Partida Rol por web

- Jumm... - se impacientó Galstak - yo también me estoy hartando de tanta puerta. Y Ameiko sigue sin aparecer...

El momento tenia un punto comico. Grygory peranecia entre sus compañeros, atento a cada uno que iba abriendo una puerta, momento en el cual el bardo se preparaba, apuntando con la balesta, por si hubiera mas goblins. El sonido de las puertas abiertas se sucedia de un modo vertiginoso, como si el tiempo que tuvieran para encontrar a Ameiko fuera corriendo en su contra.

Galstak abre la puerta. Ante él hay un pequeño pasillo que termina en unas esclaeras que descienden hacia la oscuridad.

Camlo se dirige a otro de los lugares que aún no han revisado

-Veré que hay por aquí...- Pone la mano en el pomo de la puerta asegurándose que al menos Grygory le cubra.

Recepción

Camlo abre la puerta y entra en una gran sala destinada a recibir a los clientes. Cuenta con un par de grandes y cómodas sillas, un mostrador donde se exponen algunas muestras de crital y una estantería al sur en la que descansan multitud de vasos, copas, platos, y otros objetos de cristal, ahora rotos a pedradas. Una puerta junto a la estantería conduce al exterior de la fundición. Hay dos ventanas al este cubiertas de gruesas cortinas, una puerta al oeste que debe comunicar con el despacho y otra puerta que sale hacia el norte.

Recepción

Camlo inspecciona la sala buscando algo que pueda pasar desapercibido y tenga interés.

Camlo no encuentra nada fuera de lo común entre el mobiliario y los cristales rotos.

Kaddok se dedicó a trastear por la recepción pero pareció derribar los objetos sin orden ni sentido en lugar de estar buscando algo. Cuando le miraron sus compañeros se encogió de hombros. -Veamos que hay tras esa puerta -Dijo antes de abrirla.

Algo me dice que de haber algo esta ahí abajo.

Lapidus parecía cansado de registrar sin encontrar nada...

- Jrummm - asintió gravemente el Bárbaro, mirando al enano. - Aunque esos bastardos chiquitines se esconden muy bien... pero Ameiko es lo primero.

Bajó un primer escalón.

- ¿Vamos?

- Quizas deberiamos de terminar de explorar todo este piso ... mas que nada para no encontrarnos sorpresas luego. No nos debe quedar mucho.

-Opino como Grygory, amigos-añadió Camlo al reunirse con los demás.

-Quizás encontremos algo de utilidad antes de bajar...ademas, me gustaría echar un vistazo detenido a éstas notas-dijo mientras sacaba un pequeño libro  de entre los pliegues de su túnica como por arte de magia .

- venga Galstak - le dijo al barbaro - vamos a abrir esa puerta, yo te cubro... dijo el bardo señalando na puerta cerrada

Sala de preparación

Galstak abrió la puerta y se asomó a un pequeño cuartito donde se preparaban los principales componentes para fabricar el cristal y utilizarlos en la fundición.

-Buff-exclamó Camlo-aquí hay muchas letras y no he traído los anteojos. Tendré que leerlo tranquilamente antes de irme a dormir.-

De nuevo guarda el libro bajo su holgada ropa y se une a los demás en la exploración situándose tras ellos.

-Muy bien, vamos Saco, que todavía queda mucho por explorar.- Kaddok se fue al pasillo que había descubierto anteriormente y abrió la primera puerta a la derecha.

Lapidas registro con avidez entre los materiales de la cristalería, quizás hubiese algo de valor o utilidad por ahi: ácidos o herramientas

Lapidus no encontró nada de valor entre los cristales. Los goblins se habían asegurado de que todo aquello, si alguna vez había tenido algún valor, hubiera dejado de tenerlo.

Kaddok volvió al comedor, atravesó la puerta que conducía al pasillo y abrió la primera puerta a la derecha. Se trataba de un pequeño almacén donde se guardaban herramientas, ropa de trabajo, algo de leña y materiales similares.

Un frustado Lapidus registró el almacén.

Camlo sigue con interés a Lapidus mirando sobre su hombro.