Partida Rol por web

Pujamos ahora por el lote 4. Una mano humana, concretamente la izquierda, momificada y que en cada dedo tiene una vela supustamente hecha también de grasa humana. Se le conoce como "la mano de gloria" y procede de EE.UU. La datación es de pricipio de este siglo, sobre el 1900.

Baja un poco el tono para continuar:

En teoría, esta mano procede de un criminal ahorcado. El precio de salida es de 20£

50 Libras exclamó Stuart con alegría. 

 No se cedía a un guión, intentaría llevarse algo, lo que fuera para romper su mala racha.

_100£ por aquí.

Joseph volvía a participar, aunque seguramente su puja no sería la última. Se acercó a la Sra. Ford para comentarle algo.

_Debo reconocer que me ha sorprendido, Sra. Ford. Cuando me dijo que iba a tener que esperar para saber qué era lo que había venido a buscar, jamás habría pensado en este lote. La felicito por conseguirlo. Aunque algo me dice que quizás no era el lote que más le interesaba...

La subasta se desarrolla a un buen ritmo y a pesar que "La Mano de la Gloria" me parece que es un efecto interesante, tampoco pujo por el mismo, negando mi participación con un educado gesto.

-"¿Una mano momificada? La verdad que no está entre mis preferencias."
Moviendo de nuevo la cabeza de lado a lado declino pujar por este lote.

Ingrid está un poco inquieta por su victoria en la última puja.

¡Gracias Sr. Sinclair! Reconozco que este lote no estaba en mi lista inicial de objetivos, pero ¡es que me ha gustado tanto esa túnica con rebordes plateados! ¡No he podido resistirme!

No creo que la túnica sea de mi talla –dice con evidente sorna- pero quizás pueda darle un buen susto a alguien para el siguiente Halloween.

En fin, ahora tendré que ir con más cuidado con el dinero que me queda.

Joseph se llevó una mano a la boca, que no llegaba a ocultar su sonrisa.

_Reconozco que me ha gustado también la túnica, y no había pensado en asustar gente con ella jaja. ¿Que no ha podido resistirse? Más me pareció que se estaba aburriendo y solo quiso ver quién subía el valor aún más. Es que es aburrido ver subastarse objetos que no interesan a uno. Espero que tenga mejor suerte la próxima, a menos que sea con el objeto que también yo deseo. En ese caso creo que necesitaré toda la suerte para mí -concluyó sonriendo-.

 Se imponía la estrategia.

 110 libras. puje a continuación con una sonrisa.

 Vamos, vamos....

Aunque no era previsible que una joven de apariencia tan frívola se intesesase por un objeto tan macabro como ese, podéis oir la dulce voz de lady Margaret haciendo su oferta:

190 libras.

Con un gesto adusto, el francés rechaza participar en la puja por este siniestro lote.

Tampoco el afamado cazador parece interesado en este objeto, que mira con desdén.

El aristócrata ruso resopla con desden ante las ofertas que se van presentando, negándose a participar y se dedica a estudiar el catálogo.

El enigmático personaje permanece en silencio, sin ofertar en absoluto.

230 libras - ofrece el magnate americano.

Aun enfadado, este asistente a la subasta rechaza participar con un gesto.

Tampoco el sueco parece interesado en este extravagante lote.

_Creo que esa mano ya tiene un dueño...

Ingrid no trató siquiera de disimular su cara de asombro ante la puja de Lady Jameson, pero cuando el Sr. Walker pasó con creces de las 200 libras, la americana se quedó literalmente boquiabierta.

Ese lote debía de esconder algo más, porque si no, no se podía entender lo que acababa de suceder.

Stuart comenzaba a aburrirse. Declino una vez más seguir pujando con un gesto de su mano.

Bostezó tapandose educadamente la boca con una mano.