Cuando despertáis vuestros ataúdes están abiertos, estáis en una habitación un poco cochambrosa, no es demasiado bonita, y no está nada amueblada, de hecho los único que se podría considerar mueble que está en la habitación son vuestros ataúdes y dos sillas donde están sentadas la acompañante de Eric y de Elizabeth, podéis ver que Tom es el único que todavía sigue dormido.
Me desperezo un poco, una costumbre muy humana que realmente nada tiene que ver con mi ser vampirico, como si de una niña pequeña se tratase, froto mis ojos y bostezo, agarro mi peluche y camino casi arrastrando los pies hasta mi "Madre", tengo cara de sueño y me muevo de forma pesada y cansada, muy pocos podrian distinguir mi forma de moverme de la de un humano normal.
Me levanto de mi letargo sintiéndome algo más sediento que anoche, como siempre. Día a día cada vez la sed era mayor hasta que un día tocaba alimentarse.
Me dirijo a una ventana y tras asegurarme, como hago siempre, de que no hay luz solar, miro a través de ella para ver si logro localizar dónde nos encontramos.
Al mirar por la ventana ves un barrio mal iluminado, parece bastante marginal, poca gente hay por la calle, deduces que es tarde.
el mensaje es solo para ti :)
Abres los ojos, ves que los demás ya se están moviendo, ninguno se ha preocupado de que siguieras durmiendo.
solo para ti :)
te contesto aqui, me parece bien que duermas invisible, para la proxima lo pongo :)
borro tu post :)
Me desperezo poco a poco... Me levanto del ataud, miro a mi alrededor y pregunto a mis compañeros: - ¿Dónde estamos? -
Repentinamente caigo en la cuenta de que mi aspecto no es el más idóneo para dar los buenos días a nadie, así que busco un espejo alrededor y trato de adecentarme un poco.
Véase que despierto siendo un monstruo horrible pero intento ofuscarme para parecer el tipo normal del otro día.
la habitacion esta desierta, no tiene ningun espejo.
- Que bonito- digo en cuanto veo el verdadero aspecto del nosferatu- Me gustas mucho mas asi-
Respondo a la niña que parece interesarse por mí: - ¿En serio? Para mí es más cómodo, pero los humanos, y a veces hasta algunos nosferatu, se sienten incómodos con mi presencia. Por eso suelo ocultarlo. - Cambio de aspecto a algo más agradable a la vista, me dirijo hacia la puerta de la habitación y le pregunto a las dos humanas: - Vosotras lleváis despiertas más rato. ¿Dónde estamos? -
La compañera del malkivian es la que contesta. - No sabemos dónde estamos, nos han vendado los ojos y no hemos podido ver por dónde íbamos, un hombre dijo que ahora vendría, que iba a buscar algo que os podía venir bien.
Ví que Anabeth no se sorprendía, le había enseñado bien...y eso sólo en una noche, lástima que el príncipe no me haya dejado convertirla...más adelante, sería una Malkavian estupenda.
-Querida- Dije esforzándome por hablar bien para ella -¿Sasbe is tardará mucho?- Le pregunté mientras pasaba un dedo por su mejilla-
No debe de quedarle mucho, se supone que tardaba poco, y lleva unos 15 minutos fuera.
Miro muy atentamente a la chica que esta hablando, es mona y sobre todo humana, podria ser muy util y ese Malkavian parece que se lleva muy bien con ella, me acerco despacio y la miro fijamente a los ojos- ¿Quieres jugar conmigo?- pregunto de forma dulce y poniendo cara adorable.
La chica sonríe a la niña. – Lo siento, pero creo que no es el momento para jugar ahora, lo dejaremos para un futuro.
Miro a la mujer con cara de tristeza como si estuviera apunto de ponerme a llorar- Porfa- digo de una forma muy lastimera, como lo haria una niña pequeña de verdad.
Mientras Elizabeth hace chantaje a Anabeth la puerta de la habitación se abre. Por la puerta entra un joven fuerte y atractivo, lleva una mochila en la mano. – Por fin amanecéis, pensé que ya hasta mañana no sabría nada de vosotros. Son las tres de la mañana, no sé si podréis investigar mucho a estas horas, pero siempre podéis ir a casa del príncipe. – Tiro la mochila encima de uno de los ataúdes. – Hay tenéis comida, por si tenéis hambre.
- ¿Se supone que tú vas a ser nuestro guía? - pregunté curioso. Le miré de arriba a abajo intentando descubrir qué tendría de especial y por qué lo habrían escogido como guía... Quizá es que no les quedaba nadie de confianza en Madrid...
Master: ¿En qué idioma nos habla? (que ya que me puse lingüística quiero aprovechar xD)
Sí, yo seré vuestro guía, al no ser que tengáis alguna queja con ello, si lo tenéis yo me voy y vosotros hacéis lo que podáis por la ciudad. – El joven estaba sonriendo. – Por cierto, mi nombre es Jack. – Sin prestar demasiada atención abrió la mochila y saco una bolsa de plasma, después la abrió y empezó a beber un poco.
a este de momento lo entendeis todos, hbla ingles.
Realmente importaba muy poco quien fuera nuestro guia, tendriamos que hacer lo que nos dijeran nos gustara o no asique alguien que conociera la ciudad seria lo mejor.
- Muy bien Jack, serás nuestro guía. - comento mientras me enderezo... - ¿Qué puedes decirnos de la ciudad? ¿quedan vampiros de la camarilla? ¿No hay nosferatu que nos puedan informar de algo? ¿hay sabbat o lupinos cerca? - No me gustaba nada tener que moverme a ciegas...
- ¿Qué relación tenías tú con el Príncipe? -