Partida Rol por web

En los ojos de un extraño

La escena del crimen

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04/01/2011, 15:41
Robert C. Whipple

Notas de juego

Yo propuse recámara y biblioteca... a ver que dicen los otros asistentes de Mr. Dupin :P

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04/01/2011, 19:39
Adèle van Nadasdy

Adèle Echo una rápida mirada al recinto y mientras el viejo librero hablaba recorrió el recinto husmeando aquí y allá, sin una búsqueda precisa sino azarosa. No esperaba que le pregunten nada y se abstuvo de decir algo, la idea del viejo le parecía bien, pero mientras los caballeros departían entre ellos, la condesa se paseaba por el lugar.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: Tirada pa' lo que diga el master. Si hay tirada que hacer :P
Resultado: 45

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05/01/2011, 11:07
Auguste Dupin

Como bien ha dicho, no hay datos suficientes para lanzar una hipotesis plausible que sugiera el lugar donde se encuentro el cadaver.

No importa el orden que elijamos, acabaremos encontrandolo. - Sonrió

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05/01/2011, 15:22
Director

Registráis rápidamente la planta baja, donde se hayan un despacho recibidor, un comedor y el salón de la fiesta. También aquí se hayan las habitaciones del servicio, con las habitaciones del mayordomo, la cocina,la despensa y la lavandería.

Decidís regresar al foyer de entrada y subir la escalinata. Y el experto instinto de Dupin os lleva hasta la biblioteca y su pequeño estudio anexo, donde, en efecto, hay una pequeña chimenea en la cual falta el atizador y donde se encuentran restos de sangre que una vez corria por las venas de Mr. Bidwell.

Hay poco de interés en el estudio. Un butacón frente a la chimenea y un pequeño escritorio. Algunas fotos; alguna escultura y algún cuadro decoran el lugar.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Tirada: 2d100
Motivo: descubrir
Resultados: 8, 12

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05/01/2011, 15:31
Director

Y la foto... una de las fotos de la pared os llama la atención.
Bidwell acompaña a un chico pequeño, flaco, pálido. Bidwell está en un estado de salud sensiblemente mejor que cuando le visteis anoche y sonrie a la cámara. Con una mano sostiene el cubo que llevó a la ceremonia y con el otro brazo rodea los hombros de su acompañante. A,bos visten camisas de manga corta y bermudas y tras ellos se ve un desierto.

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05/01/2011, 15:38
Robert C. Whipple

El anciano solo respira con fuerza, y no dice nada. No se ha equivocado, no obstante, le preocupa su precisión y como se está involucrando en aquel asunto. Suspira resignado, inquieto.

-Mr. Bidwell poco durmió antes de ser asesinado...- dice observando el lugar en general -... Y el acechador tenía un interés realmente enorme en acabar con su vida, de forma rápida... algo improvisada...- dice dándole una ojeada a las gotas de sangre en el suelo.

Medita unos instantes antes, observando absorto una de las fotografías del despacho y luego se gira tranquilo. -Mr. Dupin, hay un ejercicio que me gustaría realizar para entender un poco los últimos instantes del crimen. Necesitaré algo de su colaboración señoritas, si no es molestia. Una de ustedes tendrá que tomar el rol del fallecido y la otra de su homicida...- camina con su bastón hasta donde están las gotas de sangre y señala allí.

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05/01/2011, 16:06
Annette Bulwer-Lyell

Detenida en el umbral de la puerta, Annette no se animó a dar un paso hacia el salón. Sus ojos se volvieron sobre la condesa, quien recorría con notoria curiosidad el recinto, mientras Auguste y el señor Whipple intercambiaban impresiones, y sus palabras llegaban como desde muy lejos a los oídos de la joven británica.

Sus dedos se enredaron en las manijas de su pequeño bolso con nerviosos movimientos y sus pensamientos volvieron una y otra vez al recuerdo de su prometido.

¿Dónde estará Clayton? Espero que pronto reciba mi esquela y venga a rescatarme

Porque así se sentía Annette, secuestrada por el irresistible impulso de Adèle y por su propia incapacidad para imponerse ante la voluntad ajena. Aunque siempre fue así…

Primero, mi padre. Luego, mis profesores. Después, mis amigos, Y ahora, Clayton. ¿Cuándo aprenderé?

Un pequeño suspiro escapó de sus labios.

Luego, un recorrido por toda aquella mansión hasta dar con la biblioteca. Un estremecimiento recorrió el cuerpo de Annette, Como siempre, se paró en el umbral de la biblioteca sin animarse a dar un paso más. Menos aún en esta ocasión; allí se había cometido el asesinato. La ausencia del atizador y las manchas de sangre hablaban por sí solos. Como si el espíritu de lord Bidwell vagase aún por aquí

Cuando el anciano librero tomó la palabra y dijo aquello… Un fuerte mareo obligó a la muchacha a aferrarse a la jamba de la puerta. Quiso replicar algo, balbucear siquiera, pero ninguna palabra brotó de sus temblorosos labios. Ni siquiera un gesto, ni una tímida negativa con la cabeza o las manos. Nada. Pálida como un cadáver —como el papel que iba a cumplir arrastrada por Adèle. ¿Cómo dudarlo siquiera?— resistió la tentación de dejarse acunar por las suaves manos de un deliquio.

Clayton, ¿por qué no vienes por mí…?

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Tirada: 1d100
Motivo: podx1
Dificultad: 11-
Resultado: 9 (Exito)

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05/01/2011, 16:36
Robert C. Whipple
Sólo para el director

Olvidé mencionar. Hay algún libro sobre el escritorio?

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05/01/2011, 17:02
Director

no. no hay ningún libro. basicamente unas pocas cuartillas en blanco y un tintero y unas plumas.

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05/01/2011, 21:41
Adèle van Nadasdy

Oh, sí... Una reconstrucción de los hechos. A mi juego me han llamado. Adèle tomó la mano de una evidentemente muy aturdida Annette que ni siquiera ofrecía resistencia y la introdujo en la biblioteca. Annette, tómatelo como una representación teatral y olvídate del resto, ¿sí? Luego se volvió hacia el anciano devenido en detective y con una enorme sonrisa le preguntó: ¿Cómo dice el caballero que debemos ubicarnos?

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05/01/2011, 22:05
Robert C. Whipple

El anciano medita unos instantes. -Quien sea Mr. Bidwell, se situará sobre las manchas de sangre...- dice y observa hacia el frente de la chimenea -...observando hacia allí.- dice señalando con el bastón.

-Nuestro asesino saldrá del salón, tendrá la misión de venir hasta aquí, mientras Bidwell observa dándole la espalda a la chimenea y lanzará su estocada imaginaria...- dice un poco abstraído.

-Quisiera que nos hiciéramos una idea de que observaba Bidwell antes de ser estocado... - explica brevemente -... por eso es importante que quien haga de Bidwell se reacomode para que su atacante se acerque acechándole... - y apunta hacia el suelo con el bastón -sospecho que Mr. Bidwell no luchó demasiado, o la situación de este estudio estaría diferente... eso suponiendo que la escena está intacta- comenta.

Notas de juego

No me hago una imagen completa, no se si alrededor del estudio, en cara a la chimenea hay libreras, asumiendo que si, el punto es buscar hacia que sección de las libreras se encontraba mirando Bidwell...

Siendo un anciano librero, :P creo que es obvio hacia donde va Whipple.

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05/01/2011, 23:34
Director

La opción de la que habla el anciano parece plausible. Si así fuera, Bidwell estaría mirando la chimenea mientras el atacante se acercaba por detrás y Cuando Bidwell se dio la vuelta recibio la brutal puñalada en el corazón.

O bien el atacante estaba avivando el fuego y cuando Bidwell apareció le clavó el atzador de una certera estocada.

Sea como sea no parece haber signos de lucha en la sala, aunque tampoco hay muchos trastos que pudieran desordenarse durante un forcejeo. Si hubo lucha esta fue rápida y mortal.

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05/01/2011, 23:47
Robert C. Whipple
Sólo para el director

Notas de juego

De hecho mi idea es que si los atizadores normalmente van al lado de la chimenea, cabe pensar que Bidwell estaba dándole la espalda a la misma...

Pero de los puntos que observa, dadas las posibilidades, alguno visualiza alguna porción de las libreras?

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06/01/2011, 00:06
Director

Perdón, quizás no se me ha entendido bien.
La bibloteca tiene un pequeño estudio anexo, que es donde está el escritorio, el butacón y la chimenea y donde se ha cometido el crimen.

Si Bidwell daba la espalda a la chimenea estaba mirando hacia la puerta de entrada, y con acceso visual a los libros de la bibloteca anexa.

Pero el ataque fue frontal y no por la espalda.

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07/01/2011, 17:50
Adèle van Nadasdy

Adèle asintió a las palabras del viejo librero: A la orden. Y tomó de las manos a Annette que se dejaba conducir mansamente, pero con un gesto al borde del desmayo cuando vislumbró las manchas de sangre. Aún tomándola de las manos le susurró con una sonrisa: Tú, tranquila. Témele a los vivos y no a los muertos... Y luego se dirigió hacia la puerta a la espera de nuevas indicaciones. Parece que al viejo le atrae este papel de macabro director de obras de terror. Quién lo hubiera dicho...

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07/01/2011, 21:10
Director

Y por un instante vuelves a percibir ese olor a naranjas y esa ligera nausea evanescente. Como cuando murió Grandma Liz. Y hay alguien mas en la habitación, que se mira sorprendido el pecho y luego en todas direcciones y vuelve su rostro en penumbra hacia tí con un inaudible grito eterno. Adelanta su espectral mano intentando aferrarse al último rescoldo del mundo de los vivos que le queda pero sus manos ni siquiera son capaces de sostener las tuyas y no dejan mas rastro en tu piel que el vello erizado y un ligero escalofrío.

El elegante espectro , de grandes hombros e impecable etiqueta poco a poco se va difulminando siendo sustituido por la silueta de la hermosa Adele antes de perderse para siempre en el oblivion y en tu memoria.

Y no parece Bidwell

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09/01/2011, 16:05
Annette Bulwer-Lyell

…Y de repente, como envuelta en un remolino, Adèle desapareció ante sus ojos. No eran las finas y delicadas manos de la condesa las que tomaban a las suyas, sino otras. Grandes y huesudas. Manos de hombre. Las manos de un hombre que se contemplaba el pecho abierto en una sangrienta rosa y que gritaba. Un alarido mudo. El terror estampado en aquellas nobles facciones. Un cuerpo elegante y robusto, trajeado con impecable etiqueta. Un cuerpo que se desvanecía y extendía sus manos para aferrarse a la única persona que podía verlo en aquella fatídica estancia en la que había quedado atrapado. Un hombre murió allí, pero no era lord Bidwell…

Annette parpadeó, las palabras de Adèle resonaban como el eco lejano de una profecía —“Tú, tranquila. Témele a los vivos y no a los muertos...”— y ahora la condesa se alejaba hacia la puerta. Aquel terrible hechizo se había quebrado dejando en la piel muchacha los vagos restos de aquella visión. Una visión de espanto. La muerte de un hombre. Allí, en la biblioteca. Pero no era lord Bidwell. ¿Quién era entonces? Un escalofrío subió desde sus dedos que aún temblaban ante aquel contacto. Un hombre había muerto allí, pero ¿quién?

Tras una vacilación, sus ojos se volvieron hacia el anciano librero y el detective —Adèle se encontraba en el vano de la puerta esperando las indicaciones de Whipple y no podía verla— y…

Hubo otra muerte —quiso preguntar, pero sus palabras fueron entonadas como una afirmación. Entonces rectificó—: ¿Les comentó la policía de otra muerte acaecida aquí?

—Compórtate, Annette. Debes controlar tus excesivas fantasías. Pinta, escribe, has algo útil con ellas, pero no creas en ellas. Sólo son caprichos de una mente demasiado fantasiosa. ¿Entiendes? Nada de lo que imaginas es real. Las mujeres son muy dadas a esas cosas, y no está mal: es parte de su esencia. Pero no debes dejarte arrastrar por ellas… O perderás la razón, como tu desdichada madre.

La pequeña Annette asiente en silencio a las palabras de su progenitor. Su mirada gacha, su porte contrito. No se atrevía a mirar a su padre, porque hacerlo suponía desobedecerlo. ¿Cómo domar aquella fantasía desbocada? ¿Cómo negar lo que sus ojos le señalaban? ¿Cómo obviar aquel andrajoso espectro que, detrás del doctor Bulwer, parecía escarbar entre la basura?

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10/01/2011, 14:41
Auguste Dupin

Auguste parecía ausente, casi ajeno a lo que sucedía a su alrededor.

en un momento dado su linea de pensamiento se juntó con lo que proponía Whipple, ya que elmismo estaba reconstruyendo de memoria lo que pudo haber sucedido la fatidica noche. Una y otra vez su mente aplicaba de forma sucesiva las diferentes posibilidades, para luego analizar si se adaptaba, como si de una pieza de rompecabezas se tratase.

Me parece una ide excelente, no esperaba menos de usted. Para serles sinceros me apetece hacer la reconstrucción. -Su apetencia por el teatro alía otra vez a la luz

 

Si no les parece mal, me gustaría hacer de victima.- Propuso

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11/01/2011, 01:28
Adèle van Nadasdy

Adéle alzó una ceja ante las palabras de la británica y se disponia a responderle cuando Dupin, recien salido de su ensimismamiento… o vaya a saber de qué, se postuló como víctima de aquel macabro teatro. Los ojos de la condesa se entrecerraron y sus labios se fruncieron en un mohin algo despectivo, pensó en replicar de malos modos, pero se contuvo… O no. Me parece una excelente idea, estoy segura que Annette le cederá su puesto encantada y yo estaré complacida de asestarle la estocada fatal. Dijo con una media sonrisa jugueteandole en los labios. Lástima que no tengo un atizador a mano. Por otra parte…

Ahora se volvio hacia la muchacha que se encontraba junto a la chimenea. ¿Cómo es eso, querida Annette? No, la policia habló de un muerto solamente y en la morgue vimos unicamente el cuerpo de Bidwell y al forense. Una persona muy agradable por cierto. Pero… ¿Cómo es eso que dices de que hubo otro muerto?

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12/01/2011, 15:53
Auguste Dupin

Se dió cuenta de su descoertesía, Otra vez se había dejado llevar por su entusiasmo, el cual había pasado delante de sus modales.

Lo siento, no pretendía ser descortés .- Dijo sinceramnente.

Por favor a mi también me gustaría saber que es eso de que hubo otra muerte