Partida Rol por web

Dita sea que non sea dicho que el de Rocaflorensa n'es un cobarde!!! Reflexiono. Mas que aquesta es la mismísima Boca del Lobo est, et que meterse ahí sin luz es una locura!

Non seré yo el que se meta aquí a las foscas - sentencio -. Sigamos, pues, el camino de los portugueses que aquí dentro solo habemos de encontrar males y desgracias - bátome, pues, en retirada que bien dicen que uno debe saber cuando marchar en el momento preciso.

Aleixo.... de cómo quedó el carro que os transportaba sabemos que de algún modo sois afanosos con el fuego. A eso nos referimos. Si os queréis hacer los despistados es otro cantar. 

Gil, mientras, busca en los alrededores a ver si encuentra material para hacer una antorcha que aguante más de un par de minutos. 

PArescía que retornábamos por el camino inicial. Non parescíame mal, pero lo de acusar a Aleixo abiertamente de brujería me parescía mal. Que una cosa era lo que sospechábamos et otra ser acusado sin pruebas...muchas veces en la mesma situación me  encontré yo et tuve que salir por patas que siempre hay amigos de quemar vivos lo que non entienden. Y respecto a la bruja, lobera o la madre que la parió... me amolaba dejarla fazer et desfazer a su antojo en el bosque, pero adentrarnos en su guarida a oscuras me parescía la peor de las opciones. Nos volveríamos a encontrar, o eso esperaba et saldaríamos aquesta deuda.

-Sin fuego es una locura adentrarse ahí dentro. Si nada se puede hacer (digo echando una mirada a Aleixo) mejor sera seguir nuestro camino, mas si en el futuro esa bruja vuelve a atacarnos con sus malas artes y tiene mas fortuna lamentaremos la oportunidad que ahora dejamos escapar aqui. Volvamos al camino pues. Hacia el castillo a escoltar al sobrino del obispo-

- Quiere Dios que sea así - refunfuña Gil mirando a la cueva. Recoge saliva para sus adentros y escupe hacia el interior de la misma queriendo ofender a la lobera - Tiago gana. Vamos en busca del obispo. 

Aleixo no dijo nada, pues miró a su señor y por no importunarle con malas palabras dirigidas a Gil hubo de callarse. Por su parte, el de Maeztu anduvo rebuscando por derredor pero nada encontró más que pasto, hierbas y peñascos, cosa natural en el paraje. Don Tiago no dijo nada, su mirada volvió hacia el camino principal, con las dos monturas puestas de nuevo dirección Monroy.

Y así hubísteis de llegar a la tercera jornada a tal villa. Era media tarde cuando supísteis que aquel lugar no tenía sino mucha actividad campesina y un ir y venir de soldados y miembros de órdenes militares. El sitio se alzaba en torno a un castillo con tres torres y un pequeño foso. Preguntando a ciertas gentes, marchásteis hacia el castillo para pedir audiencia con el alcaide Ruiz Díaz de Villalobos (el cual os recibió a las puertas de la pequeña fortaleza) y entregar la carta de Lope, en la cual se explicaba todo el asunto y la razón de vuestro viaje. Y así hicísteislo. Y de tal forma hiciéronse cargo de Gil Dávila, cuya responsabilidad ya no os concernía. Habíais cumplido.

Gracias, una vez más -dijo Tiago de Águila a todos en general-. Pero antes de seguir, en vuestra mano queda acompañarme en busca del Obispo cuando se sepa que hemos traído a don Gil hasta el lugar neutral. No vos pido a ninguno que sigáis tras de mí o mi siervo de nuevo, tan sólo pido algo de respeto para él en caso de que así sea -ambos dos se miraron, y Aleixo quedó complacido sabiendo que su amo le respaldaba con justicia-.

Vaya hombre!- pienso sorprendido -parece que el noble señor va recuperando la memoria, mas solo para lo que le conviene, pues no se nos ha pagado por le trabajo hecho 

Mi señor, Don Tiago. Llegamos a un acuerdo allí en el monte cuando nos enfrentamos a aquellos soldados, que casi me cortan el brazo, que vos acompañaríamos a buscar al obispo a Jariacejo, et que por ello seríamos bien recompensados, como no se puede esperar otra cosa de un hombre de alta alcurnia como sos vos. Claro está que nada haríamos en Jaraicejo pues el obispo puso pies en polvorosa al estallar el conflicto en aquella villa. Et si el obispo esta ahora en Trujillo, allí deberiamos ir con vos, para acabar de cumplir la nuestra parte del trato y asi vos podrá cumplir la suya palabra

Mientras reviso, e trato de guarescer, la profunda herida que propícieme uno de los canes que nos atacaron, oigo lo que el tal Don Tiago nos plantea acerca del nueso destino: Tan pronto quiere echarnos de su lado??? Y eso sin pagar la creciente cuenta pendiente??? Ni hablar deste negocio!

Et menos mal que aparece el Fuco y le plantea los términos del acuerdo de manera harto más civilizada que la que yo hubiera empleado y es cosa que agradezco habida cuenta mi escasa locuacidad.

Me pongo del costado del ladrón, escenificando mi postura - Sea! - corroboro verbalmente golpeando el suelo con la base de la lanza para enfatizar cuanto digo.

Asentí a las palabras de Fuco et Roger. Non es que esperase cobrar por los servicios, mas quería ver a don Tiago ya recuperado o al menos en el camino, cosa que parescía que ya estaba. Aún así quería seguir viendo los suyos progresos et ver en que acababa aquello.

-Deberíamos mandar a alguien a informar...dije non del todo segura, pues ni yo mesma estaba dispuesta a ir et la idea de volver a la ratonera me axfixiaba. Pero dejar a aquellas gentes sin noticias de lo que acaecía me parescía una crueldad.

Tenía Gil mucha curiosidad por ver qué pasaba con el obispo cuando viese al desmemoriado así que no tenía ninguna gana de perderse el encuentro. Y así lo dejó claro.

No pondré una coma sobre las palabras de Fuco. Yo no he de volver sobre mis pasos a no ser que el altísimo obligue, pero sí - asintió a Katixa -  Si queréis informar, siempre podemos mandar carta. Alguien en la taberna que pare en dirección a Jaraicejo habrá de llevarla por cuatro reales. 

¿Acaso veis, Fuco, dineros que me llegaran desde que nos rescatásteis? -también rememoró aquel encuentro en el monte- No podré olvidar -parecía tal irónico- cuán bien lo hicísteis, ni tampoco recompensa vos faltará. Querer llegar yo a mi regreso, a mi ciudad, quisiera ya, y pagarvos con buena suema pero ahora mismo no puedo -entonces se acordó de lo que le dijo su siervo, sobre aquel enemigo natural de Ciudad Rodrigo-. En cuanto volvamos haré buen acopio de vuestra paga, y la de todos, para dárosla: no vos preocupéis.

Don Tiago se alegró por el gesto de Roger, que interpretó como que seguiría con él. Buena cuenta de dineros llevaríase también el de Rocaflorensa. Luego miró con sabiduría a la joven Katixa, de cuyo morral salía el graznido de su cuervo.

Así, es... deberíamos informar... -entonces se giró, viendo vuestros rostros uno a uno una vez más. Atendió también al conseño de Gil, en cuanto a enviar una misiva, pero la honestidad del noble portugués parecía ir por delante. Y finalmente su ojos se pararon en su siervo.

Aleixo -y el joven se puso firme-. Iréis vos. Mejor me representaréis vos que una misiva. Frío es informar de la muerte de ese joven, Paredes, a manos de esos lobos... Asique, siervo mío, id e informad de aqueste asunto en mi nombre, de que ya está Gil de Ávila en el castillo de Fernando de Monroy, y que tienen allí deuda con aquestos hombres -referido a vosotros-. Que el Concejo de Jaraicejo y su alcaide lo sepa. Marchad pues luego a Trujillo, y allí nos encontraremos.

Pero señor, ¿estáis seguro de...? -repuso Aleixo-.

¡No hay pero alguno! -replicó, recobrando poco a poco su carisma nobiliario-. Estaré bien con nuestros acompañantes -decía refiriéndose a vosotros-. Nada nos pasará. ¡Marchad!

Y así lo hizo Aleixo, tomando uno de los caballos, el del propio Francisco de Paredes, marchó hacia el este al galope. Avanzaba mucho más rápido que lo que lo había hecho la comitiva, y quizá hasta podría alcanzaros a las puertas de Trujillo antes de llegar a aquella ciudad, quién sabía.

* * *

Vosotros tomáteis el camino hacia el sur, despues de preguntar y proceder a encaminaros cuanto antes dirección Trujillo.

Recompensas para cada uno: 15 p.Ap.

Los p. Ap (Puntos de Aprendizaje) viene siendo la Experiencia ganada. Podéis guardarla para más adelante o bien gastarla ahora. Si la queréis gastar ahora debéis hacerlo según la tabla a continuación. Nota: podéis gastar en CUALQUIER competencia (el manual dice que el gasto es sólo en las competencias que uno alcanza con éxito en tiradas de dados, pero yo creo que la experiencia vital de un PJ en una partida o una persona en la vida real es global). Dudas y colocación del reparto, en el Off:

He aquí la mecánica de los Puntos de APrendizaje

Tabla de Mejora de Competencias
Porcentaje de Competencia a la que queremos llegar || Coste en Puntos de Aprendizaje

0 o inferior:  Cuesta 10 PAp aumentar en +1% la competencia.
1 – 30: Cuesta 1 PAp aumentar en +1% la competencia.
31 - 60: Cuesta 2 PAp aumentar en +1% la competencia
61 - 80: Cuesta 3 PAp aumentar en +1% la competencia.
81 - 90: Cuesta 4 PAp aumentar en +1% la competencia.
91 - 100: Cuesta 5 PAp aumentar en +1% la competencia.

Sobrepasar el nivel de la Característica x5 Cuesta 10 PAp aumentar en +1% la competencia.
101 o superior* Cuesta 25 PAp aumentar en +1% la competencia.

* Las subidas por encima del 100% se consideran casos muy concretos y sólo se permitirán con el beneplácito del DJ.