Partida Rol por web

Richard escucha a su amigo. En verdad hay algo que no cuadra, aunque no quiere precipitarse.

-Usted ha estado más tiempo con él. ¿Sabe algo de ese tío suyo? - susurra.

A medida que los invitados se iban despidiendo de Charles, con cierta pena y compasión, le dijo a uno de sus sirvientes que condujera a sus dos amigos y la señorita Leed al saloncito de tertulias; así lo llamaba él.

Una vez a solas delante de la puerta principal, viendo como se alejaba el último vehículo de los invitados. Se dirigió al saloncito donde esperaban sus invitados más cercanos.

Allí estaban sus tres amigos.... la Señorita Catherine Leed y los señores Richard Von Bishmark y Robert Howard, esperando más detalles sobre la llamada.La hermosa voz de Ella Fitzgerald llenaba habitación, y un apetecible Burdeos, un Chateau Le Doyenné, espera sobre la mesa, junto a varias copas, a ser degustado. Pedí al servicio que sirviera unas copas.

-"Amigos míos, he decirles que Frederick Short era mi tío por parte de madre, normalmente le conocía como el tío Freddy. Era doctor en arqueología y profesor de la universidad de Miskatonic, fruto de su trabajo apenas le había conocido pues solía desaparecer por largas temporadas en expediciones por la India. De pascuas a ramos lo veía y siempre tenía algún regalo de su última expedición." Empecé la conversación.

Con voz apesadumbrada -"Hablo en pasado, porque al parecer ha ocurrido un incidente mortal en su casa....La llamada recibida era para que acudiera al depósito a reconocer el cadáver..." con leves movimientos de cabeza y mirando a mis compañeros -"No me encuentro con fuerzas para ir solo, les rogaría si no tienen otra cosa que hacer .... me acompañasen. Entiendo que pedirles que visiten un depósito de cadáveres no es cosa agradable, sobretodo para usted, señorita Leed. Por lo que entendería perfectamente si me dijeran que no".

- Para esto están los amigos, para apoyarnos en estos momentos difíciles. No te preocupes de nada Charles. Iremos en mi coche, lo tengo muy cerca de aquí.

Richard titubea dubitativo. Por una parte le gustaría ayudar a su amigo de cualquier forma posible, por otro lado no sabe cómo poder acercarse a la morgue, no dejándole su exigua pensión ni siquiera para permitirse un taxi. De repente, el ofrecimiento de Robert le llega como inesperada solución.

- Muchas gracias por su ofrecimiento, señor Howard, me proveería de la posibilidad de ayudar a Charles - Después, dirigiéndose a Charles - Como dije antes, pero me ratifico ahora, tienes toda la ayuda que te pueda dar, Charles.

Catherine escucha con atención las explicaciones de Charles. Efectivamente, no era un lugar agradable al que visitar. Sin embargo, nadie le había pedido que viera ningún cadáver. Solo tengo que ir a dar ánimos al señor Diehl. No es para tanto. 

-Estaré encantada de acompañarle, señor Diehl -afirma.

Las palabras de apoyo que sus amigos le dedicaron, le llenaron de orgullo y satisfacción, consiguiendo dibujar en su rostro triste y melancólico una sonrisa de alegría y esperanza.
Esperanza para averiguar lo sucedido realmente con su tío Freddy; pues necesitaba saber más sobre el mortal incidente.
-"Muchas gracias amigos míos, sabía que podía contar con vosotros" les respondió al mismo tiempo que daba un último sorbo a su copa.
-"Si no os importa, me gustaría partir ya hacia la morgue" continuó -"Robert,...gracias por llevarnos, significa mucho para mí" dió las gracias al improvisado chófer con un apretón de manos"partamos pues, sin más demora"