Partida Rol por web

-No...

Contesté antes de poder armar una mentira porque no podía armarla, estaba muy triste. Sentía que alguien me había partido el corazón en doscientos pedacitos y no podía recoger ninguno. Y lo peor, tampoco culpar a nadie.

-Perdonen...

Me llevé las manos a los ojos y los froté, esperando no llorar... pero con cada momento sentía que iba a hacerlo.

"¿Por qué me siento así? No es justo para nadie, soy una tonta..."

-Solo es que... creo que estoy cansada...

La mirada que le lance a mi hermana no fue precisamente de "te creo" era claramente de, ya hablaremos en casa a mi no puedes engañarme y no voy a dejar que estes asi, pero claro todo eso no tenia ni que decirlo por que ella me conocia tan bien como yo la conocia a ella y una simple mirada era todo lo que me hacia falta.

Dora tenía en sus ojos las palabras que me revelaban todo. En este momento, solamente con mirarme una vez comprendí yo que ella no creía ni pizca de lo que había dicho. Eso solo me empeoraba pues la pobre no es que no podía hacer nada conmigo, lo cual era verdad, sino que además le haría mal saber que había perdido la cabeza yo por ese chico que conocí esta mañana.

-Bueno...

"¿Será eso lo que pasa cuando alguien te salva la vida? Capaz mi enamoramiento solo es agradecimiento profundo..."

Claro que no, yo estaba hasta los huesos loca por ese chico, pero me quería mentir. Decirme la verdad no era una opción y además ni siquiera podía descargarme llorando o rompiendo algo, porque no era ésta mi casa.

Observe la converacion entre hermanas con cierta añoranza, pero en silencio pues no tenia mucho que opinar.

"Se nota que no estoy acostumbrada a tratar con gente"

-Si quieres puedes descansar en mi habitacion hasta que llegue tu madre-le ofreci.

Si cruzar el jardin no fuese tan peligroso le hubiese dicho de acompañarlas, pero solo podiamos esperar.

-Gracias Lily

Me levanté y le permití que me acompañe a su cuarto. No tenía idea de cuándo mamá pasaría a buscarnos, yo solamente quería descansar los ojos un tiempito. Era importante para poder despejar mi mente de tantos pensamientos negativos. Lily era realmente agradable y atenta.

"Ahhh soy un caso... debería estar disfrutando en vez de sufriendo dolor de cabeza así..."

-Solo me acostaré unos momentos, hasta sentirme mejor.

Me quede observando como Lily acompañaba a mi hermana, seguramente abria sido bueno idea ir con ellas pero si la acompaba sabia que no podria evitar quedarme para saltarla a preguntas y tenia la sensación de que era lo que menos necesitaba.

Con suma calma la lleve a la habitacion y la ayuda a acomodarse.

-¿Necesitas agua o algo?-pregunte mientras mullia la almohada.

"Maldita sea por que no tengo nada para cosas asi..."

-No... lo siento. Importunarte así, disculpa.

Me recosté y me sentí un poco mejor, aunque las ganas de llorar no habían cesado. Respiré hondo y esperé unos momentos a que el cansancio que tenía de tantas emociones se hiciera presente para que me llevara a un lugar mejor. El mundo de los sueños.

"Por ahora me libro de las explicaciones a Dora, pero ¡ay de cuándo tenga chance!".

Aprete levemente los labios

-Deacuerdo, pero si necesitas algo llamame, estare con tu hermana-

Le dije con un tono suave mientras salia de la habitacion

-Gracias.

Dije a Lily y cerré mis ojos. No quería pensar más en nada, tenía que dejar de pensar. Yo era una chica alegre y despreocupada y así quería seguir siendo.

De Dora, mamá, Spiner, si es posible no pensaría en nada de eso hasta muy muy tarde.

- Disculpa a mi hermana, algunas veces se pone muy nerviosa, pero seguro que esta encantada con ver tu casa -

Sonrei a Dora mientras me sentaba

-No pasa nada, debe haber tenido un largo dia-

Mi mente caviló un poco más sobre el futuro, el pasado, el presente... pero siempre terminaba yendo a Spiner. Ahora pensé que quizás no es que el chico fuese el novio de Lily sino que todos los exploradores de lo salvaje hacían herramientas similares. Quizás Lily conocía a otros como él...

"Mmm... debe ser eso... O quizás es que quiero que sea eso. Awww... tengo que dormir, vamos. Ufff... ammm... no, no me viene el sueño. Vamos, vamos, vamos.... tengo que dormiiiiiir".

Y como todo cuánto más quieres algo, más se te esfuma y así se esfumaban mis intentos de dormir.

Transcurre un rato, pero empiezas a escuchar unos arañazos en la puerta.

Como era de esperar el sueño no te llega y cuando tas lo intentas mas dificil te es conseguirlo, al final no consigues nada mas que escuchar trozos de conversación y risas del cuarto de al lado.

Habia charlado con Dora, mas bien dejado que ella me hablase de como era la vida alli. Al oir los ruidos me acerque a la puerta con cautela y la abri lo suficiente para ver.

Alli estaba en la puerta como si jamas se hubiera alejado el ratoncillo, mirandote con cara de roedor y curiosamente empapado.

Suspire aliviada y le indique que pasara mientras iba por algo para secarlo.