Partida Rol por web

La calma tras la tormenta

5.0 Intereses Comunes

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08/02/2011, 17:03
Maul

Er....Maul queria añadir cosas pero las mentes de los demas iban a marchas forzadas y la suya a trote cochinero de modo que la mitad de las veces se quedaba pensando en la anterior frase, no obstante parecia que habian llegado a algo, ya que el cardenal sonreia, si era como con su antiguo jefe, esa sonrisa significaba horas extras haciendo pedazos herejes...oh, si por favor, Sigmar sea loado...

Disculpe pero.¿no se supone que la hechicera se va a marchar con el ascuas?..pregunto Maul..quiero decir, aunque no parece que la respete para nada, el ascuas ha venido a sacarla de aqui; la unica manera de obligarla a quedarse con nosotros, es decir, un lugar donde tenerla vigilada y aplastarla el craneo a la primera gilipollez.. cosa que no tardara mucho en suceder..mascullo esto ultimo..ehhh, decia yo que..recupero el discurso...lo soltaba todo de carrerilla y algo atropelladamente...

Que la unica manera es a traves de una acusacion seria de herejia, si los tres aventureros firman lo mismo de wolfgang ya son tres testigos, sea magister, sea el patriarca eso es algo muy serio como para tratar de esconderlo...es mas, contratemos a los espadas como medida de seguridad, que expien su pecado a ojos de Sigmar combatiendo esa cosa; en cuanto la encontremos podremos destrozarla y plantarle en los morros al wilenhof que la cago en sus deberes....a ver como se libra de esa....

 

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09/02/2011, 23:17
Heinrich Arztmann

—Por mucho que me guste la idea de Herr Maul, no creo que el Magister ni los Colegios se muestren cooperativos. Con o sin acusación de herejía —dijo Heinrich—. Al fin y al cabo es la palabra de unos mercenarios contra la de una colegiada.

El interrogador no dijo más mientras pensaba algo más que aportar.

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09/02/2011, 23:13
Verner von Neuman

Verner miró a Maul mientras este le hablaba y asintió a las palabras que le dijo el enorme hombre.

-Sí, es cierto Artzmann. Pero con esa acusación, y el testimonió de esos tres, lo van a tener muy mal para defenderse si se marchan de aquí de rositas sin colaborar, y encontramos cualquier cosa que la hechicera esté tratando de esconder. Le dijo a Maul. Ahora están ahí fuera hablando, no se que se traen entre manos, pero si todavía no han vuelto a por su gente, entonces quiere decir que tienen mucho de lo que hablar. Tal vez cuando vuelvan estén abiertos a negociar sobre las competencias que nos corresponden a cada uno de los implicados en esta cuestión. Y como acaba de sugerir herr Maul, la posibilidad de indulto ayudándonos en caso de que se demuestre que la hechicera es culpable de herejía, azuzará a esas pobres almas a colaborar.

Verner respiró hondo mientras cabilaba.

-Señor Artzmann. Fue usted quién habló con Wolfgang. Le entregó al interrogador el papel que anteriormente Heinrich le había dado a verner, con el testimonio firmado de Wolfgang. ¿Quiere hacer usted los honores de recoger dos firmas más en este papel? 

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09/02/2011, 23:31
Verner von Neuman

Los templarios parecieron haber terminado de hablar y Verner se apartó del grupo para mirar fíjamente a las tres personas detenidas que aún seguían dentro de la celda.

-Dama y caballero. Les dijo fríamente a Alvaro y Lollenda. Su compañero Wolfgang ya ha tomado su decisión antes de que yo llegara, y no sabemos cuanto tiempo disponemos hasta que ese Hechicero de Batalla regrese a por ustedes. No tengo ni la más remota idea sobre lo que puede estar hablando con la que ha sido su patrona hasta ahora, pero mi olfato me dice que es lo suficientemente importante como para no haber vuelto ya a por ustedes. De momento tengo las manos atadas y si ese hombre lo desea se los llevará de aquí, pero, hizo una pequeña pausa, eso no quiere decir que su patrona y ustedes vayan a quedar libres de sospecha, solo significará un traspaso de competencias, y les puedo dar mi palabra, de que el asunto no acabará aquí. Tomó aire. Solo será cuestión de tiempo otro traspaso y que volvamos a vernos, como le he dicho a Freudenfeuer, cuando eso ocurra... Verner bajó la cabeza, y escupió a una esquina de la celda luego la volvió a levantar y su rostro había pasado de ser la faz de un hombre calmado, a ser el semblante enrojecido y poseido por la locura de un fanático de Sigmar...cuando eso ocurra, vuestros culos serán míos. Así que más os vale tener unas buenas cartas con las que jugaros el indulto y colaborar como lo ha hecho vuestro compañero... ¡Artzmann! Gritó. Enséñeles el documento y déjeles claro lo que afirma el señor Ehrlichmann.

Verner esperó a que Heinrich les mostrara el documento firmado por Wolfgang.

-Ahora, ¿Tendréis la sensatez de colaborar y tener algo a lo que agarraros cuando llegue el inevitable final confirmando el testimonio de vuestro compañero, o preferiréis jugárosla con la hechicera que os ha estado llevando de aquí para allá sin daros ninguna explicación?

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09/02/2011, 23:31
Heinz von Freudenfeuer

-La verdad, dudo mucho de que esta gente esté enterada de nada de lo que haya ocurrido en los alrededores de donde fué asaltado el carro. Sus investigaciones se han centrado en la ciudad, todo el mundo en Altdorf lo sabe. Llevan varios días investigando el origen de la plaga que se ha iniciado en el Barrio Pobre, e incluso han quemado medio barrio en dicha investigación. Le respondió Heinz. Sin embargo una colaboración sería beneficiosa para ambas partes, desde luego... puesto que tú, celeste incompetente, no pareces tener mucha idea de por dónde puede estar el artefacto perdido, y da la impresión de que pese a tu superioridad mística, sus medios para la investigación son superiores a los tuyos. Solo hay que ver cómo os han encontrado a vosotros, y eso que todavía no tienen claro que relación teneis con ese blasfemo objeto.

Heinz se quedó pensando.

-Si pretendes colaborar con ellos para encontrar el artefacto, deberás andar con tiento. Puedo hablar con su líder y hacer que sus hombres colaboren contigo, pero no puedo asegurar tu seguridad en el proceso, ninguno de los dos estará por encima del otro, y allá a donde vayáis las leyes pueden incluso beneficiarlos y ponerlos por encima de tí. Eso quiere decir que deberás tenerlos satisfechos y colaborar con ellos lo suficiente como para que no duden de tí, o las cosas se podrían torcer, y entonces no estaré yo allí para ayudarte.

Notas de juego

Esta es la carta:

 

Cita:

De: Fausto Von Adalwäin.

Para: Meinrad Rüdiger.

Mi muy estimado Meinrad,

Acudo a usted como último recurso en mi disparatado intento de acabar con el mal que el objeto que le remito mantiene en su interior. Sé que el riesgo que corro enviando esto por correo dados los tiempos que corren tras la Tormenta es más que inmenso, pero no nos queda otra opción.

Mis investigaciones solo confirman lo que ya le conté en otras misivas Herr Rüdiger, el Forúnculo de Nurgle causa una muerte lenta, dolorosa y horrible mediante la enfermedad. Solo los dioses saben cuando se activa y porqué, seguro que esos malditos sectarios tuvieron algo que ver con sus intenciones. Tampoco he conseguido saber que tipo de beneficios reporta el Forúnculo que hace que todos esos locos vayan detrás de él.

Espero las primeras conclusiones cuando reciba esto.

Hasta entonces, que Sigmar nos proteja.

Fausto Von Adalwäin.

 

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10/02/2011, 00:57
Wolfgang Ehrlichmann

Wolfgang tenía el rostro inusualmente serio, inescrutable para aquellos que no lo conocieran. El charlatán parecía una figura de cera de sí mismo, con goterones de sudor rodando por su frente como si el calor sofocante de la sala lo estuviera derritiendo. No movía un solo músculo y había metido los pulgares por dentro del cinturón, dejando descansar sobre la cinta de cuero el peso de sus brazos.

Sin embargo, para un buen observador o para alguien que hubiera sido su compañero de correrías como lo eran Álvaro y Lollenda, Wolfgang era un libro abierto. En sus oscuros ojos había una clara advertencia, reafirmada por el ligerísimo temblar de su ceja derecha y una casi inexisistente inclinación de la comisura de sus tensos labios. "Firmad, que nos la jugamos", parecía querer decir cuando observó el documento y luego a Álvaro y Lollena, alternativamemte. "Firmad que estos no se anda con tonterías y lo mismo les dan ocho que ochenta".

Wolf se moría por salir de esa pocilga y emborracharse a la salud de tanto cabrón y del enano muerto. Pero tendría que esperar. Tendría que esperar a que toda aquella situación llegara a un maldito desenlace. Y, ahora que se percataba del detalle, notaba la vejiga llena. No habían descansado, no se habían repuesto de las heridas de los combates, no habían comido casi nada y apenas habían bebido. Y encima, las necesidades fisiológicas apretaban. ¡Maldita fuera cien veces aquella Gabriella!

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10/02/2011, 23:00
Heinrich Arztmann

—Por supuesto, Su Eminencia —contestó Heinrich aduladoramente.

A continuación, sacó un pergamino y lo mostró ante los mercenarios.

—He aquí la confesión firmada por Herr Ehrlichmann en la que relata los sucesos acontecidos desde su contratación por Frau Von Hauss hasta el día de hoy —sonrió antes de continuar—. Incluida la coacción ejercida por la hechicera donde les amenazó con el uso de sus poderes si no cumplían su contrato. Algo que, por si no lo saben, es ilegal en el Imperio. Como su compañero puede constatar —lanzó una mirada de advertencia a Wolfgang— en este documento ustedes aparecen como víctimas de una hechicera que abusó de la autoridad conferida por la ley y en ningún momento como culpables.

El inquisidor movió los brazos enérgicamente mientras seguía con su pequeño discurso, que empezaba a tomar tintes de fanatismo.

—Es nuestra orden la que se encuentra entre el individuo común y aquellos como Frau Von Hauss, que piensan que pueden hacer lo que les venga en gana sin importar a quien afecten de por medio —clavó fijamente la vista en los dos mercenarios—. Sólo queremos que confirmen con su rúbrica que Herr Erhlichmann dice la verdad y no ha lanzado falsas acusaciones a toda una colegiada. Algo que, por si también lo desconocían, se considera una falta de gravísimo orden y que no nos tomamos a la ligera.

La pausa que el interrogador hizo para mirar la mancha de sangre del suelo, único signo que delataba el paso del enano por la celda, dejó claro cómo se las gastaban en la Inquisición.

—¿Y bien? Necesitaré sus nombres al completo para incluirlos en la confesión.

En los ojos de Heinrich brillaba la satisfacción. El inquisidor les ofrecía dos alternativas: vender a la bruja o vender a su compañero de armas.

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13/02/2011, 23:43
Maul

Les tenian cogidos por los huevos...canturreo Maul en su mente, ya habia hecho todos los aportes que consideraba necesarios, de modo que ahora callaria la boca como un buen soldadito antes de meter la gamba y mas adelante, dejaria que su martillo hablase por el; ahora era labor del interrogador, un jodido profesional como la copa de un pino que les habia demostrado a los espadas el marron en el que estaban.

Al menos si eran listos, podian firmar el perdon de Sigmar o de los comose llamen dioses elficos de la susodicha en su alegre banda de espadachines, la pozada ya estaba cavada, salir o ser enterrado eran cosas completamente suyas...

 

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14/02/2011, 02:38
Lazár Harish

Esto parece llegar a su fin, menos mal que estos al menos parecen razonables. Aunque me parece un poco raro que la elfa no se haya puesto pesada con aquello de pertenecer también a una raza muy por encima nuestra, pero claro, viendo como había acabado el otro supongo que no le quedan ganas de alardear sobre su procedencia, espero que a la bruja también le aprieten las tuercas... en el potro.

 

 

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14/02/2011, 17:11
Lollenda

Lollenda lanzó una mirada a Alvaro, y luego a Wolfgang, entendiendo perfectamente la mirada que este le dedicó en ese mismo momento, cargada de un significado que no podía obviar. La elfa se adelantó un paso y habló:

-Esta ya no es mi tierra, pero mi futuro en la que debía de serlo hace mucho que se nubló y solo acataré las leyes de los míos allí dónde están vigentes, por lo que por mucho que me duela en el orgullo, respetaré las leyes de la casa que me acoje. Dijo son seriedad antes de poner su firma en el pergamino ofrecido por Heinrich bajo su nombre, escrito con una elegante y estilizada letra que delicada mano escribió con rapidez, pero con elegancia.

La elfa alzó la vista para cruzar sus fríos ojos con los del templario que le había ofrecido el pergamino.

-Además, tengo la suficiente cabeza como para ver que esa mujer nos ha estado utilizando, y si he consentido eso hasta ahora, ha sido a causa de la remuneración por el trabajo.

Una vez hecha la firma, se colocó de nuevo en el lugar junto a sus compañeros, esperando a la decisión de Alvaro.

Notas de juego

Penejoteada.

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15/02/2011, 22:35
Director (Akrabu)

Notas de juego

¿Sabemos algo de Dragut? Lleva una semana sin conectarse. Esperaré un poco más y si no, lo penejoteo.

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15/02/2011, 22:37
Director (Akrabu)

Notas de juego

¿Algo más que quieras decirle a Heinz para lo de negociar con los templarios, o procedo a darle a él la iniciativa?

Si dejamos la negociación en manos de Verner y Heinz, lo solucionaré con tiradas sobre sus perfiles para ver si llegan a un acuerdo, y aplicaré más o menos modificadores dependiendo de lo que sepan sobre el asunto.

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15/02/2011, 23:44
Wolfgang Ehrlichmann

Pues no, de Draugt si que no se nada : /

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16/02/2011, 22:33
Gabriella Klara Von Hauss
Sólo para el director

Ellos están más acostumbrados a las persecuciones, pero dudo que puedan lidiar con un asunto de este calibre, si lo dejamos solo en sus manos la cosa ira a peor.

Una colaboración podría beneficiarnos a ambos

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22/02/2011, 20:08
Heinz von Freudenfeuer

Heinz miró con su característico ceño fruncido a Gabriella, y los brazos en jarras.

-De acuerdo. Veré qué es lo que puedo hacer. Le respondió. Pero no cuentes con que pueda otorgarte autoridad sobre ese grupo. El tema de las competencias es muy delicado, y más en una situación como esta. Además... Miró de reojo a la puerta de la celda. El orgullo de esa gente no permitirá que les des órdenes. Procura ir con cuidado. Y ahora espérame aquí.

Heinz se giró con sus autoritarios ademanes, y caminó rumbo a la celda.

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23/02/2011, 16:23
Gabriella Klara Von Hauss
Sólo para el director

Grácias,. te agradezco tu ayuda, y no te preocupes, lo conseguiré.- Le dijo antes de que Heinz se marchara

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27/02/2011, 15:39
Alvaro de la Mancha.

Aun viendo que era una encerrona, volvi a leer el manuscrito tranquilamente no entendia algunas de las palabras, pero era pura verborrea de los cazadores de brujas.

Me acerque al manuscrito sabiendo que era la condena de Gabriella y puse mi rubrica, pero justo antes de terminarla levante la cabeza para mirar ha Von Neuman, queria intentar saber por su cara, hasta que punto estabamos metiendo la pata. Luego mire a mis compañeros y asenti.

Notas de juego

Lo siento me quede pensando que hacer, y al final no escribi nada.

Ademas he conseguido curro :) lo cual me resta cierto tiempo, que me absorve una campaña de Mordheim.

¿Puedo hacer alguna tirada para intuir algo en la cara de Von Neuman? Puedes pjeotizar la tirada. (Toma palabrota)

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28/02/2011, 16:36
Director (Akrabu)

La fugaz mirada que Alvaro le lanzó a von Neuman no le rebeló nada más que su semblante, serio e imperturbable como una de las numerosas estatuas de mármol erigidas a Sigmar en las plazas de los pueblos y ciudades de todo el Imperio.

Si algo pasaba ahora por la mente del inquisidore, este no lo mostró con sus gestos faciales, y continuó oculto tras su faz.

- Tiradas (1)
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28/02/2011, 16:43
Heinz von Freudenfeuer

Mientras los arrestados terminaban de confirmar las palabras del hombre llamado Wolfgang bajo la atenta mirada de los templarios, los pasos de alguien acercándose a la celda resonaron por el pasillo, un momento antes de que el Hechicero de Batalla hiciera acto de presencia en la puerta.

-Herr Neuman. Despues de tener unas palabras con esa incompetente que se hace llamar hechicera, me gustaría hablar con usted sobre el asunto que nos tiene aquí liados. Dijo con voz grave, y palabras más calmadas que las proferidas antes de marcharse en aquella misma celda.

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28/02/2011, 16:51
Verner von Neuman

Von Neuman podría haber fulminado con la mirada al hombre que lo reclamaba para hablar desde la puerta de la celda cuando desvió su vista en aquella dirección. Luego volvió a girar la cabeza y se acercó a Heinrich.

-Deme eso Herr Artzman, puede que me sea necesario. Le dijo a su hombre extendiendo la mano y quitándole el pergamino recien enrollado en el que Alvaro acababa de dejar su firma. Esperen todos aquí. Añadió para todo el mundo antes de encaminarse hacia la puerta, una vez tuvo el pergamino en su mano.

-Y ahora, confío en que por el bien de las relaciones entre los colegios de la magia, y los que nos ocupamos de hacer cumplir las leyes de Sigmar, haya entrado en razón y que tenga intención de decirme algo útil. Le dijo al hechicero que lo miraba sin amilanarse. No tengo ninguna intención de seguir perdiendo el tiempo con tanta chorrada, y mi paciencia ya se ha acabado.

Con aquello último, los dos hombres desaparecieron de la vista de los presentes en la celda.