Partida Rol por web

El templo del devorador del sol

2. La Baronía de Cromm

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14/07/2019, 23:00
Baronesa Wynne Cromm

Cabalgáis hacia el sur, pasando granjas y cabañas. Bajos los cielos tormentosos, la Baronía de Cromm es un castillo sombrío, poco más que un bajo alcázar rodeado por un muro exterior. Parece que los muros han sido reparados muchas veces a lo largo de los años.

Galopando a través de un campo abierto que lleva hacia la aldea, no veis o escucháis signo de combate. Los truenos resuenan en el cielo mientras os acercáis, la lluvia se convierte en bruma, mientras un fresco viendo del mar sacude vuestras capas.

Las puertas de la Baronía de Cromm se abren según os vais acercando. Tras ellas podéis ver un granero con un pozo, unos establos, un corral y un campo de entrenamiento. El alcázar en si es una simple casa fortificada que parece relativamente nueva. Veis una hilera de seis cuerpos tapados con lonas en el patio. También veis otros seis soldados haciendo guardia en el muro occidental.

Una mujer con armadura de unos treinta y pico años sale de la casa, acompañada por otro hombre con armadura que porta un brazo en cabestrillo. Según os acercáis, la mujer se quita uno de sus guanteletes y extiende la mano a Sir Isteval.

-¡Bienvenido a la Baronia de Cromm!

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14/07/2019, 23:07
Sir Isteval

-Baronesa Wynne -replica el caballero- ¿No me diga, mi señora, que ya ha dado muerte y enterrado al dragón?

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14/07/2019, 23:08
Baronesa Wynne Cromm

-Me temo que no -contesta de forma seca- Ya no soy tan joven como antes. Pero basta de eso. Mi sargento ha sido herido con un arma envenenada

 

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14/07/2019, 23:09
Sir Isteval

-Dejad que os presente a estos valientes, son algunos de los que han venido valientemente para defender la Baronia -dice Sir Isteval señalandoos a vosotros

La Baronesa Wynne presenta a su segundo al mando, el capitán Falke.

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14/07/2019, 23:19
Vakazara

- Perdonad, mi señora. Mi nombre es Vakazara, clérigo y guía del Cónclave Celeste en el Vado de la Daga, si me dejáis ver a vuestro sargento creo que podría ayudarle, si la diosa Luna lo ve conveniente. Éste es mi hermano, Vakaipa, magistrado y maestro del Cónclave, su sabiduría también será de gran ayuda. - La tiefling había escuchado toda la conversación, hasta saber lo del veneno. Sin embargo ésto hizo que algo no cuadrase.- Disculpad mi pregunta... si luchaban contra un dragón, ¿quién manejó ese arma envenenada?

El asunto parecía extraño, no veían desperfectos importantes propios de un ataque así, o al menos como ella había imaginado que sería, y luchar contra un ser armado no tenía mucho que ver con la imagen que tenía de una gran bestia.

La dama que tenía delante parecía mujer con arrojo, quizá una guerrera cuando era más joven, pues ahora mantenía la dignidad de quien luchó hace tiempo. Sea como fuere de extraño lo del veneno, parecía preocupada por sus hombres. Eso era algo que a la clérigo le agradó.

Sin embargo echó una mirada de duda a su hermano, no sabía si él pensaba lo mismo, o quizá sabía más sobre dragones y entendía qué había ocurrido en la baronía.

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15/07/2019, 13:05
Vakaipa

Vakaipa debía haber estado estudiando las murallas del castillo cuando su hermana mencionó su nombre y atrajo su atención, pues pareció sorprendido por un momento de participar de aquella interacción con los nobles.

Éste es mi hermano, Vakaipa, magistrado y maestro del Cónclave, su sabiduría también será de gran ayuda. 

En ese momento miró al frente y levantó su báculo en gesto formal, saludando a los presentes y dejando que los demás se presentasen antes de añadir a las preguntas de su hermana pero en aquel momento se encontró con los ojos de ella, esa mirada de ceja alzada cargada de significado. 

Piensa, hermano mío, tú que eres tan inteligente y apuesto -conjeturó Vakaipa que Vakazara trataba de decirle mentalmente- ¿Crees que debería tirarle los trastos a la Baronesa Wynne Cromm? ¿Sabes algo de dragones y venenos? ¿Debería probar otro tinte de pelo?

A todas aquellas preguntas mentales adivinadas por el mago respondió negando con la cabeza y cruzando y descruzando las manos, no queriendo decir nada en alto todavía y ganando tiempo para consultar sus libros.

- Tiradas (1)
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15/07/2019, 16:08
Ilvor

El trayecto no fue nada tortuoso, por el contrario, iniciaba a recordar esos sentimientos de libertad que tenía al galopar entre el bosque y las planicies de su hogar.

Al llegar al lugar de destino, observaba con interés los cuerpos que yacían tendidos, preguntándose cómo habría pasado y cuáles serían sus últimos recuerdos en este mundo.

Al llegar al Baronesa, no pudo evitar y la duda de su compañera, la cual, hacía mucho sentido, rápidamente retorno su mirada a los cuerpos inertes.  

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15/07/2019, 23:15
Giacomo Biancarella

A pesar de la lluvia, el trayecto no fue especialmente desagradable. Claro, que cualquier cosa que pusiera distancia entre el gremio de Luskan y él, era buena cosa siempre. Cuando llegaron a la baronía, al ver el estado en el que se encontraba, Giacomo empezó a creer que ciertamente había pasado un dragón por allí. Las estructuras destruídas, los hombres heridos... Mala cosa, un dragón adulto le quedaba un poquitín grande al bufón. Pero bueno, se había apuntado ya, lo mínimo que podía hacer era ver cómo de mal estaban realmente las cosas.

Cuando la Baronesa Wynne se presentó ante ellos, GioGio saludó con una elástica reverencia y aguardó a su turno antes de hablar con ella.

 -Encantado de conocerla, Baronesa. Mi nombre es Giacomo Biancarela y he de decir que es un honor y un placer comprobar que la Baronía ha resistido al ataque de un dragón en tan buenas condiciones. Y me vais a permitir añadir una pregunta a las que han realizado mis compañeros de viaje, ¿por casualidad habéis visto a una bella elfa oscura por aquí? Medirá más o menos esto- Giacomo hizo un gesto con la mano, poniéndola a la altura de una drow ligeramente más alta que la media -Tiene el cabello blanco y sedoso y va ataviada con ropa cómoda de bailarina. ¿Os suena por un casual?

En el fondo el bufón deseaba que le dijera que no, porque eso significaría que su Cuchi-Cuchi había estado lejos y a salvo durante el ataque. Ojalá fuera ese el caso...

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16/07/2019, 23:50
Director

Giacomo y tú os separasteis para elegir el mejor lugar donde comenzar de nuevo, mientras él fue al Vado de la Daga, tú elegiste la Baronía de Cromm, ambos cerca, por lo que no tardaríais en reuniros, pero al llegar a la Baronía de Cromm puedes ver como el hedor a muerte lo inunda todo.

Las puertas de la Baronía de Cromm se abren según te vas acercando. Tras ellas puedes ver un granero con un pozo, unos establos, un corral y un campo de entrenamiento. El alcázar en si es una simple casa fortificada que parece relativamente nueva. Ves una hilera de seis cuerpos tapados con lonas en el patio. También ves otros seis soldados haciendo guardia en el muro occidental.

Estás a punto de preguntar que ha pasado o de darte media vuelta y dirigirte a Vado de la Daga cuando las puertas vuelven a abrirse, en esta ocasión entra una comitiva de unos 30 hombres, tu sorpresa es mayúscula cuando con ellos va Giacomo.

Después de unas palabras de la baronesa Wynne que no alcanzas a oir te acercar, para escuchar a Giacomo hablar:

 -Encantado de conocerla, Baronesa. Mi nombre es Giacomo Biancarela y he de decir que es un honor y un placer comprobar que la Baronía ha resistido al ataque de un dragón en tan buenas condiciones. Y me vais a permitir añadir una pregunta a las que han realizado mis compañeros de viaje, ¿por casualidad habéis visto a una bella elfa oscura por aquí? Medirá más o menos esto- Giacomo hizo un gesto con la mano, poniéndola a la altura de una drow ligeramente más alta que la media -Tiene el cabello blanco y sedoso y va ataviada con ropa cómoda de bailarina. ¿Os suena por un casual?

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17/07/2019, 00:04
Director

Te pones a pensar, a recordar cada libro que has leído sobre dragones, pero no recuerdas ningún dragón venenoso

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17/07/2019, 00:16
Ashara D'ress

De entre la gente allí presente, se escucha una carcajada que helaría la sangre de muchos -Reconocería esa sensual voz y ese musculoso cuerpo hasta en le mismísimo infierno- se abrió paso entre la gente para llegar a unos metros de él y poniéndose una mano en la cintura, sonrió diciendo -¿que haces tan lejos de tu circo payasito?- le sonrió cómplice. Realmente cuando vio a Giacomo y preguntando por ella, se le olvido todo el olor a muerte que había visto y percibido allí, ahora había cosas más importantes, que requerían toda su atención.

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17/07/2019, 00:22
Vakaipa

De entre la gente allí presente, se escucha una carcajada que helaría la sangre de muchos -Reconocería esa voz y ese musculoso cuerpo hasta en le mismísimo infierno

Aterrado ante aquella voz en alto y las implicaciones de lo que estaba diciendo aquella mujer, el tiefling Vakaipa apretó el brazo de su hermana Vakazara para guiar su mirada hacia la drow; si se trataba de una de sus amantes era imprescindible reaccionar cuanto antes y salir de allí por patas no fuera a estar compinchada con ---Ah, que no, que a quien conoce es a Giacomo Biancarella--- El alivio que aquello le supuso le hizo brotar una lágrima de alegría.

Para quien le viera reaccionar así fuera del contexto de los mellizos pareciera que uno se emocionase ante aquella aparición dramática y llamase la atención de la otra para que no se perdiese la inminente respuesta del colorido individuo.

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17/07/2019, 09:37
Nube

El último en incorporarse al grupo fue Leo, se había entretenido en el establo saldudando a los caballos. Le gustaban los caballos, acarició a un par de ellos, incluso rodó un poco el Heno que estaba fuera del alcance de un semental particularmente gordo. Por lo visto también existe la buena vida entre los caballos.*

Llego casi corriendo, dando una mala imagen de novato**, hasta juntarse a las personas delante de los cuerpos tendidos y cubiertos con su último sudario. ¿Sólo seis? menuda decepción. Además no había rastro del dragón a simple vista, todo parecía demasiado común.

Por costumbre, tiene que decir de nuevo su nombre a personas que seguramente no verá más y tendrá que volver a decir su nombre a otras personas... que aburriemiento... suerte de tener un nombre tan corto.

-Mi nombre es Leo- levanta la mano recta a modo de saludo, tiene dos mochilas a las espalda, un arco largo, escudo, hachas... va con muchas cosas pero se las arregla para moverse bien. Bien podría parecer el escudero de alguien si no fuera por la espada en la cintura.

Notas de juego

* Me fijo si los caballos han intentado escapar o han pasado miedo, haciéndose daño.

**Mi carisma es bajísimo xD

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17/07/2019, 12:36
Vakazara

El gesto de su hermano hizo que la tiefling se sobresaltase, una elfa oscura. La sensación de peligro aumentó hasta que la mujer se acercó a uno de los miembros de la improvisada expedición, un hombre disfrazado de mimo. Vendría a sacar algo de dinero aprovechando la fiesta, aunque es raro que entonces hubiera ido con ellos hasta la baronía.

A Vakazara todo este asunto cada vez le escamaba más.

Susurrando por lo bajo se acercó a su mellizo.- Deberíamos vigilar a esa mujer por si está aquí por nosotros.

Al volver a relajarse saludó a Ilvor con un gesto, el centauro había ido con ellos. Siempre se mostraba presto a ayudar cuando algún problema surgía en el pueblo, y parecía que no iba a perderse algo tan grande como el ataque de una gran bestia. Sabiendo que contaban con la ayuda de la criatura quedó un poco más tranquila, aunque puede que ninguno de nosotros sea muy valioso contra un dragón de verdad.

 

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19/07/2019, 14:24
Baronesa Wynne Cromm

Disculpad mi pregunta... si luchaban contra un dragón, ¿quién manejó ese arma envenenada?

-El dragón no estaba solo, por lo menos no siempre lo estuvo. Un enorme dragón negro vino volando desde la Ciénaga del Lagarto y aterrizó en el patio. Se presentó como Thoss Fyurnene, el Devorador del Sol, Elegido de Talona. Después de mandar a un sirviente a Vado de la Daga me reuní con el dragón para parlamentar con él. El dragón demandó un tributo a cambio de dejar la baronía en paz, me pareció un trato justo, ¡era un dragón! Habría muchas bajas si luchabamos con él, así que le entregué el tributo. Pero no cumplió con su palabra, mientras se alejaba una gran fuerza de hombres lagarto atacaron el alcázar desde el oeste, mis soldados y yo impedimos que entraran dentro, pero a Durenn consiguieron darle con un dardo envenenado.

  si me dejáis ver a vuestro sargento creo que podría ayudarle

La baronesa hace un gesto a uno de sus soldados para que lleve a ambos hermanos a donde está su sargento

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19/07/2019, 14:32
Director

Os llevan dentro, hacia una cama donde un soldado se retuerce en la cama, está gravemente herido y febril, si no hacéis algo por él, seguramente no pase la noche

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20/07/2019, 12:21
Giacomo Biancarella

No es que las explicaciones de la baronesa no fueran interesantes, pero el escuchar aquella voz hizo que Giacomo se girase para contemplar a la elfa oscura con la qeu había estado deseando reencontrarse. Con su tranquila sonrisa habitual, el bufón se acercó a la drow, rodeando con sus brazos la esbelta cintura de la elfa.

 -Buscaba a la drow más guapa del reino.- le dió un toquecito cariñoso en la punta de la nariz -¿Cómo estás, Cuchi-Cuchi? ¿Me has echado mucho de menos?

Ahora que ya volvía a tener a su compañera con él, ya podía ocuparse de lo demás, ya fueran ataques de dragones o flechazos envenenados.

 -¿Hombres lagarto? Sí que suena a subordinados que seguirían a otra criatura escamosa más grande. Pero también es cierto que es una amenaza que con tiempo y recursos se puede eliminar de forma más sencilla que un dragón negro adulto.

Porque aunque él nunca hubiera visto un dragón en persona, podía hacerse una idea de lo grandes y fuertes que podían llegar a hacerse. Ventajas de tener hermanos a los que les gustaba leer libros sobre criaturas mágicas.

 -¿Cómo veis la amenaza de los hombres lagarto, Baronesa? ¿Creéis que podrían volver a atacar dentro de poco?

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20/07/2019, 15:00
Vakaipa

- Ya sabía yo que no me sonaban dragones con veneno aunque hay wyverns con espolones venenosos y venenos célebres como el aliento de dragón o la sangre de dragón, pero son denominaciones que nada tienen que ver con la criatura en sí y... -ver que aquel hombre se debatía por su vida hizo que la verborrea que estaba soltándole a su hermana le pareciese trivial, había que tratar de ayudarle- ¿Crees que puedes hacerlo, Kazi? ¿Está ella contigo?

Ese 'ella' que de pequeños había sido una chanza hacia la amiga imaginaria de su hermana, esa luna en el cielo que no podía existir cuando alrededor sólo había cavernas, cadenas y fosos de lava, era la misma Selûne por la que ahora Vakaipa preguntaba. Si ya una vez salvó su vida de enfermedad quizás ahora tuviera a bien proteger a aquel hombre del veneno.

- A una palabra tuya puedo dormirle, uno siempre se recupera mejor de estas cosas descansando en lugar de sacudiéndose -le ofreció mientras pasaba una hoja tras otra de su libro y conjuraba chisporroteos en el aire para tratar de informar a su hermana de todo lo que pudiese- ¿qué necesitas de mí?

- Tiradas (2)

Notas de juego

  • Si me pides dormir uso el hechizo
  • Lo que saque de las tiradas te lo cuento
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20/07/2019, 17:36
Ashara D'ress

Sonrió ampliamente al bufón y ronroneo -sabes que si ¿como no echarte de menos?- luego volvió su atención a lo que allí se decía y escucho algo sobre venenos -Seguramente con eso pueda ayudar, si hay alguien que usa armas envenenadas son los míos, conocemos muchos venenos, aunque si ese dragón dijo ser siervo de Talona , lo del veneno no es nada extraño, teniendo en cuenta ser la diosa de la ponzoña- dijo a la Baronesa y miro a los hermanos tiefling.

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20/07/2019, 19:54
Vakazara

Mientras llegaban hasta los aposentos donde habían dejado al sargento, Kazi pensaba en aquellos hombres lagarto. Ahora tenía más sentido lo que habían visto.

Lo primero, y aunque esperaba un ataque devastador, es que nunca hay que fiarse de un dragón, como había escuchado algunas veces. Lo segundo, que no se trataba de una bestia tonta que se movía por instinto, tenía un plan y había utilizado hasta tropas para llevarlo a cabo.

Estaba claro que algo buscaba en la baronía.

No le dio tiempo a preguntar por ese tributo pedido, pues los llevaron rápido donde estaba el herido, pero lo haría en cuanto pudiera.

Observó al sargento, el dardo había penetrado profundamente dejando una fea herida, pero no sabía a qué veneno se enfrentaba. Esperó a que su hermano obtuviese alguna información al respecto, pues a partir de ahí podría actuar si es que podía hacer algo.

Necesitaban a una sanadora, aunque quizá ella podría paliar los efectos antes de que esa figura llegara, si es que en la baronía o los alrededores se encontraba alguien así.

- Si, está conmigo.- Puso los ojos en blanco y comenzó a recitar una larga plegaria.- Señora de la noche, que el poder de tu luz permita a este hombre frenar su agonía. Te invoco como sierva y discípula, como hija y amante. Usa mis manos como instrumento de curación, haciéndome partícipe de tu poder y del gozo de tus enseñanzas...

Cuando terminó, una luz recorrió el cuerpo del hombre, restaurando algunos cortes y restableciendo su vigor. Aún no sabía si había sido efectivo contra el veneno, pero esperaba no tener que hacer uso del ofrecimiento de su hermno para que el soldado dejase de sufrir dolor.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Curar heridas por si puede estabilizar el veneno. Si no es así al menos sentirá algún bienestar hasta que alguien más versado pueda tratarlo.

Son 7 puntos recuperados.