Partida Rol por web

Dominik le hace señas a Dimitri, de seguro él mismo no era el adecuado para tranquilizar al joven oficial. Pero si la cosa se ponía más caldeada, no quedaría otra opción que interferir.

Se acerca sutilmente a Sweet y al responsable muchacho.

A pesar de que lo que realmente me apetece es salir y dejar inconsciente al guardia... Obedezco y hago uso de la Presencia Invisible.

Straad de escuchar a hurtadillas muy atentamente a la situacion como si fuera un depredador esperando a que suceda algo (De todos modos los humanos no son mas que comida o medios para conseguir cosas).

Qué es presencia invisible? En mi manual ningún poder de Ofuscación tiene ese nombre.

El joven oficial los encara, flanqueado por Dominik y Straad, los filos del frente presentado suavizados por la señorita Sweet. Está esperando una respuesta.

Parece que sus camaradas demoran en actuar, si la cosa sigue así  puede resultar peligroso para la misión. 

Termina de acercarse, está al lado del joven y  problemático oficial.

-Parece que alguien colocó eso en nuestro camión sin  nuestro permiso. Es una terrible confusión. 

Dominik no podía adivinar si había encontrado las armas por ser un excelente oficial y cumplir con su deber o que en realidad era buscaba algo para obtener algún beneficio a través de la extorsión. 

- Si verifica nuestras credenciales verá que somos personas  de buena procedencia, con algún que otro lugar de importancia. No creo que hacerle pasar un mal momento a esta muchacha, en realidad mucha gente podría enojarse por entorpecer nuestro acceso. 

Mejor dejemos todo como está.

Dominik mira fijamente al oficial

Con una moneda de oro de antes de la revolucion  entre sus dedos observó al oficial...

"Te ofresco un trato dejanos pasar y serás recompezado detenos y enfrenta tu destino. La primera es una opción donde ganas, no hay que ser tonto"

Mientras decia esas palabras su rostro se distocionaba hasta adapatar la imagen del diablo acostumbrada, luego de decir la frase su rsotro volvio a parecer el de un simple mortal.

El color escapó de la cara del joven mientras, lentamente y temblando, les devolvía sus pasaportes y tomaba tímidamente la moneda de la mano de Straad. Su intimidación, más los hechos expuestos por Dominik, habían sido suficientes, y nadie parecía notar nada.

Sweet se quedó al costado de la camioneta unos minutos, para mejor esconder las armas.

"Mil perdones," dijo Sweet cuando subió, su voz arrepentida y frustrada. "Lo había escondido perfectamente, Dimitri, no sé cómo lo vio. Qué bueno que el Señor Straad se encargó... sabía que debía sobornarlo, pero..."

Exhausta, los llevó a Berlín del Este, donde, una vez en el hotel, colapsó. Había pasado todo el viaje murmurando disculpas, como si delirara y tuviera miedo.

Una vez allí, se habían convertido sin duda en el primer equipo de la Camarilla en entrar a las tierras soviéticas desde la revolución. Los tres eslavos están más cerca de casa de lo que pudieron haber imaginado hace sólo un mes.

- Me gustaría  recorrer los suburbios, observar el movimiento nocturno. Mis  ghouls recorrerán las calles, atentos a lo que una animal  puede notar como peculiar. 

Primero que nada, buscar vástagos en actividad, cazando o rondando cerca de  humanos.

Ordeno a Sweet que haga un análisis del edificio en el que nos alojamos y sus alrededores. Quiero que compruebe puntos débiles, rutas de entrada y de escape y que se preocupe por recordar los rostros de todos los que allí se encuentran.

Yo me voy a recorrer un poco las calles, especialmente las zonas más marginales y peligrosas, donde pueda encontrar a toda esa gente indeseable (carteristas, yonkis, camellos...). Quiero saber qué se cuece en el entorno del ganado de la ciudad.

Comenzó su búsqueda por la zona céntrica, pero  no pudo, demasiada gente,  mejor buscar en zonas mas alejadas  y que sean posibles lugares con actividad cainita como parques, cementerios y hospitales. Puede que algún que otro club nocturno 

"Quedemos en reunirnos en una hora determinada en un punto central antes  y  establescamos u punto de reunión luego de hacer nuestras investigaciones"

Merodearé por alguna iglesia importante aver si encuentro con algun "conocido", me mantengo estando al acecho de manera sigilosa.

Haciendo búsqueda de campo, sin acceder a fuentes de información que te guíen, das con la Iglesia Ortodoxa Rusa local, la cual tu familia auspiciaba financiera e ideológicamente y les servía como organismo de control y poder sobre los campesinos, mercaderes, y nobles menores. Oficialmente, se mantenían neutrales a los negocios de los cainitas, y sólo los Obispos y Arzobispos estaban pendientes de sus actividades, cuando no eran directamente Ghouls o Vástagos de un importante Señor Feudal. No había ningún motivo para pensar que traicionarían el rito de confesión, por ejemplo, si buscaras allí respuestas.

A éstas horas de la noche, la Iglesia seguía abierta, las puertas invitantes y el interior acogedor.

La zona céntrica fue demasiado para los instintos afinados de tus perros, al igual que los centros de vida nocturna. Los suburbios mostraron un entumecimiento de vitalidad que te hizo sentir que cualquier cosa de la que se alimentara un vástago tendría sacarina, así que ni te molestaste.

Los parques tenían actividad, pero principalmente macarras que, aunque fueran vástagos, no serían de alto rango. Estaban, sin embargo, involucrados en actividades que parecían ritos primitivos, y no se estaban intoxicando con alcohol, como el joven y menos prudente Ganado suele hacer.

En los cementerios ves actividad, la cual sería sabio no molestar. Parecía un tipo de rito anti-natural, pero desde esa distancia, bien podían ser cánticos guturales agustinos.

Los hospitales siempre eran centros neurales secundarios para los cainitas, y al introducirte en ellos, había posibilidad de investigar.

"Me quedaré vigilando el fuerte, Dimitri," te dijo. No usó ningún apodo ni un tono confianzudo. Obviamente seguía avergonzada por fallar al ocultar las armas. "Confía en mí y vuelve a salvo. Mañana en la tarde iré a vigilar la frontera para asegurarnos de que el resto del grupo llegue."

Ingreso a la iglesia ¿que es lo que veo?

Ésta debería ser tu mayor pista. En el camino, no habías visto ninguna Iglesia Católica, las cuales eran las más obvias sedes del Sabbat. Cualquier información que consiguieras, también, podría hacer que el grupo gane más interés en asediar tu castillo y devolverte tus tierras.

El lugar está vacío tras el servicio nocturno. Ves a un monaguillo apagando las varias velas, casi consumidas por las ofrendas de fieles durante el día, y un clérigo ortodoxo en el banquillo más cercano al altar de la nave. El monaguillo se te acerca. Es un niño rubio de quizás doce años, alto y fornido para su edad, que probablemente esté siendo recogido pronto por sus padres. "El Padre Julianoff está rezando, ¿viene a confesarse? Debería acabar pronto, lo puede esperar aquí."