Partida Rol por web

Activo el intercomunicador mientras me dirijo hacia el blindado.

- Aquí el agente Murphy -contesto- Vamos de camino. Asegúrelos con correas y lo que tenga más a mano. No los suelte hasta que estemos allí, repito, NO LOS SUELTE.

Hago un gesto a los demás con la mano para que me sigan, parece que nuestro curso de acción inmediato está claro.

De nuevo en vuestros vehículos, os movéis a través de la ciudad fantasma de Hamilton, sepultada bajo la nieve y el hielo. La tormenta parece no tener intención de cesar y la temperatura parece haber detenido su descenso al alcanzar los -40º.
Llegáis al hospital sin incidencias y una vez en el interior os reunís con la Dra. Schultz en la misma sala donde la dejásteis. Sobre una de las camas yace el cuerpo de Wong, malherido por las balas de los policías vacuizados y que sigue en estado grave. Uno de esos policías, el que pudisteis capturar, yace en un rincón, atado y amordazado, observando como si la cosa no fuera con él. Y sobre tres camillas, sujetos con correas de seguridad, veis al Sheriff Anderson, su otro ayudante Fischer y la recepcionista Beth harbury. Los tres están conscientes pero claramente confusos por haber despertado de tan largo sueño y encontrarse atados en una sala de hospital.
La Doctora os sonríe y se aparta, dejando el asunto en vuestras manos.

Me acerco a los encamillados y y sin decirles nada pego un tirón para verificar las correas.

-¿Seguro que están bien? -lanzo la pregunta al aire- ¿recuerdan algo o padecen algún tipo de amnesia?

Finalmente me acerco al que está en el suelo y le digo:

-¿Y usted no tiene nada que contarnos?

- Sea cuidadoso, señor Kosmoss - dice el doctor al verle tirar de las correas - Estas personas no han recuperado aún todas sus fuerzas. Diganme - El doctor se acerca a ellos, sacando el medallón que encontraron en el bunker - Alguno de ustedes reconoce ésto?

Me sitúo cuidadosamente tras el doctor, atento a cualquier movimiento por su parte... no hemos llegado hasta aquí para permitir que ese talismán caiga en manos del Enemigo.

- Doctor -le comento mientras le aparto ligeramente con el cañón de mi arma- No se acerque a ellos, por favor.

Dafne se dirige a la doctora, al ver que los pacientes continúan aturdidos.

- Magnífico trabajo - le dice - y finalmente ¿en qué ha consistido la cura? ¿se sabe si fueron vacuizados? - y señala a los pacientes. Entonces, se percata que la mujer con problemas psicológicos no está en esta sala - Por cierto, ¿ha tenido algún progreso Rachel? - en ese momento, Dafne se fija en que el doctor está enseñando ese extraño medallón a los recién despertados - ¿Sabrán algo?... - piensa. La mujer se asusta cuando observa que Alex apunta al doctor LeGoff, llevado por un exceso de precaución - Tranquilo, Alex. El doctor sólo quiere echar una mano - le intenta tranquilizar.

El arcanotécnico asiente satisfecho con el trabajo de la doctora: al final no ha resultado estar vacuizada. O eso parece en un principio. Observa a los tratados y les sonríe. De momento están atados, así que en caso de ser un vacuizado violento, no podrán hacer nada. Aunque no parece ser el caso. O faltaban varias piezas del rompecabezas, o WJ no acababa de encajarlas bien. Había muchas preguntas en su cabeza y pocas respuestas. De todos modos, y en silencio, esperó a que las preguntas de sus compañeros fuesen contestadas para ver si arrojaban algo de luz al asunto.

La doctora os observa con expresión algo atónita. Al parecer vuestros métodos no le parecen lo más adecuado para unos pacientes que acaban de salir de un coma, pero a pesar de eso guarda silencio y espera a un lado.

El Sheriff Anderson trata en vano de moverse y tras mirar un rato el amuleto, niega con la cabeza.
-Quienes... Quienes sois? -Acerta a preguntar

Cierro los puños y el crujido del cuero se escucha entre el silencio de la sala:

-Quien debería contestar a las preguntas es usted y no nosotros. -doy un paso hacia el aun con los puños cerrados- ¿recuerda algo desde el momento de antes de despertarse aquí? -miro el medallón de reojo- ¿ha reconocido esa reliquia? ¿para que sirve y cómo se utiliza?

Abrí y cerré los puños varias veces.

Observo el despliegue de diplomacia de mi superior y contengo un suspiro de resignación.

WJ escucha el comentario del militar y se queda sorprendido, aunque admitía que era algo lógico hablar como lo hizo, no era nada afortunado. Hasta él podía verlo. Había escuchado como había hablado? De repente como si de un rayo de iluminación le hubiese golpeado la cabeza, su cabeza se mueve hacia atrás y su cara hace un gesto de sorprendido, como si se le hubiese pasado algo por la cabeza.

- Podría ser que...- Dijo para si mismo. De repente se fue al policía a hablarle.- Oye acompáñame a fuera, que necesito algunas herramientas... No deberíamos andar solos.-dice en última instancia sin intención de parar.

Tras ir al blindado y recoger sus cosas. WJ vuelve al hospital con sus cacharros. Aún no lo había hecho, pero quedaba por construir algo para medir las interferencias y poder llegar al centro. Y quizá el medallón fuese el foco de ellas.

Avanzo lentamente y me sitúo frente a los heridos.

- Sheriff, soy el agente Murphy, estuve destinado aquí hace algunos años -saco mi identificación con foto y se la muestro- Espero que me recuerde. Nos gustaría hacerle algunas preguntas.

Con un poco de suerte solo me habrá escuchado a mi.

Ante el arrebato de ira del señor Kosmoss, Dafne se inquieta un poco. Como persona dotada con la capacidad para conocer el carácter de las personas y comprender las causas de su comportamiento, la psicóloga no puede más que pensar que se trata de un cuadro de TEI, trastorno explosivo intermitente, posiblemente causado por agresiones a temprana edad, o alteraciones en los niveles de serotonina. Independientemente de la causa de ese comportamiento, estaba claro que no podía perjudicar a la investigación. Así que aprovechando la intervención de Murphy, se acercó al piloto.

- Ya nos encargamos nosotros de interrogarles, Kosmoss - le dijo con actitud conciliadora. La mujer posó su mano sobre hombro del traje del piloto, instándole a apartarse de los heridos - Creo que podrías ayudar a WJ-35 con eso que se lleva entre manos. Y ya de paso, le echas un ojo - Dafne espera que el piloto reflexione y salga a ayudar al arcanotécnico.

Instintivamente subo la mano y entrelazo los dedos con los de Dafne para dejas que mi mano se deslizase despacio, y sin llegar a mirarla directamente dije en voz mas baja:

-Parece una opción correcta. Vayamos a ver que trama el chico.

Se escuchó el crujido de las botas cuando giraban y el tintineo de los tacones que comenzaban a caminar.

-Empiezo a estar cansado, igual me va bien tomar aire y sentarme a ver que fabrica.

El Sheriff observa la identificación de Murphy durante unos segundos y parece calmarse.
-Murphy, hijo... ¿Qué ha pasado aquí? No recuerdo nada.

La doctora aprovecha la pausa para responder a Dafne*
-Les he administrado el antídoto para el gas que inhalaron, pero el efecto no es inmediato. Pasarán todavía algunos minutos confundidos e invadidos por el sopor. Afortunadamente no están vacuizados ni tienen otro daño más que una ligera hipotermia. Se pondrán bien. Rachel quiso ingresar de nuevo en su celda aislada de forma voluntaria. Estará allí si la necesitáis.

Sigo los movimientos de mis compañeros sin perder detalle. Es obvio que cada cual tenemos nuestras habilidades y somos expertos el algo, de eso se trata, de formar un equipo capaz y eficiente que este preparado para afrontar todo tipo de contratiempos.
Dejo que mis compañeros se ocupen de sacar informacion a los supervivientes, me mantengo al margen sin bajar la guardia observando y escuchando todo lo que se dice. De momento todo va bien. Alguno de ellos nos dara alguna pista sobre lo ocurrido.

Con un sonido de presión aliviada y unos pequeños chorros de gas, mi máscara se desprende para que el sheriff pueda ver mi cara. Espero que eso le ayude a tranquilizarse.

- Sí, soy yo, sheriff -intento sonreír- No tenemos mucho tiempo, así que le pido perdón si resulto brusco. Formo parte de un grupo de reconocimiento que está intentando averiguar qué es lo que ha ocurrido en la ciudad... ¿lo recuerda? Una ola de frío que ha congelado a la población... tal vez una criatura de tamaño monstruoso... incluso hemos sido atacados por algunos agentes vacuizados. Por eso tomamos tantas precauciones ¿puede ayudarnos?

WJ le da un par de maletines a Jack llenos de sus herramientas y el coje su portátil y algunas cosas más. Cuando vuelve, se sienta en el suelo, en algún lugar con enchufes. Es entonces cuando, una vez encendido el portátil, empieza a construir un cachibache electrónico a partir de objetos abiertos que tenía aquí y allá. Moviéndose de aquí para allá, enchufando soldadores, fuentes de alimentación y midiendo con varios instrumentos, WJ está absorto construyendo algo que, en algún momento, empieza a conectar al ordenador.