Partida Rol por web

Sois unas insolentes y faltas de respetuosidad a esta ceremonia, que desde tiempos inmemoriables se viene realizando , con cada reunion de los distintos clanes que se han celebrado... pero que representantes han enviado aqui... esto es mas serio de lo que parece, este ritual no solo es un rito de bienvenida, sino que ademas nos ligara a este lugar hasta que el aquelarre se de por finalizado, no pudiendo abandonar dicho lugar de ninguna manera conocida....

Esta claro, asi pues o estais u os vais, pero no molesteis ni falteis al respeto, brujas insolentes... me referi por fin una vez terminado el caldo del pote, hacia las que tanto habian criticado las costumbres ancestrales....

Me arrime a Lady Lethalia cuando vino con el cuenco de eso que estaban tomando la mayoría. Olí un poco, y me quedé a su lado sin decir nada. Solo la miré, a la vez que sostenía la espada en mi mano.

Cada una de las brujas que se acercaron hasta el caldero recibió la porción que solicitaba. Cada una de ellas se ganaba un corto asentimiento de aprobación. Yidorac siempre fue parca en palabras amables, por lo que ese gesto debía ser suficiente. Aceptación, reconocimiento y aprobación. Bienvenida.

La bruja que servía se alegraba secretamente de no haber necesitado más que una mirada para recordarles a sus... compañeras la importancia de los ritos de bienvenida. No espero que todas participen. Por lo que a mi respecta, una representante de cada casa puede hacer de portavoz, pero no hubiese sido apropiado que negasen una ofrenda como esta.

Cuando habló Gunhilda sí que le dedicó una mirada más larga, mientras le servía en su plato algo más de carne y menos caldo - Suerte que sabes tan bien como yo que no desperdicio un guiso si lo que quiero es hacer daño a alguien ¿ verdad? - Se inclina sobre ella, como si quisiera contarle un secreto sin perder su sonrisa - El agua vive en muchas formas.

Recupera la verticalidad y estira la espalda haciendo que todos sus huesos crujan y sigue sirviendo hasta escuchar a Madame Blavatsky. Una bruja que conoce la importancia de nuestra tradición... 

En un instante se cruzan sus miradas y Yidorac asiente, confirmando sus palabras y sigue sirviendo, inalterable.

Me tomo el guiso que me había dado Yidorac, tras haberme vuelto a sentar en mi sitio tranquilamente para tomarlo.

Si es que son unas descosideradas...mira que no seguir la tración de las antiguas...

El guiso,poco a poco,va enfriándose en las gélidas manos de Lady Lethalia sin que el caldo haya manchado sus labios. Esta clavada en su sitio sin,aparentemente,prestar mucha atención a lo que ocurre,aunque pobre del que piense que Lethalia esta siendo poco precavida porque se equivocaría.

Juas. Me hacéis reir, de verdad. ¿Es qué ya no quedan brujas como las de antes? A ver, entiendo lo del ritual, lo del Aquelarre y todo lo que queráis hacerme saber como tradición. Llevo bastante tiempo en esto como para saber respetar las tradiciones y demás, sin embargo, me da que sin los relicarios... bueno, que aquí lo único que podemos celebrar es una reunión de tupperware con un guiso, por que sin ellos, el Aquelarre como que no, hermanas. Explicó Morgana con una media sonrisa en sus labios. Así que, por mi, cocinad, bailad, y como si queréis adorar al dios de la fertilidad sin ropa y bailando alrededor de una hoguera, como no aparezcan los relicarios, aquí nos quedaremos un rato largo.

Morgana seguía sentada junto a una piedra derruida, esperando que alguien dijera algo interesante por una vez.

La verdad, es que parecéis niñas de parvulario. Sois brujas, por el amor de los Nueve, comportaos como tal. Que las Halliwell son ficción.

Escuché las palabras de mi compañera Morgana,la única que por ahora habla y piensa como yo. Miré a Lady Lethalia diciendo con mi mirada que voy donde ella.

Cuando llego donde esta, le susurro, hermana no hagas caso a estas si es que son brujas y vienen a lo que es importante a estar de fiesta. Y ven junto Lady Lethalia y conmigo hasta que se hable algo claro por aquí. No estamos para perder el tiempo al menos yo no vengo a perderlo. A la vez que miraba a Lady Lethalia con mirada de complicidad.

Alandra se acerca a la marmita, introduce su cuenco y participa en el arcano ritual, mientras murmura una canción

Las cinco casas empiezan el aquelarre
en el baile de las brujas la que más miedo da
no importa dejar tu huella
Aniversarios que celebrar, saborear la victoria final
tradiciones con orgullo
hay que saber imponer al vencido
no importa dejar tu huella
El camino ha sido repetido con la misma crueldad
que nos identifica a todas y es desangrándolo por el cuello
no importa dejar tu huella

Sed de aventura convertida en poder
Sed de aventura convertida en miseria
Cualquiera de las grandes casas giran y giran alrededor de la angustia
No importa dejar tu huella

Con la misma crueldad de la victoria final
El conclave ya empezó es la hora del aquelarre.

Asiente a Alana, aprobando su parte del ritual. Las cosas son como deben ser, los pasos que se dan son lo que han de darse. Así sea....

Lethalia esgrime una sonrisa que dura tan poco como un parpadeo hacia Morgana,había dicho lo que todos en la casa de Gió pensaban. Quizás fueran porque estaban criadas en la otra parte del velo y solo veían a las criaturas cuando morían pero eso les daba una mente algo distinta. El guiso quedó helado en las manos de la bruja que miraba a sus hermanas.

Asiento ante las palabras de Morgana, por fin alguien con cabeza en este cónclave -Por mí podeis seguir jugando y bailando. Pero esto es serio y muchas podríamos morir aquí, ¿es que os da lo mismo?

- ¿Morir? Nebaleth arqueó la ceja antes de mirar a Reis, mientras acababa el cuenco de delicioso guiso. Pensaba que solo ibamos a investigar un robo, hermana.

¿Crees que las que nos hayan robado nos dejarán investigar en paz? - pregunté asombrada -Las ladronas están aquí, entre nosotras...

Todas las llamadas habian sido escuchadas, y todas llegaron al lugar indicado... y al llegar vieron que no estaban solas, un pequeño espiritu jugaba con los petalos caídos de las primeras flores del lugar...

Al veros cesó su juego y con pasos sinuosos se movió entre vosotras... Su aura estaba enfundada como en miles de gasas, sus ojos revelaban inocencia, dulzura, culpa e ira...

Poco a poco fue pasando por cada una de vosotras... sus frias manos os tocaban, su tremulos labios os besaban y su delicado pelo os acariciaba a su paso...

Mientras andaba sus labios no se movieron pero una voz resonó en vuestra cabeza... todas sabiaís que era ella... y que su vaticinio tendría consecuencias para todas...

Recordar bien, como fuisteis un día, pues la muerte a todas os saludará... y sus frías manos os alzará en sus brazos y al miraros a los ojos, recordareís mis palabras pues tan solo cuando os mire a los ojos vereis vuestro verdadero ser...

Fueron sus unicas palabras... después un leve susurro en el viento... y tan solo un dulce aroma quedó en el lugar de su presencia... y el recuerdo de una sonrisa, que nunca se borra y unos ojos que siempre velan por el destino...

Yidorac habla entonces en un susurro, esa clase de voces que todo el mundo escucha, cascada y marcada por los años y la experiencia.

- Si nos perdemos a nosotras mismas y lo que significa ser una bruja tanto dará que se hayan perdido los relicarios - Sonríe a Reis con esa expresión gélida que la caracteriza. - Eso significaría que ya estaríamos muertas a los ojos de la diosa, porque nuestras tradiciones, lo que nos hace auténticamente lo que somos, habrían desaparecido.

- Aunque puedo entender... - Se sirve a sí misma un poco más - Que otras casas se hayan desviado del verdadero camino de la brujería. No me decepcionan. Solo logran confirmar lo que las verdaderas guardianas ya sabíamos: que hay entre las más jóvenes algunas que han olvidado lo que son y el respeto que le deben a esta comunidad.

- Pero hoy no he venido a dar lecciones de historia y tradición, sino a hacer una ofrenda de parte de mi casa, la del agua y sus profundos misterios. - Hace una leve inclinación burlona - Y lo hago de buena fe, porque es lo que ha de hacerse. Cuando todo salga a la luz ya cada una de sus casas tendrá tiempo de instruiros. No es mi tarea, ni mi responsabilidad, ni me importa en absoluto.

En cuanto aparece la nueva espíritu la bruja se gira con una amplia sonrisa hasta que siente que la roza y la besa y rápidamente enrojece de puro pudor.

-P-pero...

No llega a terminar la frase cuando rápidamente se gira hacia sus hermanas.

-¿Quién es ella?

Pregunta mientras mira algo desorientada a sus compañeras, pero entonces su sonrisa se amplía como si fuese lo mejor que hubiese podido suceder mientras chasquea los dedos.

-¡¡Ya sé!! ¡Era la diosa de la que habláis! ¡La Luna! ¿A que sí?

Entonces sus ojos miran directamente a Yidorac en busca de respuesta. No parece darle importancia al hecho de no haberla visto antes, de haberse desvanecido pese al sello, o de que la haya besado, ya no.

Escucha bien Morgana le Fay, si estamos aqui es por que entre las presentes estan todos los relicarios robados.... y como ahora que todas habeis tomado parte en el ritual, no podreis ninguna abandonar el lugar, hasta que aparezcan o solo las poseedoras de estos queden con vida... esta es la ley, ...

Necias, que son unas necias, que se las dan de listas y sabedoras del conocimiento y caen en la mas sencilla de las trampas... ahora ya no hay vuelta atras y o caemos todas, o las ladronas habran ganado....

Los relicarios han de encontrarse, han de aparecer a costa de la vida de quienes sean, dije al final....

¡Pero si es lo que estoy tratando de decir desde el principio! Os tomáis esto como un juego, y lo único que está en juego aquí son nuestras vida. Dijo Morgana. Y de Le Fay nada, esa era una estirada, drogadicta y además, una guarrilla del tres al cuarto, por favor, no me comparéis con esa Bruja, que aunque llevemos el mismo nombre, nos separan eones.

Morgana sonrió.

Así que, id vaciando los bolsillos y me temo que aquí correrá sangre, y no precisamente de culpables, me temo.

Seguía limpiado y escuche  lo que decían Morgana y dije. Morgana tiene razón en todo lo que dice porque algunas se lo toman todo a guasa... cuando vean que caerán brujas inocentes esperemos que cambien en su forma de ser y no todo es fiesta... y escuche el susurro que se me acerco me puso los pelos de gallina... Pero seguí limpiado mi ballesta y preparando para que llegue el día de salir donde estábamos todas reunidas...

Tras tomar un poco del caldo de Yidorac en silencio, me acomodé en un lado del grupo y estuve atenta a las conversaciones que transcurrían. Sin más apareció lo que parecía ser un espíritu, sus palabras desconcertantes me helaron la sangre, no pude evitar que mi vello se erizase ante la presencia de ese ser.

Seguidamente volvieron las discusiones, me puse los dedos en las sienes, me dolía la cabeza de escucharlas.

No paran de criticarse unas a otras, ¿ no se dan cuenta que entre unas y otras se están comportando como niñas?, espero que esto acabe pronto porque no voy aguantar tanta tonteria y soberbia.- pensé mirando a las implicadas -.