Partida Rol por web

- ¿Y en qué cabeza de orejas puntiagudas cabe rodear un lugar sagrado de tremenda muralla de piedra y no construir un acceso que al menos sus congéneres conozcan? ¡Oh, claro! ¡Así los únicos seres que lo tienen fácil son los dragones! ¡Muy astutos! Brrrrggguuu...

Wendel se enfurruña a un lado mientras todos los demás siguen dándole vueltas al modo de ascender por aquella pared.

Azorado y pensativo el guerrero empieza a quitar ramaje de la pared para tratar de buscar alguna indicación...

-Puede parecer una idea absurda, amigos, pero debería haber alguna indicación por algún lugar de qué hacer frente al muro para acceder al árbol sagrado de los elfos -Comenta Khelben a sus compañeros mientras sigue buscando.

Fibbin camina de un lado ha otro mirando la pared por si encuentra algún pequeño resquicio sobre el que iniciar la subida, pero aquel muro inmenso parece ser plano completamente.

-Yo también tengo una cuerda si es necesario utilizarla podeis hacer uso de ella.-les dice a Eddi y a Arnold.-En los bosques que rodean mi poblado suelo escalar bastante pero esto...-continua hablando y mirando aquella pared-esto es demasiado.

- Yo también tengo una cuerda -añade el enano secamente.

El guerrero mientras busca algo alternativo hace entrega a sus compañeros de su cuerda...

-Tomad la mía también -Dice sosteniendo la cuerda entre sus manos.

La maga hace igual que el resto de sus compañeros y saca su cuerda para que las unan y hagan una lo suficientemente larga como para llegar desde alla arriba hasta el suelo. Tras eso, Luthien sonriendo al enano se concentra unos momentos mientras recita una especie de salmos por lo bajo y casi de inmediato nota como comienza a sangrar de nuevo por su herida lo que hace que lleve sus manos incosncientemente hacia ella. Una vez ha acabado, abre los ojos y les pide a sus compañeros la cuerda tratando de reprimir un gesto de dolor.

Con la cuerda en su poder, la maga comienza a caminar sobre la pared en dirección a la cima a paso rápido.

Arnold va uniendo todas las cuerdas de sus compañeros y, cuando todo está listo, la maga sale levitando junto con la soga hasta la cima de la pared. Una vez allí, la sujeta firmemente y sus compañeros comienzan a subir.

El paladín, sudando y con manifiesta dificultad por culpa de las heridas va escalando poco a poco hasta que, por fin, alcanza su objetivo.

La mediana comienza a escalar poco a poco aquel muro intermibale pero cada vez se sienta más cómoda en la subida y no tarda en alcanzar la cima.

Wendel se incorpora y se sacude las pequeñas motas de polvo que se le adhieren a la ropa. A cotninuación se dirige hacia la pared, respira profundamente e inicia la escalada. Afortunadamente esta resulta más sencilla de lo que parece en un principio y el enano completa la ascensión como si se tratase de un experto escalador.

El guerrero se siente incapaz de subir por la cuerda, jamás había realizado una escalada. A parte aún no había recuperado la fuerza después de tomarse las pócimas de salud...

Una vez Arnold consigue anudar entre si todas las cuerdas que le han dado sus compañeros, Luthien coge un extremo de la misma y lanzando un nuevo hechizo empieza a trepar la lisa pared con bastante soltura, aunque por el camino va dejando un pequeño reguero de sangre a razón de la herida que todavía permanece abierta en su cuerpo.

Cuando la maga llega a la cima procura atar fuertemente la cuerda a un robusto árbol y lanza el otro extremo por la pared haciéndosela llegar a sus compañeros. Antes de decir nada, la maga observa a su alrededor y a el horizonte buscando algún indicio de peligro, pero no lo encuentra, asi que se apresura a indicarles a sus compañeros a que empiecen la escalada.

-Podéis subir!!! Está bien sujeta!!!... grita Luthien

Sin perder tiempo los portadores van subiendo con mayor o menor dificultad por la pared que se interpone en su camino. Para asombro de todos Wendel es el primero en llegar a la cima haciendo gala de una perfecta sincronización entre piernas y brazos, seguido muy de cerca por Fibbin que también demuestra sus dotes de trepadora. Arnold tampoco muestra demasiadas dificultades a la hora de salvar el obstáculo, y algo mas aparatosa es la escalada del arquero que le cuesta horrores subir por esa pared. Todos llegan a la cima y una vez allí esperan a que suba Khelben que se ofrece voluntario para subir en último lugar, guardando de esta forma la retaguardia.

Todos observan como Khelben empieza a subir por la pared. En principio parece que no tiene ningún tipo de problema para superar aquel obstáculo, pero conforme va avanzando en el ascenso, el guerrero empieza a notar síntomas de cansancio y pesadez. Las heridas de su cuerpo no han curado totalmente y esto debilita al guerrero que en un inútil esfuerzo por mantenerse sujeto a la cuerda resbala cayendo al vacio cuando ya estaba a punto de llegar a la cima.

El pánico se adueña de los que permanecen en la cima de la pared cuando estos ven caer al vacío a Khelben…

¡¡¡ Nooooooooooo ¡!!... exclaman la mayoría de sus compañeros. Pero Luthien, lejos de impresionarse por la caída del guerrero hace acopio de una sangre fría inusual en ella y sin apenas parpadear vuelve a susurrar una larga lista de palabras sin sentido mientras agita sus manos fuertemente hasta proyectarlas hacia el guerrero.

Cuando eso ocurre, Khelben nota un fuerte tirón en su cuerpo y enseguida se da cuenta de que en vez de caer irremediablemente hacia el suelo, esta flotando en el aire mientras es empujado por una fuerza invisible hacia la cumbre de aquella maldita pared de piedra. Luthien mantiene sus manos apuntando al guerrero mientras con gestos de cansancio y sufrimiento consigue subir al guerrero hasta sus compañeros, haciéndolo caer a sus pies como si de una pluma se tratase. En ese momento la maga cae desfallecida también al suelo intentando recuperarse del esfuerzo que acababa de hacer.

Pasados unos minutos en los que Luthien se recupera del sobreesfuerzo realizado y habiendo superado el obstáculo que ha supuesto el ascenso de la pared mientras se recuperados del susto que les ha dado el guerrero, el grupo vuelve a retomar la marcha, con Eddi una vez más en cabeza y la luz del sol desapareciendo por el horizonte.

Lo que el grupo ve después de haber conseguido escalar la lisa pared de piedra es nuevamente una densa vegetación y grandes árboles que dificultan el paso de los portadores. Para Eddi al igual que para el resto del grupo es la primera vez que visita ese lugar, pero pronto se sorprende a si mismo ya que da la sensación de que conoce el lugar, pues se mueve con soltura y parece conocer el camino a seguir hasta el árbol de la esperanza.

Seguidme, tiene que ser por aquí… dice el arquero sin dejar de caminar.

Pronto llegan a una hilera de arboles que parece cortarles el paso, y mientras Eddi se afana por encontrar una camino para llegar al árbol un suave murmullo empieza a hacerse notar en los alrededores del lugar. Poco a poco el murmullo va transformándose en la dulce voz de una joven mujer. La voz es audible para todos los componentes del grupo. Nadie reconoce el idioma de “las palabras” que llegan a sus oídos pero Eddi por el contrario parece entender todo lo que escucha.

Posando una de sus manos sobre el tronco de un árbol empieza a ojearlo detenidamente mientras acaricia seco tronco al que se ha apoyado. Acerca su cabeza al árbol para acabar pegando su oreja a este. Da la impresión de que Eddi ha entrado o está entrando de alguna manera en contacto con la naturaleza, con los espíritus que en ella habitan.

Poco después de haberse acercado al árbol y mientras la dulce voz seguía una armoniosa cadena de palabras indescifrables, el arquero por su parte empieza a susurrarle al árbol ( el elfo que le susurraba a los arboles xDDDDD) al que se había acercado. Pasado unos segundos, una suave brisa empieza a mecer las copas de los arboles. Eddi sigue concentrado mientras susurra al árbol cada vez con más energía y rapidez. Contra más concentrado estaba el elfo, más fuerza cobraba la brisa que recorría el lugar.

Por su parte, la dulce voz de la mujer también parecía acelerarse a la vez que Eddi se concentraba. Al cabo de unos minutos, parecía que ambos ( Eddi y la voz ) estaban entablando una conversación. La fuerza del aire cada vez es más fuerte, incluso llega a hacer que Fibbin pierda ligeramente el equilibrio. Mientras, los compañeros de Eddi miran atónitos lo que está sucediendo.

Llega un momento en que la concentración de Eddi es tan grande que una fuerte ráfaga de viento proveniente de la retaguardia del grupo que los atraviesa haciendo que todos pierdan el equilibrio mientras la ráfaga de viento acaba estrellándose contra los árboles situados junto a Eddi.

El arquero cae exhausto e inconsciente al suelo mientras la misteriosa voz desaparece y el aire se calma para dejar paso a una terrible tranquilidad en el lugar.

Donde hace impacto la ráfaga de aire ahora se ha abierto un nuevo camino entre los arboles al cual acedéis inmediatamente.

Cuando entráis en el nuevo camino de 3 metros de ancho y de tierra que se ha abierto delante de vosotros, podéis comprobar que el lugar está formado por un enorme agujero aproximadamente 200 metros de altura. El borde del agujero está repleto de una densa arboleda de distintas alturas. Los arboles que están situados justo en el borde llaman la atención debido a su extraña manera de crecer. En vez de verticalmente, crecen inclinados hacia el centro del agujero con la intención de camúflalo y haciéndolo invisible desde el aire gracias a sus enormes copas.

Los portadores sacan nuevamente sus antorchas de las mochilas para iluminar el camino que les llevara hasta el fondo del agujero. Una vez todos tienen la antorcha en sus manos, Luthien las prende nuevamente gracias a su magia. El descenso empieza y antes de darse cuenta, la abertura por la que han entrado se cierra nuevamente disimulando de esta forma el camino que desciende al árbol.

El grupo al final consigue llegar al fondo del agujero sin haber sufrido ningún tipo de percance durante el descenso. Cuando llegan al final del camino, se encuentran en un amplio espacio vacio. No hay nada a su alrededor, simplemente el camino por el que han descendido y las paredes de aquel agujero.

El grupo da vueltas a su alrededor observando el lugar, buscando algún sitio por donde poder continuar su camino hasta el árbol, pero no encuentran nada, comprueban detenidamente las paredes del lugar, pero en ellas no encuentran ningún indicio que de pie a pensar que haya una posible puerta o apertura por donde proseguir la marcha.

Luthien camina pesadamente junto al resto de la comitiva, aunque siempre tratando de mantenerse alerta y sin poder dejar de maravillarse a cada paso ante las maravillas y curiosidades que había en aquel entorno. Durante el trayecto la maga no puede evitar detenerse un par de veces y beber algo de agua al notarse los labios secos y casi cortados.

Cuando por fin llegan al fondo del agujero, Luthien aprovecha para sentarse tratando de ganar unos preciosos minutos de descanso mientras el resto examina la sala.

- Bueno Eddi, y ahora que, quizás sepas algo o recuerdes cualquier cosa que nos pueda ser de ayuda en este punto.-

Wendel parece más frustrado con cada paso que dan o cada obstáculo que encuentran. Mantiene el ritmo de los demás mientras descienden por aquel agujero pero lo hace en silencio y frunciendo el ceño en un gesto que pocas veces había abandonado en los últimos días. Finalmente, alcanzan el final del agujero y se detienen para investigar. Tras unos minutos sin encontrar una salida Wendel toma la palabra.

- Esto es una ratonera. Si quisieran hacernos una emboscada, aquí se lo ponemos en bandeja. O encontramos pronto una salida, o será mejor largarse de aquí y buscar otro camino.