Partida Rol por web

Bienvenido a tu topic, donde tu eres el amo y señor de este lugar.

Eres libre de colocar imágenes, música, vídeos o todo lo que sea mejor para ambientar tu refugio, ademas, puedes narrar cualquier tipo de acción que hará tu PJ.

Solo recuerda, es un martes 7:00 de la mañana y la temperatura es de 0ºC.

Si no tienes ideas, simplemente deja el topic en blanco y avísame que yo haré lo posible para ayudarte a moverte dentro de Erebo.

¡Saludos y bienvenido!

Dirección médica, despacho de Laila Derav.

Se trata de un despacho amplio en la terera planta por la fachada sur del edificio, con una mesa ovalada para ocho personas. En cada lugar de la mesa, asignados por los sillones, hay una tablet y en medio unos huecos para colocar vasos y botellas. A ambos lados del despacho hay estanterías con libros sobre medicina y al fondo un escritorio casi tan grande como la mesa con un ordenador de sobremesa (aparentemente un apple, aunque la marca no se ve). Hay cuatro sillones (dos por lado).

En la esquina opuesta al escritorio hay un sofá cama de tela que contrasta completamente con la apariencia lujosa del resto de la estancia, además de una mesilla en frente con un hornillo sobre el que reposa una cafetera italiana. Se puede ver algún papel esparcido por encima del escritorio y múltiples bolígrafos (con el logo del hospital), un par de estilográficas de considerable valor y material diverso de oficina.

Aclarar que a un lado del despacho (entre las estanterías) hay una puerta que conduce a un pequeño vestuario con baño completo y taquilla (con cerradura). Desde el nombrado vestuario se puede acceder a una pequeña habitación con una cama de un metro veinte de hierro forjado (claramente antigua).

La pared del despacho (la de la puerta de entrada) tiene dos cuadros, uno de un paisaje y el otro más abstracto pintado con colores fríos. Dos de las otras paredes como a hemos dicho se encuentran tapadas por estanterías con libros y la pared restante da al exterior por la fachada sur del hospital y tiene un ventanal con doble cristal.

El techo es blanco y de el cuelga una lámpara de araña sencilla con tres únicas bombillas de bajo consumo las cuales en lugar de enfocar hacia el techo enfocan hacia el suelo. Contrasta con el techo el suelo, de parquet y siempre bien pulido.

En frente a la puerta de este despacho se encuentra la oficina de la secretaria de dirección y al final del pasillo un puesto de guardias de seguridad para mantener vigilados los despachos.

No hay ningún horario colgado, pero si se le pregunta a cualquier empleado del hospital la respuesta seguramente será -Cuando viene lo hace por las mañanas-

Era un martes a las 7 de la mañana, hacía unos días que había llegado a Erebo y aún no estaban terminadas las obras en mi nueva casa por lo que tenía que estar alojándome en un hotel. Mi horario era flexible, y aunque en teoría debería estar en el hospital a las 6:00 am, aún faltaba el primer día que haya llegado a tiempo. El presente día había sido hasta el momento cuando más temprano había llegado, solo media hora tarde.

No comprendía muy bien el hecho de haber aceptado este trabajo, estaba claro que no le serviría demasiado a sus intereses de manera directa aunque si podía ser una manera de mantenerse más al corriente de lo que pasa realmente tras el velo o la mascarada. No debía preocuparse por ahora de ningún vástago tzmisce aunque había uno que sí la reconcomía por dentro... algún día su familia conseguiría la venganza que tanto ansiaban contra el Conde Danisla, señor del condado Florescu en Transilvania.

Más tarde posiblemente se preocupase de averiguar la situación de algunos garou de las tribus procedentes del otro lado del atlantico, ya que tanto los Garras Rojas como los Wendigo resultaban demasiado desconfiados y ariscos con los extranjeros, con los Garras Rojas seguramente tubiese más que ver el hecho de ser una humana.

La joven comenzó a ordenar los papeles que había sobre la mesa y a revisar el correo electrónico que tenía como directora médica y donde recibía desde publicidad de distintos medicamentos hasta información sobre nuevas técnicas quirúrgicas o mensajes del personal para informar de problemas o hacer sujerencias.

Por último leyó un tratado elaborado por el personal de enfermería del propio hospital que pretendía ser un nuevo protocolo de como tratar las úlceras por presión con un método novedoso que consistía en aplicar presión moderada en las zonas circundantes a la lesión para aumentar el riego en la zona lesionada para que esta curase antes. Muchos médicos critican el método tachandolo de inútil y aunque en apariencia lo es, parecían existir datos empíricos que demostraban lo contrario -Los médicos creo que deberíamos dedicarnos más a lo nuestro, decir que eso no funciona es como decirle a un mecánico que no haga lo que hace-, no nos compete-

Debido a haber estado "jugando" con la disciplina de vicisitud y haber consumido demasiado sangre, Laila tenía la cara un poco desfigurada, aparentemente con pústulas y yagas. La joven decidió arreglarlo de una vez para poder mostrar su cara como ella y no tener que esconderla detrás del amplio cuello del abrigo.

La muchacha cerró la puerta del despacho por dentro para evitar visitas de curiosos mientras intentaba arreglar su cara y dejarla como era, estaba claro que si no practicaba nunca conseguiría ser capaz de manejar correctamente la disciplina pero resultaba odioso cuando no conseguía devolver a su rostro los bellos rasgos jóvenes que la caracterizaban.

Se dirigió al baño para ayudarse del espejo, y sacando una foto suya para ayudar a su memoria comenzó a moldear la carne y piel para intentar recuperar su apariencia (apariencia 5) además de la suavidad y tonicidad que tenía.

-Supongo que después de todo no es tan malo envejecer despacio aunque haya que disimularlo...-

La joven aparecida comenzó a manipular la carne valiéndose de la disciplina vicisitud (primer y único nivel que tiene en ella) y dudando completamente de sus capacidades para recuperar su aspecto sin un gran coste tanto en sangre como en esfuerzo.

Tirada Inteligencia + pericias (alteración corporal) dificultad 10 puesto que es para aumentar la apariencia aún manteniendo el aspecto. Gasta un punto de fuerza de voluntad para tener un exito automático (y para evitar las pifias).

1 exito+ el punto de fuerza de voluntad gastado+ el nivel que tenía en apariencia signifíca que ahora mismo Laila tiene apariencia 3.

No conforme con el resultado aunque se ha acercado notablemente a su apariencia original decidió retocar un poco la nariz, los ojos y los labios, incluso podría retocar los pómulos que aún no eran exactamente como antes.

Laila volvió a utilizar su sangre y otro punto de fuerza de voluntad (éxito automático) para conseguir su meta, aunque no la consiguiese se trataría de un resultado aceptable el conseguir una pequeña mejora, podría parecer que su cara había engordado algo o que podría tener más ojeras... eso no resultaba algo que no pudiese ser explicado mejor que las yagas y pústulas que tenía.

De nuevo la tirada de 6 dados a dificultad 10 con un éxito automático por el gato de fuerza de voluntad (recuento 8 puntos de sangre y 7 puntos de fuerza de voluntad actualmente)

Delante del espejo la joven se da cuenta de que su aspecto es el mismo que tenía antes y decide que es hora de salir del hospital, las variaciones que pueda haber con respecto a su anterior forma son ya imperceptibles, lo comprueba afinando el sentido de la vista por medio del auspex y decide salir del hospital.

Hoy es martes, son las 7:25 de la mañana y a pesar de no haber rellenado el papeleo correspondiente para la solicitud del aparato de hemodiálisis necesario según el jefe del servicio de diálisis salió del despacho pues se encontraba tanto física como mentalmente cansada debido al esfuerzo realizado. Dirigiéndose a la secretaria dijo sin vacilación:

-Voy a tomar un café a la cafetería del pueblo, jennifer, necesito dar una vuelta que aquí  tienen la calefacción muy alta. Tenme ordenados los formularios y organizada la lista de espera de cirugía plástica. Tengo que comparar los precios de los hemofiltros, circuitos y mantenimiento entre las últimas máquinas de Gambro y Fresenius... el doctor Malcom quiere la de la casa Fresenius pero imagino que la razón es que le han ofrecido un mejor congreso-

-Muy bien Dra Derav-

-Yamame Laila, y por favor no te refieras a mi por Dra, queda demasiado formal para mi gusto-

Fuera del despacho había una cámara, además de estar el guarda de seguridad por lo que debía disimular sus lazos con la estirpe y con todo lo sobrenatural, la secretaria era realmente quien controlaba todo y el único trabajo que Laila tenía era estampar su firma. Jennifer era una ghoul de algún vástago influyente de la ciudad que trabajaba ahí bajo las órdenes de la príncipe para tener el hospital controlado. El hecho era que esta secretaria hacía todo el trabajo y aunque las decisiones de Laila se llevaban a cabo sin problemas, no sucedía lo mismo cuando por parte de la estirpe había intereses de algún tipo. Se ha cambiado la casa que proveía al hospital servicio de esterilización por autoclave debido simplemente a que el nuevo servicio pertenecía a un vástago local, se ha cambiado en contra de la voluntad de Laila en su primer día de trabajo a pesar de ser más caro (esto compete a toda la junta directiva del hospital, pero el puesto de Jennifer no es el único que asegura ese ferreo control sobre el centro sanitario.

La joven Salió del edificio bien abrigada en dirección a una cafetería que había visto viniendo hacia el hospital, realmente se sentía cansada y no le apetecía nada volver otra vez al hospital pero debía figurar como que si había estado allí por lo menos un rato firmando y rellenando ese papeleo para que no quedase descubierto el ardid del asunto.

-Taxi- Laila se subió al taxi  y dijo -por favor, al Smart Coffee, creo que se llamaba-

Por esta vez el taxi sería un buen método de transporte, no había tiempo para que su choffer viniese para trasladarla, o por lo menos no le apetecía esperarlo

Laila llegó al hospital y desde la entrada de este se dirigió por los pasillos hacia su despacho. Al llegar vio a jennifer, tal vez hubiese algún comunicado por parte del príncipe de la ciudad por lo que se dirigió a la secretaria para preguntar de un modo peculiar para que el miembro de seguridad que había allí no se diese cuenta:

-¿Te dio tiempo a ordenar y preparar todos los formularios e información sobre las máquinas de hemodiálisis? po cierto, necesitaría que vinieses a revisar un documento en el ordenador para imprimirlo luego-

Intentaba hablar con Jennifer en el despacho por lo que la "invitaba" a entrar. Después tal vez debería hablar con el danzante de la piel que le había dado su número. Parecía interesado en ella por algo en particular y lo cierto es que se trataba de una persona interesante.

Cuando Jennifer se dispone a responderte, por la entrada ingresa una muchacha joven de rasgos asiáticos, completamente desvanecida pero sin signos de violencia.

- ¿La tratara usted doc? - pregunto Jennifer para saber que debía hacer.

Laila se quedó sorprendida de que eso hubiera sucedido al lado de los despachos de la dirección médica, seguramente no se tratase de nada relacionado con un ser sobrenatural por lo que debía actuar según los protocolos.

-Que remedio, avisa al cuarto de celadores para que venga uno con una camilla y a urgencias para que envíen a alguien del personal de enfermería con total urgencia... yo la iré reconociendo. Tendremos que dejar la información para más tarde-

La muchacha aprovechando que estaba en la puerta de su despacho tomó uno de los fonendoscopios que se encontraban del lado de dentro de la puerta de su despacho y su bata también colgada allí para tener a mano unos depresores linguales también. Se acercó lo más rápido que pudo a la joven que se había desvanecido para auscultarla y comprobar que tanto los latidos como la respiración fuesen estables, buscaba posibles arritmias, un soplo o cualquier otra anormalidad

-Además Jennifer diles que traigan el electro*- (un aparato de electrocardiogramas por si no se entiende)

Laila entre auscultación y auscultación preguntaba a la chica datos

-¿como se llama usted?... ¿que es lo que siente?... cuenteme lo que ha pasado... -

Cuando comenzaste a hacerles preguntas, la muchacha despierta abriendo completamente los ojos los cuales estaban inyectados en sangre y en lagrimas, comienza a respirar agitada y su pulso se acelera terriblemente.

Grita con una voz agudamente escandalosa, soltando una sola nota en su desesperante crescendo, para luego levantar las manos y hablar en un idioma asiático de manera estrepitosa y sin pausa alguna.

- ¡¡Aléjense de mi chupasangres....aléjense de mi!! - dijo entre gritos y entre frases en un idioma desconocido para ti - ¡¡mi padre me matara...el me matara a mi como a los demás...lleven el bolso, quémenlo!! - exclamo nuevamente para luego caer inconsciente, con sus signos vitales normalizándose segundo a segundo -

Uno de los paramedicos notablemente asustado responde tras la escena.

- Fuimos a buscarla en la iglesia católica, ella estaba siendo atendida por el cura...no sabemos mas que su nombre, es una tal Jenniffer Zha, hija de Shirō Ishii...hemos intentado contactarnos con el, pero no hemos podido concretar una llamada -

Laila era consciente de que lo más seguro sería que algún vástago despreocupado había roto eso que llamaban la mascarada, no parecía muy difícil de ocultar pero le interesaba lo que había sucedido; la información tenía su valor además de que era probable que la muchacha siguiese con vida porque "pertenecía" a alguien.

-Bien, me ocuparé personalmente de esta paciente, ingrésenla en cirugía aunque su cuadro nos señale que deba ir a medicina interna. Claramente está sufriendo un delirio pero no tiene fiebre por lo que la observaré un poco más-

La médica miraba en busca del bolso del que la chica hablaba para saber si se encontraba presente, después de todo podía estar relacionado de alguna manera debido a sus palabras.

-Y dejen de buscar a su padre por el momento, al fin y al cabo ya la han oído que la matará... debemos confirmar qué es cierto y qué no de sus palabras, tal vez debamos poner en conocimiento a las autoridades en primera instancia pero no lo hagamos antes de saber si esa información es parte del delirio-

Laila echó un vistazo a su secretaria, al fin y al cabo no dudaría que esta pondría en alerta sobre la situación al príncipe de la ciudad. No intentaría interferir en el trabajo de esta puesto que tal vez pusiese su propia vida en peligro de hacerlo. A pesar de ello confiaba en que la información transmitida sería objetiva aclarando que la situación estaba controlada lo que le daría tiempo.

Laila pensaba utilizar el pentotal sódico para tranquilizar a la paciente y hacer que le contara relajadamente lo que había sucedido con los "chupasangres", el pentotal es un barbitúrico utilizado para múltiples cosas en medicina, se trata a su vez de un hipnótico que hace que la persona drogada no mienta por lo menos consciéntemente (se conoce como suero de la verdad). Laila sabe como cirujana los efectos que esa droga puede tener por lo que prepara un ambú por si hay que ventilar a la "paciente".

La muchacha se calma notoriamente, se mantiene con la respiración relajada, tras recuperar la conciencia, le inyectas el suero y ella parece reaccionar favorablemente y es recién ahí cuando notas que no cuenta con el dichoso bolso.

- ¿Do...donde estoy? - pregunta suavemente la niña mientras abre lentamente los ojos -

Mientras Laila cierra la puerta para asegurarse que nadie entre y las escuche sin que se de cuenta, le habla pausadamente para que la muchacha le cuente lo acontecido:

-Tranquila, estas a salvo en el hospital-

La aparentemente joven cirujana se acercó a la muchacha para hablar en voz más baja diciendo aún de manera pausada:

-¿Que ha sucedido antes? cuéntamelo con calma-

La chica tenía rasgos claramente asiáticos, pero se llamaba jennifer con lo que seguramente ya hubiese nacido en los EEUU siendo hija de inmigrantes.

Laila tenía el ambú a mano, aunque no debería ser necesario siempre existía la remota posibilidad de que se produjese una parada respiratoria.

Parpadea varias veces antes de hablar, entrecerrando los ojos y tratando de entender donde estaba, con un fuerte jadeo nota que estaba en el hospital y dice algo alterada.

- Por que me trajeron aquí, le rogué al cura que no me trajera aquí...doctora, usted debe saber que aquí trabajan vampiros y son ellos los que llevan victimas a mi padre, ellos son los culpables de que mi hermano haya desaparecido y ellos son los culpables de las muertes...por favor doctora sáqueme de aquí, se lo ruego, se lo imploro - dijo asustada -

Te atiende una enfermera muy amable en la recepcion, quien con ojos tranquilos te habla.

- En que puedo ayudarlo padre... -

- Hola hija, venía a visitar a una joven que habrá sido ingresada hace poca cosa, como mucho una hora... Se desvaneció en la Iglesia y me ha dejado francamente preocupado. - Digo en tono serio y afectado, mirando directamente a los ojos a la enfermera.

- Ya veo padre... - se fija en sus registros - ...debe de ser Jeniffer Zha, la hija del dueño del restaurante feo ese...pues ella esta bajo unidad medica a observación de la doctora Laila Derav, solo bajo nuevo aviso puede permitirle entrar, por lo que lo siento padre, pero la muchacha no puede ser visitada aun -

Asiento lentamente y con los ojos cerrados.

- Entiendo, entonces, ¿le importaría que esperase aquí? - Pregunto señalando los típicos bancos destinados a la espera.

- Ningún problema padre tome asiento - mientras te sientas notas una gran cantidad de revistas de la NOAA y de los progresos que realizo Pentex en la zona -