Partida Rol por web

Robert, con un agil movimiento se acerca a la puerta en silencio. Asoma un poco la cabeza para poder observar por el cristal de la puerta y observa como un grupo de cuatro hombres vestidos de militar otean la calle en busca de algun rastro. Estan subidos en un tanque de guerra norteamericano que supones va pilotado por un quinto hombre.

El tanque ha sobrepasado vuestra posicion y parece que se dispone a girar hacia la derecha por una calle. Segundos despues, el tanque ha girado y se ha marchado.

Me aparto rápidamente de la ventana, me vuelvo hacia los demás y digo: Ya se han ido pero... eran 4 tipos que iban encima de un tanque americano,y miraban hacia todas partes como buscando algo, esto es de locos, no sé a dónde va a llegar

Esto cada vez me huele peor .

Comento parapetado detras de la puerta.

creo que tendriamos que volver a avisar a los otros , si van al hospital quizas entren y les pillen , seremos la unica oportunidad de salvarlos.

- Puede que tengas razón Hugo. Aquí no hacemos nada.

Aprieto la mano de Lissa con la izquierda, mientras con la derecha vuelvo a empuñar mi arma.

- Cuando digais.... espero que los demás sigan bien.

Vale, pues vámonos. Agarro mi escopeta, me acerco hasta la puertta, miro hacia afuera y si no veo a nadie, abro la puerta y salgo, mirando a izquierda y derecha.

Robert abre la puerta lo mas silencioso posible, parece haber hecho esto mas de una vez. Mira a ambos lados y una vez se ha cerciorado que en la calle no hay nadie, sale hacia el exterior.

- Hugo, ¿no van hacia la parte de atrás del hospital?- pregunto alarmada- Deprisa, habría que llegar a la parte delantera para avisar a los demás....

¿Por qué demonios nos ataca el ejército? ¿No deberían ayudarnos contra los monstruos?

Carrie, no levantemos falsas sospechas, a lo mejor no quieren atacar el hospital, a mi me parece que están haciendo una vuelta de reconocimiento. Es posible que esten buscando a la niña. Aun asi, creo que deberiamos ir hacia el hospital por donde vinimos y avisar a nuestros compañeros. Rapido... - Comienza a correr pistola en mano hacia la parte trasera del hospital.

Sólo una breve sonrisa a la pequeña que va se aferra con fuerza a mi mano, antes de salir las dos corriendo detrás de Hugo.

Recordando la última vez que me separé del grupo el espectáculo que encontré, mientras corro sólo puedo pensar Dios mio, si de verdad estás ahí, si de verdad nos vigilas, por favor, que estén todos bien, que no haya pasado nada más.

En mi carrera hacho un vistazo atras para ver si me siguen y la vez ver que no nos sigan.

Correis agazadapados por los laterales de la calle hasta llegar al hospital. Entrais por la zona de urgencias y accedeis lo mas rapido posible al bar, donde pasasteis la noche.

Alli se encuentran Nick, Jack y Wilson mirando por una ventana con cara de incredulidad. Tras ellos, Johnny y el calvo, tumbados en dos camillas.