Partida Rol por web

Por fin tras las últimas compras* partís en vuestra misión hacia la base de los montes Korthos, donde están las cuevas que debéis explorar según os ha dicho el maestro Shaine. Salís de la gran urbe de Absalom hacia el oeste, por la carretera que lleva a Diobel en el otro extremo de la isla de Korthos.

En cuanto salís Janira os detiene un momento y os dice:

- Esta que pasamos ahora es la puerta oeste, en el barrio de su mismo nombre. Ahora avanzaremos por la carretera que es mucho más segura que caminos alternativos más rápidos, pero menos seguros, y tampoco tenemos prisa si mantenemos un buen ritmo de avance. Así que no os quedéis atrás. ¿Veís aquella arboleda de la que surge una torre? Pues es nuestro primer punto de referencia, hacia allí nos dirigimos y haremos el primer descanso. Unas diez millas. Avancemos.

Tuka con entusiasmo dice: "¡De acuerdo adelante!"

Duric emprendió la marcha escuchando atentamente las explicaciones de Janira. - Debemos de seguir un buen ritmo y no retrasarnos para llegar antes de la luna llena, ¿no, Janira?

Sin girarse y dando saltitos de emoción dice:

- Si, si Duric, avancemos hacia la exploración y la aventura, pero guardar fuerzas que el camino es largo!!

Zatqualmie avanzó junto a sus compañeros. Vestía para la ocasión una poco discreta túnica de colores anaranjados y apoyaba su paso utilizando una especie de bastón de madera y acero con formas irregulares, posiblemente fabricado por él mismo.

Hogo seguía a sus compañeros en silencio. Él no podía ver todas las cosas que nombraba Janira, pero prestando atención podía oírlas: El algarabío de la ciudad, los pasos de los demás sobre la carretera empedrada, o los pequeños animalillos de la arboleda.

Tuka se pasa el trayecto buscando con la mirada en los alrrededores. Observando y moviendose cerca del grupo según avanzamos.

Encuentras una pieza de caza pequeña, un conejo y algunas raíces. Lo suficiente para tres personas.

Tuka caza un conejo y algunas raíces pero no son suficientes para todos, a si que Duric piensa que debería ayudarle a encontrar algo más para comer. A si que saca su arco corto y se dispone a buscar alguna presa.

- Tuka espera que te ayude, necesitaremos más provisiones, me temo que con eso no es suficiente para los cinco. -

Duric se interna con Tuka para intentar cazar cuando Janira les dice:

- Mmm, queridos compañeros, si seguimos perdiendo el tiempo puede que no podamos llegar a tiempo o tengamos que reducir el tiempo de descanso, cosa que no se suele agradecer. Creo que llevamos raciones de viaje suficientes para dos días así que no creo que sea necesario perder más tiempo buscando alimento. Desayunamos bien esta mañana y no creo que haga falta, aunque podría equivocarme!!

Duric se queda unos segundos pensando, - Llevas razón Janira, si necesitamos alimento más adelante podemos cazar o buscar lo que necesitemos, debemos darnos prisa en llegar a nuestro primer punto de referencia. - 

El sol avanza en su tránsito diario hacia el oeste, cada vez está más alto y casi está llegando a su cenit. En ese momento podéis vislumbrar la torre a unos 200 pies. Janira os mira y sonríe:

- Bueno, parece que toca descanso. Y comer algo para continuar el viaje hacia las montañas. ¿Podéis ver que ahora las montañas ya nos dejan ver alguna de sus características más reconocibles?¿Véis allí el pico de la arpía? Aquella zona que parece una mujer con alas y la nariz picuda. Algunos dicen que esa figura cambiará si alguna vez alguien les quita el dominio a las arpías de las zonas altas de las tierras de los Túmulos. Es más, hay quien asegura tener un antepasado que vio dicho cambio, pero, no está documentado y seguro que tan sólo es un cuento de viejos!!

Si es muy curiosa la geografia de esta isla.

Hogo se sienta en una roca mientras deja su mochila en el suelo y saca algo de comer. Mientras sus compañeros hablan del entorno se mantiene callado y escucha, tratando de hacerse un mapa mental de la zona.

Tuka prepara lo recogido y reparte lo que hay para comer. Viendo que hogo esta comiendo ya lo reparto entre los demas. Lo siento Hogo no había sufiente para todos. Intentaré hacerlo mejor la proxima vez.

El gnomo hechicero caminó entusiasmado junto al resto del grupo, llevando a sus espaldas una pequeña mochila atada con una espece de arneses que rodeaban la cintura y pecho de la túnica de colores chillones del pequeño gnomo como si dicho mecanismo sirviera para evitar que esta se desprendiera de él por accidente.

- ¡Así que esa cima está moldeada por las arpías, por ello esa forma ¿eh?! -exclamó acariciandose la barbilla ante la historia de la mediana pathfinder - ¿pero en que afecta que tenga esa forma al lugar, acaso las arpías han invadido una zona que no les pertenece? - preguntó con interés.

Janira sonríe a la pregunta del gnomo y le dice:

- Consulta tus notas en el cuaderno, dije en La panza del cerdo que los centauros dominan las llanuras y los bosques, los minotauros los bosques y zonas de ladera y las arpías las zonas altas. Por eso hay quien dice que si algún día otras razas son capaces de derrotar a las arpías, esa figura cambiará. ¡Pero es un cuento de viejas! Si no lo tenéis anotado os aconsejo que lo anotéis ahora en vuestro diario. Así como el camino que hemos hecho y el que vamos a hacer.

- Ah, ya entiendo... así que... la zona se transfigura según las criaturas que las habiten... interesante - dijo extrayendo la libreta con letra dimininuta de su mochila y anotaba con una pluma mientras caminaba realizando un inevitable zig-zag que podría hacer tropezar a alguno de sus compañeros. - ¡Fabuloso! Esto de convertirse en un pathfinder es más emocionante de lo que pensaba... la verdad me preguntó si en vez de arpías, calaramos fuego a los picos, si estos tomarían forma de llama... - murmuró muy seriamente.