Partida Rol por web

La tercera luna pasó y dejó paso al tercer sol… y con él un nuevo ataque se dejó ver…

El sol alumbraba a las nuevas caídas con delicados rayos sobre sus cuerpos… ni siquiera la muerte las pudo separar… y con sus manos aferradas a aquello más quiso durante su vida, habían abandonado este mundo…

Las almas de Brianne y de Titania cruzaban juntas el umbral…

Sus cuerpos… ahora sin vida permanecían unidos por sus manos… mientras que sus miradas opuestas nunca se mirarían más… sus ojos expresaban aún la agonía que habían pasado mientras la muerte las abrazaba…

La misma expresión que otras muertes habían revelado en aquella reunión…  

Titania y Brianne se habían ido… entre los brazos de la dulce dama de la muerte…

Estaba en mi rama subida en lo alto del árbol, con los ojos casi cerrados. Cuando me di cuenta que Titania y Brianne caían.
Volé inmediatamente hacia sus cuerpos y miré a Salem, Nocturna y Brisa con gesto en mi rostro de tristeza y sin saber muy bien porque ellas.

Como es posible que ellas hayan acabado esta noche muertas…sus palabras nos han estado ayudando hasta ahora. No se han metido en ninguna pelea, solo respondían a lo que el resto quería saber.
Es tan injusto…ahora tenemos que luchar y acabar con las traidoras.

Salem, porque han tenido que ser ellas las que caigan, cuando hay otras que son las culpables…no puedo quedarme quieta y de manos cruzadas viendo como siguen cayendo más hadas.

¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! El dolor me desgarraba por dentro, las dulces amantes habían sido asesinadas por las traidoras. A pesar de mis formas me caían bien, eran las únicas que me caían bien.

Perras traidoras, hijas de mala madre. Pienso acabar con todas y cada una de vosotras personalmente. Empezaré por ti Draely, a ti ya te tengo calada. En cuanto al resto, os descubriré, os daré caza, y os rellenaré las entrañas con mis bombas hasta haceros estallar en tantos pedazos que os será imposible regresar de los brazos de la muerte. Pienso beberme vuestra sangre y brindar con ella. Ya no me importa salir de aquí con vida o no, pero os juro que mientras viva no descansaré hasta daros una muerte lenta y dolorosa. 

Zorras.

La rabia se había apoderado de mi ser, ya no podría contenerla aunque quisiera. Y francamente no quería. Convertiría aquel conclave en un matadero si con ello conseguía acabar con las traidoras, aún a costa de mi vida, aún a costa de mi cordura.

Leporidae, tranquila guarda tu ira hacia Draely. Caminé nuevamente hacia Salem, Nocturna y Brisa y les dije a ellas y al resto de hadas.

Que sepáis aquí todas que no dudaré en usar mi ballesta para acabar contigo Daphne por lo que le has hecho a Titania y Brianne. No me vas a negar lo que he visto con mis ojos, por lo que prepárate para inventarte algo bueno. Porque la ira que tengo hacia a ti no hará que cambien de idea de matarte yo personalmente.

El resto podéis creerme o no, pero yo la he visto a ella, al resto no las he podido ver pero a ella le vi muy bien.

Sentada en una esquina una lágrima cae de mi rostro.

Leporidae, di lo que quieras, estoy harta de tí y tus acusaciones junto con las demás.

Me acerco a los cuerpos y cierro los ojos para después envolverlos en unas suaves enredaderas que les seriviría de manto.

...Lloro lagrimas que bien podían ser de sangre, por el dolor que me producen, pero son de la más pura rabia...

Ellete, tu tienes el poder haz uso de el, si así lo crees oportuno, titania y Brianne, tenían el poder de descubrir sin lugar a dudas a las traidoras caídas, y a las que quieren socavar nuestra unión, ya hemos visto sus ramificaciones, cuando bien podían haber caído alguna de ellas en la noche, y haber sido por fin descubiertas...

Es muy oportuna la muerte de las amantes, digo sin dejar de llorar, pero esto no quedara así, vuestras muertes serán cobradas con las vidas de aquellas que has osado profanar nuestros espíritus y nuestros cuerpos...

Y mas que te vas a hartar, al menos mientras sigas respirando, pero créeme, el momento está cerca.

Ellete, preciosa, que sea la ultima puta vez que me dices hacía donde debo enfocar mi ira, podría pensar que intentas manipularme, y eso, querida, sería malo para tu salud. Miro desafiante al resto de hadas. El resto quedais advertidas también. 

Despierto con el grito de una hada y observo la escena, Brianne y Titania yacian muertas agarradas de la mano...Draely se acercaba hacia ellas, inconcientemente unas dagas de hielo salieron de mis manos interponiendose entre las caidas y Draely...

- NO TE LES ACERQUES, DRAELY!...- dije firmemente, me acerco a las amantes y las observo un poco...

- Leporidae, creo que tu debes encargarte de su descanzo, junto con las demas en quienes confias...cualquier acto que nosotras hagamos te parecera hipocrita y no quiero que nos sigan apuntado de traidoras...-

Asladriel pensaba que esa noche seria ella la que caeria, pero jamas penso que Brianne y Titania fueran las siguientes, apesar de sus dichos o acusaciones esas hadas le caian bien, eran bellas, hermosas y siempre dejaban un rastro de amor del mas puro...es una lastima su perdida...

Sigue con tu ira hacia Draely pero estas perdiendo el tiempo hoy con ella, aquí la culpable de esta muerta es Daphne pero tu misma.

Tu ocupate de la otra si quieres que yo me encargaré de vengar la muerte de hoy.

Salem no dudes en ningún momento que así lo haré, si hace falta que acabe con ella con mi ballesta lo haré encanta por estos ojos que han visto por fin la verdad.

Pongo mi mano sobre el hombro de la dama helada No te metas, Asladriel, esto no biene contigo

me acerco a Leoporidae y abro los brazos Aquí me tienes, lánzame una de tus bombas si quieres, matame a puñetazos si quieres, demuestra tu naturaleza agresiva, ahora es el momento, pero te avisó que después no responderé a mis actos.

Miro fijamente a Draely, mis ojos, inyectados en sangre, tan solo reflejan odio, ira.

No te lo voy a poner tan facil Draely, quiero verte sufrir, quiero que veas como te arrebato lo que mas quieres en esta vida, primero será Elthedrea, luego a Gronoly si consigo salir de aquí con vida. Y pienso disfrutar con ello. Una sonrisa aflora en mi rostro mientras profiero mi amenaza.

Haced lo que queráis con sus cuerpos Le respondo a Asladriel. Sus almas ya han vuelto con Gaia, ya no sufrirán mas. No confío en ninguna de vosotras, así que procurad no entrometeros en mi camino.

Nocturna abrió los ojos y se acerco a las demás viendo la escena. Vio a sus hermanas apenadas,amenazando a Draely,ella sin embargo fulmino con su mirada a otra hada.
Asladriel! Maldita! Has visto lo que pasa poder defender a las traidoras! Dijo el hada acercándose al claro,dejando un rastro de oscuridad tras de si.
Sus alas se abrieron mientras,sin dejar de mirarla se acerco a las amantes y se arrodillo a su lado partiendo las enredaderas de Draely con sus propias manos
Lex Talionis querida,dijo a Asladriel Alba pondrá las cosas en su sitio Dicho esto,agachándose,besó los labios de cada una de las amantes con ternura y delicadeza,tomándose su tiempo con cada una. Al levantarse,una sonrisa infantil surcaba el rostro de Nocturna. Se estiró y sonrió a todas mientras corría alrededor de Ayra
Ala! tu eres la de las mariposas. Llámalas,llámalas quiero jugar con ellas!

Apenas abro los ojos y de nuevo una discusión, llantos, y un llamativo cambio en Nocturna. Miro con una exasperante calma a las presentes mientras froto mi ojo derecho, y en un rápido movimiento me coloco frente a Leporidae.

No dudes que me entrometeré en tu camino si te arrojas sobre algún inocente y me doy cuenta.

Le sonrío mientras hablo con dulcura y mi dedo índice toca su nariz ligeramente jugetón, me giro dándole la espalda y caminando hasta colocarme al lado de Salem, lugar donde me siento.

Ellete, si tus ojos ven la verdad, tu lengua puede condenarte, deberías de ser cuidadosa con ella, pues vale tanto como tus ojos...

Sonrío con amabilidad. Me llevo el dedo índice al mentón mientras miro hacia arriba como pensativa o ausente.

Daphne estuvo callada todo el día de ayer, que yo recuerde.

Mis ojos se clavan en Nocturna.

Y aunque confío ciegamente en mis hermanas oscuras, tanto Nocturna como Salem, no puedo evitar tener mi propia opinión... Y ahora mismo hay alguien que me preocupa más...

Suelto una ligera risilla.

Pero por ahora parecen haber demasiados objetivos, así que aseguraré el mío.

Alzo la mirada ahora hacia Salem.

¿Quién crees culpable? Yo creo que Ellete dice la verdad...

Shaiya me da igual que yo ahora pueda correr peligro, pero lo que no voy hacer es que sigan acabando con las inocentes esas traidoras. Si tengo que ser la próxima que sea después de acabar con Daphne. A mi lo de que este calla o hable me da igual la verdad, pero no voy a dudar de lo que he visto.

Por fin Daphne, vuelve a abrir la boca. La primera vez lo hizo para soltar un comentario con bastante lógica, cosa que hacía falta en aquel momento y de nuevo, vuelve a hacerlo, esta vez, para defenderse de acusaciones falsas.

Si no he hablado, es porque ya me parece suficientemente bochornoso lo que está ocurriendo como para meterme en medio. Os insultáis las unas a las otras, y os acusáis sin pruebas condenando a hermanas inocentes. Pero visto que estás tan empeñada en que soy culpable Ellete, me defenderé, pues no quiero ser otra más de las inocentes aniquiladas. No sé que habrás visto, pues ni siquiera sé si has visto algo realmente. Pero creeme cuando te digo que no es a mi a la que has visto. Puedo hacer dos cosas: pensar que no me has visto y que simplemente me estás acusando porque al ver que no estaba muy activa podías eliminarme con facilidad, error que sí admito. O, creíste verme porque alguna de las verdaderas traidoras tomó mi forma y eso quiso que vieses.

Yo sólo sé que soy inocente, y sí, es cierto que no puedo demostrarlo, pero tu tampoco tienes ninguna prueba. Es sólo tu palabra contra la mía. Y dado que incluso he aceptado que pudieses ver a alguien disfrazado de mi, y que no te he acusado de mentirosa, me debes un voto de confianza. Dijo con la cabeza bien alta. No tenía remordimientos, y tenía la conciencia tranquila. Ella era inocente y no sabía qué había ocurrido ni que había visto Ellete, pero sus acusaciones, le dolían.

Claro mujer veo entre sombras a gente con melena rubía y con tu misma cara por el bosque y aquí...claro que si. Estaba siendo sarcástica.

Que vas decir tú cuando te he pillado, pues esto mismo el defenderte de que es mentira. No te estoy atacando en ningún momento por no ser activa, porque como he dicho antes eso me da igual. Lo que digo es que mis ojos te han visto a ti muy claramente entre la oscura niebla como has acabado con ellas. Puedes creerme o no estas en tu derecho como el resto de las aquí presentes. Pero sigo diciendo lo que ya he dicho, y utilizaré mi ballesta si hace falta.

Solo quiero que se acaben con las traidoras y no inocentes, no vengas con el cuento de que eres inocente como muchas de aquí presentes que ya sabemos...porque a mi no me cuela, quizás si cuele a otras pero no a mi cariño. Mis ojos ven muy claramente y no estoy ciega.

No te llamo ciega ni mucho menos. Pero aquí todas tenemos poderes, y ¿quién no te dice que el poder de alguna es el de nublar la vista y hacer ver algo que no es cierto? o.. ¡yo que sé! Cualquier otro que pueda explicar este malentendido. Soy inocente Ellete, y te lo digo con total seguridad. Tú sigue acusándome y lanzándome las flechas que quieras con tu ballesta. Mátame si así lo deseas. Tan sólo serás culpable de menguar las pocas hadas inocentes que quedamos por aquí. Dijo con la cabeza baja y aguantándose las ganas de llorar de la impotencia.

El papel de ser hada buena también se hacerlo yo muy bien. Estoy harta de ver como muchas son culpables y se les da muy bien fingir el ser inocentes cuando son realmente culpables...

Que tengo que creerte a ti por tu palabras? y dejar de decir lo que he visto con mis propios ojos. Si eso para ti es menguar a las pocas hadas inocentes lo siento mucho. Sé muchas cosas de los otros cónclaves para que sepas.

Y por eso digo lo que he dicho, que a las traidoras se les da muy bien el camelar con sus palabras al resto de hadas para que confíen en ellas y luego acabar una por una con todas. Pero esta vez no pasará esto en este cónclave.

Sé que me estoy exponiendo a las traidoras pero confío en mi misma para acabar con ellas.

Miro a Nocturna entre sollozos, dos hermanas más han muerto. Hago que un millar de mariposas la envuelvan jugueteando con ella, mientras otras más se van hacia los cuerpos de Titania y Briene, en un gesto de despedida.

Alba, preciosa, aqui tienes tus mariposas.