Partida Rol por web

- Aniquilación, la solución es la aniquilación... - asegura - unos deben morir, para que otros podamos sobrevivir.

Bellatrix asentía a las palabras de Dolores sin escucharlas realmente, todavía rumiando el descubrimiento sobre el señor Ollivander, cuando de repente sus ojos mostraron confusión y se dirigieron hacia Tom Riddle.

- M-mi señor -musitó con un hilo de voz-, realmente sois vos. - Aseguró mientras empezaba a hacer pequeños y rápidos movimientos con sus manos. - ¿Pero por qué me habéis abandonado? ¿Por qué no me habéis convocado? ¿Y por qué no habéis elegido a vuestros mortífagos entre la casa Slytherin?

Su mirada recorrió a todos los presentes y todos pudieron ver la expresión dolida y confusa de la mujer. - Es Él... Hermione ha usado La Vista para investigarlo. Yo se lo pedí. Y es Él, el primero de los mortífagos*. P-pero... P-pero... ¿Ha renegado de nosotros, la casa que mejor lo ha servido siempre, de la que han salido todos sus mortífagos en el pasado?

Se llevó una mano temblorosa a la frente y volvió a mirar al joven Tom. - Ahora lo sabrán los leones y las águilas, ¿por qué os habéis ocultado de quienes os hemos servido siempre? ¿Y a quiénes habéis considerado dignos de serviros en nuestro lugar?

- Chico, tienes una última oportunidad de apostar por esta casa. Revelanos los nombres de tu compañero para que no tengamos que perder el tiempo averiguando algo que ya deberíamos saber o seré yo misma quien te ponga la soga al cuello - asegura - aquí no hay lugar para traidores.

- ¿Y acaso podrías creer en los nombres que diese después de que mintiera con anterioridad? - Preguntó Bellatrix con voz aguda al escuchar a Dolores.

Se encogió de hombros y siguió hablando. - El repugnante de mi primo es uno de los ligados por el tallavaritas y sabe cosas. Parece que la persona con la que está ligada también tiene la Visión. Hermione cree que podría ser el elfo asqueroso. Por lo que parece esa persona ha investigado a Hermione y a la china. En Gryffindor tienen la mirada puesta sobre la niñata de las gafas horteras.

La mujer hizo una pequeña pausa y se dio algunos golpecitos en la barbilla con la varita. - La vieja chocha parece compartir el don de Dolores. Se ha expuesto de la forma más gratuita, probablemente para que se decidan a atacarla esta noche. ¿No os parece? 

Tom observó a sus compañeros, han superado la prueba pensó para sus adentros.

Tanto la vieja chocha como Flitwick son los mortífagos, mis ex-compañeros. Siento mis mentiras, y si no os fiais de mi, comprobadlo. Estoy dispuesto a morir por mis mentiras. Sin duda slytherin, una casa excelente, lo adivinasteis vosotros solos. Bravo. Ellos saben vuestros secretos. Ayudadme a matarlos y tendréis a la otra parte de vuestro lado.

- ¿La vieja chocha mortífaga? ¿Seguro que no se parece más a mi, que a ti? Sigo sin creer una palabra, y me temo que antes perderé mi tiempo con los demás que con aquellos a los que apuntas, seguro que sigues protegiéndolos.

Miró a los demás

- No doy un galeón por él, pero viva o muera el daño revelando nuestras cartas ya lo ha hecho y es de esta casa. No me molestaré en defenderlo si se le acusa, pero como prometí no seré yo quien lo persiga, aunque tampoco quien desvíe su voto si le acusan públicamente. 

Señaló a Lestrange, dejandole claro que le hablaba a ella

- Es más, anima a "tu chica" a acusarle en público si tiene algún tipo de prueba, no será del todo negativo que alguno de los nuestros sea ajusticiado y él estará encantado de morir delegando en otro la responsabilidad de su causa. Espero que al menos fuera de esta casa. - sugirió a Tom

- Definitivamente la profesora de adivinación trabaja para Tom. - Draco pronunció el nombre con gusto, ahora que le habían aclarado quien era, había sido o sería, pero que, sin embargo, había demostrado no merecer el respeto que ese alter ego llegaría o llegó a ganarse una vez. - A buscado convenceros, la simpatía por saber vuestro don, como si airear los secretos de mi tía hiciera que, de pronto, deseara juntar su mejilla a la de la delatora como premio y emoción por conocerla tan bien.

Mujeres... - entornó los ojos al techo sin entender ese modo tan peculiar de mostrar afecto. - Ha sido lista, dos noches, dos conocimientos.  Ya meterá la pata, y tanto que lo hará.

Luego miró a Tom - Esta claro que no se te ha pegado nada de su presunta inteligencia. ¿Apostar por ellos? ¿Retransmitirles todos nuestros secretos? Estabas perdido antes de empezar. Ésta casa es más fuerte.

¿A por quién iréis esta noche? - alzó una ceja inquisitiva, de esa respuesta dependía una vida.

-El plan sigue como hasta ahora. Yo me guardaré mi carta una noche más, a ver que es lo que ocurre. Espero que podamos solventar con facilidad los ataques que se puedan producir esta noche hacia nosotros. Al menos sufriremos uno con casi total seguridad, puede que más.

Salazar parecía estar sopesando aún más implicaciones que normalmente.

Tom pensó que él si debiera morir. Una parte de Voldemort que se desvanecería. Rió unos instantes y prosiguió.

Yo no desvelé todos vuestros secretos, siento deciros que la mayoría ya los sabían. Cuando fuimos a por Salazar no hubo otro remedio, dos votos de ellos contra uno mío. Yo solos les conté lo de las pociones, lo de más, como ya he dicho, ya lo sabían. Esta noche   - dejó unos momentos para recordar y luego miró a Dolores.- Posiblemente a por ti, tenían la rara idea de que si te matábamos te unirías a nosotros, sandeces de esa vieja chocha y el enano la secundó. Creo que puedo intentar desviar la muerte hacia quien me digáis. Antes de que me propongáis y me maten o me matéis vosotros decidme quien queréis que muera esta noche.

- Sería de lo más estúpido que intentaran enfrentarme, pero son libres de hacerlo, al menos sabré quienes son con certeza aunque sea lo último que haga. - sin parecer ni siquiera un poquito ofendida - me preocupa más a quien salpiques con todo esto al morir 

-Draco Malfoy, tomad.- Le tendió una poción- Habéis sido atacado esta noche. Bebeoslo si queréis sobrevivir.

Bellatrix escuchaba las palabras de Tom con expresión confundida. - ¡¿Una vieja chocha y un medio duende?! - Exclamó, mientras le temblaban las manos. - ¡Un medio duende! - Repitió, levantando los brazos con incredulidad. - ¡Sólo faltaría que hubieras convocado al elfo! ¿Y para convocar a esa escoria no me has convocado a mí? - Preguntó con un tono a medio camino entre dolido y molesto. - Eso si es que no sigues mintiéndonos, como antes. Mintiendo a tu propia casa. ¡Mintiendo a tus seguidores! - Añadió, señalándose a sí misma primero y a Narcissa y Draco después. - ¿Y quién sino tú podría haberles contado todos nuestros secretos? Ya no podemos creer en tus palabras. 

Asintió a las palabras de Dolores. - He hecho algo mejor. He aprovechado que el viejo verde se afila la varita espiándonos a Hermione y a mí para pedirle que lo delate él delante de todos. Así Hermione no tendrá que exponerse. Y si se libran del viejo, nos harán un favor.

Al escuchar a Salazar su mirada se volvió preocupada hacia su sobrino. Era cierto que no estaba de acuerdo con la blandura con que lo educaba su madre. Pero el chico tenía potencial y era de su sangre. No le gustaba nada que hubiera sido atacado. Tras asegurarse de que estaba bien y esperando que tomase la poción que el fundador le tendía, volvió a mirar a Tom. - ¿Eso ha sido cosa vuestra? - Preguntó, entrecerrando los ojos.

Draco deambuló hasta la voz de Salazar, se sentía adolorido y desorientado, los oídos le pitaban y todo a su alrededor parecía discurrir a una velocidad diferente a la suya, como si todo movimiento dejara una estela detrás. Me han atacado intentó situarse dentro de aquella bruma en que parecía atrapado su cerebro No debí haber bajado la guarda, ya sabíamos que no eramos los únicos asechando en la oscuridad de los pasillos del castillo.

Alargó sus manos a pocos pasos de Salazar para llegar incluso antes a esa poción que le ofrecía. Su pulso tembló al llevársela a los labios pero con la primera gota se sintió completamente revitalizado. Adolorido pero vivo.

- ¿En serio Tom? - se giró hacia él irguiéndose en la vuelta, recuperando el brillo de su pelo - Tanto odias no ser el joven predilecto de esta casa? Muy típico de Él eliminar todos los que pudieran hacerle sombra se autoelogió con orgullo de ese ataque poniéndose al nivel de otro a quien odiaba sin darse cuenta de ello.

Tom arrepentido dijo:

Lo siento Bella, yo no he llamado esta vez para la misión, pero al morir puedo llamar a alguien. Creo que estás capacitada, pero aunque me lo merezca, tú me has condenado ha muerte contándole tal cosa a Olivander, no estoy seguro. Y por otra parte, Draco, los otros dos han actuado a mis espaldas esta vez, de verdad que te he defendido, a ti y a Dolores, lo juro.

Tom calló unos momentos y prosiguió recordando las acusaciones de sus compañeros de casa.

Y no, no he contado yo todos vuestros dones, solo he contado lo de las pociones. Hay más gente que es capaz de enterarse de cosas y las comparte con su casa. Os pediría un día más de mi vida, pero ahora, ya es tarde. Antes de morir, que estoy seguro de que lo haré, Bella no es seguro pero probablemente seas mi elegida. La maga más capaz de todos los tiempos sin duda.

- Y le privarias de su don. Si quieres hacer algo por esta casa, escoge a Salazar, podrá seguir ayudando cuando gaste su última poción y puede hacerlo esta misma noche ¿no es así Salazar? - propone

-¿Lo veis? ven que no es de fiar, yo lo supe siempre.-Rompió su silencio al saber que Draco podía a ver muerto esta noche y quedarse solo sin amigo ni... asesoría.

La casa Slytherin esta en peligro desde el mismo momento que apareció ese niño y nos mintió tan descaradamente con ese poder suyo. Y ahora toda la casa peligra.-Estaba claramente nervioso. Ademas aun le ardía la boca.

Bellatrix negó con la cabeza mirando a Tom con pesar. - No te he condenado yo. Te has condenado tú mismo al mentirnos. Si hubieras sido sincero desde el principio, no me habría visto obligada a pedirle a Hermione que indagara en ti para ver qué nos escondías. Fuiste tú el que elegiste confiar en una vieja chocha y un medio duende antes que en tu casa y seguidores. - Su mirada se endureció. - Y fuiste tú el que me enseñó que la traición debe ser castigada.

Sabias palabras Bella, pero yo también estaba amenazado. Si, he hecho mal mintiéndole a esta casa. A mi casa. Pero si os he mantenido en ascuas cierto tiempo y luego me habéis delatado y me habéis condenado, ¿por qué debo hacer algo por ella? ¿Me explico? No me habéis dejado demostrar que ahora estaba con vosotros, no me habéis dado ni una noche.

-Nadie tuvo una noche, confiar es confiar. Y tu no confiaste en nosotros, No digas tonterías niño. Tu solo te has lapidado al mentirnos.-Miro a su amigo.-Este solo es puro veneno Draco, veneno para los magos puros.