Partida Rol por web

-¡¡¡Chicos!!! Hay algo aquí, algo raro -dijo el periodista mientras se aproximaba a los cadáveres inspeccionándolos sus hombros-. Parece algo metálico, está brillando, ni idea de lo que puede ser, venid.

Mientras esperaba la llegada de la comitiva empezó a palpar un bulto en la tierra, a un costado del cadáver que se encontraba más a la derecha.

-¿Qué es esto?

El rifle que disparó los casquillos es muy común en este tipo de expediciones, de hecho, el propio Gordon lleva uno igual.

Mientras observaba los cuerpos dio instrucciones precisas a Gordon

- Ve a ayudar al resto a traer nuestras cosas aquí. Iremos a pie a partir de este punto, así que esconded bien la canoa que ya no la necesitaremos- el explorador asintió y caminó de vuelta al río.

Miró ambos cuerpos durante un par de segundos

- No los reconozco, están en mal estado y tampoco conozco la cara de todos los miembros de la anterior expedición. Es posible que sean ellos... no creo que ningún hombre blanco se haya adetrado en estos parajes a excepción de la expedición de Williamson y ahora nosotros.

Se fijó entonces en lo que Matt había encontrado junto a los cuerpos.

Al parecer nadie había visto que ambos cuerpos portaban anillas metálicas de pequeñas dimensiones a la altura del hombro derecho - las anillas del correaje - , ambos conservan las hebillas de los cinturones- de lo poco que conservan de hecho - y por último, Matt extrae una caja metálica de debajo de uno de los cuerpos, que también se os había pasado, en cuyo interior hay un trozo de papel arrugado y un cuaderno con notas.

El papel arrugado resulta ser un mapa y en el cuaderno hay apuntadas algunas cosas interesantes:

Observó detenidamente el mapa, se asemejaba bastante a la ruta que seguían ellos, y lo poco que había de legible en las palabras lo confirmaba, tomó una foto del documento, sería una buena imagen para el reportaje.

-Parece que en efecto son de la expedición de Williamson -dijo mientras tendía el recorte al señor Bucks, Jeremy Morgan no le inspiraba ninguna confianza en absoluto y parecía saber más de lo que contaba-. Figura la ruta y parece ser algún pasaje de la crónica de su viaje, pero no se entiende la mayoría -Aclaró mientras escrutaba a Morgan-.

Tras leer ambos documentos

- Así es, parece la ruta de la expedición. El primer campamento yo diría que coincide con el punto en el que nos encontramos ahora mismo. Esta noche cotejaré ese mapa con el mío y trazaremos un ruta hasta su segundo campamento a ver qué encontramos. Respecto a las anotaciones... son inquietantes. Parece que ambos documentos están hechos por miembros de la expedición de Williamson pero no por él mismo, si se fijan en el mapa se refieren a Williamson en tercera persona. Es muy posible que fueran atacados por los indígenas, de ahí que no hayamos encontrado tampoco ninguna pieza, en la pirámide y alrededor de ella ha habido combate, eso es innegable- Mira hacia detrás esperando ver al resto del equipo que no obstante aún no aparecen

- Acamparemos aquí esta noche.

Roger sospechaba de Jeremy Morgan. Quizá fuera la forma de ser de éste último pero organizaba todo como si temiera que si otro lo hiciera fuera a descubrir algo que él no quisiera. Se encogió de hombros y cedió el papel que Matt le entregaba al señor Morgan.

—Me resulta inquietante el apunte que habla del grabado —dijo dirigiendose a Matt—. Parece que ha desencadenado algo.

Estuvo durante unos instantes mesándose la barbilla, pensativo.

—Estoy tratando de recordar alguna leyenda que relacione los hechos pero... —reflexionó.

Acto seguido se volvió hacia Morgan y le preguntó directamente.

—¿Señor Morgan, le viene algo a la cabeza?

Escucha atentamente a Morgan y como el anciano gruñon, parece referirse a algo en concreto, aunque su mente, se desvia, imaginando la escena de los cuerpos, elevando la mirada hacia la piramide, y luego a la cajita metalica, con el plano, que parece la ruta a tomar por la antigua expedición.

-¿Indigenas que atacarón?, mmmm, sinceramente, lo dudo. No me cuadra la disposición de los cuerpos, y ..

Se silencia, buscando con la mirada a Gordon, el cual apenas participa de los descubrimientos, dando su opinión. No se fia de ese hombre, y prefiere guardar silencio sobre sus conjeturas, sobre lo ocurrido.

-Sr. Bucks, ha hablado de un grabado ¿cree que es el mismo del que habla esos documentos, que parecen una parte de un diario?

Asintió firme con la cabeza.

—Estoy convencido —afirmó rotundamente—. ¿Ha visto algún otro por aquí? Además, ese grabado estaba destrozado. Pura lógica señor Strange.

Las palabras en el arrugado papel parecen dar algo de luz a los disparos en la pirámide, dispararon a los símbolos y según la opinión del autor eso provocó algo desagradable y peligroso. Es curioso el cambio, de un día al siguiente, de la actitud del narrador. El 21 habla de pasar el tiempo con el diario y al día siguiente su tono se vuelve completamente alterado, como ataco por cierta paranoia. Mientras medito sobre las palabras escritas no puedo quitarme de la cabeza las hebillas en los hombros de los cadáveres. ¿Pudieron servir para atarles?

Las preguntas se agolpan en mi cabeza y me siento nervioso al no encontrar respuesta clara. La conversación me saca de mi abstracción y vuelvo a mirar los cuerpos cuando Morgan afirma que acamparemos aquí. El lugar no parece peor que cualquier otro, pero la extraña pirámide y los muertos no hacen que me agrade precisamente la idea.

- Deberíamos darles algo parecido a una cristiana sepultura, o ¿quizás el doctor quiera hacer un examen médico mas detenido antes?

- Sigo pensando que se trata de un ataque de indígenas... los indígenas fueron armados con armas de fuego hace ya unos años, los insurgentes al gobierno británico ya saben, lo mismo de todas las colonias. En cualquier caso de momento todas nuestras teorías no son más que especulaciones, debemos reunir más datos antes- a la propuesta de Jack -sí, el doctor debería echarles un vistazo y después hay que enterrarles, no podemos dejarles así.

En pocos minutos llegó al lugar el resto de equipo: Miguel, Gordon, Stuart y el doctor Franklin con todo el equipo y las provisiones. Mientras Miguel, Gordon y Stuart montaban el campamento, el doctor estudiaba y comparaba ambos mapas y el doctor examinaba los dos cadáveres. Aparte de lo ya descubierto por vosotros, el doctor sólo puede determinar que llevan mucho tiempo muertos, lo cual es evidente para cualquiera que haya visto los cuerpos. Eso por no hablar de la muerte causada por una rotura de cuello de uno y de un balazo en la nuca de otro, también evidente a simple vista.

Al atardecer ya está el campamento montado, Gordo y Vincent se reparten las guardias. Cenáis en torno a un fuego de pequeñas dimensiones pues Morgan sigue convencido de la teoría del ataque indígena y no quiere llamar mucho la atención.

Dormís en tiendas de tres personas y la calurosa noche discurre sin incidentes, con los sonidos propios de la selva os cuesta dormir.

A la mañana siguiente tras un desayuno a base de fruta fresca - lo primero a consumir, lógicamente - todos colaboran en desmontar el campamento, de manera que a eso de las 10 am se reemprende la marcha. Hace aún más calor que ayer, ya en plena selva continuáis la ruta hacia el segundo campamento de la expedición de Williamson, paráis para almorzar un poco más tarde de media mañana y continuáis hasta el mediodía. La última hora de marcha se ve enormemente dificultada por el hecho de que no hay camino despejado, sino que hay que ir avanzando a machetazos (Stuart abre la marcha con uno) para despejar la vegetación.

A primera hora de la tarde, llegáis a un punto más despejado en el que a lo lejos se alza un túmulo de piedras que la gran mayoría de vosotros nunca ha visto:

Se trata de poco más que una montaña de piedras debidamente apiladas y ordenadas, se os antoja prehistórico o quizás no. El caso es que al verlo Stuart levanta la mano y detiene al grupo.

Con el machete en alto

- Cuidado, no me fío de que sea seguro. Puede que sea una trampa... -dice oteando en dirección a la estructura. Guiña los ojos al forzar la vista - creo que está despejado Doctor Morgan.

<Click>

-¿Qué es esto? -Preguntó Matt-.

<Click><Click>

-Podría ser algún tipo de construcción religiosa, la disposición así como la coronación lo sugiere -Especuló mientras cerraba la tapa de la cámara-. La pregunta es si está relacionado con alguna tumba o algo más relacionado con un altar.

Tras ello se adelantó al resto y se puso a examinar el conjunto.

No se ve absolutamente a nadie en los alrededores de la estructura, tan sólo un claro rodeado de vegetación y más selva.

No paraban de aparecer cosas, dos cuerpos, unos casquillos, el mapita y las notas, y ahora esto. Unas piedras distribuidas de una forma curiosa. Mientras el joven periodista realiza fotos, el se acerca para examinar..

Tomó algo de aire. El camino a través de la vegetación le había dejado algo cansado. Tenía la pierna cansada. El dolor había vuelto a aparecer a causa de la fatiga. Caminó unos pasos más hacia el túmulo; ni siquiera las palabras de Stuart le hicieron titubear. Durante un buen rato lo observó y después se alejó unos pasos para dejarse caer al suelo.

—Si no les molesta voy a descansar un instante

Sí que pudo tratarse de un ataque de indígenas. Incluso si no estaban armados, los que estaban en el campamento tenían armas de fuego. Pudieron ser sorprendidos y les quitaron las armas, pero esas hebillas ¿qué significan? Y ¿Qué detonó esa extraña locura, llegando incluso a disparar a unos símbolos grabados en la roca? Estos y otros pensamientos bombardean mi cabeza antes de que el sueño se apodere de mi tendido en el suelo de la tienda.

Por la mañana no me siento cómodo y participo en la deconstrucción del campamento con rostro serio y sin hablar demasiado. Luego emprendo la marcha con vigor para  demostrarme a mí mismo, y a los demás de paso, que seré capaz de llegar más allá de donde llego la primera expedición. Avanzo con brío, con el machete en mi mano derecha para ayudarme quitar algunas matas que estorban la ruta a pesar de que todo el trabajo realmente duro, el abrir el camino, recae en el hombre que va en cabeza.

Cuando por fin la vegetación se abre, aparece ante nosotros un extraño apilamiento de piedras amontonadas cuidadosamente. Después de enfundar el machete, me doy una vuelta alrededor del montículo, en primer lugar examinando el suelo que lo rodea en busca de huellas ya que, si bien parece las forma típica de las construcciones prehistóricas, me parece extraño que una construcción tan endeble pueda mantenerse mucho tiempo en un entorno selvático y atacado de forma recurrente por fuertes huracanes.

Os dáis cuenta de que la estructura no es otra cosa que un Quern, un túmulo de piedras prehistórico que servía de señalización y enterramiento.