Partida Rol por web

La memoria de los Águila

Parte Primera. EL SIERVO Y EL AMO

Cargando editor
23/09/2016, 09:25
Fuco

Entónces habló el ladrón-busquemos un poco más-quería alcanzarlo, quería saber. -Dejadme ver el medallón-Esperaba encontrar en el alguna pista

Saco el medallon del zurron -Olvidoseme el maldito medallon. Segun lo tome del carro aparecieron esos omnes y guardole rapidamente para que no me vieran hacerlo- Lo pongo entre mis manos y los examino rapidamente a ver si soy capaz de entender alguno de los simbolos y formas que tiene. Para mi no es mas que un trozo de hierro o cualquier otro metal sin valor.

-Tomad, miradlo vos. No creo que tenga ningun valor-

- Acampémonos - 

-Roger, pardiez! No habiamos convenido con los soldados que nos volveriamos a ver en la carreta. Si que se esta oscureciendo, si, mas seguro aun tendremos tiempo de volver sobre nuestros pasos y alli hacer noche. Que tampoco nos va la vida en cazar al malnacido aqueste- digo intentando convencer a roger de cambiar de sitio de acampada mientras miro a Gil y Katixa buscando su opinion 

- Tiradas (2)
Cargando editor
23/09/2016, 10:41
Katixa

Tomé con cuidado el medallón entre las manos e intenté encontrar algún patrón que delatase si era mágico o no. Después de examinarlo se lo devolví al ladrón con sumo cuidado. Era suyo, su destino estába ligado al medallón, el era su custodio ahora.

Y habló el moro, yo quería seguir un poco más, pero tenía razón. De noche poco más íbamos a hacer. No pareciéndome un desatino tremendo lo que dijo,pero me pareció más prudente lo que apuntilló el ladrón. Nos habíamos comprometido con los guardias a volver en dos horas, cierto que no me gustaban, pero nos debíamos a nuestra palabra y debíamos cumplirla-Estoy con Fuco-Dije su nombre con cuidado, sin querer molestarle-Nos comprometimos a volver en dos horas, las palabras nos obligan. El cuervo descansaba comodamente en el nido intentando conciliar el sueño.

- Tiradas (1)
Cargando editor
23/09/2016, 18:30
Director

Estaba claro que para los ojos de los demás, a priori, aquel medallón pareciera una mala joya, tosca y seca, pero tras mirarlo bastante bien sospechaste que aquello se trataba de algún tipo de herramienta (más que elemento decorativo) para realizar algún ritual o hechizo mágico (cosa que conocías bien, por cierto).

Cargando editor
23/09/2016, 18:32
Director

Mientras Katixa observaba con sumo cuidado (en la osucuridad, claro) el colgante y adorno tomado por Fuco, y el resto debatía sobre si quedarse o volver, oísteis crujidos de hojarasca y ramas, propio de pisadas. Os volvísteis, y efectivamente, notábais (ya que con la oscuridad nocturna no se veía a más de dos varas) que alguíen llegaba. Un par de pasos quizás. Oíais que se aproximaban, muy tranquilamente.

Notas de juego

El que quiera, tirada de Descubrir (en su defecto PER), con malus del 25% por oscuridad.

Cargando editor
23/09/2016, 19:07
Katixa

Me asusté al entender la naturaleza del medallón, quién lo perdió volvería por el, y si era capaz de prender fuego a un carro con las manos atadas se trataba de un brujo poderoso.

Me volví sobresaltada cuando oí el crujir de las ramas, eché mano al cuchillo y pregunté -¿quién va?-Con suerte serían los soldados, con mala suerte el hombre que buscábamos que de cazado se había convertido en cazador. Daría lo que fuere por una antorcha en este momento-¿quién va?-volví a preguntar apuntando con el cuchillo en dirección al ruido.

- Tiradas (1)
Cargando editor
23/09/2016, 19:08
Fuco

En escuchando el ruido a nuestro alrededor y con el miedo que otorga la oscuridad de la noche me giro rápidamente para ver de que se trata. Mi manos de forma instintiva se desplazan hacia las empuñaduras de los cuchillos para estar prestas

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Criticazo!!

Cargando editor
23/09/2016, 22:17
Roger de Rocaflorensa

Et que non quería saberne otra que aquesta y que ahora los míos acompañantes lo que querían era regresar, en plena noche, en donde el carromato e arriscándonos a perdernos en la espesura et de bien seguro a perder el rastro del fugitivo para non recuperarlo nunca más! Cómo echaba en falta a mis compañeros de batallas en aquestas circunstancias agora que aquestos flaqueaban!!!

Et que mientras discurro esto mesmo oigo un removerse de hojarasca y echo mano a la lanza, presto a enfrentar al que sea que se nos acerca en la oscuridad!

- Tiradas (1)
Cargando editor
25/09/2016, 09:55
Gil de Maeztu

Gil había mantenido un discreto segundo plano desde que salieron del carromato. Bien es cierto que aceptó raudo la misión por el hecho de poder disfrutar de las viandas que le ofrecieron los soldados. Pero más cierto es que a él ni le iba ni le venía lo que hubiese hecho aquel desgraciado. 

Mañana seguiremos rastreando e por Dios que aqueste fugitivo en habrá de caer!

- Roger, ¿a qué tanto afán? - le contestó desde varios metros y con voz baja. Tan baja que puede que no le oyera -  Con caminar estas dos horas haciendo el paripé de búsqueda y volver al carro ya habremos cumplido con nuestra palabra y no habremos entrado en juzgar qué ha hecho y qué no el harapiento de los fuegos...

No estaba cómodo ni con entregarle a unos soldados sin saber nada más ni mucho menos con la llama aparecida de la nada. Y en esos pensamientos estaba cuando escuchó un ruido en los alrededores. 

Chssst - hizo un ruido por si alguno de sus compañeros no lo hubiese oído también y rápido desenfundó su cuchillo permaneciendo alerta. 

- Tiradas (1)
Cargando editor
25/09/2016, 13:14
Director

Estaba claro, según viste, que dichos hombres no portaban ni en su mano ni habían tomado antes de acercarse arma alguna (eso es lo que apreciaste, al menos, a distancia prudencial desde que oísteis sus pasos y os girásteis).

 

Cargando editor
25/09/2016, 13:15
Director

Tras poner por delante vuestras armas y preguntar la joven Katixa por quien se acercaba, que enseguida vísteis, a dos pasos de vosotros y con las manos en alto (en señal pacífica) a dos hombres. Uno parecía ser el tipo con harapos que visteis junto al carro (y que huyó monte arriba nada más veros aparecer por el camino). Ahora veíais que se trataba de, seguramente, un tipo entrado en años; el otro coincidía, más o menos, con la descripción del prisionero hecha por los alguaciles, y era mucho más joven que el primero.

Cargando editor
25/09/2016, 13:17
Joven

Po... por favor... -decía el joven en un marcadísimo acento portugués y casi vano castellano-. Perdón... ¡ayudadnos! ¡ayuda! -el muchacho tenía el rostro desencajado, pues en aquel monte pedregoso y ahora casi rodeado de gentes con armas (vosotros) su situación no es que tuviera demasiadas elecciones-. Nos... persiguen... ¡ayúdennos! -reiteraba tragando saliva-.

El otro no decía nada, y parecía bastante abstraído.

Cargando editor
25/09/2016, 20:38
Fuco

-Tranquilo muchacho. No os atacaremos. Tan solo sacamos las armas pues nos sobresaltaron vuestros pasos en estas horas oscuras donde cualquier sombra parece acecharnos- Digo dando un paso adelante para intentar calmarle a ellos y a mis compañeros. Enfundo mis cuchillos para dejar claro que no tengo intención de hacerles ningún mal

-Pero, venid aquí y contadnos muchacho y vos también señor, que os aflige? quien os persigue y, si puede preguntarse por que motivo? Solo si sabemos lo que ocurre podremos intentar darle solución, o no es verdad?-

 

Cargando editor
25/09/2016, 21:38
Katixa

Guardé el cuchillo al ver al muchacho. Las palabras de Fuco me tranquilizaron. Parecía que quería hablar-menos mal-Miré al moro con gesto de desaprobación por si le pasaba por la cabeza ensartarlos con las lanzas y me puse entre el y el muchacho. Luego saqué el pan que me quedaba, un poco de queso y algunos frutos y se los ofrecí-¿tenedes hambre?-, imaginé que tendrían hambre y lo agradecerían. No quitaba ojo al otro e intenté averiguar sus intenciones...el portugués me parecía un alma cándida, un pobre hombre atrapado por circunstancias adversas, pero el otro...¿sería el brujo? Un escalofrío me recorrió la espalda sólo por imaginarlo

- Tiradas (1)
Cargando editor
25/09/2016, 22:27
Roger de Rocaflorensa

Oigo, más que escucho, al estudiante mascullar sandeces que no logro discernir y que acaso me atañen... mas que como sea que lo que un jovenzuelo que ha pasado rodeado de libros las escasas primaveras que acarrea a las suyas espaldas me importa más bien poco no le presto mucha atención... menos aún cuando se presentan ante nos los dos misteriosos personajes.

Sonrío, y es que, como caídos del cielo, arriban a nuestra posición, precisamente, los fugitivos a los que andábamos buscando. Oro! Cavilo con mal disimulado entusiasmo: Bríllanme los ojos como tomados por el dorado material et que tenso el brazo presto a caer sobre los cervatillos...

Mas que mi entusiasmo dúrame bien poco, y es que habíame olvidado o descuidado que la mía compaña no está compuesta de gentes de armas sino que más bien todos ellos parécesme señoritas de alcoba o compañía, con excesivos escrúpulos e remilgos et que sembla que tengan más interés en conoscer de la vida de nuesas presas que obtener el oro que por aquestas ofrecen...

Dita sea! Escupo al suelo con furia, la lanza aún bien firme en el puño et que bien enfadado de tener que vagar por los campos con semejantes gentes tan descuidadas y cargadas de melindres!

- Tiradas (1)

Notas de juego

Tiré para ver si oía lo que Gil mascullaba... fallé!!!

Cargando editor
25/09/2016, 23:00
Gil de Maeztu

Gil permaneció atento para ver cómo se desarrollaba la situación. Las palabras de Fuco le parecieron cabales y también observó como Katixa ofrecía y comida y guardaba su cuchillo. Mas él no hizo igual y lo mantuvo desenfundado. 

Tampoco pasó desapercibida el escupitajo que el soldado le echó al suelo sin duda frustrado por la poco dramática salida que había tenido la situación por el momento. 

- Kaixo atzerriko - les saludó - Pedís protección más no decís por qué huís. ¿Qué pasó?

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Gil mantiene la mirada en el otro acompañante mientras espera respuesta con el cuchillo en mano. 

Cargando editor
26/09/2016, 09:43
Aleixo

Ninguno de los atendió el ofrecimiento de Katixa (pese a que miraron las viandas), aunque las palabras de Fuco parecieron tranquilizar al joven. Luego el joven habló con gran acento, atendiendo a los requerimientos de Fuco y también de Gil (no sin ver el rostro de expresión del Rocaflorensa, bien dispuestos a atarlos y llevarlos con sus captores).

Éste es mi señor, don Tiago de Águila, y yo soy Aleixo, su sirviente  -el joven señalaba al entrado en años como tal, y le tiraba un poco del brazo para que dejase de estar como detrás de él y se descubriera a vosotros. El tal Tiago seguía como desorientado, os miraba pero era como el que tiene la mirada perdida-. Ahora mismo hablo yo por él ya que no recuerda apenas lo que pasó. Verán: Marchamos de Ciudad Rodrigo a Plasencia, en busca del su Ilustrísima el Obispo de Plasencia don Rodrigo. Al llegar, supimos que éste había marchado a Jaraicejo. Así que poniendo rumbo allí, hacia el sur, unos hombres al servicio del Concejo de la ciudad, creyéndonos bandidos, nos apresaron. Decían nosequé de un robo en la biblioteca de Ciudad Rodrigo, y supongo que nos creerán responsable. A mi me metieron en una carreta, pero don Tiago logró escapar. Nada he sabido de mi señor hasta ahora, hace unos minutos, cuando lo he visto monte arriba. En un despiste de los guardias, logré huir, y mientras corría me topé, de casualidad, con el. Supongo que se habrá dado un golpe en la cabeza, pues no me recuerda -el siervo que hablaba lo miraba, con cierta pena por ésto-, ni tampoco lo que pasó o dónde vive. He estado hablándole de su vida, pero ha perdido la memoria...

Notas de juego

Haced una tirada de Empatía (PER) (Katixa, tu haz otra). Hacedla en oculto.

Cargando editor
26/09/2016, 09:57
Katixa

Guardé las viandas al ver que no las cogían y escuché la historia. A los pobres les habían apresado por el delito que habíamos cometido nos, eso no estaba bien, por eso el destino los había puesto en nuestro camino. Había algo que no cuadraba en la historia del joven, y es que en ningún momento hablaba de que la carreta se incendiase, ¿quién era el brujo? Ya no sabía qué pensar, pero tenía claro que debíamos ayudarles.-Os ayudaremos a escapar-parecía fácil, los guardias habían ido por otro sendero y estábamos solos en mitad de la noche.-Pero...¿cómo escapásteis? Vimos la carreta en el camino, estaba como incendiada. Lo normal es que os hubiéseis achicharrado dentro.-No creía cometer ninguna indiscreción. A fín de cuentas el muchacho nos había visto y nosotros a el cuando llegamos al claro en el que estába el carro. Pero...¿por qué después de escapar volvía al carro? Me acordé del colgante y recé a la Madre Tierra para que Fuco lo tuviese bien guardado.

En cuanto al señor no sabía que pensar. Me acerqué a el y fuí a examinarle la cabeza, quería ver si tenía marcas de algún golpe-¿permitís?-dije, esperando que me autorizasen el o el muchacho a tocarle.

- Tiradas (1)
Cargando editor
26/09/2016, 10:09
Gil de Maeztu

- ¿Ciudad Real? ¿No queda eso a muchas leguas de aquí? - preguntó pretendiendo parecer confundido Gil - ¿Qué harían unos soldados buscandoos a tantas noches de distancia? 

-Os ayudaremos a escapar. Pero...¿cómo escapásteis? Vimos la carreta en el camino, estaba como incendiada. Lo normal es que os hubiéseis achicharrado dentro

- No me malinterpreteis, pues me encuentro inclinado a ayudaros pero ayudadnos vos a que podamos confiar en vosotros. 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Duda, ¿Lo de Ciudad Real está puesto a idea o te refieres a Ciudad Rodrigo?

Cargando editor
26/09/2016, 10:18
Fuco

Escucho mascullar a mis espaldas al de Rocaflorensa -Por Dios que no me ensarte con la lanza por ponerme en medio que, o poco me conoce, o díficil que no crea que todo lo que hago es por ver si destos omnes no sacamos un bien mayor que las migajas que nos ofrecen los dos soldados muertos de fame que allá abajo nos esperan-

Escucho la historia del joven, mas no veo mas que inconsistencias en ella. Nada dice del fuego en la carreta y fáceme raro que un omne de cierta categoría como parece que tendría el tal señor don Tiago del Aguila viajando con un sirviente, fueran tomados por bandidos cuando van de viaje. Y si el señor escapase de los guardias del concejo, porque parece que lleve semanas vagando por el monte vestido con esos harapos como si de un mendigo se tratase?

-Paréceme claro, amigo, que una gran inyusticia se esta cometiendo contra vos y vuestro señor, que en mala desgracia ha caido pues a parte de ser acusado de un robo que vos no hicisteis, ha perdido la razón y se encuentra harapiento como si llevara semanas vagando por el monte. Parecionos ver al vuestro señor cuando llegamos a la carreta mas huyo despavorido cuando nos vio. Debió ser entonces cuando se topó con vos

- Tiradas (1)
Cargando editor
26/09/2016, 10:58
Roger de Rocaflorensa

Ben claro me paresce que el Santo ha bajado en nueso auxilio ya que non solo nos brinda a unos desgraciados que vayan a comerse el nueso marrón sino que a más nos da el beneficio de darnos unas monedas por ello!
Mas que en lugar de caer sobre ellos como si de perdices asustadas se trataran mis acompañantes prosiguen atareados con banales parlamentos que sigo agazapado en la penumbra, solo pendiente que llegue el momento de atacar para culminar lo que habíamos empezado et que anda torciendose de malas maneras:
- Qué en sacaremos, por cierto, de ayudaros e no entregaros a las Autoridades como los buenos ciudadanos que somos??? - Requiero desde la oscuridad, la lanza bien presta y la mandíbula apretada por si fuera menester iniciar el combate.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Disculpad, posteo en un receso que he tenido en el curro!!!