Partida Rol por web

Foster tira la mesa para protegerse del francotirador. Avisa a la doctora Brennan para que se tire al suelo mientras desenfunda su arma para poder eliminar a la agente rusa. Su grito provoca que varias palomas rompan a volar alejándose del inminente campo de batalla.

La doctora camina hacia la rusa y escucha claramente las palabras de Foster y debería hacer algo o lanzarse a por ella y esperar derrotarla físicamente o tirarse al suelo y esperar que Foster la elimine de un par de disparos. Mientras camina hacia ella puede ver que la piel de la agente rusa empieza a brillar levemente, en el sueño su piel hacía lo mismo y luego estallaba. No es que vaya a poner una bomba en la cafetería, es que ella es la bomba. 

Mientras estáis tranquilamente hablando de la incursión nocturna decidís volver al hotel y hablar con Seoane y Cástor. En ese momento veis una bandada de palomas salir volando de lo que parece una de las calles más próximas. Un grito potente se escucha entre el eco y sobre los ruidos de los poco coches que pasan por la zona:

- JUDDITH TÍRATE AL SUELO AHORA MISMO...HAY UN FRANCOTIRADOR... 

Es la voz de Foster y están en aprietos. Está en una de las calles más cercanas, pero os llevará casi un minuto llegar a ellos corriendo...

Nos hallábamos en camino de vuelta al hotel cuando, de repente, resuena en las calles la voz de alarma de muestro compañero norteamericano.

Miro con gesto de sorpresa a Tierno y rápidamente, me llevo la diestra a la funda sobaquera en la que llevo mi Glock.

Me aproximo a Tierno y digo.

¡Estamos en problemas indudablemente!. Y a mi me llevara demasiado tiempo llegar hasta el hotel y cambiarme. No nos quedan muchas opciones.

Tratare de llegar hasta la calle lo antes posible. Supongo que si ese franco tirador ve entrar a un individuo armado corriendo hacia su objetivo, me tomara como blanco. Cuando dispare sobre mi, intenta deducir su posición por el humo del disparo. Ha de estar en una localizacion lo bastante alta como para tener una buena disposicion de la zona. ¡Ve a por el en cuanto lo tengas localizado!.

Y sin mas dilación, pues he soltado todo esto con suma rapidez, desenfundo mi arma y corro hacia el lugar de donde ha surgido el grito.

Naturalmente al llegar, presto toda mi atención a los lugares elevados desde donde un franco tirador, puede estar apostado. Y por supuesto, lo primero que hago al llegar a la calle, es tratar de cubrirme con lo que pueda.

Asiento al inglés y, mientras me apresuro hasta la fachada inmediata a la esquina que hay que doblar, mi figura se va transmutando. Con un par de golpes precisos, me descalzo de las zapatillas flexibles y repto hacia las alturas, y luego en paralelo sobre la acera, hacia el lugar de la conmoción, sorteando alféizares y balcones, impulsándome a toda la velocidad de la que soy capaz, adhiriéndome a las cornisas musgosas y cubriendo de un salto las bocacalles, hasta alcanzar los tejados.

En cuanto me asome a la calle en cuestión, estaré atento a las detonaciones del asesino.

Si algo se le daba bien, era pensar rápido. En las pocas ocasiones en las que junto a Booth había tenido que reaccionar deprisa por un inminente peligro, nunca se había bloqueado. Y después de la experiencia con ese tipo que se hacía llamar "Jack", era mejor actuar y pensar después.

- ¡Foster, el francotirador va a por tí! - le gritó, esperando que confiara en ella y le dejara a la chica en sus manos. Se lanzó a la carrera para tratar de derribar a la muchacha antes de que hiciera saltar por los aires a ella y a la cafetería.

La doctora actúa sin pensar mucho en los resultados de sus actos. No piensa que la agente rusa lo que quiere es que ella esté cerca para detonarse y matarla. Foster lo ve claramente pero no puede hacer nada ya que ahora la doctora dificulta su campo de visión para disparar. El francotirador espera que este se mueva para poder eliminar al americano.

La doctora impacta contra el cuerpo de la agente rusa y la logra derribar aunque no parece haberle hecho demasiado ya que ella amortigua su caída rodando y poniendo a la doctora debajo suya. La tiene bien agarrada y se prepara para detonarse a sí misma y eliminar a la brillante doctora. Foster tiene un blanco claro de la espalda de la agente rusa aunque no sabe si lograra vivir lo suficiente para poder matarla ya que el francotirador ruso ya está preparado...

En la esquina acaba de torcer el británico Richard Turner corriendo con un arma en la mano...corre en zig zag para evitar ser un blanco fácil para el tirador.

El británico sólo ve a gente correr despavorida, a dos mujeres en el suelo y medio tapadas por una mesa blanca típica de terraza tras la que puede vislumbrar una pistola que podría ser la del soldado americano. Rafael está detrás del británico esperando a ver donde se encuentra el tirador para localizarlo y proceder a eliminarlo.

La situación parece complicada, la agente rusa está enzarzada en una pelea con la doctora Brennan. El francotirador tiene atrapado a Foster y acaban de llegar los refuerzos. Richard Turner corre en su ayuda intentando evitar en la medida de lo posible al francotirador del cual no conoce su posición. En cambio Rafael se mantiene atento para ver desde donde dispara el agente ruso.

El francotirador dispara contra el capitán Foster, ya que llevaba apuntando un tiempo hacia ese objetivo. Dispara contra la mesa que es una pobre cobertira. El disparo impacta en el hombro del soldado norteamericano con toda su potencia, podéis ver como la sangre salpica la mesa y el suelo. Se escucha un grito de dolor del capitán Foster. La mesa ha amortiguado parte de la explosión de la bala pero el daño es considerable.

Richard Turner sabe que el francotirador está detrás suya ya que vio el punto de entrada del disparo. Rafael lo ve claramente, está a unos quince metros de su posición en horizontal y dos metros o tres a mayor altura. El es edificio que hace está enfrente del que está él aunque el suyo hace esquina. Si tiene suerte podría llegar con un simple salto...

El disparo me alcanza de lleno y no puedo hacer nada salvo gritar de dolor. Con el arma en la mano disparo contra la espalda de la agente rusa que pelea con Juddith. Veo que el disparo le impacta en la espalda aunque no sé que daño le he podido causar. Tras efectuar el disparo me desmayo debido al dolor.

El golpe de la doctora es fuerza y acierta de pleno pero la dureza de la agente rusa es mayor. El entrenamiento o los poderes que posee la hacen más dura de lo que la doctora habría pensado. Siguen peleando sobre el suelo de la calle sin visos de terminar rápidamente.

La agente rusa parece que empieza a concentrarse de nuevo para cargar su poder, la doctora comprobó que no es un poder inmediato...parece que necesita cargarse con algún tipo de energía antes de estallar. La duda que tiene es ¿cuánto tiempo necesita? Foster rompió su concentración con un disparo. Puede que los compañeros de la doctora tengan mejor suerte si logran disparar contra la rusa de nuevo. 

Empiezas a notar mucho calor en tu cuerpo, ves como la rusa empieza a tintinear levemente. Pero el calor no proviene de ella, te duele la cabeza un poco y notas que tu nariz sangra sin haber recibido un golpe todavía. Notas algo de miedo en los ojos de la rusa que te está mirando fijamente pero no sabes a qué es debido... 

Sigues notando que tu temperatura aumenta y notas que posees más fuerza en ese momento ya que la rusa se separa de ti un poco más. Ella sigue intentando pegarse a ti pero no lo logra. Puede que lo de ser especial te salve de esta...

En el ángulo de la calle por la que acudimos con su perpendicular –y letal escenario ahora- me refreno, conteniendo el aliento; a mi izquierda, hacia la mitad de la calzada, frente a una cafetería, a Foster acaban de darle un tiro, mientras trataba de acertar a una desconocida con la que la doctora está enzarzada. Turner ya se ha adentrado en la bocacalle, a una docena de metros por debajo de mí, pero ha quedado completamente expuesto –ahora lo he visto claro-, puesto que le da la espalda al francotirador, situado en una fachada que domina el cruce, a mi derecha, casi justo enfrente de mí y desde la que se controla la calle concurrente; la ventana en cuestión está un par de metros por encima de mi nivel y, además, tendría que sortear una distancia de seis o siete metros de un salto… Aunque siento la tentación de superar la distancia y alcanzar la ventana mediante un salto, se me ocurre que podría quedar yo mismo en posición vulnerable. Niego con la cabeza, no es momento de heroicidades suicidas.

Cojo carrerilla –confiando en que haya centrado toda su atención en el inglés y no vaya a cazarme en cuanto surque los aires- y doy un salto para adherirme a la acera opuesta. Avanzaré entonces en diagonal para colocarme a un lado de la ventana, maldiciendo que el asesino aún tenga la oportunidad de otro disparo. Que dios les ampare.

Y justo en el momento en el que aparezco en el lugar de los hechos, he aquí que siguen pasando cosas.

Corro todo lo aprisa que puedo en dirección a Foster pues he visto como ha caído a causa del disparo del maldito francotirador. Y para colmo de males, nuestra doctora particular, parece estar enzarzada con alguien pues trata de sacarse de encima a su oponente.

Corro en zig zag hacia el lugar con mi Glock empuñada en la diestra. Se que Tierno ya ha debido ocupar su posición y casi espero el segundo disparo del franco tirador para que delate su posición.

Y en cuanto al oponente de la doctora, no lo logro distinguir muy bien. Pero estoy impaciente por descubrir que tal le sienta todo un cargador de 9 mm en la cabeza

El tirador ruso no parece percatarse de la presencia de Rafael sobre el tejado y se prepara para apuntar y eliminar a Richard Turner. Ha de realizar un disparo rápido y preciso pero el problema es que el británico no es un blanco estático como lo fue el agente norteamericano. Tendrá que afinar su puntería si quiere acabar con él y no lo tendrá nada fácil. 

Apunta con su fusil y aprieta en gatillo, su disparo no es para nada preciso y la bala de punta explosiva choca contra el suelo de la terraza. Un pequeño cráter de color negro queda marcado en la superficie.

Turner escucha un disparo silbar pero no nota ningún impacto. Y eso es bueno, muy bueno. Foster continúa en el suelo inconsciente, parece que pierde bastante sangre pero ahora mismo la prioridad es la doctora. Desde su posición ya podría disparar contra la agente rusa aunque prefiere acercarse un poco más para no depender tanto de la suerte como de su pericia con la pistola.

Por su lado Rafael se encuentra en el mismo tejado que el agente ruso y se prepara para terminar con él. Ahora las cosas parecen igualarse y la ventaja soviética se desvanece.

En el suelo la doctora sigue combatiendo a la agente rusa, entre ellas parece que saltan chispas (literalmente) aunque ahora parece que la doctora está en una situación algo más ventajosa.