Partida Rol por web

Los Caprichos de las Nornas

Capítulo 3: Esclavitud

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20/06/2016, 10:39
Harald Erikssen

Asentí a las palabras de Erik, aunque Siggy no pudiera vernos, pero no pude por menos que añadir: y dinos si hay algún momento en el que se queden menos aquí, alguna fiesta que vayan a celebrar o algún acontecimiento que tengan previsto y que podamos aprovechar.

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20/06/2016, 18:29
Siggy Helgasdatter

La noche cae, fría y, como de costumbre, os empezáis a posicionar unos junto a otros, sabedores de la necesidad de conservar el calor. Una persona fría podría morir de hipotermia y perder a miembros de la tripulación no es algo que os podáis permitir.

Cuando Erik pregunta a Siggy, todos, de forma automática, os acercáis hacia la pared tras la cual sabéis que están las mujeres. La voz de la hermosa mujer tarda en escucharse, pero su voz es clara una vez comienza.

Soy Siggy Helgasdatter, hija de Helga Knutsdatter. Mi madre posee tierras allá en Northumbria y como todos los jarls, debe luchar contra las víboras por conservar su posición y sus posesiones. Una de esas víboras, Olaf Olafsson, tuvo la brillante idea de secuestrarme y venderme a Aitet, esperando que las cadenas me hiciesen perder la vida, olvidada en algún lugar de Frankia o en el fondo del oceano junto a Njörd. Notáis como la ira se va adueñando de Siggy. Pero he aguantado. Y quizás Loki sea el responsable, porque pese a no rebajarme a obedecer a ningún hombre en este campamento y ganarme buenas palizas por ello, parece divertirse haciendo que el jodido Aitet se haya fijado en mi. Por suerte, en lugar de tomarme como podría hacer con cualquier esclava, pretende seducirme y no hace más que invitarme de la forma más torpe a su lecho con buenas palabras. Siempre recibe mis negativas con una sonrisa, pero cada vez son más forzadas y cuando sus hombres me levantan la mano cuando les cruzo la cara por propasarse, su predisposición a defenderme va siendo menor. Temo que un día se canse y termine haciendo uso de la fuerza. Soy una guerrera, pero no soy estúpida.

Calla y es entonces cuando Harald, al ver que la historia parece haber terminado, interviene, logrando que Siggy vuelva a hablar.

No hay ninguna celebración cercana, pero todas las noches tienen buenas comilonas esta escoria. ¿En qué estábais pensando?

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20/06/2016, 22:05
Erik Kodranssen

-En que una de sus cenas sea la última de sus cenas.

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21/06/2016, 19:14
Uthred Svensson

   Durante todos los días desde el primer acercamiento de Siggy me he convertido en un fantasma. No hago más que avanzar, arrastrando mis cadenas, y trabajar en silencio. Raspar y raspar. Reparar los barcos que en la siguiente temporada se alzarán en el mar. Mi cuerpo va aquejando las inclemencias de la esclavitud. Mi pelo ha crecido así como mi barba y mis músculos parecen ahora más flácidos de lo que eran. No obstante, mi rabia y mis ganas de luchar no han menguado.

   Y aunque parezca ausente, mi cabeza seguía bullendo de ideas y posibilidades. Escuché a Siggy una segunda vez, cuando vino a traernos el almuerzo. Le dí las gracias con una sonrisa tímida y los dioses, como mis compañeros, fueron testigos de un rubor que se instaló en mis mejillas. Seguía en silencio. Escuchando y sopesando. Por fin una noche Siggy pudo venir a la caseta donde nos tenían encerrados. Había que aprovechar esa noche.

   - Compartimos destino parecido, Siggy hija de Helga... - Susurré recordando mi pasado y mirando a mis compañeros con la punzada de culpabilidad que siempre me atenaza cuando pienso en ello. Quizá mi susurro hubiera pasado desapercibido. Cuando la mujer preguntó y Erik sentenció, pregunté a Siggy. - ¿Todos cenan en el Hall de Aitet? - Ella no podía ver la sonrisa que esa posibilidad dibujó en mi rostro, pero si todos los guerreros se daban comilonas en el mismo sitio, será más fácil deshacernos de ellos. Había esperanza.

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22/06/2016, 01:57
Haakon Rasmussen

La historia de Siggy me cautivó por completo. No solo por los ya de por si asombrosos acontecimientos que relataba, sino por el hecho de que era la primera vez en aquellas semanas que durante un breve instante olvidé por completo que aún eramos prisioneros de Aitet. Fue como si simplemente me encontrase escuchando alguna historia fantástica narrada por un familiar, muy lejos de aquél lugar.

Sin embargo el relato acabó, y con él volvió la cruda realidad, y el apremio por escapar de nuestros secuestradores. - Si esto fuera una historia heróica, escaparíamos de aquí, mataríamos a Aitet y a sus lacayos con nuestras propias manos, y después nos iríamos con la marea y el viento a favor hacia una nueva tierra a la que poder llamar nuestro hogar. - contesté, aún con cierta ensoñación - pero no lo es. Es imposible para nosotros matar a Aitet cara a cara a menos que podamos encontrarlo a solas y con la guardia baja, y menos aún plantar cara a todos sus hombres. Deberíamos centrarnos en lo más importante: Atraer a los guardias mientras estén confiados o distraidos, inutilizarlos y escapar liberando por el camino a todos los nuestros. -

- Yo también quiero hacer pagar a Aitet, pero la venganza no es menos venganza por posponerla hasta el momento oportuno; sea este en unos días o incluso un año. -

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22/06/2016, 11:54
Harald Erikssen

Asentí ante las palabras de Haakon: es cierto, me encantaría tomarme la justicia con Aitet y los suyos, pero en nuestras actuales condiciones no creo que pudiéramos.

Traté de pensar en alguna otra solución: Siggy, dices que tienen un festín todas las noches ¿cuantos hombres se quedan de guardia normalmente? Si no son muchos, quizás podríamos acabar con ellos y atrancar las puertas de la sala donde se celebre el banquete. De esta forma, para cuando pudieran salir habríamos huido. Pero esto es si vemos posible que huyamos todos. No vamos a dejar a nadie atrás para que sufra la ira de estos malnacidos.

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22/06/2016, 21:45
Erik Kodranssen

-Fuego. Atrancar las puertas y prender fuego al salon.

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22/06/2016, 22:04
Uthred Svensson

   Dí un pequeño aplauso. Sonreí. Incluso me permití un amago de risa.

   - ¡A eso quería yo llegar! Estoy con Erik. Si atrancamos las puertas y escapamos solo pasarán unas horas hasta que den con nosotros. Y en el estado en el que estamos... No pienses que somos unos debiluchos, Siggy. - Bromee, si estuviera en la misma habitación que ella me habría permitido el lujo de guiñarle un ojo o flirtear. ¡Tal era mi entusiasmo y mi esperanza! - En cambio si al escapar, atrancamos la puerta... y prendemos fuego a la casa de Aitet. Que se pudran él y sus perros. Cuando quieran salir más de uno habrá muerto calcinado o estarán tan aturdidos por el humo que no podrán ni luchar. No vamos a darles una muerte digna a esos perros. - Entonces pensé en la mujer de rubios cabellos. ¿Y si esa noche le da a Aitet por flirtear con ella y le hace quedarse en la casa? - No te preocupes, Siggy. Nos has brindado ánimos en momentos funestos. Tu presencia nos ha dado fuerza y tu información esperanza. No vamos a dejarte atrás. Hoy has logrado evadirte de Aitet. Bien... si accedemos al plan de Erik, lo llevaremos a cabo en una noche en que puedas escabullirte. - Aquella mujer había sido como un soplo de aire fresco, o un balde de hidromiel después de una agotadora batalla. Además, su información había sido primordial para conocer a nuestros enemigos. Y la pregunta de Harald, acertada, nos daría mucha más información. Esperé a que contestara a mi compañero para volver a hablar. 

   Y si todo esto no sale adelante, se me estaba ocurriendo otro plan un tanto más tortuoso y complicado, pero puestos a tirar los dados y tentar a la suerte... quizá Loki esté de nuestro lado.

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23/06/2016, 23:25
Harald Erikssen

Hago un leve encogimiento de hombros: supongo que cada uno en lo suyo. Yo como guardabosques me baso más en el sigilo y Erik como buen herrero confía más en el fuego, aparte de que me gustaría vengarme de forma más personal y que esos cerdos mueran por mi mano, pero no estamos en condiciones de exigir mucho. Si logramos escapar y si puede ser vengarnos también, no pondré pegas por el procedimiento.

Por fín lograba salir de mi estupor y abatimiento inicial. Poco a poco se iban ofreciendo oportunidades e íbamos fraguando un plan, algo que nos ofreciera una esperanza de librarnos del pesado yugo de la esclavitud y volver a nuestra ansiada libertad.

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24/06/2016, 11:01
Uthred Svensson

   - No solamente es buena idea para matarlos. De echo no creo que mueran muchos, sinceramente. - Expuse, siendo sincero. - Pero los que logren salir del fuego estarán aturdidos, les costará respirar porque habrán respirado el humo nocivo y no estarán en condiciones de luchar o de salir a perseguirnos. Con el fuego de Erik ganamos dos caminos: Podemos quedarnos e ir matando a quienes salgan, poco a poco, aprovechando su aturdimiento y su estado. O podemos dejar que ardan y escapar, pues el fuego nos brindará la oportunidad de ganar tiempo.

   Hice una pausa en la que traté de tranquilizarme. Me sentía como un caballo desbocado que corría libre por un bosque. Pero era consciente que un mal traspies podría dar al traste con la carrera del caballo. No debía confiarme. No debíamos confiarnos.

   - No obstante... deberíamos perfilar más los planes. Haakon... ¿que dicen los dioses al respecto? ¿Que piensas tú en todo esto? - Pregunté al thulr, pues sus consejos son sabios.

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24/06/2016, 15:55
Siggy Helgasdatter

Siggy se mantiene callada. Escuchando. Sólo interviene una vez dejandoos hablar en todo momento. Contesta a Harald y su boca se cierra. No lo sé. Cuando no estoy aquí encerrada, estoy dentro de la casa y me vigilan muy de cerca. Desconozco cuántos guardias puede haber, pero no creo que muchos. Incluso estos se mantienen más atentos a un despiste para colarse dentro que a cumplir su tarea.

Cuando os váis animando con los planes y habláis de venganza, Siggy, tranquila hasta entonces, estalla. ¿Sois estúpidos? Si causáis un fuego es para huir. Nunca conseguiréis matarles a todos uno a uno. Bastante afortunados debiéramos sentirnos si conseguimos liberarnos todos, prender fuego a la casa con estos bastardos dentro y huir sin mirar atrás hacia los barcos, al mar y a Northumbria.

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24/06/2016, 20:46
Uthred Svensson

   - ¿Sin armas, víveres y con este tiempo? No es estación para navegar, Siggy. Pero sí es cierto que si luchamos sin duda alguna perderemos. Podemos matar a algunos - Northumbria. Había oído hablar de ese lugar por mi abuelo, pero en todos nuestros viajes nunca había pisado la isla del oeste, la tierra de los anglos y los sajones. Suspiré, pues esa tierra me llevaba lejos de mi tierra. Pero siempre había viajado, y al final, cuando estuviera preparado, volvería la tierra de mis padres y mis antepasados. - No navegaremos aún. Esperaremos a tener un barco preparado y podemos sabotear el resto. Eso nos llevará un tiempo en el que podremos ir apilando útiles que podamos ir sisando. Aprovecharemos cuando el mar esté más tranquilo, y nosotros preparados, para escapar y navegar. La cuestión es, Siggy, tú has ido a esa casa. ¿Como es? ¿Cuántas puertas tiene? ¿Pueden atrancarse desde fuera? - Recordé haber hecho la misma pregunta cuando fuimos a por Gunnar, y era necesario saberlo porque por muchos obstáculos que pongamos fuera, si las puertas se abren hacia dentro, no servirá de nada.

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26/06/2016, 15:43
Erik Kodranssen

-La vispera de partir, los hombres de Aitet seguro que hacen una gran celebración, se relajarán más ese día que ningun otro, sobre todo si nos hacemos pasar por esclavos modelicos, si fingimos que la desesperación se ha adueñado de nuestros corazones.

Esa noche, los barcos estarán ya listos, habra provisiones embarcadas y armas con toda probabilidad. Si escogemos esa noche para bloquear la salida y prender fuego al salon principal, es posible que tarden en darse cuenta de que hemos robado uno de sus barcos. Ademas, sería necesario quemar o inutilizar los demas barcos, podriamos quebrar o cortar sus timones si conseguimos armas.

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26/06/2016, 19:58
Harald Erikssen

Siggy tiene razón. No nos ceguemos por nuestra sed de venganza. Atranquemos la puerta, prendamos fuego si queréis y huyamos antes de que puedan atraparnos. Somos muy pocos, estamos muy débiles y sobre todo, tenemos familias a nuestro cargo por las que tenemos que velar.

Aún falta tiempo hasta que podamos poner en marcha nuestro plan. Tenemos que conseguir algo más con lo que atacar a los guardias, hay que debilitar nuestras cadenas lo máximo posible para poder liberarnos en el momento adecuado y como bien dice Erik, debemos actuar como inocentes corderitos hasta entonces para hacer que se confíen. 

Será duro para todos, pero tenemos un objetivo y no debemos desfallecer ni impacientarnos y malograr nuestra oportunidad.

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27/06/2016, 01:15
Haakon Rasmussen

Negué con la cabeza ante tantas discusiones. La indecisión nos causaría tanto prejuicio como las cadenas de Aitet, así no nos liberaríamos de él nunca.

- Ya hay un barco capaz de navegar, y esperar que seamos capaces de sabotear los demás es suicida; los guardias no nos quitan ojo de encima. ¿Preguntas qué me dicen los dioses Uthred? Pues creo que ya han hablado a través de vosotros. Fuego. Será nuestro arma y nuestra distracción. Mientras los guardias estén confusos intentando apagar un incendio liberaremos a los demás, y también servirá para quemar el resto de naves a nuestro paso para que no puedan perseguirnos. -

- En primer lugar atraeremos a los guardias más cercanos con alguna treta. Ellos nos creen desarmados e indefensos, pero un clavo en la cabeza demostrará lo contrario, en ese momento sus armas serán las nuestras. A partir de ahí se que no será fácil, pero si no somos capaces de robar provisiones mientras escapamos tendremos que partir sin ellas, y que el mar nos provea de lo que necesitemos. -

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27/06/2016, 14:07
Erik Kodranssen

-Tengo una idea. Como no tenemos armas, habria que ensayar entre nosotros como neutralizar a los enemigos. Dos podrian sujetar y un tercero clavar. Asi segurariamos el exito de las primeras dos muertes y conseguiriamos armas, ademas de poder disfrazarnos para acometer el plan del incendio.en cualquier caso,necesitaremos el beneplacito de los dioses y por supuesto, un noche de comida y bebida abundante en las tripas de nuestros aprehensores.

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27/06/2016, 20:05
Siggy Helgasdatter

No es estación de navegar, pero no vamos a pasar el invierno vivos. El frío caerá sobre nosotros como una daga, las temperaturas bajarán con fuerza y esta caseta no será suficiente. Muchos moriréis. Y seguro que Aitet ya ha pensado en venderos a alguno de vosotros o a alguna mujer o niño a alguien de la región para quitarse bocas que alimentar. Siggy hace una pausa para tomar aire. Nota como el fuego de su interior se vuelve a desbocar e intenta controlarlo. Si decís que un barco está listo para navegar, es el momento. No os he visto brearlos, por lo que aún necesitaréis otra semana de trabajo para no hundirnos. Pero al final de ella, debemos aprovechar y comenzar nuestro plan. Sea ese día o en los días sucesivos. Pero no podemos esperar mucho más.

Miráis a vuestro alrededor y os dáis cuenta de que tiene razón. Muchos tosen de forma fea, aunque no os habías fijado hasta ahora. Probablemente sea mejor jugarse la vida en el mar como personas libres que en una caseta, uno a uno, a manos del frío.

 

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27/06/2016, 20:27
Erik Kodranssen

-Dices bien. ¿Vamos a esperar a que la debilidad se apodere de nuestros cuerpos? Yo digo que arranquemos nuestra libertad de las garras de Aitet cuanto antes. Sufriremos, los dioses no lo quieran, nuestra familia menguará... Pero no podemos dejar que el miedo a la muerte o al sufrimiento nos atenace. Hemos de pelear con las armas que tenemos a mano, tomemos un barco, naveguemos contra los temporales y el clima adverso. Enfrentemonos a la ira de Njord para demostrarle que somos dignos de navegar por sus dominios. Mañana Odín proveera, hoy... ¡Tomemos nuestra libertad!

Siggy, Aitet te habla, seguramente hasta te escucha por lo que has dicho. ¿Crees que podrias sugerirle que celebre una fiesta con motivo de la total reparación del barco en el que trabajamos? Si lo logramos, podriamos matar a nuestros carceleros durante la celebración, mientras unos corren a bloquear y incendiar el salon, los demas podrian correr a la despensa, tomar unos sacos de comida y a los barcos. Debemos medir las distancias, calcular el tiempo del que dispondremos y ser precisos tanto como letales. ¿Estamos juntos hermanos?

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28/06/2016, 21:57
Uthred Svensson

   Sin duda Siggy había nacido de auténticos líderes. Debería darme vergüenza por no estar tan preparado como ella, por no tener una mente tan clara. Si encima sabe luchar... los dioses bien podrían proveerme de una mujer así. Pensar en ello me hace sonreir como un bobo... ¿que iba a hacerle cuando además de hombre soy joven y tengo los instintos a flor de piel? Pero nada puede apartarme de nuestro plan.

   - Atención todos. Esta claro. Nos iremos aunque el mar esté difícil. Yo se navegar... podría encargarme de ello. - Hice una pausa en la que pensé las opciones. - Siggy, soy Uthred, hijo de Sven... - Dudé entonces si descubrirme ahora. Pero quizá fuese ahora o nunca... y por la misma razón podría distraer a mis hermanos. Si los dioses quieren que sobrevivamos será momento de desvelar secretos. - ... y estoy herido. Los dioses no me permiten morir, bien. Pero aprovechemos mi estado. Tengo uno de los clavos de Erik pero no debo ser yo el portador. Cuando nos llevan a esta caseta solo los guardias que nos custodian están atentos y si el resto esta festejando, será un momento único. Yo puedo simular un desvanecimiento. Cuando vengan a por mi, seguramente para darme una buena paliza o tirarme a los perros, podéis aprovechar para atacarles. Yo no les atacaré, porque estaré disimulando y no tendré tiempo de reacción. Debéis ser vosotros. Atacad al cuello. Rápido y silencioso, tapando sus bocas. - Hice una pausa para seguir pensando.- Nos haremos con sus llaves y sus armas y pondremos en marcha. Atrancamos la casa donde estén y la prendemos fuego. Seguramente haya más guardias. Tenemos que actuar como si fueramos... cazadores*, atraemos su atención hacia un punto, atraemos a los hombres de uno en uno o de dos en dos, y les matamos sin que se den cuenta. Cuando hayamos logrado prender fuego al hall de Aitet y liberar a los nuestros, echaremos el barco al mar. Hmmm... Deberíamos dividirnos, mientras unos llevan a cabo el plan del fuego, otros deben cargar y preparar rápido la embarcación. Bien... ¿qué os parece? ¿Erik, Bernt, Haakon, Harald, Siggy, Ishild? ¿Algo que añadir?

Notas de juego

Cuando hablaste del segundo clavo, Erik, dijiste que me lo dabas (o me lo darías), no me quedó muy claro, pero he contado con que tengo yo el clavo.

*no se si el concepto guerra de guerrillas sería usado en aquella época XD

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29/06/2016, 16:07
Harald Erikssen

Bueno hermanos, ya tenemos una fecha, finales de la semana que viene. Pongámonos manos a la obra, hay que conseguir todo lo que podamos usar en un futuro de arma, hay que debilitar nuestras cadenas.

La idea de Uthred parece adecuada - eso que había dicho de que estaba herido y los dioses no le permitían morir no me había pasado desapercibido, pero no era el momento de profundizar. Ya nos lo contaría él si sobreviviamos y quería hacernos partícipes de ello - Yo estoy dispuesto a tomar el otro clavo. Si podemos atraerlos de uno en uno sería mejor. No se si Siggy, tu que tienes cierta amplitud de movimientos serías capaz de atraer a alguno por separado hasta un punto en el que nos podamos ocupar de él discretamente. .