Partida Rol por web

Esta partida está en revisión. Si el director no da señales de vida o es aprobada por un cuervo será borrada esta noche

Días pasados

Días pasados

Cargando editor
14/12/2010, 21:09
Alessirä

 Me giré a mirarlo porque había escuchado cómo subía las escaleras; por mucho que él intentara ocultarme cosas, siempre conseguía enterarme, era como si de pronto estuviéramos mucho más unidos que nunca. Casi era cómo si pudiera sentir el dolor que el sentía o los miedos o cualquier otro sentimiento. Me acerqué a él, ignorando el latir de mi corazón que se disparaba cada vez que le veía con mal semblante.

-¿Qué pasa?

Lo hice sentar en la orilla de la cama y lo miré fijamente clavando mis perlas grises en sus ojos.

-No aceptaré una respuesta negativa y mucho menos una mentira...

Acaricié su mejilla suavemente y de pronto un fuego intenso me apretó por dentro, cerré los ojos y pude ver claramente mi propio corazón envuelto en llamas, mi vida envuelta en llamas, el dolor de ambos y la separación pero también un duradera felicidad que nadie iba a poder arrebatarnos y entonces lo tuve claro: pasara lo que pasara, siempre estaríamos juntos. Sabía que mi padre estaba detrás de aquella revelación pero ya nada podía hacer para ocultarle nada, así que abrí los ojos y volví a mirar a Valkin, esperé tranquilamente a aplacar el calor que emanaba hacia él tras la revelación, no quería quemarle literalmente.

-Quiero saber todo lo que pasa, Valkin... De ahora en adelante estamos unidos de una manera que ni yo misma puedo explicarte.

Me arrodillé ante él y recargué mi rostro en su regazo mirándolo hacia arriba, estaba segura de que íbamos a pasar muchos problemas pero también estaba segura de que si era juntos, nada importaría.

Cargando editor
14/02/2012, 17:32
Alessirä

Muchas noches habían pasado desde aquella revelación que quedar en nada, en bruma y abismo pero no perdí oportunidad de afinar mi puntería y de conocer más mis poderes, sabía que pronto los iba a necesitar. Podía ser la misma a vista de cualquiera pero no de Valkin que me conocía mejor que nadie y tampoco del lobo que poco a poco estaba más unido a mí también. Los necesitaba a ambos y creía saber que ambos me necesitaban a mí, aunque nadie entendiera el por qué. Éramos tres y siempre íbamos a ser tres, lo demás, estaba de más. 

Salí de la casa cuando ambos aún dormían, sabía que el lobo se había percatado de mi salida pero de momento no había nada que temer. Mi padre estaba llamándome a las lindes del bosque y debía presentarme si no quería que le hiciera daño a mis... Bueno, a mis amigos. Llevaba los pies desnudos para que la tibieza del rastro de Alessir pudiera guiarme y finalmente lo encontré. Esta vez no era un apartado del bosque, tampoco era un claro, estábamos en medio de árboles y al mirarlo, me di cuenta que no debía temer.

-Te envié a hacer algo y terminaste haciendo algo muy distinto...-dijo a modo de reproche.
-Estoy haciendo exactamente lo que me pediste, entrenándome para ser la mejor y...

Un golpe de calor me invadió, mi padre era mucho más poderoso que yo.

-¡Deja de mentir!

Sentí que iba a caer pero me mantuve estoica, mirándolo con odio y dolor. No podía evitar sentirme así hacia él.

-¿Estás enamorada?-gritó.-¡Obvio que lo estás, como una estúpida!

El fuego de su furia nos envolvió a él y a mí pero sabía que en ese estado, lo más que podía hacer era debilitarme. No estaba segura de si lo hacía porque me amaba o porque no soportaba a Valkin. Caí sobre mis rodillas, con lágrimas quemantes rodando por mis mejillas.

-No podrás evitar que cuide de él.
-Y tú no podrás cuidarlo toda la vida, voy a matarlo-
dijo sin más y se marchó.

Mientras me ponía de pie, me daba cuenta que era verdad, no estaba jugando o amenazándome. Tenía que conseguir más poder si quería poder cuidar de él. Me encaminé pesadamente de vuelta a la cabaña, teníamos que abandonar aquel lugar. No es que Alessir no pudiera encontrarnos en cualquier otro, pero si le costaría un poco más.

Cargando editor
06/03/2012, 21:07
Alessirä

Me haces un favor??? Me pones de directora?? Di que sí... Quiero seguir teniendo a Alessirä!!

Cargando editor
23/03/2012, 21:27
Alessirä

Si mi padre había cumplido o no su promesa, no podía saberlo. Valkin se había marchado, dejando atrás tantas cosas y asuntos por resolver, sin darme tiempo siquiera a despedirme de él. Lo vi marchar por la ventana sin decir una sola palabra, sin volver a mirar atrás, sin esperar a que yo pudiera despedirme; sus razones debía tener. Me dejé caer en la cama, pensando hacia qué punto dirigir mi vida, una cosa era segura, debía seguir adelante, costase lo que costase pero ¿para qué? A mi padre ya no le interesaba lo que hiciera, quizás ahora buscara a un heredero digno de un Dios y a Valkin, no le había costado nada darme la espalda.

-Esperaré un par de semanas, luego iré hacia el sur. Quizás encuentro a Juk y él pueda ayudarme con mi entrenamiento.

Resoplé, furiosa, decepcionada, era otra persona, las cosas cambian tan pronto como una puesta de sol. Al final, quizás él había hecho lo más sabio para los dos, yo tenía cosas que hacer, no podía distraerme en aquello que había empezado a sentir por él y volver a ser yo, Alessirä, la semidiosa hija de un Dios mayor, nos vendría bien a todos, hombres y dioses por igual.

Desde que nací, fui criada como un pequeño heredero, tuve los mejores maestros en todos los aspectos que alguien pueda imaginar, los mejores espadachines, los más sabios magos pero nunca nadie me enseñó a sentir, quizás para eso si que me hizo falta mi madre. Ya era tarde, esas cosas tendría que aprenderlas de ahora en adelante y tendría que hacerlo sola. Cerré los ojos, en ese momento sólo necesitaba descansar y dejar de pensar en él.

Cargando editor
21/05/2012, 20:21
Sólo para el director

Recordar que no siempre las cosas salen como una espera pero a veces sí y es cuando te maldices bastante por no haberte alejado cuando era el momento. Lo sabía, lo sé ahora y lo voy a saber tiempo. Siempre ha sido mi culpa, ahora toca recapitular, cerrar la página sin lastimar a nadie y volver al mundo obscuro del que nunca debí salir.