Partida Rol por web

Oscuridad y silencio...

La inmensidad del espacio parece ser vacío... un vacío negro en el que sólo alguna lejana estrella rompe la oscuridad con una minúscula luz que llega a nosotros a través de años luz de distancia...

Pero de pronto la imagen se amplia en un zoom que nos permite ver algo que antes no distinguíamos. Un enjambre de transportes espaciales moviéndose todos en la misma dirección. Se trata de cerca de un centenar de naves de diferentes tamaños, todas en torno a una astronave tipo colonial cuyo tamaño ridiculiza a las otras, como un banco de peces acompañando a una ballena azul en los oceanos de la Vieja Tierra, cuando aun quedaba vida en el planeta...

Bienvenidos a la Metamorfosis Extática.

La gigantesca astronave colonial fue construida dos decadas antes de la Caida y durante la misma fue utilizada para evacuar refugiados fuera de un condenado planeta Tierra.
Como sucedió a muchas de estas gabarras, la Metamorfosis Extática no fue capaz de encontrar un lugar adecuado para desembarcar su carga de miles de pasajeros, convirtiéndose en un campo de refugiados en viaje permanente, y en ocasiones sufriendo motines internos.

Eventualmente se unieron a los ya existentes enjambres escoria, adoptando su estilo de vida nómada. La facción denominada Escoria sigue un estilo de vida de ideología anarquista y que aboga por el control total de una persona sobre su propio cuerpo y mente, aceptando por completo la modificación corporal y la experimentación. A la inmensa astronave se la puede considerar como una ciudad flotante que funciona como un gigantesco mercado negro y carnaval de lo bizarro (una zona sin ley donde cualquiera puede encontrar lo que desee o necesite por el adecuado precio o reputación). No cuenta con presencia policial y existen pocas restricciones aparte de no poner la estructura de la nave en peligro.

Esta gabarra escoria lleva consigo algo más de 6000 transhumanos, sin contar infomorfos y todas la naves que viajan a su alrededor. Como nave colonial, está preparada para transportar a sus pasajeros durante años hasta que lleguen a su destino, pero no para un viaje interminable como en el que está embarcada. Por suerte, la Metamorfosis Extática cuenta con propulsores de fusión que reemplazaron a sus originales propulsores de plasma, sus pasajeros cuentan con las comodidades más básicas y sus sistemas de soporte vital son capaces de soportar la población que allí vive. El cilindro central de la astronave gira sobre sí mismo para obtener una gravedad leve (0.4 G), pero el resto de la nave se mantiene en gravedad cero.

Las gabarras Escoria son cruces de caminos para gente de todo tipo de facciones, morfos e ideologías, y cada uno de ellos se encuentra aquí para dedicarse a sus asuntos sin restricciones, para pasar unas vacaciones y estar de juerga, o simplemente para trasladarse hasta su siguiente destino. Hay secciones de la nave que son bazares a cielo abierto, otros tienen una vida nocturna perenne, y hay incluso zonas en las que puedes encontrar algo de descanso o privacidad.

La Metamorfosis Extática atrae a transhumanos de toda clase y condición...

... tales como vosotros....

Te concentras en el esquema de microcircuitos sobreimpresionado en tu campo de visión y después en el panel abierto que tienes enfrente. Las obvias diferencias te hacen torcer el gesto.
Menudo trabajo de mierda que han hecho aquí.

Estás boca abajo, enfundada en tu traje de vacío, flotando en gravedad cero frente a una escotilla de acceso al exterior, en las entrañas de una de las zonas de carga próximas a los hangares de naves que se acoplan regularmente a la Metamorfosis. La alarma saltó cuando uno de los sensores detectó un fallo estanco en esta escotilla en concreto. Mala cosa. Una pequeña fuga aquí puede ir a más y causar una descompresión en esta sección. Y si los sistemas de seguridad no actúan a tiempo, podríais perder toda la sección y causar serios daños estructurales en el puerto de carga anexo.
Y todo porque alguien hizo aquí una chapuza.

Aplicas ultrasonidos de alta frecuencia en varios de los puntos del panel con tu útil multiherramienta y luego lo transformas en un microsoldador para puentear el sistema del panel y que pase a estar bajo tu control. Mientras trabajas, con tan solo un pensamiento, apartas la imagen de los planos originales (inútiles en estas circunstancias) y mandas un aviso a Koryo para que investigue quién fue el responsable de esta reparación y que vaya preparando el informe correspondiente para compartirlo con la red de técnicos de la nave.
En realidad no crees que sea posible localizar al responsable de la chapuza. La Metamorfosis es vieja y este "arreglo" parece de hace décadas. Es gracias al trabajo desinteresado de los técnicos como tú que esta gabarra continúa su viaje a través del sistema solar. No cobras por ello, pero dispones de todas las comodidades básicas que una nave como esta puede proporcionar y posees una alta reputación en la red @.

Continúas con la reparación cuando aparece en tu campo de visión un mensaje de Héctor para quedar hoy. Lo desechas de inmediato. Koryo no debería habértelo pasado mientras estas en mitad de un trabajo, pero parece que le gusta Héctor. Y lo cierto es que lo pasáis bien juntos, pero últimamente se está poniendo un poco pesado, como si fueras de su propiedad exclusiva. Y eso no puede ser. Ya te ha pasado antes con otros hombres. Será mejor dejarle las cosas claras la próxima vez, pero no hoy, en realidad hoy no te apetece verle.

De pronto, el rostro de Koryo se materializa frente a tí, con una sonrisa y guiñándote un ojo. Pero en esta ocasión no te hace gracia. Ella sabe expresamente que no debe interrumpirte en mitad de una reparación delicada como ésta.

Pero antes de que empieces a echarle la bronca, Koryo empieza a hablar:
[Elis, es importante. Es Firewall]

El resto del cuerpo de tu musa se termina de materializar. Entonces abre la palma de su mano y aparece un mensaje sin abrir. Puedes ver en los datos anexos que ha sido autentificado y desencriptado, y que ha llegado directamente desde El Ojo, la red privada que utiliza Firewall.
Sin perder más tiempo lo tocas y el mensaje se abre:

Ni hao, amiga. Se precisa urgentemente tu ayuda. Ha llegado a nuestra atención el hecho de que un traficante de arte desconocido en tus alrededores está tratando de vender ciertas obras maestras al mejor postor. Por favor, investiga y valora la naturaleza de la obra de arte y el impacto potencial en la población. Si su calidad es realmente digna de considerarla una obra maestra, haz lo que sea necesario para evitar que la obra de arte caiga en manos de ningún coleccionista privado. Cerca de donde te encuentras podrás reunirte con otros tres colaboradores para ayudarte en tu tasación. Mantennos informados de tus progresos.

Guardas el mensaje mientras lo asimilas. No te hace falta un decodificador para entender lo que quieren decir con "obras de arte". Se refieren a armas de destrucción masiva. ¿Aquí, en la Metamorfosis? Incluso en una microsociedad anarquista como ésta hay algunas limitaciones, y una de ellas es que están prohibidas a bordo las armas que pudieran causar la destrucción de la nave...
Además, el aviso de Firewall tiene categoría de máxima prioridad. Eso significa que la venta de armas se debe de estar produciendo ya, por lo que hay que moverse rápido.

Comprendes que la reparación tendrá que esperar. Bloqueas la escotilla, reinsertas el panel de control y activas una serie de protocolos de seguridad para no pueda ser activada. Después te impulsas con los brazos para girar sobre ti misma en el entorno sin gravedad e impulsarte hacia un nivel más alto.

Mientras, Koryo crea un mapa traslúcido de la astronave en el que se muestran tres iconos parpadeantes.
[Elis, ya tengo situados a los tres centinelas: Gavin Cladwell, Zora Möller y Ahmir Sektioui. He abierto canales de comunicación y tienes acceso a sus fichas aquí mismo.]
Cada uno de los iconos se abre, desplegando un panel informativo con información de cada uno de los otros agentes de Firewall. Ninguno con el que hayas trabajado antes.

Te mueves de manera sigilosa y segura entre los puestos del bazar que se extiende a lo largo de esta amplia explanada. La multitud te rodea, centenares de transhumanos de toda clase y condición, enfundados en todo tipo de morfos, e incluso infomorfos que proyectan sus imagenes holográficas transparentes, como si fueran fantasmas de un antiguo cuento de terror. Pero no hay terror. Sientes satisfacción por encontrarte en un lugar como este, donde el poder de las hipercorporaciones no alcanza, y las ideas anarquistas han creado una sociedad horizontal, un nuevo modo de sociedad. Todavía mantienen una economía de transición, con su uso de moneda, pero la sociedad escoria va camino de tu ideal de transhumanidad.
Miras hacia arriba con tu vista potenciada, donde el espacio infinito queda iluminado por las luces de posición de la astronave y docenas de las más pequeñas que acompañan a la Metamorfosis Extática.
Concluyes que es un nombre adecuado. Metamorfosis.

Caminando a tu lado, Errico confirma tus ideas:
[Nuestro objetivo es el bien de todos, la eliminación de todos los sufrimientos y la generalización de todas las alegrías que puedan depender de la voluntad humana. Es la paz entre todos los seres humanos. Es una nueva y mejor civilización, una humanidad más digna y feliz. Pero creemos que el bien de todos no puede alcanzarse realmente más que con la consciente colaboración de todos. Creemos que no existen formulas mágicas capaces de resolver las dificultades. Que no hay doctrinas universales e infalibles a todos los hombres y a todos los casos. Que no hay hombres y partidos providenciales que puedan sustituir útilmente la voluntad de los demás por la suya propia y hacer el bien a la fuerza. Creemos que la vida social adquiere siempre las formas que resultan del contraste de los intereses ideales de los que piensan y quieren. Por eso convocamos a todos a pensar y a querer.]

Las palabras de Malatesta te hacen sentir ligera, y no es debido al entorno de microgravedad (0.4 G) en el que te encuentras.

Mientras caminas, vas revisando hojas de datos que aparecen frente a tu campo de visión. Contactos, suministros para misiones, posibles reclutas para sustituir la última baja en tu célula. En un lugar como este las posibilidades para encontrar lo que necesitas son elevadas. Ha valido la pena el viaje de varias semanas en esa pequeña nave de transporte para llegar hasta aquí, donde puedes llevar a cabo tus investigaciones sin temor a ser detectada por los sistemas de seguridad del Consorcio Planetario.

De pronto, Errico levanta su mano y en su palma aparece un mensaje con el icono de máxima prioridad.
[El análisis cuántico ha sido correcto: El mensaje ha sido autentificado y desencriptado. Zora, proviene directamente desde El Ojo.]
El Ojo, la red privada que utiliza Firewall. Abres el mensaje:

Ni hao, amiga. Se precisa urgentemente tu ayuda. Ha llegado a nuestra atención el hecho de que un traficante de arte desconocido en tus alrededores está tratando de vender ciertas obras maestras al mejor postor. Por favor, investiga y valora la naturaleza de la obra de arte y el impacto potencial en la población. Si su calidad es realmente digna de considerarla una obra maestra, haz lo que sea necesario para evitar que la obra de arte caiga en manos de ningún coleccionista privado. Cerca de donde te encuentras podrás reunirte con otros tres colaboradores para ayudarte en tu tasación. Mantennos informados de tus progresos.

Cierras el resto de ventanas con las que estabas trabajando y vuelves a leer el mensaje.
"Obras Maestras". El código de Firewall para hablar de lo que son en realidad: armas de destrucción masiva. Una venta realizada en un lugar como este es comprensible, fuera del control de las redes de las hipercorporaciones. Pero ese tipo de armas pone en peligro a todos los que viajan en esta astronave. Hay que actuar rápido.

Errico ya se ha adelantado y te muestra las fichas de tus tres colaboradores. Es la primera vez que trabajas con ellos. Se trata de Elis Menezes, Gavin Cladwell y Ahmir Sektioui. Su situación aparece en tu campo de visión sobre un mapa tridimensional de la astronave. Lees por encima sus fichas antes de pedirle a Malatesta que te ponga en contacto con ellos, cosa que ya ha hecho.

[Tengo conectados online a los tres centinelas, Zora. Los canales abiertos poseen varios filtros de encriptación, pero te recomiendo que no trates detalles en esta transmisión. No es una linea completamente segura.]

A través del ventanal de tu habitáculo contemplas las estrellas. Te mantienes flotando en gravedad cero, en una posición de yoga, manteniendo tu mente en blanco. Limpia.

Una hora cada día dedicada a la meditación. Con tu cibercerebro en modo autista. Alejado del tumulto exterior de la Malla. La mayoría de la gente se sentiría perdida y aterrada ante tal grado de desconexión, pero no tú. Usas este tiempo para centrarte. Sólo encuentras una paz similar cuando te encuentras en mitad de un combate. En esos momentos de confusión es donde las cosas están más claras para tí.

Dos semanas desde que llegaste a bordo de la Metamorfosis Extática, durante su breve paso por uno de los varios hábitats orbitales de Triton, la mayor de las lunas de Neptuno. Dos semanas en las que has recibido variadas ofertas de trabajo. Eres especialista en seguridad. Pero eso significa diferentes cosas según el lugar del sistema en el que te encuentres. Aquí, en el sistema exterior, lejos del control férreo del Consorcio Planetario, bien podría significar asesino a sueldo.

Cierras los ojos. La meditación te ayudará a decidir por qué oferta decantarte. Pero debe ser una decisión sabia y mesurada. Para ello, aspiras hondo y exhalas el aire lentamente, dejando tu mente totalmente en blanco, llegando a un nivel de concentración todavía más profundo.

Entonces, poco a poco, un ligero aroma a flores inunda tu olfato. Y piensas que a veces tú eliges la opción que deseas, pero a veces tú eres el que es elegido...

Ángela.

Abres los ojos para verla frente a ti con su sonrisa dulce y preocupada al mismo tiempo.
Sabes que debe tratarse de una emergencia. Si no fuera así, ella jamás hubiese interrumpido tu meditación.

En breves momentos, presentaciones entópicas inundan tu campo de visión, mientras el modo autista de tu cibercerebro pasa a modo activo y variados datos de la Malla llegan hasta tí para ser filtrados por Ángela que alza la palma de su mano en la que gira el icono de un mensaje nuevo, parapadeando en rojo. Eso significa...

[Mensaje de Firewall. Urgente. Recibido a través del Ojo.]

El Ojo, la red privada de Firewall.
Abrir. Ordenas.

El icono se abre ante tí. La suave voz de Ángela recita:
[Análisis Cuántico: Completado. Verificación: Completada. Desencriptado: Completo.
Leyendo:
Ni hao, amigo. Se precisa urgentemente tu ayuda. Ha llegado a nuestra atención el hecho de que un traficante de arte desconocido en tus alrededores está tratando de vender ciertas obras maestras al mejor postor. Por favor, investiga y valora la naturaleza de la obra de arte y el impacto potencial en la población. Si su calidad es realmente digna de considerarla una obra maestra, haz lo que sea necesario para evitar que la obra de arte caiga en manos de ningún coleccionista privado. Cerca de donde te encuentras podrás reunirte con otros tres colaboradores para ayudarte en tu tasación. Mantennos informados de tus progresos.]

Junto al mensaje aparecen tres imágenes. Junto a cada una de ellas hay una serie de datos.

[Son Gavin Cladwell, Elis Menezes y Zora Möller, los otros tres centinelas asignados para esta célula de Firewall. Todos ellos se encuentran a bordo de la Metamorfosis Extasiada. Paso a mostrarte su localización en la nave y a abrir un canal privado para establecer comunicación directa.]

Usas tus pies prensiles para impulsarte al otro lado del habitáculo y llegas hasta un compartimento que abres con un gesto, revelando tu armadura corporal y la pistola cinética, que examinas y recargas antes de enfundarla en tu cintura.

Porque no son obras maestras de arte lo que vais a buscar. Ese es el código de Firewall para la referirse a armas de destrucción masiva...

Terminas de vestirte y echas una mirada atrás, hacia la muchacha que yace dormida sobre la cama entre las sábanas semitransparentes. La dorada melena bioluminiscente se desparrama sobre su espalda desnuda.

Sonríes mientras recoges tus cosas de una mesilla, sin miedo a hacerla despertar. El sedante que le has inoculado sin que se diese cuenta es muy suave y te ha permitido realizar un registro a fondo y obtener ciertos códigos de seguridad que te serán muy útiles.
La chica baila en el local El Refugio, y ahora estos códigos y tu relación con ella te permitirán acceder a este lugar, donde se reunen los traficantes de reliquias terrestres a los que estás siguiendo la pista. Necesitas tantear el terreno antes de decidir si son adecuados para realizar negocios con ellos o lo suficientemente ambiciosos como para estafarlos...
Por el momento, el primer paso está dado.

Sales del habitáculo a un pasillo y tomas uno de los ascensores gravitacionales que conectan las diferentes partes de la inmensa astronave. Te mueves ligero y grácil. La microgravedad siempre te ha sentado bien. Mientras, accedes a la información nueva que no has podido revisar durante las últimas horas, y te dedicas a actualizar tu agenda personal.

Adda aparece por el borde de tu campo de visión, trayendo consigo nuevas noticias que pueden interesarte y recordándote tus próximas citas de los próximos días.
Te preguntas por qué ha tardado tanto en aparecer. Siempre pasa lo mismo cuando estás con una chica (algo que sucede muy a menudo), puede que sea tu imaginación, pero jurarías que Adda se comporta de una manera un poco distante, como si estuviese algo celosa. Eso sí que tendría gracia...

[Gavin.] Dice de pronto Adda. [Un mensaje a través de El Ojo. Firewall se pone en contacto contigo.]

El mensaje aparece en tu bandeja de entrada, tras pasar los variados filtros que verifican su autenticidad y lo desencriptan. La sonrisa de tu cara se desvanece cuando lo abres y el mensaje se reproduce en audio:

Ni hao, amigo. Se precisa urgentemente tu ayuda. Ha llegado a nuestra atención el hecho de que un traficante de arte desconocido en tus alrededores está tratando de vender ciertas obras maestras al mejor postor. Por favor, investiga y valora la naturaleza de la obra de arte y el impacto potencial en la población. Si su calidad es realmente digna de considerarla una obra maestra, haz lo que sea necesario para evitar que la obra de arte caiga en manos de ningún coleccionista privado. Cerca de donde te encuentras podrás reunirte con otros tres colaboradores para ayudarte en tu tasación. Mantennos informados de tus progresos.

Sientes la sequedad en tu boca. Cierras el mensaje y lo destruyes (procedimiento estandar de Firewall).
Adda, reorganiza mi agenda. Pides a tu musa. Cancela todo para las próximas veinticuatro horas. Abre comunicación con... observas los iconos que van apareciendo en tu campo de visión, los tres agentes de Firewall junto a sus perfiles correspondientes y su posición localizada en la astronave .... Zora Möller, Elis Menezes y Ahmir Sektioui.

Adda toca ligeramente los iconos de los tres centinelas, que pasan del color rojo al verde.
[Canales de comunicación abiertos.] Contesta Adda, después te mira, con expresión preocupada [¿Qué ocurre Gavin? ¿Obras maestras?]

Por supuesto que no. Adda se ha dado cuenta. Obra maestra es el código de Firewall para hablar de armas de destrucción masiva...

Así es como ha funcionado siempre. Puedes vivir el día a día, hacer planes, tener metas, incluso puedes llegar a ser feliz por un breve periodo de tiempo en algún habitat autonomista. Pero nunca puedes permanecer demasiado tiempo ajeno a las fauces depredadoras del universo. El mundo acecha permanentemente y hay que saber captar sus señales si no quieres convertirte en su merienda, un mensaje anónimo o una sombra por encima de tu cabeza, lo mismo da una cosa que la otra, lo importante es saber reaccionar. [Buenos reflejos, camarada. No hace falta que diga que esta acción que nos ocupa es ahora nuestra máxima prioridad. Establece un punto de reunión cercano, con bajos índices de actividad y al menos una ruta de escape. Adjunta las coordenadas  al siguiente mensaje, y envíaselo a nuestros nuevos colegas.]

Hola, espero que  no estéis tan ocupados como para no atender a las viejas amistades. Nuestra amiga del arte no nos perdonaría jamás si se llegara a enterar de que hemos coincidido y no nos hemos llegado a ver. Os habréis enterado de que últimamente anda algo preocupada. ¿Por qué no nos reunimos en un sitio tranquilo y lo hablamos con calma?                 

[Elis, acabo de recibir un mensaje de Zora Möller. Te lo reproduzco.]

Hola, espero que no estéis tan ocupados como para no atender a las viejas amistades. Nuestra amiga del arte no nos perdonaría jamás si se llegara a enterar de que hemos coincidido y no nos hemos llegado a ver. Os habréis enterado de que últimamente anda algo preocupada. ¿Por qué no nos reunimos en un sitio tranquilo y lo hablamos con calma?

Junto al mensaje aparecen adjuntas unas coordenadas. Reconoces el lugar, uno de los miradores de la cubierta superior. Un lugar relativamente tranquilo y apartado...

Koryo te mira, esperando que le des una respuesta para Zora.

[Ahmir.]
Ángela llama tu atención con un nuevo mensaje entrante. La remitente es Zora Möller.

Lo abres mientras terminas de colocarte la armadura corporal.

Hola, espero que no estéis tan ocupados como para no atender a las viejas amistades. Nuestra amiga del arte no nos perdonaría jamás si se llegara a enterar de que hemos coincidido y no nos hemos llegado a ver. Os habréis enterado de que últimamente anda algo preocupada. ¿Por qué no nos reunimos en un sitio tranquilo y lo hablamos con calma?

Junto al mensaje aparecen adjuntas unas coordenadas. Ángela te muestra su localización en el mapa tridimensional de la astronave. Es uno de los miradores de la cubierta superior.

Ángela te mira, esperando que le des una respuesta para Zora.

Todavía te encuentras dentro del ascensor gravitacional cuando la bandeja de entrada se ilumina con un mensaje nuevo.

[Es de Zora Möller.] Te confirma Adda, que lo reproduce en audio para tí.

Hola, espero que no estéis tan ocupados como para no atender a las viejas amistades. Nuestra amiga del arte no nos perdonaría jamás si se llegara a enterar de que hemos coincidido y no nos hemos llegado a ver. Os habréis enterado de que últimamente anda algo preocupada. ¿Por qué no nos reunimos en un sitio tranquilo y lo hablamos con calma?

Junto al mensaje aparecen adjuntas unas coordenadas. Adda te muestra su localización en el mapa tridimensional de la astronave. Es uno de los miradores de la cubierta superior. No se encuentra demasiado alejado de tu posición actual.

Adda te mira, esperando que le des una respuesta para Zora.

[Cuando hayas acabado con el mensaje quiero que me vayas haciendo un listado de los principales proveedores de armas de toda la flota. También quiero que me localices a los principales agentes de subastas, y que accedas a las redes comerciales locales buscando subastas que tengan un precio de salida alto, mayor tráfico de crédito y no demasiados compradores. Pero procura no dejar rastros, camarada, no quiero ir haciendo demasiado ruido de momento. ]

[Mensaje enviado. Esperando respuesta.]

Errico comienza con las labores de búsqueda que le has encomendado. Mientras tú sigues la ruta marcada en el plano de la nave que te llevará hasta el lugar elegido en el menor tiempo posible. Malatesta ha seleccionado como punto de encuentro un mirador en una de las cubiertas superiores.

Con un gesto de la mano, extraes un plano de detalle del general y examinas el lugar de la reunión, marcando todos los accesos y seleccionando la mejor ruta de escape.

Elis maldice en el interior de su traje sellado mientras se desplaza hacia una sección presurizada.

Quedar en el mirador no es buena idea, mejor sería en algun hangar o cuarto de mantenimiento... pero seguramente tendrán problemas para encontrarlo.

Una vez dentro dem los compartimentos habitables de la nave, el traje se transforma en un mono de trabajo ajustado y elástico. Elis aspira una bocanada de aire reciclado y busca a Koryo con la mirada hasta que se materializa apoyada contra los paneles desmontables del pasillo.

Koryo, necesito saber que el mensaje de Zora esta limpio antes de responder, si alguien más aparte de los otros centinelas lo ha recibido o interceptado el lugar de encuentro no será apropiado.

Respira hondo tratando de disipar el nudo en el estómago que se le forma cuando trata asuntos de Firewall y más cosas como esta, es la misma sensación que se produce antes de saltar por una puerta de Pandora, sabes que algo no irá bien.

Si el mensaje está limpio, emite esta contestación: Por supuesto, será un placer vernos y charlar un rato.

La técnico avanza ahora impulsándose con manos y pies en gravedad cero por hábitats que le son sumamente familiares en dirección a la cubierta donde se encuentra el mirador. A la vez su mente maquina a velocidad subsónica desplegando mapas electrónicos y dispositivos de vigilancia del la cubierta superiror. Una vez más le habla a Koryo.

Nena, me temo que Héctor tendrá que esperar.

Dice con una sonrisa mientras Koryo protesta tentándola con una noche de diversión.

Sabes que no puedo hacer otra cosa. Ahora pórtate como una buena amiga y trata de localizar si hay cámaras u otros dispositivos de vigilancia de la propia nave en ese mirador. Tendremos que apagarlos aludiendo una operación de mantenimiento.

-Adda graba esto y envialo a todos.

Cuando la musa confirma que está lista Gavin comienza a hablar imprimiendo un tono seguro y despreocupado en su voz.

-Claro, conozco un sitio agradable donde ponen unos chupitos muy buenos, el dueño es amigo mio nos pondrá una mesa apartada donde hablar tranquilamente, os envio su localización, por supuesto podemos ir a otro lado si os viene mejor, si no hay ningun problema sugiero que dejemos de comunicarnos a distancia, siempre es mas agradable cara a cara.

-Vale cariño envialo, vamos a revisar sus fichas mientras esperamos respuesta.

La meditacion... si algo habia aprendido durante todos estos años de trabajo, viajes, y vida de nómada, era la importancia de mantener el centro. La estabilidad mental, emocional, y espiritual, eran fundamentales para poder sobrellevar una vida como la mia, y para eso la meditacion era imprescindible. Durante esos momentos cuando estaba desconectado de todo, era cuando podia sentir mi verdadera humanidad.

El aroma a liliums llega a mis sentidos de forma tan fresca y vivida que hasta podia visualizarme acercando mi rostro a un ramo de flores con surtidos colores.

Entonces abro mis ojos y la veo a ella, podria llamarla mi unica familia pero trato de no hacerlo para mantener los sentimientos a raya, con una flor rosada decorando sus cabellos por sobre la oreja izquierda... la misma flor que segundos atras se encontraba en el ramo que habia visualizado. Hay veces cuando de verdad dudo que Angela solo este en la Maya y creo que ha pasado a una existencia individual dentro de mi propio Ego... pero luego descarto la posibilidad para no volverme loco y regreso a la realidad.

No habia mas tiempo para meditar, algo urgente habia pasado sino Angela no me hubiera molestado durante mi trance. Y efectivamente asi era, un mensaje de Firewall... justo cuando estaba decidiendo que trabajo elegir parece que finalmente fui elegido por uno. El mensaje era claro, asi como el procedimiento a seguir, verifique la lista de mis compañeros asignados y sus caracteristicas basicas mientras me hacia con mi armadura personal y mi arma.

[Angela, cual de todos mis compañeros esta mas cerca?]

Ya tenia el arma cargada y mi equipo preparado, queria ver con quien puedo hacer contacto inicialmente... preferia acercarme personalmente antes de enviar un mensaje por la red. Por algun motivo me gustaba aprovechar las ocasiones cuando podia trabajar en equipo.