Partida Rol por web

La Maldición de Mirgorod

3 - Noche en la Posada

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19/08/2011, 14:28
Frederick Abberline

Me encamino hacia las escaleras para comprobar si esta vez hay alguien en el piso de abajo. No me puede estar pasando otra vez... pienso con ansiedad.

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19/08/2011, 16:11
Director

Desciendes las escaleras lentamente con una creciente sensación de incomodidad, hasta que a mitad de escalera ves que el Salón no esta totalmente vació. Sentada en una mesa, hacia la puerta de entrada de la posada, se encuentra la posadera, con la cabeza apoyada en las manos.

No hay nadie mas alli.

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19/08/2011, 19:41
Thomas Holzer

Notas de juego

Mejor me quedo donde está la luz xDDD Así que los dos estamos en la zona donde nos encontramos al entrar.

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19/08/2011, 19:48
Director

Revisais la entrada pero no veis nada que os de una pista sobre el paradero de la niña.

Notas de juego

Ok, pero en la entrada podeis tratar de rastrear, con Advertir/notar no hay nada que ver :P

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19/08/2011, 22:37
Modesto Arrabbiati

- Al parecer no hay rastros de la niña por aquí, será mejor dirigirnos hacia el sur, como has mencionado antes, tal vez tengamos  más suerte.

Notas de juego

Estuve muy liado en el trabajo y recién puedo ponerme a leer los post. Vayamos ahora a investigar hacia el sur aprovechando la luz de la lampara.

Es necesaria otra tirada?'

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20/08/2011, 11:18
Thomas Holzer

-De acuerdo... - mientras respondo a Modesto, y antes de partir en dirección sur, doy un último vistazo a la zona. Nunca he sido muy bueno rastreando. Intento recordar cómo lo hacía mi padre cuando salíamos de caza, pero me temo que no será suficiente.

- Tiradas (1)

Motivo: Rastrear

Tirada: 3d10

Resultado: 7, 2, 8

Notas de juego

Modesto, sí, entiendo que podemos hacer una tirada de Rastrear, aunque yo no me puse puntuación en esa habilidad :(

Si no me equivoco, al no tener la habilidad, lanzo normalmente (la Habilidad sería +0), pero me guardo el dado menor... en fín, un desastre :P Pero había que intentarlo.

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21/08/2011, 18:39
Frederick Abberline

Por un momento dudo si darme la vuelta y volver a mi habitación. Pero al final me decido y me acerco a las posadera, no sin pensar que tal vez quiera estar sola.

Ejem... siento interrumpirla, me he desvelado digo casi avergonzado.

¿Dónde está todo el mundo?

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22/08/2011, 09:20
Director

Avanzáis hacia el fondo del cementerio, atentos a cualquier cosa que pueda indicaros la presencia de la niña. Ya lleváis un rato caminando, observáis una gran figura al fondo, algo grande. Por un momento en lo mas profundo de vuestro subconsciente no podéis evitar temer que se trate de algún demonio, o una abominación en el cementerio, pero cuando la lámpara logra iluminar débilmente la figura en la distancia, descubrís que en realidad se trata de un carruaje.

Distinguís la silueta de los caballos, y la de un hombre, de pie, frente a los mismos.

Notas de juego

Os conservo las tiradas de Advertir/Notar.

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22/08/2011, 09:28
Idrich la posadera

La mujer se vuelve hacia ti sorprendida por tu presencia, pues no debe haber oído como te acercabas. Observas su rostro compungido y los ojos enrojecidos y húmedos por las lágrimas.

- Oh, señor, no sabia que usted estaba aun aquí. Mi hija, Etelka, hace mucho que salio para preparar el baño a su compañero, el que llevaba un maletín con el, creo que era doctor. la mujer habla de manera atolondrada Pero el hombre se fue al castillo, y mande a buscar a mi hija para que dejase el agua, pero no estaba, y no la encontramos. Señor, no se donde esta, sus amigos, los otros dos, fueron a buscarla al cementerio, y el resto de hombres están buscándola también por el bosque y la ciudad. Yo me quede aquí, señor, por si volvía. Es mi única hija.

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22/08/2011, 21:00
Thomas Holzer

La enorme silueta que se recorta en el extremo sur me inquieta por unos segundos, tanto que casi sin darme cuenta mis pasos se hacen más lentos en esa dirección, como si me resistiese a acercarme hasta allí. Por suerte, la luz de la lámpara nos muestra la verdadera naturaleza de esas sombras, todavía algo alejadas de nosotros.

-¿Cree que es nuestro carruaje?-pregunto a Modesto, mientras entorno los ojos intentando responderme a mí mismo, tratando de averiguar si es el carruaje en el que viajábamos, y si el hombre que está junto a él es Hans, nuestro cochero.-Lo mejor será acercarse-concluyo.

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23/08/2011, 15:45
Modesto Arrabbiati

Las sombras disparan mi imaginación hacia sitios oscuros y repletos de demonios, trayendo a mí las imágenes renacentistas de Dürer y sus tantos grabados sobre demonios.  Afortunadamente al dar un par de pasos más, guiado por la curiosidad, la luz logro difuminar un poco aquellas aterradoras sombras dejando a la vista un carruaje.


- En verdad lo dudo, no puedo imaginarme que haría Hans en este lugar – Contesto a Tomas disimulando lo mejor que puedo mi desagrado hacia aquel lugar – Será mejor que nos acerquemos con cuidado.

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23/08/2011, 16:49
Director

El hombre os observa mientras os acercais, hasta que estais a una distancia suficiente para hablaros sin elevar la voz.

- Vengo del castillo. El Doctor Heideck necesita ayuda, y me han mandado a buscar a uno de sus tres acompañantes.

La voz del hombre es ronca, con un acento muy marcado, mas que la mayoria de los habitantes del pueblo con los que habeis hablado. Cuando termina de hablar se queda en silencio observandoos.

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23/08/2011, 17:48
Modesto Arrabbiati

Reconocer el carruaje sin duda que me trajo algo de calma, pero no duro demasiado al saber que el doctor tenía problemas.


-  ¿Le ha ocurrido algo al Doctor Heideck? ¿Cómo ha llegado al castillo? – No se lo digo a Tomas, pero algo de todo aquello me estaba dando una mala sensación, aunque no creo que a mi compañero se le pase por alto. Sería mejor esperar las respuestas del cochero antes de proseguir.

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24/08/2011, 13:28
Frederick Abberline

Oh, ¿cómo no me avisaron? pregunto casi para mi mismo. Me voy a vestir y saldré a ayudar en las tareas de búsqueda. No se preocupe, la encontraremos le digo intentando consolarla. Acto seguido subo apresuradamente las escaleras, entro en mi habitación, me preparo y vuelvo a bajar.

Miro a la posadera dentro de su llanto mientras cruzo la estancia de la planta baja, pobre mujer. Abro la puerta de la posada y salgo.

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24/08/2011, 13:54
Director

La temperatura del exterior es fria, y una ligera niebla cubre el suelo, aunque con la luz ves suficiente como para orientarte y no caerte.

La calle de la posada esta rodeada por las pequeñas edificaciones que componen el pueblo. Ves a numerosas personas en la zona, con antorchas, que sin duda estan haciendo lo mismo que tu. Mas alla de la calle principal a penas hay casas, y se extienden los oscuros bosques que rodean el pueblo.

A espaldas de la posada, apenas ves una vaya de madera que parece ser el limite del cementerio al que la posadera hizo referencia.

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24/08/2011, 17:22
Thomas Holzer

Intento ordenar todas las preguntas que se amontonan en mi cabeza y asimilar la situación lo antes posible. ¿Por qué este cochero se ha detenido aquí, en lugar de ir hasta la posada a buscarnos? ¿Qué le habrá ocurrido al doctor? ¿Y por qué dice que viene a buscar a uno, concrétamente uno, de nosotros?

Casi sin esperar a que conteste a Modesto, lanzo algunas preguntas más:

-¿Trabaja para el señor Vadja? Dice que viene a buscar a uno de nosotros, pero ¿A quién? -miro a Modesto nada más pronunciarme, y parece tan inquieto como yo.

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24/08/2011, 17:30
Director

El hombre os mira pero su gesto no muestra ninguna emocion, mas bien parece indiferente a vuestras preguntas, y sus respuestas parecen apoyar esa idea.

- Lo desconozco señor

Dice por toda respuesta a las preguntas de Modesto. Despues volviendose hacia Thomas añade.

- Trabajo para el principe Vadja señor. El doctor no especifico, sencillamente dijo necesitar la ayuda de alguno de sus acompañantes. No tardaremos en volver señor.

Aunque su ultima frase parece un intento de tranquilizar cualquier preocupacion, su tono frio y su voz ronca no acompañan sus palabras.

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24/08/2011, 17:53
Modesto Arrabbiati

La respuesta no era la que esperaba, el cochero de los Vadja no había contestado a ninguna de sus preguntas y todo se ponía cada vez más extraño. Si bien la familia los había recibido amablemente era muy sospechoso que insistieran en que solo uno de ellos fuera a ayudar al Doctor.

Sacudo la cabeza tratando de que el aire frío me despeje un poco aquellas ideas extrañas y le hablo en voz baja a mi compañero.

- Tengo la sensación de que este lugar y los acontecimientos de este último día nos están volviendo un poco paranoicos. Supongo que el Doctor ha mandado a buscar a solo uno de nosotros porque en una noche normal todos deberíamos estar durmiendo... seguramente que Lenhard no ha querido despertarnos. – En parte trato de convencerme más a mi mismo que a Thomas de todo aquello, pero mis sospechas no se difuminan. ¿Por qué el carruaje estaba en el cementerio?¿Por qué los Vadja necesitaban del Doctor? ¿y por qué la nuca se le erizaba de solo pensar en que no habían encontrado ni un solo rastro de la pequeña Etelka.

- Thomas, si el Doctor necesita ayuda será mejor que vayamos los dos en ese carruaje,  hay algo que extraño en todo esto y será mejor no arriesgarnos.

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24/08/2011, 18:06
Director

Notas de juego

Una nota:

Yo no he dicho que fuese el mismo cochero que os trajo al pueblo, aunque si es el mismo carruaje. El chico que os trajo era joven, y este es bastante mas mayor. Es que me da la impresion de que presumis que es el mismo, y no es asi.

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24/08/2011, 18:10
Thomas Holzer

Sin duda las respuestas del cochero, lejos de tranquilizarme, me inquietan todavía más. Se nos ha presentado una complicada disyuntiva.

Me muevo ligeramente para dar la espalda al cochero y escuchar discretamente a Modesto, intentando que el primero perciba lo menos posible de nuestra conversación. Las palabras de mi compañero parecen muy lógicas... al menos todo lo lógicas que permite una situación tan extraña.

Sin dejar de dar la espalda al cochero, contesto a Modesto en susurros.

-Estoy de acuerdo con usted. Ciertamente, en otras circunstancias no me fiaría de este extraño hombre, pero la idea de que el doctor necesite nuestra ayuda, quizás bien valga el riesgo, y tiene razón en que si vamos juntos este riesgo será menor...

...o eso espero, pienso.

Me doy la vuelta de nuevo, encarando al cochero, y mientras me acerco le comunico que ambos le acompañaremos hasta la localización del doctor Heideck.

Notas de juego

Esto es, es el carruaje que nos llevó del castillo hasta el pueblo, pero otro cochero. Entendido.