia quedado solo, claro que no era de extrañar ¿quienes eran ellos entre tantos seres de notable importancia? No obstante escuchaba con atencion cada una de las palabras.
Al parecer el Dragon Magnus era el culpable de cuanto habia sucedido. El y los suyos eran los culpables de toda esa matanza y ahora solicitaba paz. Solicitaba el olvido sobre lo sucedido y algunos otros parecian dispuestos a darselos.

 - No pactaremos - dijo el Naya mirando fijamente y con una mirada cargada de odio al dragon brillante - hablais de paz, de resolver la causa que proboco esta sombra sobre el mundo - no apartaba su mirada de aquella figura, en un intento ridiculo tratando de despertar miedo en aquel ser - al parecer no somos el unico pueblo que ha sufrido su ira, pero si el que mas lo ha pagado - subio su tono hasta convertirlo en gritos - ¿que hemos hecho que merece tal accion?¿que ha ofrecido que merece tal perdon? al parecer los demas pueblos no han sufrido lo que hemos parecido nosotros. Los dragones fueron excluidos ¿tal vez temian su poder? los Tvus no se estan curando de las heridas, pues disponen tiempo para tratar asuntos que a nuestro parecer son menores. Queremos un castigo, exigimos que sea castigado el culpable del extermino Naya - señalo con el dedo al dragon - ¡queremos la cabeza de Magnus como penitencia y que su Dios sea excluido, que no sea recordado, que sea maldito por toda criatura de Albur y asi mismo le suceda a quienes le muestren su apoyo!

Notas de juego

Nadie le hace caso al pobre Naya... xD.

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29/09/2010, 09:42
Jeldhor, el errante

Jhirann se queda observando la moneda de Dragon en silencio, en Tal Kokand se guarda otra y sobre su pecho el lleva tatuada su runa, pero se cuida de decirlo ya que los secretos de Tal-Kokand deben seguir siendolo.

Escucha el exabrupto del Naya y niega con la cabeza

-cuando el velo se retire sera tiempo de justicia, no antes- dando por respondido continua -Las monedas de Dragón son los regalos de Á, y solo Á tiene el poder de crear el velo, los dioses, sus hijos, no podrían hacerlo, no sobre todo el mundo y de forma permanente. El velo es obra de Á, molestos con los mortales o con los dioses. Por eso las monedas de Dragón mitigan su efecto. Siendo obra de Á la única manera de retirar el velo es convencer a Á de que lo retire. ¿Como conseguimos eso si no podemos hablar con el de ningún modo?-

Notas de juego

normal con esas aportaciones :p, los juicios al palacio de cristal

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29/09/2010, 15:29
Knhoss

La Tvu había roto el hielo inicial y luego se había quedado al margen. Ella también tenía sus razones para odiar a los dragones de la grieta. Había sido ella la que se vio con la responsabilidad de organizar la defensa de las ciudades asediadas y había presenciado en primera fila la destrucción que los malvados seres habían ocasionado en su pueblo antes de que pudieran repelerlos. Pero el sabio Kohiri tenía razón... en este momento debían trabajar juntos para quitar el velo. La justicia llegaría después, de mano de quién se designara para tal fin.

-Tranquilo hermano Naya. Sabemos por los mensajeros que el Concilio envió a vuestras ciudades que la destrucción es mucha y que han sufrido sin causa alguna el ataque de las huestes de Yoonel... pero el representante de los dragones de la grieta aquí presente no es su dios... ya tendrá que dar explicaciones por los ataques injustificados a Vandrerfan y a Naghaurn... pero ahora un mal mayor nos afecta a todos, es en ello en lo que debemos enfocar nuestras energías.

-Dragones de Hielo, hijos de Á, ¿Cómo servirá esa moneda para deshacer el velo? Sabio Jhirann, tú también pareces conocer su poder... Siempre creí que esas monedas eran una leyenda... si no fuera porque la estoy viendo, incluso dudaría de ella. ¿Es en verdad un regalo del dios creador?- Nyrith miró con curiosidad a ambos sabios, esperando su respuesta. Un rayo de esperanza enmarcaba su rostro.

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29/09/2010, 15:48
Pyaray, The Whisperer

Oslo, el Rey de los gigantes se mesaba la larguísima barba escuchándolo todo y prestando especial curiosidad a la pregunta de los tvus acerca de la moneda, tenia la esperanza de aprender aquí algo más acerca del velo que les cubría, y ahora se iba a decir algo realmente importante acerca de él, esto iba a ser un momento decisivo y ahí estaba él. El sabio y paciente Rey de los Gigantes que ahora observaba a la nívea mujer esperando sus palabras.

¿Como enviada por el mismísimo Á qué podían esperar de ella?

¿Acaso los hijos de Á no estaban de acuerdo con los actos de Á? ¿Qué clase de culto trataba de corregir los designios de su dios?

Por ahora estas palabras eran guardadas, pues aún no era el momento de intervenir, era el momento de escuchar a los más impetuosos a los más impacientes, a aquellos que revelarían un sendero que ellos mismos seguirían con la vista al frente sin prestar atención a lo que se perderían por el camino

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29/09/2010, 17:13
Elocc`iso

Olem al ver la moneda, se estremecio. El dolor, el miedo, la rabia el deseo de venganza creio en el aun mas. Tanta amargura arrastraba que era incapaz de ver el verdadero problema, que era el manto oscuro.
La moneda fue un gran error, pues simbolizaba la muerte en sus tierras. Ellos la honraban como muestra del gran poder del Dios Á, pero para los Nayas, era un simbolo maldito, una muestra del horror del mundo, pues con ella llego la nigromancia y el poder de Planser de insuflar vida a los muertos.

El Naya torcio el gesto y se alejo del centro diciendo con un tono aspero y seco - Mil veces sean malditas esas monedas y el Dios que las creo. Si esa es la fortuna que nos espera... estamos condenados.

Entonces recordo las palabras de la Tvu, se volvio y le dijo desde su posicion levantando la voz para hacerse notar - ¿¡Mucha!? ha sido total, completa y general, no queda pueblo, ciudad o reino Naya intacto. Nuestros queridos lideres fueron destruidos, nuestro pueblo casi extinto. Ahora sobreviven perdidos en colonias errantes que no pueden, que no se atreven a llamar hogar. Todo una civilizacion hecha pedazos ¿¡y se pretende que nos aliemos con quienes son culpables!?

 

Notas de juego

Habeis dado con un Naya muy cabezota jejeje. y la moneda no ayuda :P

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29/09/2010, 20:03
Jeldhor, el errante

Jhirann sigue su linea de pensamientos sin hacer mucho caso a las discusiones que no tienen que ver con el problema real

-mandar un mensaje a Á para que levante el velo, eso es lo que hemos de hacer. Á lo ve todo y lo sabe todo, sabe de nuestra necesidad, asi pues se me ocurren tres opciones. Cansado de su creación ha decidido destruirla. El mensaje no es para nosotros sino para los dioses por lo que nada de lo que decidamos o hagamos tendrá ningún valor, o... es una prueba de algún tipo para nosotros, y espera que la resolvamos de alguna manera-

Los cascos del kohiri golpean el suelo, aunque es mas bien un gesto de estar pensando

-solo merece la pena pensar en la tercera opción. Una prueba. Algo que han de realizar todas las razas de Albur, o al menos sus representantes ¿pero que puede esperar de todos nosotros Á? cada raza sigue su camino, igual que le ha molestado la guerra le molestaría una paz total, ya que es el camino de algunas razas ser malvadas. No espera una tregua universal.-

Jhirann se queda en silencio meditando sobre lo que puede esperar Á

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29/09/2010, 21:23
Hya, Reina Dragón

La fría Reina tuerce el gesto ante las palabas del Naya. Lo observa, intentando tal vez con sus artes aplicar algún bálsamo a la herida de su pueblo.

Pero el dolor es grande... oh, tan grande! Como el velo. El velo mismo es el que mantiene ese dolor.

- Tal vez el odio y el dolor sea una prueba. Una prueba resulta siempre el dolor. Esta noche de sangre no es más que un profundo odio como el del representante de los Nayas, corporisado en el cielo.

Piensa, y luego afirma. El Poder de Á es grande, pero aún más lo es el de todas la consciencias. Nuestro grito de dolor ha sacudido los cielos.

Sopesa la Moneda. Solo se me ocurre pensar que, siendo este objeto una representación del más alto poder Divino, es el medio que tenemos de encauzar nuestros propios deseos. Si cada Raza reuniera sus Monedas, si reuniéramos los poderosos fragmentos de la Voluntad de Á, entonces podríamos con ellos ser más fuertes aún que los Dioses, y descorrer esta roja cortina.

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30/09/2010, 03:25
Elocc`iso

- Si es para derrocar a los dioses, buscare esa moneda maldita - Su voz contenia la ira reprimida que luchaba por estallar.

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30/09/2010, 05:08
Knhoss

La Tvu observó los rostros de los presentes mientras la mujer dragón hablaba. Allí reunidos se encontraba el imponente rey de los gigantes, cerca del líder de los dragones de la grieta. Estaban los shenkem y la dragona que custodiaba el Árbol de la vida y un poco más allá, los vurmak, aquellos lejanos parientes.

Vandrer, nayas, kohiri. Todos ellos presentes. Pero faltaban los sekaar, aquellos vecinos suyos que compartían el cobijo de Skraag. Tampoco habían hecho acto de presencia los sirénidos y aunque la mujer se sentía más cómoda sin su presencia, realmente las ausencias eran muchas. No había ningún sabio silvho como tampoco los orkos habían enviado representante. Ni los elementales; ni esos otros extraños seres surgidos del lugar dónde se encontraban ahora.

-Sabia del pueblo dragón, propones juntar esas monedas para llegar hasta Á. Más, si las leyendas son ciertas, la que se le otorgó a nuestro pueblo yace fundida en las profundidades de Skraag... donde se dice que la arrojó Ghiskhaft para otorgar un don a nuestro pueblo.

-Ese no es el único inconveniente que veo aquí. Muchos pueblos, habitantes de Albur no se han presentado a este concilio. ¿Como podremos hacer entonces para obtener esas monedas? Y por último... si esas... abominaciones, esos seres que según dicen habitan la Llanura de las almas son parte de la creación... ellas también deben contar con un regalo de Á similar al nuestro... con lo cual, será imposible hacernos con ella- la voz de Nyrith murió rápidamente invadida por la desesperanza. Al parecer, la salvación era una misión cuasi imposible.

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30/09/2010, 06:07
Gaia

Thorek avanzo con paso firme entre los presentes para situarse en un costado. Había permanecido oculto en las sombras oyendo lo que decían Las palabras del Naya sonaban fieras, la rabia que contenía no llevaría a ningún sitio si seguía así El quería derrocar a los dioses... ¿Pero que había con los dioses que defendían las ciudades?


-Naya, estas equivocado en tu manera de pensar. Aquí muchos de los dioses han intentado proteger las ciudades como han podido. ¿Por que meter en un mismo saco a todos los dioses cuando solo algunos son los culpables? Es cierto, su pueblo es uno de los que mas bajas ha sufrido, pero en estos momentos de guerra todos compartimos el mismo destino. Podría haber sido cualquier otro pueblo el que hubiese perdido y seguramente no te estarías lamentando... - Observo a los demás – Si es cierto lo de las Monedas, entonces lo mejor seria buscarlas. Pero al hacerlo seguramente los dioses malignos lo notaran e intentaran evitarlo. Debería solo un grupo buscarlas, para no levantar sospechas. Hay una delgada linea que supuestamente es un tratado y es muy fácil de romper. El moverse por las sombras, sigilosos y fuera de la vista de todos nos proporcionaría una ventaja. Mientras algunos distraen a los enemigos, los demás pueden buscar el objetivo común..-

 

Comento cruzándome de brazos. Totalmente serio. Posando la mirada en cada uno de los presentes que había en el sitio. El tono en el que hablaba era completamente neutro, ya que no quería que ninguno se sintiera ofendido con mis palabras.

 

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30/09/2010, 10:27
Jeldhor, el errante

 Anna la Valkiria se adelanto -yo y los mios buscaremos esas monedas, si se pueden encontrar las encontraremos, los Vandrer somos expertos en encontrar tesoros. Se dice que hay una de esas monedas para cada raza. Debemos iniciar una gran búsqueda y reunirnos aqui de nuevo dentro de 10 años, con las monedas, creo que en ese tiempo si cada uno ponemos nuestros recursos seremos capaces de encontrarlas todas. A no ser que hayan sido destruidas claro-

Su voz denotaba firme determinación, finalmente parecía que se llegaba a algún lado, a una solución realizable, ademas de una oportunidad de realizar grandes gestas que quedasen para la leyenda

Notas de juego

 propongo gastar un evento por cabeza para reunir todas las monedas, incluyendo las "destruidas"

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30/09/2010, 10:34
Yoonel, el Nacido Muerto

-Haz lo que quieras embajadora Anna, pero no espereis contar con mi ayuda. La unica razón que vine a esta reunión era con la esperanza de asegurar la paz para mi pueblo, y en cambio me encuentro con recriminaciones infundadas y comentarios ofensivos, tales como compararse a una piedra. Si esta es vuestra decisión así sea.

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30/09/2010, 14:06
Elocc`iso

Que ironico resultaba que el unico que le apoyaria en su decision, fuera a aquel que queria castigar.

- Buscar entonces - dijo el Naya - si ese es vuestro proposito, mi pueblo no se ofendera, mas no conteis con nuestra ayuda. No se nos escucha con la debida atencion - señalo al Kohiri - no veo por que deberia de escuchar yo a los pueblos sometidos ¡Justicia y castigo! es lo unico que pedimos y se nos pide que aguardemos diez años ¡diez! antes de tomar decision alguna. ¿Y si no funciona? ¿Diez años mas de espera? ¿asi hasta cuando? - respiro larga y profundamente antes de concluir con un tono de pena - veo que somos un pueblo menospreciado, no entiendo la necesidad de seguir hablando.

Notas de juego

Ala! diez añacos! que los Nayas son humanos, vivien 70-80 años, diez años es una barbaridad para ellos xD.

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30/09/2010, 15:18
Pyaray, The Whisperer

Las monedas del Dragón, objetos del Dios Primigenio, objetos de poder inimaginable, objetos fuentes de la creación

Esas monedas merecían mayores propósitos que simplemente remover el velo, esas monedas podían ser usadas para crear un nuevo mundo, para abrir nuevas dimensiones, pero para ello haria falta un intelecto superior, no podía dejarse esas monedas en manos de tan impetuosas y emotivas criaturas, las monedas debían pertenecer al pueblo Gigante, ellos le darían mejor uso que ningún otro.

Tal vez fuera su naturaleza quien le empujara a tan avariciosa idea, o tal vez fueran los incipientes efectos del velo, el Rey Gigante Oslo tenía una gran historia que contar, tenia grandes objetivos que dar a su pueblo, por fin tendrían una meta. Los gigantes conseguirían el mayor poder existente en Albur.... Las Monedas del Dragón, habia sido una reunión muy provechosa

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30/09/2010, 15:30
Knhoss

La tvu comenzaba a perder su paciencia. ¿Como era posible que los llamados sabios se cegaran en esa forma? ¿Acaso no veían que el mal mayor podría acabar con todos?

-Nayas, dragones, vuestro reclamo es comprensible. De hecho, necesitamos la paz para poder vencer a la oscuridad que se cierne sobre nosotros. Pero si queréis que vuestros reclamos sean escuchados, también deberéis colaborar- Nyrith miró a ambos representantes fieramente.

-Magnus tú exiges paz, cuando fueron tus acciones las que desataron la guerra. Exiges paz que los pueblos aquí presentes estamos dispuestos a concederte... y sin embargo te niegas a colaborar. Esto es un toma y daca. Ya has visto que quienes teníamos los motivos mayores para exigir tu sangre, hemos aceptado firmar el pacto... pero también se exige de tí y de tu pueblo que colaboréis, que pongáis vuestros recursos a favor de aunar esfuerzos en quitar este velo que tanto daño hace al mundo. Si no está en vuestros planes colaborar, no puedes pretender que el resto de los pueblos acepte aliarse a una raza que no busca más que su propio beneficio.

Luego, aún enardecida por las palabras que acababa de pronunciar, encaró a Olem.

-Naya, tu pueblo ha sido aniquilado y tu sangre clama por más sangre... pero aquí no se encuentra el culpable de la destrucción... y mientras ese velo de muerte cubra los cielos, tu pueblo seguirá sin alcanzar la justicia que tanto persigue.

¿Queréis ser retribuidos? ¿Queréis que el artífice de tanta destrucción y muerte pague por lo que ha hecho? Ayudad entonces y seréis ayudados. Mi pueblo, a quien represento en este momento ante este consejo de sabios, se prepara para ayudar en las reconstrucciones poniendo al servicio de tu pueblo y de los Har-Ail que también han sufrido mucho, conocimientos, recursos y manos que colaboren a poner piedra sobre piedra otra vez. Y cuando todo vuelva a la normalidad, podréis exigir que se castigue al culpable.

La tvu estaba hablando como nunca. Por primera vez en ese concilio, sentía el por qué su propio Concilio la había mandado allí.

-Valkiria Anna, haremos todo lo posible para ayudaros, pero debemos intentar que la búsqueda se realice con celeridad. No tenemos diez años para esperar. En mucho menos tiempo que ese lapso, las plantas y los animales habrán sucumbido ante la oscuridad... y también los pueblos libres... El manto que cubre los cielos es cada vez más poderosos y su influencia va minando rápidamente la moral de las razas. Es desalentador, sí, pero no creo que dispongamos de más de un año o dos para lograr nuestra empresa. En eso Olem tiene razón.

-Por favor, pueblos de Albur. Unámonos en esta empresa que nos afecta a todos, ayudémonos unos a los otros antes de que el poder destructivo del velo nos incapacite y nos quite la voluntad de acabar con él.

 

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30/09/2010, 16:29
Yoonel, el Nacido Muerto

-¿He dicho yo que no quería ayudar?¿He dicho que no estaba dispuesto a hacer mi parte? Lo único que digo es que si no podemos estar de acuerdo en algo y tratarnos con respeto en este momento, cuando estamos reunidos para una causa común, no podremos estarlo nunca.

Firmemos el acuerdo, aceptemos la paz entre las razas aquí presentes y dividamos las tierras, jurar cumplir lo acordado y traer a este concilio una Moneda del Dragón cada uno como prueba de vuestro compromiso.